La tormenta perfecta contra Villar y las elecciones a la RFEF de 2017 (parte 1)

¿Cuántas vidas tiene Villar? […] Llevan años metiéndole en la cárcel e inhabilitándole, pero la verdad que no hay forma.

Joseba Larrañaga (12-5-2016, El partido de las 12, Cope).

Resumen

Durante los años 2014 y 2015 el CSD tomó una serie de decisiones que perjudicaron a los intereses de la RFEF, mientras que beneficiaban a la LFP presidida por Javier Tebas. Lejos de plegarse a la injerencia estatal, el presidente Villar se enfrentó con intensidad a las decisiones de Miguel Cardenal, apoyando incluso una huelga general del fútbol español que se interpretó en diversos ámbitos como un pulso al gobierno en su conjunto.

Puesto que en el año 2016 iban a celebrarse elecciones en la RFEF, Miguel Cardenal con el probable apoyo de Javier Tebas, diseñó un plan para evitar que Ángel María Villar renovara su presidencia por un mandato más. Así, con la ayuda de Miguel Galán, presentaron dos acciones administrativo-sancionadoras y tres acciones penales, sabiendo que el éxito de cualquiera de ellas supondría la inhabilitación de Villar. Todo ello era siempre filtrado a la prensa por los protagonistas con el fin de crear un estado de opinión contrario a Villar. Las dos acciones administrativas fueron desestimadas, y en las penales Villar tan solo continúa investigado en el caso del Recreativo de Huelva y en el caso soule, que al momento de celebrarse las elecciones estaba bajo secreto de sumario.

Simultáneamente encontraron en Jorge Pérez, secretario general de la RFEF, el candidato alternativo que necesitaban. Pero hacía falta tiempo para preparar convenientemente su candidatura, por lo que desde el CSD se retrasó deliberadamente la aprobación del reglamento electoral de la RFEF, lo que se haría un año más tarde de lo inicialmente previsto.

Ese plazo de un año debía permitir que estallara el caso soule, la gran causa construida a partir de los hechos denunciados ante la Fiscalía tanto por Miguel Cardenal como por Jorge Pérez.

Pero ninguna de todas las actuaciones planteadas consiguió el fin propuesto, y llegado el 22 de mayo de 2017 Ángel María Villar revalidó su presidencia de la RFEF al ganar sin rival.

Solo dos meses después su suerte cambió definitivamente, pero ello no es óbice para afirmar rotundamente que ninguno de sus rivales consiguió el objetivo pretendido: sustituir a Villar por un presidente apoyado por Javier Tebas.

Introducción

A primera hora del martes 18 de julio de 2017 agentes de la UCO se personaron en el domicilio particular en Madrid de Ángel María Villar para llevar a cabo la diligencia de entrada y registro acordada por el titