Ensayo Historiográfico: Historia del fútbol en México a través de la revista Cuadernos de Fútbol.

Introducción

Los deportes son parte de las actividades lúdicas que están presentes hoy en día en la vida cotidiana de la mayoría de las personas y que desde tiempos antiguos han sido catalogados como una parte cultural importante para la sociedad, pasando por la civilización griega, hasta los últimos juegos olímpicos llevados a cabo en territorio brasileño. El futbol ha sido parte de una disputa ideológica en cuanto a lo que representa para la sociedad, es por esto que, surgieron distintos estudiosos en el viejo continente como Eric Dunning y Elias, quienes describen de qué manera el deporte influye en la sociedad. Por otro lado, intelectuales marxistas repudiaron el futbol como objeto de estudio debido a la creencia de que generaba una distracción de la lucha de clases, incluso lo mencionaban como el opio del pueblo. Sin embargo, para comprender estos pensamientos se debe también analizar los conceptos que rodean al deporte en general, la emoción, el espectáculo, los espectadores, entre algunos otros.

En México el futbol es uno de los deportes más representativos y actualmente se podría decir que es aquel que mayor difusión tiene en la sociedad mexicana, sin embargo, el atraso que existe en cuanto a su estilo de juego, logros deportivos, profesionalización, entre otras cosas, es debido a lo tardío que fue su llegada al territorio nacional. Mientras que en Europa ya se practicaba este deporte, en México aún no había ni destellos de lo que era el juego de pelota moderno, es por esto que se puede apreciar que lo rezagado que se encuentra el país en cuanto al ámbito deportivo se debe a la forma en que se llegó a la inclusión de los deportes en el país mexicano, así pues, se puede apreciar que este atraso deportivo se refleja en el estudio de esta práctica, ya que existe muy poca presencia historiográfica en cuanto al futbol se refiere.

En el presente ensayo se analizarán algunas de las obras relacionadas al futbol en México presentadas en la revista “Cuadernos de Fútbol” por parte de Carlos Calderón Cardoso. Esta revista forma parte del Centro de Investigaciones de Historia y Estadística del Futbol Español (CIHEFE) y su objetivo es

“el de convertirse en un foro para que todos los historiadores y especialistas de nuestro fútbol tengan un lugar especializado en que puedan publicar sus trabajos. Así contaremos con artículos de todos los miembros del CIHEFE, colaboraciones de profesores de universidad, historiadores y periodistas especialistas en la historia del fútbol español.”1

Aunque en la revista el objetivo principal es recrear la historia del fútbol español, se presentan estudios referentes a los futbolístico y México, es por esto que, se analizaran en orden de aceptación del trabajo y solo las obras referentes al futbol en México y que aparecen publicadas en esta revista.”

Obras.

“Orígenes del fútbol en México – Capítulo I” (Calderón Cardoso, 2013) es el primer capítulo de una obra de 4 volúmenes escrita por el historiador deportivo Carlos Calderón Cardoso, en la que su objetivo principal es sentar las bases de lo que fue el desarrollo del futbol en México durante la época porfiriana. La obra muestra cómo debido a la modernidad que se estaba implementando en el país gracias a la paz alcanzada en el gobierno porfirista, se comenzó a llevar a cabo la actividad deportiva. Otro de los puntos que menciona en esta primera parte sobre los orígenes del futbol en México, Calderón Cardoso muestra la creación de una revista especializada en los deportes, así como también datos importantes sobre el primer equipo de futbol en México y la llegada de los balones por el puerto de Veracruz, aunque especifica que no existen pruebas contundentes para corroborarlo.

Durante el desarrollo de la obra, utilizó imágenes para reforzar la información que escribió, de manera visual. Presenta, además, una serie de anexos al final del documento en los cuales explica términos que no plasmo en el texto, o bien, son solo simples datos que refuerzan lo que ya había tratado de explicar.

En la segunda parte de esta serie de artículos sobre los “Orígenes del fútbol en México – Capítulo II” (Calderón Cardoso, 2013), Cardoso escribe un contexto previo a sus aportes sobre el futbol en México, pues en este segundo capítulo del origen del futbol su objetivo principal es demostrar que Pachuca es la cuna de este deporte. Para la comprobación de su hipótesis comienza analizando la importancia de la minería como la principal actividad laboral, misma que permitió el desarrollo del futbol debido a los extranjeros ingleses que trabajaban tanto en la minería como en distintas industrias ya establecidas en la ciudad, así es cómo surge lo que se consideró como el primer equipo de futbol, el cual fue creado por estos trabajadores extranjeros. Además, describe una parte de la historia de Pachuca y la importancia que tuvo con respecto al avance tanto industrial como minero, los distintos procesos que llevaron a la ciudad a considerarse como una de las más importantes en el siglo XVIII.

Es interesante la descripción que hace sobre los primeros asentamientos humanos –en el territorio de lo que más adelante se llamaría Pachuca-, continúa detallando el efecto que trajo consigo la llegada de los españoles para mostrar cuando se inició el despegue de la industria metalúrgica. Al igual que en su obra anterior, explica cómo es que la modernidad alcanzo niveles de aceptación tan altos en la sociedad que cualquier cosa que fuera extranjera debía pertenecer a la sociedad mexicana. El ocio forma parte de la población debido al surgimiento que sucede cuando comienza la industrialización y uno de los primeros deportes que se estableció en la ciudad fue el cricket. Todo esto, es lo que explica Cardoso en la continuación de la primera obra analizada previamente, además de que también menciona como y cuando surge lo que hasta hace relativamente poco no se conocía, el origen del primer torneo de futbol en México, el cual se llevó a cabo con la participación de cinco equipos, los cuales representaban a los distintos clubes deportivos, por ejemplo, el Reforma Club, British Club y el Pachuca Athletic Club.

En cuanto a las fuentes que utilizó Cardoso destacan las primarias, pues las fotos que presenta en su investigación tienen un gran valor histórico –no quiere decir que las de segunda mano no lo hagan-, ya que muestra a los integrantes de estos primeros equipos, los campos en donde se jugaba futbol, la tabla de posiciones del primer torneo y, como dato curioso, presenta a Maximiliano de Habsburgo en el entre tiempo de un partido de cricket.

Cardoso termina su segunda parte de los orígenes del futbol al igual que la primera, pues no presenta ningún tipo de conclusión y la forma de dar por terminado el articulo solo deja entrever que falta más datos por analizar.

La tercera parte escrita por Cardoso sobre “Orígenes del fútbol en México – Capítulo III” (Calderón Cardoso, 2013) es la primera vez que se observa que divide su artículo en distintos subtemas. Comienza detallando los equipos de futbol que existían en la capital de Hidalgo y cómo mediante los clubes deportivos se gestaría la creación de algunos más. En esta obra analiza el proceso histórico mediante el cual se fueron desarrollando diversos deportes y lo que fue el inicio del balompié mexicano. Otro de los subtemas que proporciona este tercer capítulo del origen del futbol trata sobre la creación del México Cricket Club, institución deportiva que tuvo como prioridad la práctica y difusión del cricket.

En cuanto a lo relacionado al futbol en esta obra, los subtemas siguientes explican la creación del Reforma Athletic Club y el British Club más a fondo –ya que, en la obra anterior a esta, Calderón Cardoso solo analiza la participación de ambas instituciones en el primer torneo amateur de futbol en México.

Al igual que en las anteriores dos obras no presenta conclusiones y sus fuentes de primera mano son la parte principal de su trabajo. Se puede apreciar el uso de hemerografia, además de obras como “El libro de oro del futbol mexicano” y los censos realizados por el INEGI sobre estadísticas históricas de México.

Para finalizar con esta serie de obras escritas por Carlos Calderón Cardoso tenemos “Orígenes del fútbol en México – Capítulo IV” (Calderón Cardoso, 2013). Al igual que las otras tres obras anteriores a esta, brinda un contexto de la época a tratar, por ejemplo, describe cómo es que:

“México comienza el siglo XX con estabilidad política y económica. Se crea el Banco Central Mexicano, el Banco Mercantil de Monterrey y el Oriental de Puebla. En Ginebra, Suiza, se constituye la Société Financière pour l’Industrie au Méxique, que tiene como objetivo principal, la búsqueda de financiamiento y la atracción de capitales europeos a nuestro país. En la capital, se inaugura el servicio de los trenes eléctricos entre México y Tacubaya y el de México-Tlalpan

{…} Porfirio Díaz inicia un nuevo período presidencial y México se ve como un país próspero y moderno, pero a la vez con problemas de índole político y social que comienzan a salir a flote.” (Calderón Cardoso, 2013)

En cada una de sus obras los contextos fueron similares al presentado en el párrafo anterior y después se disponía a relacionarlo con las cuestiones futbolísticas en la historia de México. Esta cuarta obra escrita por Cardoso, describe como se constituyó el primer campeonato de futbol en México, las bases del juego, quienes participaron, quienes fueron los encargados de organizar y representar a los distintos equipos participantes, el formato de la competencia e incluso la tabla de posiciones en donde se demuestra el primer campeón de un torneo efectuado en territorio mexicano, Orizaba AC.

Nuevamente deja sin conclusiones a la obra, se puede apreciar que al menos en ninguno de los cuatro capítulos de su investigación culmino agregando esta parte. Por otro lado, se observa fácilmente su gusto por las imágenes y la hemerografía –aunque en el caso de la revisión de periódicos, forzosamente se deben consultar pues la prensa jugo un papel favorable en el desarrollo del futbol en México- pues las utilizó en las cuatro obras que se acaban de analizar.

Es importante mencionar que la redacción de las obras deja mucho que desear pues, en algunos párrafos se nota una mala puntuación, además de la falta de algunas letras y un orden cronológico en cuanto a lo que trató de hacer. Si se va a redactar una serie de obras que terminaran uniéndose para explicar determinado proceso, hubiese sido bueno que llevara a cabo un orden cronológico ya que, en el capítulo II se habla acerca de los equipos de futbol participantes del primer torneo y en el capítulo III se cuenta la historia de la conformación de estos equipos.

Las siguientes tres obras que se analizaran están realizadas por Carlos Calderón Cardoso de la misma forma en que escribió “Orígenes del fútbol en México” y sus respectivos capítulos, ya que, también se divide, solo que, en este caso, son 3 obras distintas y a diferencia de las obras anteriores propuestas por Cardoso, en estos artículos si se lleva a cabo una secuencia cronológica para el estudio del futbol en México, en este caso a través del cine.

“El cine y el futbol en México (parte 1)” (Calderón Cardoso, 2014) fue aceptado en la revista “Cuadernos de Futbol” en diciembre de 2013 y explica la llegada del cinematógrafo en México en 1896 con el corto en donde se mostraba al Presidente de la República Mexicana, Porfirio Díaz montando a caballo. La relación entre el futbol y cine, según Cardoso se da desde su llegada al país mexicano, debido a que ambas prácticas llegan prácticamente el mismo año. En cuanto al objetivo de Cardoso, básicamente es unir dos industrias de alta penetración social cómo lo son el futbol y el cine, para explicar la influencia de ambos ante la sociedad.

La obra explica cómo es que surge la primera filmación que tomó como referencia al futbol en 1937 donde se plasmó en grabación la visita del equipo Barcelona, para años más adelante llevar a cabo la que se considera como la primera película a mediados de los cuarenta. También se explica la forma en que, durante el mandato de Manuel Ávila Camacho el cine busca reforzar los valores familiares y es por esto que, el deporte aporto ese plus a las producciones cinematográficas, ya que el discurso político del presidente mantenía a los deportes como un símbolo preponderante en aquellos años.

El futbol era el deporte más popular de la época y la combinación con el cine dio buenos resultados, por ejemplo, la película “Los hijos de don Venancio” protagonizada por el mítico Horacio Casarín es uno de los ejemplos de la aceptación que tuvo en el público. Otras de las películas que tuvieron un buen lugar dentro de la sociedad fueron: “El vividor”, -en donde German Valdés le da vida a un personaje llamado Atilano y aparece jugando para el Club Atlante- y “Fenómenos del Futbol” –la cual conto con la presencia del que hasta ese entonces era el único jugador capaz de jugar en cinco mundiales distintos, Antonio “la tota” Carbajal.

Con la película anterior termina la primera parte de este estudio del fenómeno cinematográfico y futbolístico y también comienza la continuación de esta obra de tres capítulos. “El cine y el fútbol en México (parte 2)” (Calderón Cardoso, 2014) inicia describiendo de mejor forma la película “Fenómenos del Futbol” y cómo esta cinta cinematográfica favoreció a la rivalidad entre los dos equipos que terminarían siendo los más populares del país, América vs Guadalajara. A partir de aquí, el denominado clásico de clásicos le daría un giro al mundo de la televisión y el cine.

La segunda obra de Cardoso en cuanto al cine y el futbol en México continua con la descripción de las distintas películas que fueron estrenándose desde -la ya mencionada- “Fenómenos del Futbol” en septiembre de 1964, pasando por “Tirando a Gol” (1966), “El Pícaro” (1967), “México 70” (1970) –a diferencia de las demás, fue un documental sobre el mundial efectuado en el país mexicano en 1970, que estuvo acompañado con una trama de ficción para captar aún más la atención del público receptor-, y ya para finales de la década de los setenta se presentarían dos cintas cómicas, “El Futbolista Fenómeno”(1978) interpretada por Adalberto Martínez “resortes” y la más recordada en la actualidad, “El chanfle”(1979) protagonizada por “Chespirito”.

La tercera entrega de Carlos Calderón Cardoso, “El cine y el fútbol en México (parte 3)” (Calderón Cardoso, 2014) inicia dando un contexto de la situación que vivía México a principios de 1980 debido a la crisis en que estaba inmerso el país, desde cuestiones políticas, económicas y sociales se vieron afectados. Después de la explicación –muy corta- de los sucesos que acontecían en la década de los 80’s, retoma el estudio de las películas enfocadas al futbol y aquí es donde vemos la según parte de “El chanfle 2º” (1982) y lo interesante viene cuando, se genera una adaptación de la película “Nosotros los nobles” de Pedro Infante, la cual se llamó: “Nosotros los pelados”, la cual pretendía demostrar las formas de convivencia social y cultural de gran parte de la sociedad mexicana.

El estudio del futbol a través del cine llama la atención debido a la conceptualización que está presente en cada uno de los directores de cada película, pues mientras unos intentan enaltecer el futbol en México otros, en contraste, demuestran estas cuestiones sociales y culturales que desprestigian la práctica deportiva, por ejemplo, Cardoso especifica dos películas que no tienen una verdadera trama, y solo utilizaron el nombre de Hugo Sánchez para obtener cierto grado de popularidad. “Futbol de Alcoba” y “El Pichichi del Barrio”, interpretadas por Rafael Inclán, solo tuvieron la encomienda de vender un tipo de cine sobre pornografía velada, sin embargo, aunque no llego un verdadero éxito sobre ellas, son películas relacionadas al futbol.

En la actualidad, es común ver equipos de barrio llamarse “Atlético San Pancho”, haciendo referencia a la película producida en 2001 dirigida por Gustavo Loza. Aunque no contiene ninguna historia real, es importante debido a la interpretación de la forma en que surge el equipo, pues después de abandonar la práctica deportiva en el pueblo que se presenta el problema, el destino les otorga la posibilidad de reavivar el futbol. Por otro lado, “Rudo y Cursi” (2008) demuestra en la pantalla grande como es la mafia que rodea al deporte más popular de México, es por esto que, según Cardoso, se le denomina como una película anti- sports. Termina describiendo “Días de Gracia” (2012).

Estas tres obras escritas por Carlos Calderón Cardoso, al igual que sus cuatro obras anteriores, buscan crear un recorrido histórico, mientras que en las primeras su aporte radica en establecer los inicios del futbol en México, en esta secuencia de tres obras, se encarga de dos cosas: establecer la llegada del cinematógrafo y como este en conjunto con el futbol lograron una aceptación en la sociedad y en segundo punto, crear una línea histórica de la relación y participación que han tenido el cine y el futbol. Las obras en general de Cardoso contienen los mismos aspectos de redacción y estructuración del texto. En primer lugar, presentan de una manera breve y amena contextos de la época a tratar al inicio de cada artículo, como segundo punto, no presenta conclusiones finales, solo termina dando la idea de que falta algo en el artículo que se explicara más adelante –como si usara puntos suspensivos- y, en tercer lugar, la presentación de fuentes de igual forma es similar, la obra contiene una sección de notas al final de la página en donde explica las referencias que se hacen dentro del texto y describe su aparato crítico.

Los deportes en México tuvieron su época de mayor esplendor durante el mando presidencial de Porfirio Díaz. Aunque no se sabe a ciencia cierta si el presidente de la república tenía un gusto especial en alguno de los deportes que se practicaban, con la obra de Carlos Calderón Cardoso titulada “Porfirio Díaz: Futbolista. La creación del Mexican Athletic Club (1892)” (Calderón Cardoso, 2019) se puede observar que su familia, específicamente su hijo, Deodato Lucas Porfirio Díaz Ortega, fue participe en uno de los primeros juegos de futbol narrados por la prensa de la época.

Como cada una de las obras de Cardoso, sus objetivos son muy claros, en este caso su intención es describir el descubrimiento de un equipo de futbol nuevo –y del cual no se tenían registros- y la participación de “Porfirito” en el primer encuentro de este naciente club. La forma de llevar a cabo la reconstrucción de este hecho histórico tan llamativo –lo hizo ver aún más al no mencionar en el título que se trataba del hijo de Porfirio Díaz y no del Presidente de la República Mexicana- fue mediante la revisión de los periódicos que se encargaron de la narración del evento.

En este artículo, es la primera vez que se aprecia que Cardoso deja a la luz sus fuentes secundarias, e incluso mantiene un ordenamiento de las mismas al dividirlas por sección. La forma de acomodar sus fuentes fue de esta manera: libros, revistas, periódicos y artículos de internet. Para concluir con esta obra no podía faltar sus características notas al final del trabajo, las cuales incluye siempre al terminar cada obra.

Conclusión

Al analizar las obras relacionadas al futbol en México que aparecen en la revista Cuadernos de futbol, se puede apreciar cómo es que si existe una reconstrucción histórica de este fenómeno deportivo. Aunque los aportes que se presentan en la revista anteriormente mencionada se reducen a solo tres autores, cada uno de ellos le da un enfoque distinto, por un lado, los aportes que realiza Carlos Calderón Cardoso (autor al que analizamos en este pequeño ensayo) sobre el origen del futbol sirven para dar un seguimiento a este deporte desde los distintos puntos de investigación que deja inconclusos, por mencionar un ejemplo, como fue el avance del futbol después de ese primer torneo de futbol, ya que es aquí en donde su obra termina. Además, la relación entre cine y futbol sin duda es algo novedoso en el estudio del deporte, pues las perspectivas del medio futbolístico que aportan las distintas películas -que analiza en sus obras Cardoso- con sus tramas, sirven para darle un estereotipo ante la sociedad de lo que significa el futbol. Así pues, con los huecos que quedan presentes, más investigadores pueden inmiscuirse, debido a que la historia tiende a seguir en constante descubrimiento y con la ayuda de estudios anteriores, puede ser aún más factible el comenzar a estudiar este fenómeno deportivo llamado futbol.

Bibliografía.

  • Calderón Cardoso, “¡El Pachuca Athletic Club no nació en 1900!” Cuadernos de Fútbol, nº 53, fecha: 1 abril 2014, ISSN: 1989-6379
  • Calderón Cardoso, Carlos. “El cine y el fútbol en México (parte 1).” Cuadernos de Fútbol, nº 50, fecha: 1 enero 2014, ISSN: 1989-6379
  • Calderón Cardoso, Carlos. “El Cine y el fútbol en México (parte 2).” Cuadernos de Fútbol, nº 51, fecha: 1 febrero 2014, ISSN: 1989-6379
  • Calderón Cardoso, Carlos. “El Cine y el fútbol en México (parte 3).” Cuadernos de Fútbol, nº 52, fecha: 1 marzo 2014, ISSN: 1989-6379
  • Calderón Cardoso, Carlos. “El fútbol nocturno en México.” Cuadernos de Fútbol, nº 55, fecha: 1 junio 2014, ISSN: 1989-6379
  • Calderón Cardoso, Carlos. “El primer gol olímpico en México (1927)”. Cuadernos de Fútbol, nº 77, fecha: 1 junio 2016, ISSN: 1989-6379
  • Calderón Cardoso, Carlos. “Estadios del Club España”. Cuadernos de Fútbol, nº 54, fecha: 1 mayo 2014, ISSN: 1989-6379
  • Calderón Cardoso, “Orígenes del fútbol en México –Capitulo II”. Cuadernos de Fútbol, nº 43, fecha: 1 mayo 2013, ISSN: 1989-6379
  • Calderón Cardoso, “Orígenes del fútbol en México –Capitulo III” Cuadernos de Fútbol, nº 44, fecha: 1 junio 2013, ISSN: 1989-6379
  • Calderón Cardoso, “Orígenes del fútbol en México –Capitulo IV” Cuadernos de Fútbol, nº 46, fecha: 1 septiembre 2013, ISSN: 1989-6379
  • Calderón Cardoso, Carlos. “Orígenes del fútbol en México –Capítulo I” Cuadernos de Fútbol, nº 42, fecha: 1 abril 2013, ISSN: 1989-6379
  • Calderón Cardoso, Carlos. “Porfirio Díaz: Futbolista. La creación del Mexican Athletic Club (1892)”. Cuadernos de Fútbol, nº 105, fecha: 1 enero 2019, ISSN: 1989- 6379



Precisiones acerca de la “cuna” y del “decano” del fútbol en México

Reza  una  sentencia  de  autor  anónimo  que  “La historia es fácilmente manipulable, pero difícilmente podrá demostrarse aquello que se manipula porque tarde o temprano la verdad histórica saldrá a la luz”. 

Esta  frase  viene  al  caso  que  nos  ocupa,  porque  desde  1950  que  se  fundó  un  nuevo  equipo  llamado  Club  de  Fútbol  Pachuca  A.C.,  para  participar  en  la  recién  creada  Segunda  División  Profesional,  luego  de  29  años  de  ausencia  tanto  a  nivel  local  como  en  el  medio  nacional,  los  directivos  en  turno  del  equipo  hidalguense, pero  sobre  todo  desde  1995  bajo  la  dirección  de  Jesús  Martínez  Patiño,  según  comprobaremos  aquí,  han  tratado  de  imponer  a  la  afición  mexicana  como  “verdad  mediática” la  mentira  histórica  de  que  la  ciudad  de  Pachuca  es  la  “Cuna”  del  fútbol   y  que  el  equipo  Pachuca  es  el  “Decano”  del  fútbol  en  México, con  base  en  dos  argumentos  erróneos  y  sin  ofrecer  el  menor  razonamiento  y  explicación  lógica  de  lo  que  entienden  por  “Cuna”  y  por  “Decano”.

Pero  de  acuerdo  con  el  divulgador  y  filósofo  John  Wilson,  “Es sencillamente un disparate decir que algo es verdadero cuando  quien  lo  asevera  no sabe lo que significa ni cómo verificarlo”.

Esto  quiere  decir,  que  una investigación no puede llevarse a cabo si primero no se precisa,  define y explica aquello que nos proponemos conocer, develar o descubrir. En este caso precisar,  definir y explicar qué es el Association Football, es decir, cuáles son el significado y el carácter esencial del término fútbol de asociación, así como precisar,  definir y explicar qué debe entenderse con el concepto  o  analogía  «Cuna del fútbol de asociación” en cualquier país, de acuerdo con sus propiedades, funciones y relaciones  de  causalidad  con  el  fútbol  de  asociación.

Sólo así es posible postular cuál fue y dónde estuvo esa “Cuna” en la que los “Padres” creadores o adoptivos “encunaron” al Association Football inglés en México, y no atribuirle la calidad de sinónimos del  concepto  «Cuna»  a dos acontecimientos  que  fenecieron  en  menos  de  dos  horas  y  pertenecen a una categoría distinta, tales  como  la más remota “cascarita” o partido reglamentario y la formación o fundación del equipo más antiguo  de  los  que  se  tenga  noticia.

Es decir, ningún hecho, fenómeno o situación de la realidad puede abordarse sin una adecuada conceptualización del problema y la precisión del significado y extensión de sentido formal y lógico de los términos que orientarán la búsqueda, porque el investigador que se plantea un problema no lo hace en el vacío, como si no tuviese la menor idea del mismo, sino  que siempre parte de algunas ideas o referentes históricos previos, como lo haremos con el origen, el significado y la esencia del Association Football inglés, lo cual es prioritario y fundamental para la búsqueda del referente o sujeto lógico que le corresponde  a  «Cuna» en cualquier país.

Es  por  ello  que  intentaremos  hacer  una  resumida  pero  sustancial incursión por la historia  del  fútbol  de  asociación  inglés,  que  nos  permita  lograr  un  acercamiento  a  la  definición  de  estos  enunciados  propositivos,  adjetivos  o  figuras  literarias  que  se  trasladan  y  aplican  en  el  fútbol  de  México,  para  poder  tener  un  mejor  juicio  acerca  de  su  significado,  cuya  ignorancia  o  manipulación  ha  dado  lugar  a  dos  escabrosos  asuntos  por  parte  de  intereses, objetivos  y  fines  personales  y  de  grupo,  que  no  son  ni  históricos  ni  deportivos.

Como  señala  (Víctor Martínez Patón. Presidente del  Centro  de  Investigaciones  Históricas  y  Estadísticas   del  Fútbol  Español  (CIHEFE), “Para desenmarañar la cuestión hemos de definir en primer lugar con precisión qué designamos con el término “fútbol”  (o  balompié), para poder precisar posteriormente cuándo empezó  a  practicarse aquello a lo que designamos con tal nombre. Porque aquí es donde surge precisamente la confusión” .

En  México,  es  poco  conocido  que  el  8  de  diciembre  de  1863, en  la  Free  Mason’s  Tavern  de  Londres,   de  la  calle  Long  Acre  81,  en  el  barrio  londinense  de  Great  Queen  Street,  fue  creado  el reglamento  de  13  reglas  que  dio  formalidad  y  unidad  de  normas  al  juego  denominado  originalmente  en  inglés  Association  Football  o  juego  de  balón  con  los  pies  de  asociación,  el  cual  fue  organizado  e  institucionalizado  como  deporte  oficial  en  la    sociedad  civil  y  entidad  deportiva  denominada  Association  Football  o  Asociación  de  juego  de  balón  con  los  pies  de  Londres,  Inglaterra,  fundada  el  26  de  octubre  de  1863,  para  diferenciarlo  de  otros  juegos  de  pelota  en  los  que  predominaba  el  uso  de las  manos  y  eran  muy  rudos, como el Rugby, y  que  se  practicaban  de  manera  libre, desorganizada,  ocasional,  sin  reglas  definidas  y  por  simple diversión. (www.thefa.com/about-football-association/history).

Association  Football  o  Asociación  de fútbol  de  Londres,  es  una  entidad  deportiva  o  “Cuna”,  en  el  sentido  de  albergue  del  fútbol  de  asociación,  que  desde  entonces  quedó  establecida  en  la  Free  Mason’s  Tavern,  (actualmente  Connaugth  Rooms) y  cuya  primera  junta  directiva  (los “padres”)  tuvo  como  primer  presidente  a  Arthur  Pember,  secretario,  Ebenezer  Cobb  Morley,  tesorero,  F.M.  Campbell,  y  vocales,  J.F.  Alcock,  Jass  Turner,  E.  Wawn  y  H.T.  Steward.

“En inglés los nombres de la federación y del nuevo deporte eran respectivamente ‘Football Association’  (Asociación  de  fútbol) y ‘Association Football’  (fútbol  de  asociación), cuya apariencia tan similar ha provocado dificultades hasta el punto de que creo que nunca en España  (ni  en  México) se ha traducido bien el nombre del deporte: lo de ‘fútbol asociación’ es simplemente una mala traducción que, entre otras cosas, en español no significa absolutamente nada.

“En España llamamos ‘fútbol’ a un deporte creado el 26 de octubre de 1863 en Londres, concretamente en la Taberna de los Masones (Freemasons’ Tavern). Lo llamamos ‘fútbol’ por abreviación del sintagma ‘fútbol de la asociación’, siendo la ‘asociación’ a la que se refiere el nombre precisamente la que habían previamente creado los reunidos en la taberna y que no es sino la federación inglesa de fútbol. (la  Football  Asssociation,  the  FA). Así pues cuando hablamos coloquialmente de ‘fútbol’ nos referimos al fútbol de la asociación”.  (Víctor Martínez Patón.  2011.  Presidente del CIHEFE).

El actual Presidente de The FA, Asociación de Fútbol de Inglaterra, David Bernstein  (2013), durante  la  celebración  de  los  150  años  del  fútbol  de  asociación  y  de  la  Asociación  de  Fútbol  de  Inglaterra,  y  que  tuvo  lugar  en  la  sede  de  la  misma  el  26  de  octubre  de  2013,  declaro  que:

“Es increíble pensar cómo el juego (Association  Football) se ha desarrollado a partir de esa primera reunión en la taberna de los masones (la  casa) en octubre de 1863. Los padres fundadores (de la  entidad  deportiva  denominada  Asociación  de  fútbol  o  “cuna”  y  creadores  del  deporte  o  “recién  nacido  bebé-fútbol”  de asociación) tenían la previsión real para poner orden y organización en el juego”.

Esto  quiere  decir  que  Association  Football,  o  juego  de  balón  con  los  pies  de  asociación,  hace  referencia  al  hecho  de  que  sólo  empezó  a  existir  oficialmente  hasta  que  varios  equipos  de  Inglaterra  que  practicaban  el  juego  de  balón  con  los  pies  (conocido como  Dribling  Football)  de  manera  libre,  ocasional,  sin  reglas  unificadas,  de  manera  desorganizada  y  por  diversión,  convinieron  en  asociarse  en  una  entidad  deportiva  (the  Football  Association  o  Asociación  de  fútbol  de  Londres)  para  practicarlo  como  deporte  institucionalizado, en  forma  organizada  y  de  manera  regulada  por  dicha  entidad.

Por  su  parte,  el  ex  presidente  de  la  FA, Greg  Dyke,    durante  la  misma  ceremonia  del  26  de  octubre  de  2013,  declaró  lo siguiente:

Es importante reconocer el pasado y lo que los Padres fundadores del fútbol hicieron  (reglamentar  el  juego  de  balón  con  los  pies  (Association  Football),  asociar  a  los  equipos  que  lo  practicaban  y  encunarlos  en  una  entidad  deportiva  o  “Cuna”,  la  Football  Asociation)) y lo que se ha logrado  (su  crianza,  crecimiento,  desarrollo  y  evolución), porque aquí es donde empezó todo  (www.thefa.com/News/2013/oct/150-anniversary).

Dentro  de  éste  marco  de  referencias  históricas  y  lingüísticas,  tanto  el  nombre  de  la  asociación  de  fútbol  (Football  Association)  como  el  nombre  del  reglamento  (Rules  of  the  Association  Football), y  el  nombre  del  juego  en  la  práctica  (Association  Football),  hacen  referencia a  su  característica  esencial,  es  decir,  que  se  trata  de  un  juego-deporte  de  asociación  o  asociado,  que  tuvo  su  origen  formal  y  existencia  legal    hasta que se reglamentó, fue organizado en una liga mediante  la  asociación  de  varios  equipos  de  un  país, y  empezó  a  practicarse  en  forma  institucionalizada  y  regulada  en  el  seno  de  una  entidad  deportiva  oficial, la  Asociación  de  Fútbol  de  Londres,  Inglaterra.

Debemos  señalar  que  la  Football  Association  (The F.A.)  de  Inglaterra,  reconoció  oficialmente  que  Londres  es  la  ciudad  que  “vio  nacer”  al  fútbol  de  asociación  en  su  casa,  la  “Taberna  de  los  masones  libres”  de  la  calle  Long  Acre  81  en  el  Barrio  Great  Queen,  es  decir,  su  lugar  geográfico  de  nacimiento,  pero  que la  “Cuna  del  Fútbol  de  Asociación  Inglés”  es  específicamente  la  entidad  deportiva  denominada  Asociación  de  Fútbol  (Football  Association), porque  fue  aposento  y  albergue  donde,  el ya “nacido” “bebé-fútbol” inglés, fue organizado,  “encunado” y  “criado”  por  sus  “Padres”  y  la  “familia”  futbolística  (directiva  y  delegados  de  los  equipos  asociados.

El  concepto  y  criterio  de  “Cuna”  que  sostenemos  con  sentido  de  albergue  en  la  etapa  inicial  de  organización  y  desarrollo  del  fútbol  de asociación,   es  compartido  por  Greg  Dyke,  ex  presidente  de  la  FA,  quien  el  26  de  octubre  de  2013  durante  la  celebración  de  los  150  años  de  la  Asociación  de  Fútbol  de  Inglaterra  y  del  fútbol  de  asociación  declaró  también  que:

“Hoy, una placa de conmemoración  está  ubicada  en el Grand Connaught Rooms, antes  Freemason’s  Tavern,  (la  casa) sitio de fundación de la FA (Asociación  de  Futbol,  la  “Cuna”) en 1863 . Un lugar permanente de la cuna del deporte  (el  fútbol  de  asociación) más popular del mundo.

“La casa del fútbol está marcada. (no  el  sitio  de  la  primera  “cascarita  o  juego, campo  Limes  Field  del  Barrio  de  Londres,  Barnes  0  Richmond  0  el  19  de  diciembre  de  1863;  ni  el  sitio  de  la  fundación  del  equipo  más  antiguo,  Sheffield  Football  Club  de  1957). Es importante reconocer el pasado y lo que los Padres Fundadores del fútbol hicieron  (reglamentarlo,  darle  nombre  y  apellido  y  organizarlo,  es  decir, encunarlo  en  una  entidad  deportiva) y lo que se ha logrado  (su  desarrollo  y  difusión  mundializada) porque aquí es donde empezó todo”.

Cabe  acotar  que  antes  de  que  se  fundara  la  Association  Football  o  Asociación  de  Fútbol  de  Londres  en  1863,  ya  se  habían  realizado  infinidad  de  “cascaritas”  y  partidos  formales  entre equipos  de  colegios,  universidades  y  de  club  que  practicaban  el  dribling  football  o  dribling  game  (  juego  de  balón  con  los  pies  que  tenía  las  características  y  reglas  del  que  se  rebautizaría  como  Association  Football), que  ya  existían  más  de  quince  equipos  fundados,  entre  ellos  el  Sheffield  Football  Club de  1957,  reconocido  por  la  FIFA  y  por  la  FA  como  el  equipo  más  antiguo  del  mundo,  y  que  a  ninguno  de  los  lugares  o  sitios  donde  tuvieron  lugar  tales  acontecimientos  se  les  reconoció  como  cuna  del  fútbol  inglés  y  nadie  ha  reclamado  que  lo  merecieran  dado  que  aún  no  se  jugaba,  estricta  y  precisamente  hablando,  el  fútbol  de  asociación,  pues  lo  hacían  de  manera  libre, ocasional,  sin  reglas  unificadas,  por  diversión,  y  en  forma  desorganizada,  es  decir,  no  institucionalizada  como  deporte.

Entonces,  es la asociación de varios equipos  de  un  país,  la organización de  estos  en  una liga de fútbol,  un  reglamento  unificado  y el funcionamiento institucional  y  social  de la misma (promover la afición y el desarrollo  de  la práctica deportiva organizada del fútbol de asociación)  lo  que  en  Inglaterra  le  otorga  a  la  Asociación  de  Fútbol  de  Londres  el  derecho  natural  y  legal  de  ser  reconocida  como  la  “Cuna  del  fútbol  de  asociación  Inglés”.

Y  la incursión por la historia permite observar cómo el fútbol  de  asociación  inglés se expandió a fines del siglo XIX por intermedio de los comerciantes, ingenieros, obreros y funcionarios británicos que protagonizaron las incursiones económicas de su país por el resto del mundo,  de  tal  manera  que  a  principios del siglo XX este deporte ya estaba extendido por Europa y gran parte del mundo donde la mayoría de los países,  de  manera  similar  que  en  Inglaterra,  ya habían formado su asociación  o  liga  de  fútbol  (Argentine  Association  Football  League,  Uruguayan  Association  Football  League  y  Sao  Paolo  Association  Football  League),  es  decir,  sus  respectivas  “Cunas”, para transformar  al  simple  juego  libre,  llanero  o  no  institucionalizado  de  balón  con  los  pies  (football), en una práctica deportiva institucionalizada  que  le confiriera  su  carácter  esencial  de  asociado  (Association  Football  o  fútbol  de  asociación).

Nuestro  concepto  o  criterio  de  “Cuna”  en  el  sentido  de  albergue,  y  de  hito  histórico  atribuido  al  partido  más  remoto  y  a  la  existencia  del  equipo  más  antiguo,  también está  respaldado  por  Antonio  Bálmont,   miembro del CIHEFE,  Centro  de Investigación  de  Historia  y  Estadísticas  del  Fútbol  Español,  quien  en  2011  publicó  un  artículo  en  la  revista  oficial  “Cuadernos  de  fútbol”  en  el  que  puede  leerse:

“Aunque en Jerez se hubiese jugado antes al fútbol que en Huelva  (la  “cuna”  del  fútbol  en  España) esta provincia seguiría siendo la que ejerció un papel más relevante y trascendental para el desarrollo, consolidación y difusión del balompié en nuestro país. Y es que en ningún momento se ha cuestionado la hegemonía de Huelva como el principal foco de arraigo y expansión del fútbol español  (como  la  cuna  del  fútbol  en  España)   porque de lo que estamos debatiendo es del lugar en el que se jugó por primera vez al foot-ball. Uno de los hitos relevantes de nuestra historia futbolística”.

Es  importante que la  afición  mexicana  esté  informada  de  que  la  difusión  e  introducción  del  Association  Football  o  fútbol  de  asociación  inglés  en  los  países  de  Europa  y  América  tuvo  una  pauta  idéntica, y  que  según  señalo  David Bernstein  el  26  de  octubre  de  2013: “Todo el fútbol organizado en el mundo se remonta a ese importante acontecimiento”.

Este  marco  histórico  de fuentes  de  información  secundarias,  bibliografía  y  testimoniales  acreditados  acerca  del  nombre  completo  y  el  carácter  esencial  del  fútbol  de  asociación,  así  como  del  concepto  cuna  del  fútbol,  es  el  que  en  México  se  desconoce  o  ha  sido  omitido  intencionalmente,  sobre  todo  por  quienes  como  los  actuales  directivos  del  club  de  fútbol  Pachuca  y  sus  ideólogos,  han  venido  utilizando  la  historia  del  fútbol  de  asociación  en  territorio  mexicano,  más  con  intereses  y  fines  políticos,  mercantilistas  e  ideológicos  que  con  objetivos  históricos  y  deportivos. 

Dentro  de  este  contexto,  cabe  señalar  que  entre  mayo  de  1889  y  junio  de  1902,   periodo  en  el  que  posiblemente  fue  introducido  el  conocimiento  del  reglamento  del  fútbol  de  asociación  por  inmigrantes  británicos,  el  inicio  de  la  práctica del juego  de  balón  con  los  pies  de  asociación  en  México  se  llevó  a  cabo  de  manera  libre,  ocasional,  informalmente  y  por  diversión,  exclusivamente  entre  los británicos  residentes  en  Real  del  Monte  y  Pachuca,  Hidalgo;  Orizaba,  Veracruz,  Puebla  y  la  ciudad  de  México,  y  que  los encuentros  eran  poco  frecuentes  pues  se  realizaban,  cuando  mucho,  uno o dos al año,  con  el  propósito  de  divertirse  y  fortalecer  los  vínculos  de  la  comunidad  británica  en  territorio  mexicano.

En  este  sentido,  lo  que  practicaban  los  equipos  existentes  en  el  periodo  de  1889-1902,  tales  como:  el  Pachuca  Football  Club  (1892),  Reforma  Athletic  Club  (1894),  British  Club  (1901),  Mexico  Cricket  Club  (1901)  y  Orizaba  Athletic  Club  (1901  o  1902)  no  era,  estrictamente  hablando,  el  fútbol  de  asociación  en  México,  ya  que  el carácter  esencial  del  juego-deporte  inglés  es  el  de  ser  asociado,  debido  a  que  varios  equipos  de  un  país  hayan  convenido  en  asociarse  en  una  sociedad  civil   y  organizar  el  juego  en  una  entidad  deportiva  o  liga,  para  jugar  precisamente  al  juego  de  balón  con  los  pies  de  asociación,  es  decir,  organizado,  institucionalizado  como  deporte  y  regulado  formalmente  por  dicha  liga  o  asociación.

Por  lo  tanto,  ni  Real  del  Monte,  ni  Orizaba,  ni  la  ciudad  de  Pachuca  pueden  ser  consideradas  la  “Cuna”  del  fútbol  de  asociación  inglés  en  México,  dado que  en  ninguna  de  esas  poblaciones  se  jugaba  al  fútbol  “de  asociación”,  estrictamente  hablando,  ni  se  asociaron  varios  equipos  de  diferentes  ciudades  o  estados  de  la  República  para  fundar  una  liga,  organizar  al  fútbol  e  institucionalizarlo  como  deporte  regulado  por  un  código  de  reglas  unificado  antes  del  19  de  septiembre  de  1902,  fecha  en  que  los  “Padres”  adoptivos del  fútbol  de  asociación  en  México,  Percy  C.  Clifford,  Robert  J.  Blackmore,  O.M.  Sharp  (jugadores  del  Reforma  Athletic  Club)  y  Roland  Norman  Penny  (jugador  del  equipo  de  football  del  Mexico  Cricket  Club)  fundaron la  Liga  Mexicana  Amateur  de  Association  Football  de  la  ciudad  de  México  y  asociaron  al  Pachuca  Athletic  Club  del estado  de  Hidalgo  y  al  Orizaba  Athletic  Club  del  estado  de  Veracruz,  con  la  función  social  de  promover  el  arraigo,  el  crecimiento,  el  desarrollo  y  la  difusión  del  fútbol  “de  asociación”  en  el  país,  es  decir,  la  Auténtica  y Única  Cuna  del  Association  Football  Inglés  en  México.

Las  evidencias  de  que  los  “investigadores”  e  “historiadores”  que  pretenden  favorecer  a  Pachuca  saben,  pero niegan  u  omiten  intencionalmente, que  la  ”Cuna  del  fútbol  de  asociación  inglés  en  México”  es  la  Liga  Mexicana  Amateur  de  Association  Football, son  abundantes  y  han  quedado  plasmadas  en  sus  publicaciones,  pero  nunca  se  han  atrevido  a  aceptarlo  de  manera  consciente  y  pública  a  nivel  nacional  por  los  intereses  creados  que  tienen  tras  de  sí.  Aunque  de  manera  inconsciente,  se  traicionan  a  sí  mismos.

Nuestro  punto  de  vista  acerca  del  carácter esencial  del  fútbol  de  asociación,  es  decir,  que  es  asociado,  lo avala,  sin  proponérselo,  Juan  Cid  y  Mulet,  quien  en  su  obra  de  1960  “El  libro  de  oro  del  fútbol  mexicano”  de  cuatro  tomos  sostiene  que:

“Con  el  nombre  antes  o  al  final  de  su  membrete,  el  fútbol  no  deja  de  ser  asociación  (asociado),  porque  tal  es  la  característica  que  lo  distingue  ‘asociarse’,  convivir  mutuamente  para  practicar  el  fútbol “  (Cid  y  Mulet.  1962. P. 604).

Así  opina, inconscientemente  también,  Carlos  Calderón  Cardoso en  el  capítulo  cuatro  de  Los  Orígenes  del  Fútbol  en  México,  publicado  en  Cuadernos  de  Fútbol  del  CIHEFE  en  2013, cuando  afirma  que:

“En  la  instalaciones  de  éste  último  (Club  Reforma),  es  donde  quedó  conformado  el  calendario  que  marcaría  el  inicio  del  fútbol  asociado  en  nuestro  país”.  No  el  origen  del  fútbol  en  México,  o  mexicano,  como  asegura  en  la  mayoría  de  sus  escritos.

Con  esta  especificación  que  hace  Calderón  acerca  del  “inicio  del  fútbol  asociado”  deja  claro,  inconscientemente,  que  la  esencia  del  fútbol  es  esa,  ser  asociado,  y  que  la  cuna  del  fútbol  de  asociación  o  asociado  en  México  es  la  Liga  Mexicana  Amateur  de  Association  Football  de  la  ciudad  capital,  tanto  porque  allí  se  asociaron  los  equipos  existentes  en  el  país,  lo  cual  le  confirió   un  carácter  nacional  (fútbol  de  México, o  en  México) como  porque  en  ella  tuvo  comienzo  el  juego  ya  como  deporte,  y  precisamente,  ya  con  su  carácter  esencial  de  fútbol  de  asociación,  (no  antes  de  que  se  organizara  en  la  liga), así  como  la  primera  etapa  de su largo proceso  de  arraigo,  crecimiento,  desarrollo  y  difusión  oficial.

Además,  Juan  Cid  y  Mulet  (1962. p.10),  señala  que  “el  futbol  de  México,  ha  alcanzado  si  no  una  notable  fama  internacional,  si,  por  lo  menos,  plena  madurez,  pero  para  llegar  a  esto,  ha  sido  necesario  recorrer  un  largo  camino,  cuyas  facetas  vamos  enseguida  a  presentar  al  lector,  con  lo  cual  da  a  entender,  después,  que  se  trata  de  “un  conocimiento,  lo  más  exacto  posible,  de  cuál  ha  sido  el  proceso  de  desarrollo  de  una  actividad  deportiva” (1962. p.9,)  que  hoy  absorbe  la  atención  de  todo  México”.  Y  que  para  normar  el  criterio  del  lector,  empezará  por  “la  historia  del  fútbol  mexicano,  que  comprende  la  época  de  1902  a  1912”es  decir,  la  etapa  inicial  del  proceso  de  arraigo,  desarrollo  y  progreso  del  fútbol  de  asociación  que  sostenemos  en  nuestro  concepto  de  “Cuna”.

Y  así  lo  confirma  con  el  mismo  sentido  Carlos  Calderón  Cardoso,  cuando  afirma,  en  el  capítulo  tres  de  Los  Orígenes  del  Fútbol  en  México,  publicado  en  Cuadernos  de  Fútbol  del  CIHEFE,  en  2013,  categóricamente, que :

“Ahí  arrancó  la  época  inglesa  del  fútbol  organizado  en  México  (1902-1912) Así  comenzó  a  desarrollarse  el  fútbol  en  México”,  no  mexicano,  como  también  sostenemos,  porque  es  inglés.

Y  lo  mismo  hace  Javier  Bañuelos  Rentería  en  Té,  Whisky  y  Fútbol.  Balón  a  Tierra.  1998.  P  15:

“Así  comenzó  a  desarrollarse  el  fútbol  en  México, hasta  que  otros  temperamentos  y  otras  costumbres  llegaron  a  la  liga”. 

Tanto  Juan  Cid  y  Mulet  y  Carlos  Calderón  Cardoso  como  Javier Bañuelos  Rentería,  se  refieren  a  una  etapa  inicial    del  fútbol  de  asociación  u  organizado (como  proponemos),  y  que  según  Rentería,  al  igual  que  Cid  y  Mulet,  abarca  de  1902  a  1912  (como  también  proponemos)  ya  que  los  “otros  temperamentos  y  costumbres  que  llegaron  a  la  liga” a los  que  se refiere  Rentería, lo  hicieron  hasta  1910  con  la  participación  del  México  Football  Club,  integrado  en  su  mayoría  por  mexicanos,  y  más  aún  en  1912,  cuando  a  la  Liga  Mexicana  Amateur  de  Association  Football  se  le  cambió  el  nombre  por  el  de  Asociación  de  Aficionados  de  México  en  la  Liga  de  Football,  a  la  cual  ingresó  el  equipo  del  Club  España  sumándose  al  México  y  empezó  el  fin  de  la  época  británica  con  la  partida  de  muchos  integrantes  de  esta  comunidad  a  sus  lugares  de  origen  u  otros  países,  y  porque  los  españoles  empezaron  a  dominar  en  el  fútbol  del  torneo  nacional  y  a  promoverlo  en  la  provincia  mexicana.

A  nuestro  parecer,  las  siguientes  citas  de  Juan  Cid  y  Mulet  -que  aparecen  en  la  página  603  y  604  de  su  obra  El  Libro  de  Oro  del  Fútbol  Mexicano–  son  determinantes  y  concluyentes  para  comprobar  que  sí  estaba  consciente  de  que  la  Liga  Mexicana  Amateur  de  Association  Football  de  la  capital  mexicana  es  la  Única  y  Auténtica  Cuna  del  Association  Football  Inglés  en  México,  pero  no  le  convenía  decirlo  literalmente  en  su  tiempo:

“Queremos  distinguir  esa  primera  organización  liguera  ‘mexicana’  (…)  sin  quitarle  un  ápice  del  mérito  que  le  pertenece  como  organización  modelo  del  fútbol  nuestro (…) Lo  cierto  es  que,  ésta  primera  ‘Liga’  (Cuna  decimos  nosotros),  será  la  base  y  fijará  las  normas  para  las  futuras”.

No  menos  concluyente  es  la  declaración  de  Carlos  Calderón  Cardoso,  en su editorial de mediotiempo.com/editoriales/pachucalacunadelfutbol, del  3  de  junio  de  2007, en  el  sentido  de  que:

“El  campeonato  de  fútbol  mexicano  nació  de  cinco  conjuntos  en  1902,  la  llamada  Liga  Amateur  de  Association  Football,  que  en  línea  directa  es  lo  que  hoy  en  día  conocemos  como  primera  división”, o  Liga  MX, como  también  proponemos,  y  la  cual  está  bajo  la  autoridad  de  la  Federación  Mexicana  de  Fútbol  (de)  Asociación  A.C.

De  todo  lo  anterior  se  puede  inferir  y  queda  claro  -eso  creemos-  que  es la organización de una liga de fútbol, la asociación de varios equipos  de  diversos  estados a ella y el funcionamiento institucional,  legal y social de la misma (promover la afición y desarrollar la práctica deportiva organizada del fútbol de asociación), lo que en México le otorga a la Liga Mexicana Amateur de Association Football el derecho natural  y legal de ser reconocida oficialmente -dicho sea con propiedad y precisión, en castellano-, como la auténtica y única “Cuna del Association Football Inglés en México”, y no, del fútbol mexicano, como dicen, ya que el juego es inglés,  y  además fue dirigido  y  practicado  casi exclusivamente por los británicos,  desde  la  fundación  de  la  liga  en  1902  hasta  el  fin  de  la  época británica  en 1912.

Por  lo  que  respecta  al  término  Decano,  hay  que  decir  que  el fútbol de España tiene el dudoso honor de haber auspiciado entre todos sus miembros y desde hace muchas décadas un título honorífico del cual nadie se hace responsable por no estar registrado, ni definido, y aún menos constar como oficial en sitio alguno.

“Decano” procede del latín “decanus” y significa literalmente ser el líder de un grupo de diez,  pero  desde  hace  mucho  tiempo  en  España  se  aplicó  el  título  honorífico  de  “Decano” al egresado  universitario registrado  o asociado  a  un  Colegio que tuviera más años  ejerciendo su profesión.  Y  aunque  no  tiene  razón  de  ser  porque  sólo  es  aplicable  a  personas,  el  término  fue  trasladado  al  deporte español  donde  es habitual,  erróneamente, que se otorgue  el  título honorífico  de  “Decano” al club  o  equipo  que  simplemente  compruebe  ser  el  más  antiguo,  sin  tener  en  cuenta  la  continuidad  desde  su  fundación  o  registro  en  una  liga  o  federación.

Si buscamos con atención,  tanto en los Estatutos y Reglamentos  de  la  Federación  Española  de  Fútbol  como  en  los  del máximo organismo nacional en cuestiones de fútbol  en  México, la Federación  Mexicana  de  Fútbol  Asociación  A.C., comprobaremos que la figura del Decano no existe, como tampoco existe en estas bases una referencia al mejor jugador, entrenador, gestor, club o máximo goleador.

¿Quién dicta  entonces  las normas para ser  equipo  Decano  y  quien  lo  elige en México? Nadie lo sabe, ni la FEMEXFUT  se hace responsable porque no le compete  (aunque  sí muestra su complacencia  ante la  proclama  del   club  Pachuca), y ni los demás  equipos  de  la  actual  Liga  MX han hecho una  solicitud oficial indicando como debe ser elaborada y otorgada esta distinción.

Entonces, ¿por qué autonombran  sus  actuales  directivos  y  seguidores  al  Club  Pachuca  como Decano  del  fútbol  en  México,  y con base a qué atributos  o  interés?

En  el  caso  de  México, los directivos  actuales  del  Club  de  fútbol  Pachuca  y  sus  seguidores  autonombran  “Decano”  a  su  equipo por  ser el  equipo  de fútbol  más  antiguo  del  que  se  tiene  noticia  periodística  hasta  hoy, dado  que  en  el  periódico  The  Two  Republics  de  noviembre  de  1892,  aparece  una  nota  que  avala  que  en  ese  año  ya  había  un  equipo  denominado  Pachuca  Football  Club  que  iba  a  tener  una  reunión  para  reorganizar  su  plantilla,  entre  otras  cosas.

Además,  argumentan  que  es  unos de los primeros  cinco  equipos asociados a nivel nacional  en  la  Liga  Mexicana  Amateur  de  Association  Football  de  1902,  y  el  único  que  sobrevive,  supuestamente,  de   aquellos  fundadores  y  pioneros  de  su  práctica  organizada,  aunque  algunos  como nosotros,  por  ejemplo, no  compartimos  esa  versión  particular  en   absoluto,  pues  aparte  de las  apreciaciones  sobre  el  significado  del  Decano, hay otras más importantes que afectan a la trayectoria,  supuestamente  continua, del  club  Pachuca y que se deberían valorar.

Sostenemos que  el  actual  Club  de  fútbol  Pachuca,  no  tiene  ninguna  relación  con  aquel  Pachuca  Football  Club  de  1892  ni  con  el  Pachuca  Athletic  Club  de  1895,  ni  con  el  Club  de  Fútbol  Pachuca  que  se  fundó  en  1960,  es  decir,  que  ninguno  de  esos  equipos  tuvo  la  continuidad  ni  la  función  social  y  deportiva  que  pretende  atribuirle  el  historiador  y  empleado del  Grupo  Pachuca,  Carlos  Calderón  Cardoso, en  la  oficiosa  historia  particular    denominada  “Pachuca,  la  cuna  del  fútbol”  de  2001,  financiada  por  el  propio  club  y  el  gobierno  del  estado  de  Hidalgo.

En  principio,  debemos señalar que aunque  ya  hay  noticia  de  un  Pachuca  Football  Club  en  diciembre  de  1892, se desconoce en qué fecha    y  por  quién  fue constituido  mediante  acta  fundacional  y  registrado  legalmente  pues  no  existe  documento  que  lo  certifique,   no  hay  datos  de  cuándo empezó a  jugar  ni  contra  quienes; ni  se  sabe  qué ocurrió con  el  equipo entre 1893 y  mediados  de 1895. 

Hay  noticia  del  periódico  The  Mexican  Herald  del  9  de noviembre  de  1895  acerca  de   que  en  octubre  de  dicho  año  se  fusionó  con  el  Pachuca  Cricket  Club  y  el  Velasco  Cricket  Club  en  la  asociación  deportiva  Pachuca  Athletic  Club, pero  se  desconocen  sus  actividades  entre  diciembre  1895  a  1900.

En “Pachuca, la cuna del fútbol”  de  2001,  Carlos  Calderón Cardoso expone con suficiencia de detalles la historia del club, que  entonces  aseguraba que  había  sido  fundado  en  noviembre  de  1900:

 «El minero regresó a Pachuca y entusiasmado informó a sus compañeros que el fútbol había llegado a México, y se propuso formar un equipo entres los ‘hijos de la oscuridad’ que pasaban casi todo el día bajo tierra. La idea gustó sobremanera, por lo que mineros y técnicos se apuntaron en la lista de Blamey… La lista de hombres que quedaron para la posteridad fue la siguiente: James Bennetts, John Benetts, William Blamey, W. Bray, George Camphuis, Charles Dawe, John Dawe, W. Gould, Thomas Patton, Richard Sobey y C. William Thomas. Ante el aplauso de los asistentes, el conjunto quedó formalmente constituido  (¿sin  acta  fundacional  registrada?) con el nombre de Pachuca Athletic Club, un sábado por la tarde del mes de noviembre de 1900, en la ciudad de los vientos» (Ibid.: 21).   

Pero  de  acuerdo  con  el  trabajo  de  tesis  para  obtener  el  grado  de  doctorado  de  Gabriel  H.  Angelotti  Pasteur  (2005):

“En esta obra se busca tejer toda la trayectoria de la institución partiendo desde aquel pasado mítico (de cuando los «ingleses» llegaron a estos territorios) hasta la actualidad. La importancia de la investigación queda reflejada en las innumerables fuentes consultadas, locales y nacionales, archivos, museos, hemerotecas y fototecas. El único agravante de la obra es que todas las afirmaciones vertidas no están acompañadas de la cita de fuente correspondiente, dejando entre los lectores, especialmente los más exigentes, un cierto aire de incertidumbre”. (Angelotti  Pasteur  H.  Gabriel.  2005).

El  asunto  que  más  nos  importa  es  que  el  solitario  equipo  Pachuca  Athletic  Club  de  1900  (según  Cardoso)  no  pudo  encontrar  más  adeptos  al  fútbol  en  el  distrito  Real  del  Monte  y  Pachuca,   y  se  vio  obligado  a  afiliarse  a  la  Liga  Mexicana  Amateur  de  Association  Football  de  la  ciudad  de  México  donde  sufrió en los dos primeros  torneos  de 1902-1903  y  1903–1904  al  quedar  en  penúltimo y  último  lugar.

No  obstante,  en  el  siguiente  torneo  de 1904-1905 obtuvo el  primer  campeonato de cinco (dos Ligas más en 1917-1918 y 1919-1920 y dos Copas Tower en 1907-1908 y 1911-1912). Pero  finalmente, luego  de  participar  en  la Copa Centenario de 1921, el  equipo  llamado  Pachuca  Athletic  Club   desapareció de  las  competencias  oficiales  de  carácter  nacional  y hasta el momento nadie  puede  explicar  a  ciencia  cierta  (ni  Carlos  Calderón  Cardoso,  que  se  ha  dedicado  a  investigar  exclusivamente  lo  relacionado  con  el  club),  si  continuó  existiendo  como  equipo  local  ni que aconteció con el Pachuca Athletic Club  en  la  ciudad  hidalguense  de  1921  a  1933,  es  decir,  durante  12  años  más  que  ya  suman  19  con  los  7  anteriores  a  1900.

En  los  años  1930  ya  eran numerosas las prácticas deportivas que se ejercitaban en la  ciudad  de  México  y  se habían extendido a diversos sectores de la sociedad. Es  de  extrañar,  que  si  continuó  existiendo  el  Pachuca  Athletic  Club  en  la  capital  hidalguense,  hayan  sido  los obreros de la empresa minera  Real del Monte y Pachuca quienes solicitaron a las autoridades apoyo económico para fomentar las actividades físicas entre los trabajadores y así combatir muchos de los males que acosaban a los trabajadores, siendo el más importante el alcoholismo.

La siguiente misiva, (Documento 3,  Citado  por  Gabriel  Angelotti  Pasteur), escrita en el año de 1928 por el representante del Sindicato Industrial de Trabajadores Mineros del Estado de Hidalgo, da cuenta de tal situación:

«Tomando en consideración el decaimiento espiritual que embarga a la clase trabajadora y principalmente a los mineros, por falta de lugares de recreo, pues en la actualidad el noventa y cinco por ciento de los mineros, el tiempo libre que le deja el desempeño de sus labores, lo ocupa en su mayoría a la embriaguez y lo que es más en frecuentar constantemente las casas de asignación, en perjuicio de su organismo, de la familia y hasta la sociedad entera; por lo tanto, se estima necesario e indispensable que la juventud actual deba buscar la forma más eficaz para evitar este mal, propugnamos la formación de clubes deportivos”.

Pero los trabajadores tuvieron que esperar hasta 1934 para que se fundara un «Centro Social y Deportivo». La  existencia de esta institución resultaría trascendente, debido a que fue la única vez en la historia que el club de fútbol se adhirió a los lineamientos del asociacionismo, en boga por aquellos tiempos. El centro social estaba directamente ligado a la empresa minera de Real del Monte y Pachuca la cual solventaba los gastos para la adquisición de materiales (balones de básquetbol, fútbol y béisbol, implementos para boxeo, entre otros) y abonaba los sueldos del personal administrativo y deportivo contratado.

“Con la creación de esta institución, el fútbol retornaría de nuevo a la ciudad de Pachuca, recuperando su propio nombre e identidad e, incluso, siendo manejado por un ex jugador inglés, el mítico fundador del equipo, «el manco» Blamey. (lo  cual  se  sabe  ahora  que  es  falso) Aunque el ‘Pachuca’ de esos tiempos sólo participó en torneos regionales, pero cuando lo hacía en campeonatos estatales y nacionales, adoptaba el nombre de (club de fútbol del) Estado de Hidalgo» (Calderón, 2001: 75).

¿Qué  pasó  exactamente  entre  1921  y  1934  que  se  creó  el  centro  deportivo  de  los  mineros?,  y  entre  1934  y  1949 ¿ hubo  algún  equipo  denominado  Pachuca?  Nada  se  sabe  en  concreto  y  fundamentado.  Fue hasta 1950, con la creación de la Segunda División  Profesional de fútbol en México, cuando un “Club Pachuca” regresó a las competencias nacionales,  pero  descendió en  1951 y  desapareció  nuevamente  en  1952.

En 1960,   tras  ocho  años  más  de  ausencia  de  un  equipo  llamado  Pachuca, Don Germán Corona del Rosal, fundó la actual franquicia del Club de Fútbol Pachuca, A. C.  (Asociación  Civil,  no  Athletic  Club).

Desde entonces y hasta mediados de 1990, la trayectoria de la institución se caracterizó por la discontinuidad, marcada por vaivenes deportivos y organizativos, que por años mantuvieron al equipo al margen de las competencias oficiales.

Tuvieron épocas con ascensos (1966-67, 1991-92, 1995-96, 1998), de mediocridad  con descensos (1951-1952, 1973, 1992-1993, 1997) y desapariciones (1974, 1977,  y  1979). Es  decir  15  años  más,  que  sumados  a  los  19 anteriores  dan  un  total  de  34  años  sin  que  hubiera  un  equipo  llamado  Pachuca  Athletic  Club  o  simplemente,  o sin  que  se  tuvieran  noticias  de  ello.

Además, en su errática trayectoria  a  partir  de  1950, el club en numerosas ocasiones cambio el color de la vestimenta, el campo de juego, su escudo representativo, sus autoridades y, aun, de nombre,  aunque todas las denominaciones elegidas siempre conservaron la referencia toponímica al lugar de origen, es decir, a la ciudad de Pachuca, habiendo adoptado los siguientes nombres: Pachuca Athletic Club, Club Deportivo Atlético Pachuca, Garzas Blancas del Pachuca de U.A.H., Pachuca Fútbol Club, Club Pachuca y el actual Club de Fútbol Pachuca.

El texto de Calderón Cardoso prosigue narrando lo acontecido en el club a mediados del siglo XX, las crisis del equipo, los cambios administrativos, el traspaso del club al gobierno, luego a la universidad, posteriormente a un particular y nuevamente al gobierno, dando cuenta de todas las decepciones deportivas de ese  periodo.

El trayecto propuesto en la narrativa sigue una línea evolutiva en el tiempo histórico, con una trama por momentos predecible: un inicio enigmático, un desenlace y, en este caso, un final feliz  que  empieza  el año de 1994  que  el club Pachuca cambió radicalmente.

“Sin embargo, este argumento  (la  línea evolutiva en el tiempo histórico  que  maneja  Calderón) no es tan convincente como se supone. Entre el originario Pachuca Athletic Club (que fue un equipo integrado por un grupo de mineros, posiblemente amigos o familiares) y el actual <club> de Fútbol Pachuca, perteneciente a la empresa Promotora de Fútbol Pachuca  (al  Grupo  Pachuca) y que representa a una institución deportiva en la cual laboran más de 150 personas, incluyendo a los jugadores del primer equipo, hay diferencias tan notables que podríamos exponerlos como dos instituciones totalmente diferentes”  (Angelotti.  2005).

Klauss Heinemann, un sociólogo especializado en el estudio de organizaciones deportivas, define esta situación como el paso de una institución de orden «tradicional» (caracterizadas por el trabajo voluntario, el reparto de los costes entre los miembros, la orientación no lucrativa y, además, de responder con lentitud a los cambios de orden cuantitativo o cualitativos de la sociedad), a otra, orientada al mercado. Caracterizando a esta última, no sólo por su política de estímulos, sus mecanismos de formalización y de supervisión sino, además, por su «potencial de innovación», debido a que este tipo de empresa tiene que existir en competencia con otras instituciones.

La fuerza de la innovación, la actualización de conocimientos, las nuevas tecnologías y las constantes renovaciones de los productos son imprescindibles para cumplimentar sus objetivos (Heinemann,  Klauss. 1998: 76-80).

En el año de 1995, el entonces Gobernador del Estado de Hidalgo, el Sr. Jesús  Murillo Karam, personalmente eligió en calidad de Presidente del club Pachuca al empresario local Jesús Martínez Patiño. A partir de ese momento la institución experimentaría una serie de cambios significativos, los cuales fueron acompañados por importantes éxitos en el ámbito deportivo. El antiguo club Pachuca, definido por un ex Presidente como «un club muy familiar», fue transformado radicalmente, convirtiéndose en una gran empresa comercial, en un negocio.

«La reestructuración del equipo fue paulatina. Jesús Murillo Karam -por entonces gobernador del Estado de Hidalgo por el PRI- sabía que el gobierno a su cargo no podía mantener vitaliciamente el plantel, por lo que optó buscar detenidamente a un grupo de empresarios locales que por amor al equipo pudieran sortear los gastos económicos que se avecinaban y, no sólo eso, sino crear una estructura en todo el estado que impulsara el deporte en todos los niveles, desde el amateur hasta el profesional. Tras una ardua búsqueda -no podía ser de otra manera- en julio de 1995 el gobierno del Estado eligió acertadamente a la nueva administración del club Pachuca.

La directiva, encabezada por Jesús Martínez Patiño como Presidente, se encargaría desde entonces de los asuntos de la institución» (Calderón. 200. p. 112 ).

Cuando la nueva administración inició sus labores el club permanecía en la segunda  división. Pero esa misma temporada, 1995-1996, y tras la adquisición de jugadores de renombre internacional, el Pachuca realizaría una importante campaña consagrándose campeón y consiguiendo el tan ansiado ascenso a la Primera  División. Como debe suponerse, esta meta constituía uno de los mayores anhelos de los simpatizantes y de los pachuqueños en general, acontecimiento que fue festejado con toda algarabía en la ciudad.

Aunque la alegría duraría muy poco, pues en la temporada siguiente, 1996-1997, nuevamente el Pachuca descendería a la Segunda División. Estos altibajos, comunes en la historia de la institución, se terminarían en la campaña 1997-1998, cuando se logra  nuevamente el ascenso a la Primera División de manera definitiva, permaneciendo en esta categoría hasta la actualidad.

En los años siguientes, el club obtendría los logros deportivos más importantes de su historia, consagrándose campeón en los Torneos «Invierno 1999», «Invierno 2001», «Apertura 2003», y logrando el primer título internacional, la Copa de Campeones de la Confederación Centroamericana de Fútbol (Concacaf) 2002.

De manera simultánea a los éxitos deportivos la institución fue cambiando su antigua fisonomía de «club familiar» al de «empresa», convirtiéndose en una de las organizaciones futbolísticas más vanguardistas del país. Su perfil empresarial y su proyección hacia otros rubros económicos, quedan evidenciado en los proyectos emprendidos en los últimos años.

La Universidad del Fútbol es la obra más excelsa de la actual administración. Esta institución educativa, única en su género en toda América y una de las pocas del mundo, hasta principios de 2004 contaba con 500 estudiantes en cuatro carreras (Administración de Empresas, Psicología, Educación Física y Comunicación Social) siendo el eje educativo de estas disciplinas la capacitación en los deportes.

A esta iniciativa se sumarían numerosos proyectos económicos como la construcción de una plaza comercial, la «Tuzo Plaza» (donde operan diversas tiendas de servicio: «Tuzopanadería», «Tuzotaco», «Tuzomanía») y un gimnasio de primer nivel, bautizado como «Gimnasio Azteca, Ricardo Salinas Pliego», en honor al Presidente de T.V. Azteca empresa «hermana» que coincidentemente tiene tantos años como la nueva administración del club Pachuca.

Además, se realizarían tres Congresos Internacionales de Fútbol, con la asistencia de importantes personalidades de este ámbito. Después se inauguró un hotel cinco estrellas y un centro de convenciones, el «Radisson Pachuca Tuzos», ubicado en una importante zona de la ciudad.

En el ámbito de las comunicaciones, la iniciativa institucional se ha preocupado en utilizar todos los medios tecnológicos disponibles. En la actualidad el club Pachuca cuenta con dos páginas en Internet www.tuzos.com y www.universidaddelfutbol.com; una revista informativa de publicación mensual, «Corresponsal Tuzo»; una Carpeta de Prensa, que lleva 12 ediciones consecutivas; dos programas de televisión para la audiencia local, «Aquí el fútbol» y «Cuna del Fútbol mexicano»; tres programas de radio, «Zona Tuza», «A nivel de Cancha» y «club Tuzo» y, más  tarde, un programa televisivo de alcance internacional, «Tuzoccer, el mundo del Pachuca», emitido por la  cadena Fox Sport para toda América, siendo el único equipo de todo México que posee este tipo de cobertura informativa.

Sin embargo, y pese a estas alteraciones (fundaciones y refundaciones), se  pretende  alojar  en  la memoria colectiva  de  los  pachuqueños una narrativa lineal continua. Pero  el antiguo club de corte familiar, característico del periodo intermedio que va desde 1950 a 1990, fue transformado en una moderna institución, una empresa privada, en un negocio.

Lo institucional, lo organizativo, el escenario, el público o espectadores, la situación social, la realidad de los jugadores (capital económico, social y cultural), sus intereses, la finalidad de la competencia, la vestimenta, entre muchos otros factores son notablemente distintos. Pese a estos aspectos, a la distancia que separa  a  estas  dos  entidades  en el tiempo y, mucho más, a la lejanía en significado y función, Calderón  Cardoso  las presenta  como unidas.

“Una crónica ‘aplanada’ donde los huecos históricos son ‘rellenados’ con anécdotas. En este trayecto institucional, la directiva actual emerge como depositaria de este legado histórico, logrando revertir la discontinuidad en un presente cargado de éxito y prosperidad deportiva”  (Angelotti.  2005). 

El  afán  por  designar  al  Club  Pachuca como Decano del fútbol  en  México  es algo rotundamente absurdo puesto que es una figura ficticia y totalmente artificial trasladada, creada como imitación a figuras existentes en otro tipo de sociedades que no es necesaria en este el  fútbol  mexicano, y que suscita controversias y disputas estériles entre aquellos clubs que entran o han entrado en este juego por diversos intereses.

Dentro  de  este  contexto,  y  teniendo  en  cuenta  cuál es la comunidad  a  la  que  pertenece  un  equipo,  es  decir,  si  a la  comunidad  del fútbol en  México; o  si  a  la  comunidad  de  la  liga  o  la  FEMEXFUT, pues no son lo mismo aunque haya quienes las confundan,  podemos  llegar  a  las  precisiones  siguientes.

Respecto  a  la primera,  la  comunidad  del  fútbol,  en  general,  o  sea los equipos  o  clubes  asociados,  federados  o  no  que  practican  el  juego,  Pachuca  Football  Club  (1982-1895)  es  el  equipo  solitario,  llanero  o  no  institucionalizado, con  nombre,  más  remoto  del  que  se  tiene  noticia  periodística,  nada  más  que  eso. Pero  no  es  el  primero  que  se  haya  formado  ni  el  más  antiguamente  fundado,  ya  que  no  existe  el  acta  fundacional  que  lo  constituya  legalmente. Y  Reforma  Athletic  Club  es el  equipo  asociado  (1902-1914 )  y  no  asociado  ni  federado  a nivel  nacional (desde  1914  a  2018)  más  antiguo,  constituido  legalmente  mediante  acta  fundacional,  la  misma  razón  social  y  la  misma  función  deportiva.

Y  por  lo  que  toca  exclusivamente  a  la  segunda,  la  comunidad  de  la  Liga  o  Federación,  o  sea,  la  asociación  civil  o  institución  deportiva  privada,  organizada  con  base  en  clubes asociados, con  razón  social  y  una  función  deportiva  vigente; el  América  sería  el  Decano  del  fútbol  de  asociación  en  México,  dado  que  en  1917  se  registró  o  afilió  a  la   Liga  Mexicana  Amateur  de Association  Football  (1902-1912)  y  ha  continuado  perteneciendo  a  las  posteriores  (Asociación  de  Aficionados  en  la  Liga  de  Association  Football  (1912-1917);  Liga  Mexicana  (1917-1923),  Federación  Central  de  Fútbol  de  México  (1924-1928)  Liga  Mayor  de  Fútbol  (1929-1950),  Primera  División Profesional  (1950-2005),  y Liga  MX  (2005-2018)  de  manera  ininterrumpida.  Y  por  otra  parte,  el  Guadalajara  sería  el  equipo  más  antiguo  no  federado  (1908-1932)  y  federado  (1932-2018)  de  México.

En  conclusión,  el  actual  club  de  fútbol  Pachuca  (1995-2018)  no  es  ni  el  equipo  más  antiguamente  fundado  ni  el  Decano  del  fútbol  en  México,  ya  que  el  solitario  equipo  de  amigos  Pachuca  Football  Club  de  1892  carece  de  acta  fundacional,  lo  mismo  que  el  Pachuca  Athletic  Club  de  1895  y  el  1900  integrado  por  mineros,  y  el  Club  de  fútbol  Pachuca  A.C.,  fue  fundado  por  el licenciado  Alfonso  Corona  del  Rosal  hasta  1960,  luego  de  sumar  37  años de  ausencia,  como  una  asociación  civil  con  razón  social  y  función  deportiva  diferente,  además  que  tuvo  otras  desapariciones  en  1974, 1977,  y  1979.

“La historia es fácilmente manipulable, pero difícilmente podrá demostrarse aquello que se manipula porque tarde o temprano la verdad histórica saldrá a la luz”,  tal  como  en  la  reciente  investigación  periodística  de  fondo  acerca  del  “Modelo  Pachuca”, metafóricamente  conocida  como  “Pachuca  Gate”.

Bibliografía

Angelotti  Pasteur.  H.  Gabriel. (2005) La dinámica del fútbol en México. La construcción de identidades colectivas en torno al Club de Fútbol Pachuca en nuestros días. Tercera parte. El origen del fútbol, signo distintivo de los pachuqueños. Colegio de Michoacán, A. C.  Centro de Estudios Antropológicos.  (México). Calderón  Cardoso,  Carlos  (2001)  Pachuca,  la  cuna  del  fútbol.  Gobierno  del  Estado  de  Hidalgo.  Hidalgo

Gutiérrez,  Irma Eugenia (1990: 29) “Sistema Político en Hidalgo”, Seminario Ciudad de México: 15 Años de políticas públicas, la izquierda a debate. UNAM,  México. DF.

Heinemann, Klaus (1998: 76-80) Introducción a la economia del deporte.  Editorial Paidotribo. Colección: 1ª Edición.

http://www.efdeportes.com/ Revista Digital – Buenos Aires – Año 10 – N° 84 – Mayo de 2005.

http://www.cihefe.es/cuadernosdefutbol/2011/01/el-futbol-no-nacio-en-china/ Enero de 2011 por Víctor Martínez Patón (Presidente del CIHEFE).

Documento 3.  Ramo: Sindicato, Sección: Centro deportivos, Año: 1934, Caja: 1, en: Archivo de Minería de Real del Monte y Pachuca.




Opciones de criterio acerca de la “Cuna” del Association Football inglés en México

Hay  quienes  creen  -como  Carlos  F.  Ramírez  Aznar-,  que  el  criterio  para  determinar  cuál  es  la  cuna  del  fútbol  “mexicano”,  consiste  en  saber  cuál  es  el  equipo  que  se  integró  por  primera  vez  con  algunos  mexicanos  o  una  mayoría  de  ellos. En  su  obra  “Once  décadas  del  fútbol  mexicano”,  Ramírez  Aznar  afirma  que  San  Pedro  de  los  Pinos  -hoy  colonia  del  Distrito  federal-  es  la  verdadera  cuna  del  fútbol  <mexicano>  porque  el  equipo  Mexico  Cricket  Club,  que  tuvo  sus  instalaciones  en  la  colonia  Condesa,  fue  el  primero  en  darle  oportunidad  de  jugar  a  algunos  futbolistas  nacionales  en  el  primer  torneo  organizado  en  1902.

Pero  Ramírez  Aznar  maneja  información  errónea,  ya  que  el  equipo  Mexico  Cricket  Club  nunca  tuvo  jugadores  nacionales  en  su  plantilla  y  ni  siquiera  hijos  de  británicos  o  de  otra  nacionalidad  nacidos  en  la  República  Mexicana.  Mientras  participó  en  la  Liga  Mexicana  Amateur  de  Association  Football  de  1902  a  1905,  siempre  alineó  exclusivamente  a  jugadores  británicos.

Primera  alineación  19  de  octubre  de  1902.  Inauguración  de  la  temporada  1902-1903: Julian N. Branch; R.N. Penny y J.McColl Saunders; Jenkins, J.M.M. MacFarlane y E.Watson; J.A. «Jack» Branch, Harold N. Branch, A.W. Laurie, Edgar Davis y A. S. Nesbit. Uniforme con una camisa en rojo y vivos blancos con shorts blancos.

1903 – 1904:  Porteria. H. N. Branch. Defensas: R.N. Penny, J.J. McFarland. Medios: J. A. Branch, J.M. Saunders, J.F. Findley, C.Gordon. Delanteros: E. Davis, A.S. Nesbit, O.M. Sharp, J.N. Branch, W. Perkins, J.A. Burns, H. Cant, J.B. Joyce, H.M. Crookshanks.

Alineación más  frecuente  del  Mexico  Cricket  Club  1902-1905: (portero) H.N. Branch; (defensas) Penny y Mc Farlane; (medios) J.A. Branch, Sanders y Findlay; (delanteros) Sharp, Davis, J.N. Branch, Crookshank y Nesbit.

El equipo fue campeón de la Liga Mexicana Amateur  de Association  Football en la temporada 1903 – 1904. Para la temporada 1904 – 1905 el Mexico Cricket Club con sus equipos completos de cricket y fútbol fueron admitidos dentro del San Pedro Golf Club, y bajo este nombre jugaron esa temporada. En 1906 El San Pedro Golf se fusionó con  el  Mexico Country Club, y jugaron los próximos años con este nombre, para desaparecer en 1908.

En  realidad,  el  equipo  que  por  primera  vez  tuvo  una  mayoría  de  jugadores  mexicanos  en  su  plantilla  y  que  actuaban  como  titulares  fue  el  México  Football  club  de  San  Pedro  de  los  Pinos,  fundado  en  1910  por  Alfredo  B.  Cuellar  y  Alberto  Sierra,  al  cual  se  unió  Jorge  Gómez  de  la  Parada  -militante  del  Reforma  Athletic  Club  de  1903  a  1910-  y  resultó  campeón  en  el  torneo  de  1912-1913,  contando  con  algunos  refuerzos  del  desaparecido  British  Club  que  invitó  Gómez  de  la  Parada,  quien  además,  según  Javier  Bañuelos Rentería,  mexicanizó  por  completo  el  equipo  en  1914.

1912-1913: México Football Club (primer campeón con base mexicana): Bartolomé Vargas Lugo (portero); Smith y Griffen (defensas); Carlos Troncoso, Díaz Vivanco y Luis Troncoso  (medios); Elguero, Jorge Gómez de Parada, Serafín Cerón, Little y Abigail Quiroz  (delanteros).

El  caso  es  que  sí  tenemos  en  cuenta  estos  hechos  como  prueba,  de  todos  modos  la  “Cuna  del  Association  Football  Inglés  en  México”  es  la  capital  de  la  República,  pues  fue  en  San  Pedro  de  los  Pinos,  hoy  colonia  Condesa,  donde  se  fundó  el  equipo  y  donde  estableció  su  casa  club  y  su  campo  de  juego,  en  una  finca  propiedad  del  mismo  Jorge  Gómez  de  la  Parada,  que  hoy  es  la  sede  de  la  Embajada  de  Rusia,  y  en  cuyo  interior  debió  estar  el  sitio  donde  efectuaba  sus  reuniones  la  junta  directiva  del  equipo  para  procurar  su  desarrollo  y  progreso.

Sin  embargo,  debemos  especificar  que  en  dicha  finca  no  estuvo  la  “Cuna  del  Association  Football  Inglés  en  México”,  sino  que  fue  el  sitio  donde  el  exclusivo  juego  asociado  de  balón  con  los  pies  inglés,  monopolizado  por  los  británicos,  empezó  a  abrirse  a  la  práctica  de  los  mexicanos,  a  adquirir  su  carta  de  naturalización  como  equipo  (no  todo  el  fútbol  asociado),  y  a  adquirir  un  temperamento  y  estilo  mexicano  particular.

Por  otra  parte  está  el  criterio  de  quienes  creen  que  la  cuna  del  fútbol “mexicano”  es  la  liga  en  la  que  por  primera  vez  militaron  una  mayoría  de  equipos  integrados  totalmente  o  en  su  mayoría  por  jugadores  nacidos  en  México.

En  este  sentido  debemos  señalar  que  desde  1912  que  terminó  la  época  británica,  que  se le  cambió  el  nombre  a  la  liga  por  el  de  Asociación  de  Aficionados  de  México  en  la  Liga  de  Fútbol,  y  surgió  el  Mexico  Football  Club  como  primer  equipo  campeón  con  mayoría  de  mexicanos,  hasta  1927  que  se  creó  la  Federación  Mexicana  de  Fútbol,  se  afiliaron  y  participaron  varios  equipos  como  el América  (1916),  Atlas  (1917),  Atlante  (1923),  Necaxa  (1923)  tambien  integrados  mayormente  o  en  su  totalidad  por  mexicanos,  pero  estos  nunca  fueron  mayoría  en  relación  con  los  equipos  integrados  por  alemanes,  franceses,  y  sobre  todo  los  españoles,  que  dominaron  no  sólo  en  el  torneo  nacional  y  en el  Distrito  Federal  a  nivel  amateur,  sino  también  en  los  estados  de  la  República  en  los  que  ellos  difundieron  mayoritariamente  la  práctica  del  juego.

Fue  justamente  en  1927,  cuando  después  de  haber  sido  creada  la  Federación  Mexicana  de  Fútbol  Asociación,  ésta organizó  e  instituyó  anualmente  los  Juegos  Nacionales  del  Sector  Amateur,  en  los  cuales  sólo  podían  participar  mexicanos  y  continúan  realizándose  hasta  nuestros  días,  pero  aunque  estos  campeonatos  anuales  han  sido  y  son  “semillero”  o  “cantera”  de  jugadores  nacionales,  no  tienen  el  mérito  como  para  ser  considerados  “Cuna”  del  fútbol  de  asociación  inglés  en   México.

Por  otra  parte,  la  revisión  de  los  equipos  con  mayoría  o  totalidad  de  mexicanos  que  surgieron  a  partir  de  1910  tanto  en  el  Distrito  Federal  como  en  Guadalajara  (1906),  Veracruz  y  Río  Blanco  (1914),  Córdoba  (1915), Irapuato  (1915),  Orizaba  (1916),  se puede  constatar  que  los  jugadores  mexicanos  nunca  fueron mayoría  (únicamente  el  ADO  de  Orizaba  jugaba  con  puros  mexicanos),  y tampoco  las  personas  que  ocuparon  los  puestos  directivos  de  la  liga  y   de  los  equipos  hasta  1927  que  se  creó  la  FEMEXFUT,  e  incluso  más  adelante,  por  lo  que  no  puede  hablarse  de  un  fútbol  mexicano  ni  siquiera  con  este  otro  criterio.

Lo  único  mexicano  del  fútbol  de  asociación  inglés  en  México  son  el  membrete  legal  de  la  Federación  Mexicana  de  Fútbol  Asociación,  sus  estatutos  y  la  modalidad  de  sus  sistemas  de  competencias,  además  del  temperamento  y  estilo  de  juego  con  que  practican  el  fútbol  los  nacionales  que  han  participado  en  los  campeonatos  de  la  liga  nacional desde  la  creación  de  la  Liga  Mayor  de  Fútbol  (1927),  cuando  empezaron  a ser  mayoría  tanto  los  jugadores  y  entrenadores  nacidos  en  México  como  los  federativos  y  presidentes  de  equipos.

Por tanto,  si algo  puede  designarse  como  “Cuna”  del  fútbol  de  asociación  “mexicanizado”,  es  la  liga  de  la  rama  de  Segunda  División  Profesional,  creada  en  1950,  en  la  cual  durante  más  de  cuarenta  años  únicamente  pudieron  participar  jugadores  de  origen  nacional  y  los  puestos  directivos  de  equipos  y  de  la  propia  rama  fueron  desempeñados  en  su  mayoría  por  mexicanos.

Dentro  de  este  marco  de  referencias  históricas,  cualquiera  que  sea  el  criterio  empleado  para  determinar  cual  es  la  “cuna”  del  fútbol  de  asociación  inglés  en  méxico,  o  del  fútbol  “mexicano”  o  mexicanizado, esta  “Cuna”  o  albergue  que  le  proporcionaron  al  fútbol  de  asociación  inglés  sus  “Padres”  adoptivos  en  el  territorio  mexicano  para  poder  atender  sus  necesidades  vitales  y  propiciar  su  arraigo,  desarrollo  y  formación,  durante  la  etapa  inicial  de  su  proceso  de  existencia  organizada  y  oficial,  siempre  ha  tenido  su  ubicación  en  la  ciudad  de  México.

La  afición  mexicana  y  los descendientes vivos  de  los  “Padres”  del  fútbol  de  asociación  inglés  en  México, merecen  ver  a sus antepasados siendo honrados, individual y colectivamente  como  “Padres  del  fútbol  de  asociación  en  el  territorio nacional,  y  a  la  Liga  Mexicana  Amateur  de  Association  Football  como   la  “Cuna  del  Futbol  de  Asociación  Inglés  en  México, en una ceremonia especial  y  oficial de conmemoración  por  parte  de  la  Federación  Mexicana  de  Fútbol  Asociación,  rectora  del  actual  fútbol  de  asociación  y  descendiente  en  línea  directa  de  aquella  primera  liga.

La historia es fácilmente manipulable, pero difícilmente podrá demostrarse aquello que se manipula porque tarde o temprano  la  verdad  histórica saldrá a la luz.




La conformación del carácter y la personalidad del fútbol de asociación inglés en su etapa inicial de cuna en México

La  Liga  Mexicana  Amateur  de  Association  Football,  fundada  en  septiembre  de  1902  en  la  ciudad  de  México,  ubicada en donde ahora está el edificio de la Fuerza Aérea Mexicana, enfrente de la Defensa Nacional, cerca del club Mundet,  empezó  a  funcionar  como  albergue  o  Cuna  del  Association  Football  Inglés  en  México,  o  fútbol  de  asociación  Inglés,   desde  el  19  de  octubre  de  1902  que  dio  inicio  el  primer  torneo  oficial  del  fútbol  de  asociación  en  el  país, y  en  la  cual  los  “Padres”  propiciaron  el  arraigo  y  la  continuidad  del  proceso  de  desarrollo  del  juego-deporte  mediante  la  organización  consecutiva  de  torneos  de  carácter  nacional.

Sin embargo, al hablar tanto de la cuna de un personaje humano como de la “Cuna del fútbol”, en cualquier país, no basta con identificar quienes fueron sus padres biológicos o adoptivos, especificar de  qué nacionalidad  eran, a  cuál linaje  o estirpe pertenecían, qué status o situación socioeconómica tenían, cuál su nivel cultural o su posición política. Y tampoco basta saber dónde y cuándo nació o adoptaron al bebé humano o al metafórico “Bebé-fútbol  de  asociación”, ni cuándo y dónde lo bautizaron y  fue registrado. Sin duda todos estos eventos constituyen puntos de referencia importantes acerca de su etapa  inicial  o  de cuna, pero no es suficiente.

Es  necesario  conocer  como  fueron  las  experiencias  y  relaciones  más  cercanas  y  tempranas  del  fútbol  de  asociación  con  sus  “Padres”,  la  familia,  los  grupos  de convivencia  y  su  medio  sociocultural  en  su  etapa  inicial,  para  saber  cuáles  fueron  sus  efectos  en  su  desarrollo  y  la  formación  de  su  personalidad básica dentro  del  contexto  espacio-temporal  de  la  Liga  Mexicana  Amateur  de  Association  Football  y  la  sociedad  mexicana.

“En el proceso  de  desarrollo  físico,  intelectual  y  moral  de  un  individuo  y  de  la construcción de su personalidad intervienen muchas variables estudiadas profundamente,  tales  como; la predisposición genética, el temperamento, la familia, la educación, el proceso de socialización y el ambiente.

“Todas ellas son entidades importantes, pero junto a la predisposición genética heredada  de  sus  progenitores, destacan  las primeras relaciones que se establecen con  sus  cuidadores  más  cercanos  y  principales,   los  padres  mismos,  la  familia,  y  otros  agentes  socializadores  de  sus  grupos  de  convivencia  en  la  edad  temprana  de  crianza  y  de  educación  infantil”  (www.tesisenred.net)

“Todos  los agentes socializadores (padres,  familia  y  grupos  de  convivencia) ejercen influencia en el desarrollo de la personalidad a lo largo de los diferentes períodos evolutivos, por lo que se hace necesario un análisis que permita la comprensión de cada una de las etapas por las que atraviesa el individuo en su desarrollo, a través del  análisis,  la  comprensión,  interpretación  y descripción del papel que juegan los agentes de socialización en la Lactancia, la Edad Temprana, la Edad Preescolar, la Edad Escolar, la Adolescencia, la Juventud, la Adultez  y  la adultez  mayor”. (www.monografias.com/trabajos/personalidad)

Con  base  en  estos  fundamentos,  conocimientos  científicos  y  referentes  previos  de  información,  los  escritores  de  biografías  y  genealogías  analizan los rasgos culturales  de  un  individuo  durante su edad temprana  (etapa  de  crianza  y   de  educación infantil) y  las  relaciones  con  los  padres,  la  familia  y  otros, para conocer,  comprender  y  describir  la personalidad básica  de  un  personaje  -su  etapa  de  cuna- es  decir,  las experiencias tempranas del individuo  en  el  seno  familiar,  el  medio  sociocultural  y sus  efectos  en  la  personalidad  dentro  de un  contexto  espacio-temporal  y  una sociedad  determinada.

Es una interpretación  con  base  en  el  análisis genealógico,  psicológico  y  sociocultural, que hace hincapié en los factores primarios, determinados social  y  culturalmente, y que influyen en la personalidad  de  alguien,  y  que  por  analogía,  puede  ser  utilizado  en  la  disciplina  historia  para  analizar  la  etapa  inicial  de  algo,  una  entidad,  una  institución  social, o  un  fenómeno  sociocultural como  la  adopción  del Association  Football  Inglés  en  México.

Es  así  que  analizaremos  brevemente  las  relaciones  del  fútbol  de  asociación  con  sus  padres  adoptivos,  la  familia  y  su  medio  sociocultural, con  el  objetivo  de  conocer  los  rasgos  característicos  de  la personalidad básica  que  adquirió  durante  su  “etapa  inicial  de  cuna”,   dentro  del  contexto  espacio-temporal  de  la  entidad  deportiva  familiar  denominada  Liga  Mexicana  Amateur  de  Association  Football  de  la  ciudad  de  México  de  1902  a  1912   y  de  la  sociedad  mexicana  de  ese  periodo.

En ese sentido, podemos establecer treinta  y  dos  aspectos  o  rasgos  del  carácter  y  la  personalidad del Association Football Inglés en México  en  su  etapa  de  “Cuna”.

  1. Entre  las  resoluciones  que  tomaron  el  “Padre”  Clifford  y  la  “Familia”  adoptiva  primerizos  para  organizar  el  primer  torneo  de  fútbol  de  asociación  inglés  en  México,  de  acuerdo  con  las  circunstancias  imperantes  de la  época  y  los  recursos  que  tenían  destacan  tres,  dos  de  las  cuales  se  podría  decir  que  no  fueron  muy  acertadas:  Primera.  Que  el  torneo  se  jugaría  a  una  sola  vuelta  por  lo  que  no  hubo  la  equidad  que  brinda  la  visita  recíproca;  Segunda,  que  los  juegos  serían  los  domingos  por  la  tarde  con  dos  tiempos de  treinta  y  cinco  minutos  en  vez  de  cuarenta  y  cinco,  bajo  el  argumento  de  que  la  altura  de  la  ciudad  de  México  y  los  viajes  no  eran  convenientes  para  cumplir  el  tiempo  estipulado  por  el  reglamento;  y  tercera,  algo  muy  curioso  o  raro  en  una  competencia  oficial  en toda  la  historia  del  futbol  de  asociación,  pero  a  todas  luces  antirreglamentario:  que  los  equipos  de  la  capital  podrían prestarse  jugadores  en  cada  partido de  la  misma  temporada,  por  lo  que  hubo  algunos  que  vistieron  el  uniforme  de  tres  equipos  distintos.
  1. No  se  cuenta  -como  en  Inglaterra- con  la  minuta  o  memoria  de  las  juntas  que  se  llevaron  a  cabo,  por  lo  que  se  desconoce  debido a qué  razón  los  integrantes  de  la  junta  directiva  aprobaron  que  al  Orizaba  Athletic  Club  se  le  concedieran  tres  juegos  como  local  y  sólo  una  visita  a  la  ciudad  de  Pachuca. Cabe  suponer  que  fue  con  el  propósito  de  llamar  la  atención  hacia  el  fútbol  en  las  ciudades  cercanas  que  estaban  ya  conectadas  por  la  ruta  México-Veracruz  del  ferrocarril  mexicano,  y  motivar  la  creación  de  más  equipos  que  pudieran  acrecentar  el  número  de  participantes  en  la  liga  en  las  próximas  temporadas. El  caso  es  que  después  criticaron  esta  medida  los  representante  de  clubes  que  no  obtuvieron  el  título  de  campeón.
  1. El modelo a reproducir de la Liga Mexicana Amateur de Association Football fue el de la Football Association o Asociación de Fútbol de Inglaterra, cuya reglamentación y disposiciones se transcribieron y adaptaron como señal de jerarquía institucional. Además, la etapa inicial o de cuna del recién llegado “bebé-fútbol” en México de 1902 a 1912, fue organizada y administrada únicamente por los británicos por lo que los códigos, el reglamento y las normas de procedimiento fueron genuinamente ingleses, manteniéndose incluso el idioma inglés.
  1. Por modesto que fuera el equipo tuvo la obligación de poseer campo propio o rentado y con las medidas reglamentarias para poder ser admitido en la organización, y en la primera etapa fueron los campos del Reforma, British, México, Pachuca y Orizaba que, sin embargo, no contaban con barda ni alambrada para separar al público de la cancha, sino que se colocaban cuerdas sostenidas por estacas, y como carecían de tribunas, los espectadores presenciaban los juegos en sillas propias o de pie. Puebla se negó a participar por motivos desconocidos.
  1. Se sabe, según las alineaciones que proporcionan los periódicos de la época, que las formaciones utilizadas dentro del campo de juego eran un portero, dos defensores, tres mediocampistas y cinco delanteros, por lo que puede decirse que el fútbol fue ofensivo ya que el principal interés consistía en atacar para anotar en la meta del rival.
  1. Básicamente hubo una escuela que fue la inglesa, la cual consistía en pases largos y lucha por el aire para conseguir la posesión del balón, aunque era sorprendente ver a los escoceses del Orizaba tratar mejor el balón con pases cortos y recorrer largos espacios driblando rivales.
  1. La influencia inglesa en la modelación de la personalidad del incipiente “bebé-fútbol” no solo se manifestó en el campo de juego, sino que las estrictas reglas se extendían a todos los ámbitos del encuentro entre británicos, ya que era común que al final de cada partido los jugadores de ambos equipos, los jueces y directivos disfrutaran de un convivio con té y pastas, sin faltar el tradicional Whisky inglés o escocés.
  1. Además, el “bebé-futbol” fue conformando su personalidad al estilo inglés porque la mayoría de los jugadores eran de Inglaterra, su carácter fue exclusivo, cerrado a la inclusión de los mexicanos, no se sabe si porque la práctica del juego no atrajo el interés y el gusto de los nacionales, o porque no se les permitió el ingreso individual a los clubes británicos de fútbol o a la liga como equipo de nacionales.
  1. Al terminar el primer torneo, que tuvo gran aceptación por parte del público, en su mayoría inglés, y luego de la polémica resultante de que el Orizaba ganara la liga jugando tres encuentros, dos como local y uno en Pachuca, en vez de cuatro porque el último lo gano por default, en una junta en las oficinas del British Club, se determinó por votación unánime que el torneo de liga 1903-1904 se jugaría a dos vueltas, para hacer a la competencia y al fútbol más justo.
  1. Para la temporada 1903-1904 participaron los mismos cinco equipos, es decir, que el “bebé-futbol” no alcanzó el crecimiento esperado por su “familia” en su segundo año, aunque ya se celebró a dos vueltas o visita recíproca, lo cual significó un aumento en el número de juegos, la intensidad del disfrute de su práctica y el goce de los espectadores, ya que cada equipo disputó ocho encuentros.
  1. Todo esto, por supuesto, siempre bajo la égida del amateurismo y del fair play, identificado con el juego caballeroso proclamado por Percy C. Clifford y el compromiso ético individual aprendido durante años de educación formal e institucional.
  1. Por ello, dentro del ambiente y la normatividad que imperó en el seno de la “familia” futbolística, el “bebé-fútbol” desarrolló y manifestó una conducta adecuada o positiva, ya que “Las normas por las que tanto la organización como el campeonato se rigieron fueron simples y carentes de toda complicación. La Junta Directiva designaba los árbitros, que eran escogidos mayoritariamente entre los mismos jugadores, y estos no sufrían en el ejercicio de impartir justicia en el terreno de juego, ni reclamaciones ni protestas airadas, los campeonatos se desenvolvieron plácidamente y por ello la junta no requirió formar una Comisión -que con los años se llamaría Tribunal de Penas- encargada de sancionar a jugadores o a directivos”. (Juan Cid y Mulet. p. 603).
  1. Esta situación de la educación, el crecimiento  y la  conformación  de  la personalidad y el carácter del “bebé-fútbol” se mantuvo invariable pues continuaron participando sólo cinco equipos hasta 1907, año en que se realizó la Copa Tower, antecedente de la Copa México, creada por el Ministro Plenipotenciario de la Gran Bretaña, Sir Oliver Tower que era aficionado al fútbol  y la cual fue ganada en su primera edición por el Pachuca Athletic Club.
  1. El torneo 1907-1908 se disputó con tan sólo cuatro equipos debido a la desaparición del Puebla, y en el torneo 1908-1909 participaron sólo tres equipos debido a la desaparición del México Country, por lo que el crecimiento físico del “bebé-fútbol” resultó afectado de manera considerable, lo cual significa que la “familia” futbolística no lograba promocionar su aceptación -como seguramente eran sus deseos- en el gusto de los propios británicos y de los mexicanos, aunque quizás a estos si les gustaba el juego y deseaban participar pero la élite británica no se los permitía.
  1. En 1910, al estallar la guerra civil, llamada Revolución Mexicana, todo continuaba igual ya que sólo el Reforma, el British y el Pachuca permanecían compitiendo en la liga como tal. Y esta situación se prolongó en los torneos 1910-1911 y 1911-1912, que fueron más complicados por la lucha armada, pero en ambos el Reforma se impuso con claridad.
  1. El “Bebé-fútbol” tuvo además un carácter elitista y exclusivo, ya que aparte de las excepciones de Vicente Echegaray (vasco) y Julio Lacaud (francés), que jugaron en el Reforma, así como de los mexicanos Jorge Gómez de la Parada (Reforma 1903-1910) y David Islas Escárcega (Pachuca 1908-1911), el fútbol de la asociación inglesa fue practicado únicamente por los británicos.
  1. Es por ello que la primera etapa del fútbol de asociación inglés en México estuvo dominada por un equipo: el Reforma Athletic Club, que de diez torneos disputados ganó siete, por lo que puede considerársele como uno de los mejores equipos de la historia del futbol en este país.
  1. La misma Revolución ayudó al fútbol a romper con la hegemonía del viejo molde inglés y abrir las puertas a la participación de mexicanos, pues fue una época en la que muchos británicos, atemorizados por la situación del país, decidieron emigrar en busca de mejores horizontes ya sea hacia los Estados Unidos o simplemente de regreso a sus países de origen.
  1. El año 1910 es muy importante en la historia del fútbol inglés en México. Por iniciativa de Alberto Sierra, Jorge Gómez de la Parada y Alfredo B. Cuellar, se fundó el primer equipo de fútbol eminentemente “criollo”, el México Footbal Club, que con una mayoría de jugadores mexicanos y tan solo con dos o tres jugadores de origen británico en el once titular en 1912 conquistó  el campeonato de primera división o máxima categoría en el país.
  1. Al año siguiente, 1912, el  México  Football  Club  ganó  también  la Copa Tower, y ya con la guerra civil encima el club se mexicanizó por completo, además de que integró a jugadores de extracción popular, como el delantero Serafín Cerón, el mediocampista “Borolas” Estrada, y sobre todo el pintoresco portero Cirilo Roa.
  1. El fútbol de asociación  inglés en México comenzó a tomar otros derroteros que acabarían de cultivar la semilla que los británicos sembraron con pasión. Los nuevos futbolistas mexicanos y españoles fueron tomando distancia del sistema ideológico y ético del fair play procedente del deporte inglés, promovido por Clifford, y ese modelo se constituyó en referente distante cuando entre 1912 y 1914 desaparecieron los equipos Reforma y British de la Liga Mexicana, dando paso al fin de la etapa de la cuna del fútbol asociado inglés en México, caracterizada por la influencia, el temperamento, el estilo y el dominio de la tradición británica.
  1. Fue el turno para que los españoles que decidieron quedarse a radicar en suelo mexicano y los elementos nacionales cosecharan los frutos del fútbol de asociación organizado principalmente por Percy C. Clifford, Robert J. Blackmore y Roland Norman Penny, y lo volvieran más incluyente.
  1. Grandes jugadores ingleses desaparecieron del mapa futbolístico de México para no regresar jamás y los nacionales comenzaron a abrirse paso en el concierto futbolístico.
  1. “P.C. Clifford fue, sin lugar a dudas, quien más contribuyó, en la primera década del presente siglo, a cimentar (encunar) el futbol soccer, de manera muy especial en el Distrito Federal”. (Juan Cid y Mulet. P. 14).
  1.  “Así comenzó a desarrollarse (en su “cuna” o Liga) el futbol en México, hasta que otros temperamentos y otras costumbres llegaron a la liga. Para entonces los británicos ya habían sembrado la semilla del balompié” (Javier Bañuelos Rentería. P. 15)
  1. “Nosotros queremos distinguir esa primera organización liguera “mexicana”…sin quitarle un ápice del mérito que le pertenece como organización modelo del futbol nuestro…Lo cierto es que, esta primera “Liga” (¿Habrá entrecomillado Liga porque no se atrevió a escribir “Cuna”?), será la base y fijará normas para las futuras” (Juan Cid y Mulet. P. 603).
  1. “Resume todo lo anterior, lo relativo al futbol organizado bajo normas de tipo oficial, aunque no sería justo olvidar que el futbol en Veracruz (1914), Guadalajara (1908), en Irapuato (1915) y en Puebla, ha tomado ya carta de naturaleza” (Juan Cid y Mulet. P. 224)
  1. Los equipos México F.C., España y Rovers (que ocupó el lugar del British) se unieron a la competencia y así, junto con los pioneros Reforma y Pachuca, iniciaron la segunda etapa del fútbol de  asociación  en  México (su adolescencia) en la temporada 1912-1913, cuando la liga cambió su nombre por el de Asociación de Aficionados de México en la Liga de Futbol, presidida por Robert J. Blackmore.
  1. Elementos nacidos en el país ocuparon las plazas de los extranjeros que se fueron. Nombres como Jesús Piña, Alfonso Ortiz, David Islas y Carlos Orozco se hicieron cada vez más comunes entre la afición.
  1. Para llevar a cabo la organización del futbol asociado inglés en su casa-hogar-cuna, la “familia” futbolística real, los “padres”, los “familiares” y “padrinos” (La directiva de la Liga, los delegados de cada equipo) se avocaron a la misión de conseguir todo lo necesario en lo económico, técnico y deportivo para que el “bebé-futbol” inglés que había llegado a México pudiera crecer, desarrollarse, socializarse y difundirse, hasta lograr su adopción y su carta de naturalización por parte de los nacionales con la finalidad de que alcanzara su expresión mexicanizada y el estilo de juego mexicano.
  1. Es posible que por ello los británicos nombraron a la Liga “Mexicana” y no Inglesa o Británica Amateur de Association Football, pues aunque no hubo jugadores mexicanos entre 1902 y 1912 (con excepción de Jorge Gómez de la Parada en 1903, con el Reforma, y David Islas, en 1908, con el Pachuca) los fundadores británicos de la Liga sabían que lo que crearon iba a perdurar, a crecer, a desarrollarse y difundirse con el paso de los años entre los potenciales jugadores, árbitros y directivos nacionales hasta lograr su expresión, temperamento y estilo mexicanizado o mexicano.
  1. Todo este proceso de “crianza”, arraigo, crecimiento, desarrollo, progreso, difusión, transformaciones, continuidades y cambios, es decir, la conformación  del  carácter  nacional  y de la personalidad  por el que pasó el fútbol de asociación  inglés en el territorio mexicano en su etapa inicial, desde la fundación de la Liga Mexicana Amateur de Association Football de 1902 hasta el surgimiento del equipo México de San Pedro de los Pinos en  1910, así  como el fin de la época de dominio de los británicos (1912) constituye lo que en nuestra opinión, propiamente dicho, puede denominarse y reconocerse como “La Auténtica y Única Cuna del Fútbol de Asociación  Inglés en México”.

Los sucesivos cambios de denominación y de sede de la liga  en  otras  etapas  de  su  desarrollo  en  México (Asociación de Aficionados en la Liga de Football (1912-1917), Liga Nacional (1917-1922), Liga Central de Fútbol de México (1922-1927), Liga Mayor de Fútbol (1927-1950), y Liga de Primera División Profesional, hasta nuestros días, en lo que hoy conocemos como Liga MX) irían marcando por un lado su crecimiento y su progresiva “nacionalización”,  así  como  un  mayor peso y repercusión en la actividad nacional, y  por  consiguiente en el ser,  el  temperamento  y  el  estilo  mexicano del fútbol como pasión en todos los niveles de participación ciudadana.




El Veloz Sport Balear, decano del fútbol balear

Antecedentes ¿qué era el Veloz Sport Balear?

El 1 de septiembre de 1896 se fundó en Palma (Mallorca) la sociedad Veloz Sport Balear, entidad trascendental en el desarrollo de la práctica deportiva en las Islas Baleares. Fue creada como una entidad dedicada al fomento del ciclismo, deporte que en aquellos años se había convertido en la más importante manifestación deportiva de Mallorca. Y así fue, salvo en las últimas décadas (hoy sobrevive aún, como un humilde club social); y también en sus primeros años, como veremos a continuación.

Escudo del Veloz Sport Balear (1915)

Escudo del Veloz Sport Balear (1915)

A finales del siglo XIX el deporte en las Islas Baleares era un exótico privilegio para clases acomodadas y se reducía a una práctica minoritaria, ociosa (poco o nada competitiva) y falto de un calendario de competición estable. Sin duda el deporte rey era el ciclismo (y lo siguió siendo durante varias décadas más); pero adolecía de unos altibajos en su práctica que desandaban los progresos logrados anteriormente. Las irregulares apetencias de sus practicantes, que se organizaban por moda o placer, eran el principal obstáculo para la implantación de una práctica deportiva regular. Si acaso la principal emoción estribaba en la rivalidad con el otro club velocipédico de la capital palmesana: el Círculo Ciclista, sociedad fundada unos meses después, en 1897. Los derbis entre los miembros de ambas entidades eran la principal emoción de una práctica deportiva incipiente basada en el ocio y la recreación.

Esta tónica era intrínseca de los socios del Veloz Sport Balear (a partir de ahora VSB); aunque practicaban habitualmente el ciclismo, con frecuencia hacían incursiones en otros deportes según sus apetencias. Así fueron haciendo incursiones en otras manifestaciones deportivas y recreativas a medida que éstas llegaban a las islas, lo cual también contribuía a tapar el vacío que dejaba el ciclismo cuando abandonaban su práctica. Esta tónica también fue propia de su principal rival: el Círculo Ciclista, sociedad fundada meses después, en 1897.

Este estado de cosas en el VSB se oficializó en 1903 cuando los estatutos modificaron la finalidad de la sociedad al sustituir el fomento del ciclismo por el deporte en todas sus formas. No hablamos de una modificación casual y tampoco es una fecha casual: pocos meses antes el fútbol había llegado a Mallorca y su práctica empezaba a hacer furor entre los deportistas de la isla; entre ellos los socios del VSB), que pronto se organizarían como equipo de fútbol. Podemos decir que fue el balompié quien dio el empuje definitivo a la regularización de un estado de cosas ya cotidiano.

El Velódromo del Tirador

Poco después de su fundación en 1896 la sociedad velocista adquirió unos terrenos para la construcción de un velódromo a las afueras de la ciudad (todavía circundada por las murallas medievales) en una zona de denominada El Tirador. Las obras empezaron a finales de 1898 y, después de sufrir varias interrupciones, el flamante Velódromo del Tirador (tomó el nombre de paraje, sin más) se inauguró solemnemente el 10 de agosto de 1903. Rápidamente adquirió el rango de principal pista ciclista de España por sus excelentes condiciones para su práctica y hasta su clausura (en 1973) albergó más de 80 campeonatos de España en pista en todas sus modalidades.

Vista del Velódromo del Tirador (Palma) en 1913

Vista del Velódromo del Tirador (Palma) en 1913

Pero además Tirador se convirtió en el centro neurálgico de la práctica deportiva en la ciudad, pues el espacio central rodeado por la pista (técnicamente denominado pelouse) y las gradas que la circundaban lo hacían ideal para cualquier deporte, tanto como protagonista como de espectador. En cuanto entró en funcionamiento Tirador disparó la actividad polideportiva del VSB y en poco tiempo se construyeron en terrenos anejos al velódromo una pista de patinaje, otra de tenis (ambas en 1904) y un campo de tiro (1905). Aparte del ciclismo en años sucesivos allí se desarrollaron competiciones de motociclismo, atletismo, patinaje, baloncesto, tiro al pichón, boxeo o colombofilia. Incluso elevaciones de globo aerostático, actuaciones musicales y actos festivos de cualquier signo. En definitiva, Tirador fue el principal espacio al aire libre durante décadas para actos deportivos y eventos sociales de Palma. Entre ellos el fútbol, a pesar de que la superficie de la entrepista no era suficientemente amplia para acoger un campo de medidas reglamentarias y fue un lastre importante (si no el que más) para el desarrollo óptimo del juego durante estos años.

Llegada del fútbol a Mallorca

En los primeros días de 1903 llegó el fútbol a Palma con la visita de un grupo de estudiantes universitarios barceloneses que, circunstancialmente y para la ocasión, se denominaron Club Barcelonés y jugaron tres partidos contra otro combinado mallorquín formado por socios del Círculo Ciclista. Para ello se fundó el primer equipo de la historia de Baleares: el Club España, sección de fútbol del Círculo Ciclista, que como hemos dicho era la entidad rival del VSB. Hasta la inauguración del Velódromo del Tirador los partidos de fútbol se jugaron en la entrepista del Velódromo de Son Espanyolet, pista de dimensiones y estructura más modesta que el futuro Tirador y que utilizaba el Círculo Ciclista en régimen de alquiler para sus socios.

La rivalidad Círculo Ciclista-VSB hacía inevitable que ambas entidades acabasen midiendo sus fuerzas también en el plano futbolístico; pero los velocistas no pudieron organizarse hasta agosto de 1903, cuando la inauguración de Tirador fue un hecho consumado. Por fin, en septiembre del mismo año la sección de fútbol del VSB daba sus primeros pasos. Gradualmente el conjunto velocista fue recortando la ventaja que tenía el Club España en calidad de equipo decano y más rodado; a su lado otros equipos de la época, faltos de medios y sin organización, apenas podían rivalizar con ellos y desaparecían tras breve vida.

El primer campeonato de Mallorca (1903-04)

Fruto de la creciente afición, el Club España decidió organizar el primer campeonato de Mallorca del que tenemos noticia; pero no fue disputado en su campo (Son Espanyolet) sino en el de su rival (Tirador), señal de que la pista recién inaugurada reunía unas condiciones mucho más favorables para el juego. El torneo fue disputado entre cuatro equipos de Palma y se impuso el VSB, culminando así el sorpasso deportivo a su rival. Dada la bisoñez de todos los protagonistas, la competición no estuvo exenta de polémicas: el Club España se retiró a medio torneo por una cuestión de polémica arbitral, dejando en bandeja el campeonato al VSB. De fondo subyacía la rivalidad entre ambas sociedades y, cómo no, la supremacía en el nuevo deporte de moda. En cualquier caso, los velocistas tomaban la delantera y ya no soltarían el testigo.

En octubre del mismo año se disputó en el Velódromo del Tirador el primer partido en Mallorca contra un equipo de la escuadra militar inglesa, el HMS Isis. Este tipo de partidos eran muy habituales en los diferentes puertos españoles dado el alto nivel conseguido por algunas tripulaciones británicas, por aquél entonces todavía superiores al primitivo nivel técnico del incipiente fútbol español. El VSB encajó una derrota (1-4) que ponía en evidencia el todavía discreto nivel del naciente fútbol insular. Y lo que es peor: en lugar de animar a sus practicantes a mejorar su juego los desanimaba hasta el abandono fácil, una actitud que se repetiría año tras año.

Fruto de esta desazón el Club España desapareció a finales de 1904, lo cual dejó al VSB como único referente futbolístico de la isla y de mucho el más potente enfrente de humildes conjuntos que aparecían y desaparecían sin ofrecer resistencia. Esto y la falta de alicientes hicieron que la afición decayese y el propio VSB muriera de éxito, cesando también su actividad hacia febrero de 1905 y con ello del incipiente fútbol insular.

Interín (1905-08)

Equipo del Veloz Sport Balear, campeón de Mallorca y subcampeón de Baleares (1909)

Equipo del Veloz Sport Balear, campeón de Mallorca y subcampeón de Baleares (1909)

Durante los cuatro años siguientes la actividad futbolística en Mallorca fue prácticamente nula. Solo hubo dos asomos de reactivación sin continuidad: en mayo de 1907, con un partido de homenaje al recién nacido heredero de la Corona entre dos combinados del VSB; y en febrero de 1908, con un partido del VSB contra un equipo de torpederos ingleses, saliendo ampliamente derrotados los locales (4-7).

Segunda etapa (1908-09)

A mediados de 1908 el presidente y fundador del VSB, Miquel Mestre Font, dejaba el cargo. Ello coincidió con un verano en el que la afición al fútbol renació espontáneamente, fruto de los habituales vaivenes en las preferencias de los deportistas en función de modas o apetencias. Fuera por esto o por el cambio de presidente, la sección de fútbol del VSB se reactivó de nuevo colocándose nuevamente a la vanguardia del movimiento futbolístico (tampoco había con quien rivalizar, todo sea dicho). En octubre volvían los entrenamientos al Velódromo del Tirador y al mes siguiente la sociedad anunciaba la organización de un nuevo campeonato que se disputó entre diciembre de 1908 y enero de 1909 con el concurso de cinco equipos: cuatro de Palma y uno de Mahón, lo cual convierte a esta competición en la primera de ámbito balear. El VSB se proclamó campeón de Mallorca por segunda vez, pero perdió la final de Baleares a doble partido contra el Club Mahonés jugada en el Velódromo del Tirador el 31 de enero y el 2 de febrero de 1909 (1-0 y 2-1). La competición fue un éxito de público; pero volvió a reinar la indolencia, la falta de previsión y en poco tiempo la actividad futbolística quedó de nuevo reducida a partidos puntuales y sin continuidad.

Interín (1909-13)

Durante estos años el fútbol en las islas se redujo a algunos partidos aislados con un denominador común: el actor principal era siempre el VSB, que no tenía rival a nivel local ante numerosos conjuntos efímeros y escaso potencial, pero que ante rivales exteriores era vapuleado sin contemplaciones. Estas fueron sus actuaciones más destacadas:

Partidos benéficos

– Pro damnificados de los terremotos de Messina y Reggio (Italia) que había arrasado sendas ciudades el 28 de diciembre de 1908. Se jugó en enero de 1909 entre dos combinados del VSB.

– Pro soldados mallorquines destinados en la guerra de Marruecos dentro de un festival deportivo celebrado en febrero de 1912. Se organizaron carreras pedestres, ciclistas y un partido de fútbol entre el VSB y el España (un equipo pergeñado para la ocasión que nada tenía que ver con el anterior Club España).

Semana Deportiva (1909-11)

El VSB como una de las sociedades más destacadas en su época participó activamente en las tres ediciones de la denominada Semana Deportiva, evento de carácter ferial, lúdico y deportivo celebrado por Fomento del Turismo en Palma entre 1909 y 1911. Los velocistas, aparte de las indispensables carreras ciclistas también organizaron un partido de fútbol en cada una de las tres ediciones. En las dos primeras ediciones se jugó en el Velódromo del Tirador sendos partidos entre dos combinados del VSB. En la edición de 1911 hubo cambio de escenario y de protagonistas: el VSB jugó en el la explanada del muelle contra el FC Palma, otro de tantos efímeros rivales que se enfrentaron a los velocistas. En esta ocasión se jugó en un espacio de medidas reglamentarias, pero fue algo puntual y no supuso ningún precedente de cara a conseguir un campo de juego más adecuado.

Torneo del Centro Instructivo (Inca) (1910)

A principios de 1910 el fútbol enraizó temporalmente en la vecina ciudad de Inca a través de la sociedad Centro Instructivo. Ello les empujó a organizar un torneo que se disputó en el Velódromo del Tirador, posiblemente para facilitar la participación de equipos palmesanos. Jugado entre mayo y junio de 1910 con cinco equipos, fue tácitamente uno más de los campeonatos oficiosos disputados estos años a pesar de no llamarse como tal. Se interrumpió cuando estaba a punto de finalizar por motivos desconocidos cuando el VSB era virtualmente campeón y demostraba (una vez más) su superioridad.

Fiestas Constantinianas (1913)

El Velódromo del Tirador fue escenario de los actos deportivos de las Fiestas Constantinianas, celebradas por el Obispado de Mallorca en conmemoración del Edicto de tolerancia religiosa promulgado por el emperador Constantino el Grande en el año 313 DC. Disputóse un torneo de fútbol entre marzo y abril de ese año con equipos escolares (en el ámbito escolar el fútbol ya había cuajado) y concluyó con un partido entre dos combinados del VSB.

Partidos contra escuadras navales extranjeras (1910-13)

Equipo del Veloz Sport Balear durante las Fiestas Constantinianas (1913)

Equipo del Veloz Sport Balear durante las Fiestas Constantinianas (1913)

La piedra de toque que calibraba el nivel real del fútbol insular eran los partidos contra los equipos de escuadras navales extranjeras. En ellos el VSB, año tras año, salia escaldado sin remisión:

– Contra el británico HMS Cumberland (0-4) en octubre de 1910.

– Contra el británico HMS Essex (0-5) en abril de 1911.

– Contra el alemán SMS Hansa (0-5) en septiembre de 1913.

Estas derrotas venían seguidas de largos periodos de inactividad y de desánimo, lo cual mostraba que el estamento futbolístico isleño adolecía de un estado tan frágil como intermitente y de una nula visión organizativa para el desarrollo de la práctica futbolística.

Tercera etapa (1913)

Entre 1913 y 1917 fue presidente del VSB Ignasi Seguí Solivelles (1869-1943), quien dio una pujanza a la sociedad hasta entonces inaudita. Durante su mandato el VSB adoptó un carácter polifacético al incorporar actividades de carácter artístico (en 1915 absorbió el Círculo de Bellas Artes) y el velódromo acogió cada año los campeonatos de España y Baleares de ciclismo en pista sin apenas interrupción. Esto convirtió al Tirador en el baluarte del ciclismo español y, de facto, al VSB en la sociedad ciclista más poderosa del Estado.

Seguí, en su afán por convertir al VSB en una entidad puntera en todos los ámbitos, también se preocupó por el fútbol. Así, a finales de 1913 el VSB organizó un nuevo Campeonato de Baleares. Un tanto descafeinado, porque se inscribieron nueve equipos; pero únicamente de Palma. Fue interrumpido cuando el VSB iba líder para que los velocistas disputaran dos partidos contra el Athletic Foot-Ball Club de Sabadell. Se trataba del primer club peninsular que jugaba en el archipiélago y la expectación era enorme. Los resultados obtenidos (2-4 y 1-5) desalentaron a los jugadores y, una vez más, el desánimo cundió. Tanto fue así que el Campeonato de Baleares no se reanudó y el VSB finiquitó esta etapa después de apenas unos meses. Nuevamente cundía la apatía y las fuerzas vivas se desperdigaban ante el mínimo obstáculo.

Interín (1913-15)

Durante casi dos años la afición estuvo nuevamente inactiva y no aparecía nadie más, aparte del VSB, que agarrara el testigo. Para reanimar la situación en abril de 1915 el VSB trajo a otro equipo peninsular: el Regional Foot-Ball Club de Valencia, que disputó dos partidos en el velódromo: uno contra el VSB y otro contra el Palmesano FC (otro conjunto que fue flor de un día). Ambos equipos fueron vapuleados (1-7 y 1-6) y como era de esperar el desánimo persistió.

Cuarta etapa (1915-17)

Equipos del Veloz Sport Balear (camisetas lisas) y del CS Manresa (camisetas a rayas) durante un partido en el velódromo del Tirador (1916)

Equipos del Veloz Sport Balear (camisetas lisas) y del CS Manresa (camisetas a rayas) durante un partido en el velódromo del Tirador (1916)

A finales de 1915 hubo un nuevo repunte de la práctica futbolística en Palma (tan aleatorio e inconstante como los anteriores) y el VSB aprovechó para organizar un nuevo Campeonato de Baleares que se celebró entre diciembre de 1915 y mayo de 1916 con participación de ocho equipos (siete de Palma y el campeón de Menorca, el Mahón FC). El VSB participó con dos equipos, el Veloz (primer equipo) y el X (segundo o reserva). Ambos equipos velocistas se impusieron claramente en la fase de Mallorca: el primer equipo campeonó y el X quedó segundo. Posteriormente, en la final del Campeonato de Baleares el VSB se proclamó campeón por renuncia del campeón de Menorca, el Mahón FC. Nuevamente hubo polémica, ya que los mahoneses acusaron a los velocistas de reforzarse con jugadores peninsulares poco antes de la final. Una vez más, la falta de una norma federativa, la improvisación y la arbitrariedad impidieron celebrar una competición en condiciones.

A rebufo del éxito de público, durante el campeonato el VSB concertó dos partidos interregionales contra el Centro de Sports Manresa, el primero en Palma (marzo) y dos más en Manresa (abril): sin saberlo, esta sería la primera y última incursión del VSB fuera de la isla.

El principio del fin: nacimiento de la RS Alfonso XIII FC (1916)

Mientras se jugaba el Campeonato de Baleares aconteció un hecho clave: en febrero de 1916 se fundó en Palma un nuevo club, la Real Sociedad Alfonso XIII Foot-Ball Club (actual RCD Mallorca), hecho que supuso el principio del fin del VSB como dominador del fútbol en Mallorca. El club alfonsino nació con una planificación que el VSB, hasta entonces, no había sido capaz de implementar para desarrollar efectivamente el fútbol como deporte moderno: lograr un terreno de juego de medidas reglamentarias, organización de preparación física y táctica específica para el deporte de la pelota y establecer un calendario regular de partidos. Ni más ni menos; pero funcionó.

Pronto surgió la rivalidad entre ambas sociedades por ostentar el dominio futbolístico en Mallorca: la RS Alfonso XIII estrenó su campo de Buenos Aires con un partido contra el reserva del FC Barcelona (0-5) y le llegaban efectivos humanos de toda la ciudad… incluidos jugadores del VSB. La fricción entre ambas sociedades estaba servida.

Paralelamente al Campeonato de Baleares y aprovechando el renacimiento de la afición futbolística, el VSB organizó otro torneo llamado Copa Darder Hermanos entre marzo y junio de 1916 para segundos equipos, es decir, filiales o de base. Se inscribieron nueve equipos, entre ellos uno vinculado al VSB (teóricamente, el favorito) y cuatro de la RS Alfonso XIII FC. Tanto el campeón como el subcampeón fueron equipos vinculados a los alfonsinos, mientras el equipo velocista se conformaba con la tercera plaza. Estaba claro que la recién fundada RS Alfonso XIII FC progresaba a pasos agigantados y acechaba el dominio de los velocistas. El choque de trenes era inevitable.

Y las hostilidades estallaron en el primer partido entre sus equipos titulares, un 28 de mayo de 1916, en el campo de Buenos Aires propiedad de la RS Alfonso XIII FC, que acabó abruptamente antes del descanso (1-0 para los alfonsinos) con una monumental batalla campal entre los jugadores de ambos equipos y el público por medio. Ante estos hechos el VSB, ante los crecientes problemas que la sección le estaba dando, decidió cortar por lo sano y disolvió la sección de fútbol poco después. Parte de sus jugadores fueron a parar al mismo club alfonsino y el resto se reorganizaron al calor de otra sociedad palmesana de carácter recreativo: La Veda. Aún así, el fútbol no desapareció del todo del seno del VSB: se mantuvieron un par de equipos de base, pero fuera de la primera fila competitiva. Ambos desaparecieron definitivamente hacia abril de 1917.

La Veda (1916-17)

Como hemos comentado, cuando la sociedad VSB decidió cerrar la sección de fútbol parte de los jugadores se decantaron por emigrar al equipo alfonsino; sin embargo, otros, prefirieron seguir haciéndoles frente cobijados bajo otra entidad: La Veda, sociedad recreativa fundada en 1900 dedicada a la caza y el tiro (avatares de la vida: en 1976 La Veda y el VSB se unieron en una sola sociedad para sobrevivir, y así hasta hoy).

Pronto quedó claro que La Veda apostaba fuerte por la sección. En agosto de 1916 ya se habían organizado dos equipos; en noviembre la sociedad ya disponía de un terreno de juego de medidas reglamentarias, que fue estrenado un mes después contra un viejo conocido: el CS Manresa (que se impuso en ambos encuentros) al que los vedistas le devolvieron la visita en enero de 1917. Desde marzo del mismo año la sociedad incorporó un tercer equipo, posiblemente con los restos del fútbol base del VSB que dejó de competir justo en esas fechas. Los ex-velocistas, ahora vedistas, enfilaban un futuro prometedor y todo indicaba que serían una firme alternativa a la emergente RS Alfonso XIII FC.

Campeonato de Mallorca (1917)

Pero cuando mejor pintaban las cosas, la inconstancia y la debilidad ante las dificultades hicieron nuevamente mella cuando la RS Alfonso XIII organizó el Campeonato de Mallorca entre abril y mayo de 1917. Solo se apuntaron cuatro equipos: dos de la RS Alfonso XIII y dos de La Veda (titular y reserva respectivamente). Sería un duelo en la cumbre entre ambos; pero el campeonato no acabó porque los equipos de La Veda se retiraron antes de finalizar cuando perdieron toda opción de ganar el torneo. Y no solo eso: a los pocos días, la sección de fútbol de La Veda dejaba de existir.

Interín (1917-1920)

Equipo del Veloz Sport Balear (1920)

Equipo del Veloz Sport Balear (1920)

Volviendo al VSB, entre 1917 y 1921 fue presidente Joaquim Pascual Pujol (+1922) quien intentó continuar la gestión de su predecesor caracterizada por el fomento de actividades artísticas y culturales, así como la organización de los campeonatos de España y Baleares de ciclismo con una periodicidad casi anual. Pero a diferencia de aquél no mostró interés por mantener otras secciones deportivas aparte del ciclismo hasta bien avanzado su mandato (a mediados de 1920) y el fútbol en la sociedad velocista quedó aparcado durante tres años. Periodo que sirvió a la RS Alfonso XIII FC para consolidarse sin oposición y marcar distancias, pues no surgió alternativa alguna que les hiciese sombra.

Quinta etapa (1920-22)

A principios de 1920 el fútbol resurgía con fuerza en Mallorca. Una vez más, pues todavía sin organización federativa y sujeto a constantes vaivenes, en las islas tan pronto se vivían momentos de euforia como de total apatía. Fruto de este momento de auge, en abril de 1920 el VSB decide recuperar la sección y poco después el equipo ya jugaba a razón de un partido semanal: un nivel de actividad acorde con la febril actividad futbolística del momento, pero mucho más intenso que en etapas anteriores de la sección. Tal es la actividad que el VSB forma dos conjuntos: el primer equipo (Veloz), el filial o reserva (Sport) y pretende formar un tercero (que, evidentemente, se hubiese llamado Balear) que no llega a formarse.

El VSB se inscribió en la Copa Ayuntamiento, competición disputada entre febrero y julio de 1921 que fue el torneo más importante de aquellos años pre-federativos con el concurso de nueve equipos de la capital. Fue organizada por la RS Alfonso XIII y se jugó en su campo de Buenos Aires, demostrando los alfonsinos una superioridad aplastante sobre el resto de rivales. A pesar de eso, el VSB hizo un buen papel: el primer equipo quedó tercero (perdió el segundo puesto en la última jornada en favor del Baleares FC) y el filial fue subcampeón en el torneo de equipos reservas. Pero de nuevo la sección pecó de irregularidad y dejó de funcionar al poco de finalizar la competición.

Interín (1921-24)

En esta ocasión la desaparición de la sección de fútbol tuvo su razón de ser: la crisis institucional que padeció el VSB a causa de la descalificación del Velódromo del Tirador por la UVE (Unión Velocipédica Española) entre octubre del 1921 y marzo del 1925 (las razones son complejas y exceden los objetivos del presente artículo) que privaron a la entidad de seguir organizando pruebas ciclistas oficiales y de primer nivel. Es muy posible que la entidad en bloque se viese afectada por una sentencia que cercenaba de raíz su principal actividad y, de rebote, el resto de secciones dejasen de funcionar con normalidad, presa del desánimo y del desconcierto.

Lo peor de todo fue que este golpe coincidió con el despegue definitivo de la actividad futbolística de Mallorca. Entre 1921 y 1923 afloran en Mallorca las primeras sociedades exclusivamente futbolísticas, debidamente organizadas y disciplinadas, así como los primeros campos con medidas reglamentarias. El VSB, sumido en el desánimo y el desconcierto, permaneció al margen de este proceso y quedó irremisiblemente descolgado en un momento clave.

Sexta y última etapa (1924-26)

A principios de 1924 el equipo de fútbol del VSB vuelve a existir. La sanción de la UVE seguía vigente y le impedía celebrar cualquier tipo de prueba ciclista, así como sancionar a aquellos que tomasen parte en ellas. De resultas de ello el VSB vuelve a adoptar una táctica de diversificación para reactivar la actividad deportiva del Velódromo del Tirador, que había permanecido prácticamente desierto desde entonces.

Pero los tiempos ya eran muy diferentes: en 1923 se había organizado el denominado Comité Provincial Balear, organismo federativo vinculado a la Federación Catalana de Fútbol, que organizaba los campeonatos insulares de Mallorca y Menorca (en Ibiza y Formentera apenas hubo organización federativa hasta mucho después). Detrás de él ya existía una jerarquía de clubes consolidada en Mallorca, encabezada en Palma por el RS Alfonso XIII (actual RCD Mallorca) y el Baleares FC (actual CD Atlètic Balears) con medios y afición crecientes, además de otros pequeños clubes como el Regional FC, el Athletic FC o el Mediterráneo FC entre otros muchos. Abrirse paso para volver a un primer plano deportivo se había convertido en una tarea casi imposible para el VSB nada iba a ser como antes.

En esta etapa el VSB solo alcanza a jugar partidos amistosos contra equipos pequeños. Nunca llega a federarse (por tanto, jamás ha disputado un partido de liga) y en todo momento estuvo lejos del nivel de los grandes equipos, con quienes no disputa ningún enfrentamiento directo. El equipo fue espaciando gradualmente sus intervenciones durante 1925 y, aunque llegó a disputar un último partido contra un equipo de la escuadra inglesa (2-4), nunca se mostró fuerte.

Equipo del Veloz Sport Balear (1925)

Equipo del Veloz Sport Balear (1925)

A principios de 1926 llegó su última oportunidad: la sociedad velocista barajó adquirir un terreno de juego reglamentario cercano al velódromo; pero la sanción que pesaba sobre el VSB ya había sido levantada y el ciclismo volvía a ser pujante: las prioridades estaban claras. La compra no se materializó y esto fue la puntilla para una sección que agonizaba. Sus últimos partidos datan de febrero y poco después desapareció definitivamente. A partir de entonces el VSB se convirtió, ahora sí, en una sociedad eminentemente ciclista. Objetivo para el cual nació y en el que mantuvo un papel de liderazgo hasta los años 60.

Epílogo

A principios de 1942 el VSB dio un giro a su política interna y decidió reimpulsar la creación de secciones deportivas para compensar una crisis temporal que sufría la organización de pruebas ciclistas en el velódromo. Fueron creadas las secciones de baloncesto, hockey sobre patines y volvieron a celebrarse espectáculos artísticos en la pista (entre otros actuó Pepe Marchena); pero el fútbol ya no apareció. El vigor que tenía la competición futbolística y la pujanza de los clubes de fútbol de la ciudad hacían imposible el retorno del VSB a un primer nivel competitivo: no había espacio que ocupar, ni siquiera en un segundo plano. Al poco tiempo el ciclismo volvió por sus fueros y recuperó la exclusividad (tan solo resistió el baloncesto, hasta desaparecer en 1946). No fue hasta los años 90 que el VSB tuvo sendos equipos de voleibol masculino y femenino; pero los tiempos ya eran muy distintos. En cualquier caso, el fútbol no volvió nunca más al seno del VSB.

Conclusiones

El VSB fue el conjunto de fútbol más poderoso de Mallorca durante más de una década, de 1903 a 1916 (Menorca fue otra historia y en las Pitiusas no hubo actividad hasta unos años después). Durante esa época la entrepista del Velódromo del Tirador se mantuvo como único terreno de juego apto para la práctica futbolística que existió en Palma y que usaba tanto el VSB como cualquier otro conjunto mallorquín.

Los velocistas se mantuvieron en esta privilegiada posición más por ausencia de alternativas que por méritos propios, a pesar de su endémica irregularidad y que su práctica estaba siempre supeditada al calendario de competiciones ciclistas celebradas en el Tirador. Esta situación se mantuvo a pesar de su irregularidad endémica, de carecer de preparación específica, de la falta de un calendario de competición, de un estamento federativo y de que tampoco gestionó la adquisición de un terreno de juego reglamentario. Todo esto mantuvo al VSB en un nivel de juego permanentemente embrionario, estancado y muy primitivo. La ausencia de alternativas sólidas colaboró a mantener esta situación de acomodo sin solución de continuidad.

Los partidos del VSB contra combinados de la escuadra inglesa o alemana y contra clubes de la península no hacían más que constatar, año tras año, esta cruda realidad sin que el VSB diese el salto cualitativo necesario para ponerle remedio. Solo el surgimiento una alternativa firme (la RS Alfonso XIII FC, en 1916) rompió este círculo vicioso para dar un verdadero salto cualitativo que culminaría años después con la implantación de la competición federada en las Islas Baleares a partir de 1923. El VSB fue futbolísticamente un líder deportivo tan indiscutible como endeble, un ídolo con pies de barro que cayó cuando alguien puso unas mínimas bases para que el fútbol pudiera desarrollarse adecuadamente en Baleares.

Principales efemérides futbolísticas del Veloz Sport Balear

Si no se indica lo contrario, los equipos y terrenos de juego eran de Palma.

a) En los Campeonatos de Baleares

Año

Organizador

Campo

Campeón

Subcampeón

1908-09

VSB

Tirador

Club Mahonés

VSB

1915-16

VSB

Tirador

VSB

Mahón FC

1919*

RS Alfonso XIII FC

Buenos Aires

RS Alfonso XIII FC

Mahón FC

* En 1919 el VSB no participó.

b) En los Campeonatos de Mallorca (o fase de Mallorca del Campeonato de Baleares) 

Año

Organizador

Campo

Campeón

Subcampeón

1904

Club España

Tirador

VSB

FC Balear

1908-09

VSB

Tirador

VSB

CF Unión

1910 (no acabó)

Centro Instructivo (Inca)

Tirador

VSB

FC Inca

1913 (no acabó)

VSB

Tirador

VSB

Cristina

1915-16

VSB

Tirador

VSB

X (VSB B)

1917*

RS Alfonso XIII FC

Buenos Aires

RS Alfonso XIII FC

RS Alfonso XIII FC B

1919*

RS Alfonso XIII FC

Buenos Aires

RS Alfonso XIII FC

RS Alfonso XIII FC B

* En 1917 y 1919 el VSB no participó.

c) Copa Ayuntamiento de Palma (1921)

Categoría

Organizador

Campo

Campeón

Subcampeón

Tercero

Primeros equipos

RS Alfonso XIII FC

Buenos Aires

RS Alfonso XIII FC

Baleares FC

VSB

Equipos reservas

RS Alfonso XIII FC

Buenos Aires

RS Alfonso XIII FC

Sport (VSB B)

UPM

d) Partidos contra equipos de escuadras extranjeras

Fecha

Campo

Escuadra naval

Equipos

19/10/04

Tirador

Inglesa

VSB 0 – 1 HMS Isis

20/10/04

Tirador

Inglesa

VSB 2 – 4 HMS Isis

22/10/04

Tirador

Inglesa

VSB 1 – 4 HMS Isis

22/02/08

Tirador

Inglesa

VSB 4 – 7 selección de torpederos

08/10/10

Tirador

Inglesa

VSB 0 – 4 HMS Cumberland

01/04/11

Tirador

Inglesa

VSB 0 – 5 HMS Essex

14/09/13

Tirador

Alemana

VSB 0 – 5 SMS Hansa

01/03/25

Campo de los Cruzados

Inglesa

VSB 2 – 4 HMS Hood

e) Partidos interislas

 

Fecha

Campo

Equipos

30/03/16

Tirador

VSB 0 – 7 Mahón FC

26/11/20

Tirador

VSB 3 – 4 Dos de Mayo (Mahón)

28/11/20

Tirador

VSB 3 – 1 Dos de Mayo (Mahón)

f) Partidos contra equipos peninsulares (como Veloz Sport Balear) 

Fecha

Campo

Equipos

07/12/13

Tirador

VSB 2 – 4 Athletic FC (Sabadell)

08/12/13

Tirador

VSB 1 – 5 Athletic FC (Sabadell)

04/04/15

Tirador

VSB 1 – 7 Regional FC (Valencia)

26/03/16

Tirador

VSB 5 – 6 CS Manresa

19/04/16

Tirador

VSB 8 – 1 estudiantes Universidad de Barcelona

23/04/16

Manresa

CS Manresa 6 – 3 VSB

24/04/16

Manresa

CS Manresa 7 – 2 VSB

g) Partidos contra equipos peninsulares (como La Veda)

Fecha

Campo

Equipos

08/12/16

Campo de La Veda

La Veda 0 – 2 CS Manresa

10/12/16

Campo de La Veda

La Veda 1 – 3 CS Manresa

06/01/17

Manresa

CS Manresa 6 – 1 La Veda

07/01/17

Manresa

CS Manresa 4 – 1 La Veda

h) Otros partidos destacados

  • Partido de homenaje al heredero de la Corona (1907).
  • Participación en los actos de la Semana Deportiva (1909, 1910 y 1911).
  • Partidos benéficos por los terremotos de Messina-Reggio (1909) y Guerra de Marruecos (1912).
  • Participación en los actos de las Fiestas Constantinianas (1913).

Bibliografía

a) Libros

  • AA.VV. Gran Enciclopèdia de Mallorca. 19 Vol. Palma: Promomallorca edicions, 1988-91 (en catalán).
  • AA.VV: L’esport a les Illes Balears. Miscel·lània. Revista Estudis Baleàrics. Institut d’Estudis Baleàrics. Palma, 2008 (1981-). Núm. 92-93 (en catalán).
  • Canals i Morro, Pere: Ciclisme, ciclistes i bicicletes a s’Arenal. Llucmajor: Ajuntament de Llucmajor, 2012 (en catalán).
  • Fábregas y Cuxart, Luis: Ca Nostra. 50 años de vida palmesana. Palma: Ediciones Cort, 2007 (1a ed. 1965).
  • Font Martorell, Gabriel: El Club Deportivo Mallorca: historia de la institución decana del fútbol mallorquín. 1916-1944. Palma: Impr. Muntaner. Ed. Cosmos, 1944.
  • García Gargallo, Manuel: Els origens de l’Atlètic Balears (1920-1942). Dels inicis a la fusió. Lulú, 2013 (en catalán).
  • García Marín, Jesús; Pampín Rodríguez, Gonzalo: Historia del ciclismo en Mallorca. Palma: Miramar, 1991.
  • Inauguración del Velódromo de Tirador: Programa de las carreras y festejos que tendrán lugar el día 10 de agosto. Palma: Amengual y Muntaner, 1903.
  • Mercadal Bagur, Deseado: El juego del fútbol en Menorca. Maó: Ed. Menorca, 1985.
  • Pasamontes, Juan Carlos: RS Alfonso XIII. La cara oculta del Real CD Mallorca. 1916-1931. Palma: Ediciones Cort, 2005.
  • Trilobites: Año y medio de vida sportiva. Palma: Imprenta J. Tous, 1917.
  • Vidal Perelló, Miquel: Ciclistas de Mallorca.
  • Vidal Perelló, Miquel: Miquel Nadal Comas, Minaco. Palma: Documenta Balear, 2005.

b) Prensa

  • ABC (Madrid, 1905-).
  • La Almudaina (Palma, 1887-1953).
  • Baleares (Palma, 1939-).
  • El Bien Público (Maó, 1873-1939).
  • El Correo de Mallorca (Palma, 1910-53).
  • El Día (Palma, 1921-1939).
  • Diario de Ibiza (Vila d’Eivissa, 1893-).
  • El Iris (Ciutadella, 1913-37; 1943-).
  • El Mundo Deportivo (Barcelona, 1906-).
  • La Última Hora (Palma, 1893-).
  • La Vanguardia (Barcelona, 1881-).
  • La Voz de Ibiza (Vila d’Eivissa, 1922-1936).
  • La Voz de Menorca (Maó, 1906-1939)

c) Revistas

  • Baleares. Revista quincenal ilustrada (Palma, 1917-25).
  • Baleares Deportiva. Revista semanal ilustrada (Palma, 1923).
  • Los Deportes (Barcelona, 1896-1910).
  • Foch y Fum (Palma, 1917-36).
  • Majorica (Palma, 1924-25).
  • Palma Ciclista (Palma, 1898-1902).
  • El Regional. Semanario deportivo (Palma, 1924-25).
  • Sport Balear. Revista quincenal ilustrada (Palma, 1924-26)
  • Stadium (Barcelona, 1911-30).
  • Vida Isleña (Palma, 1912-13).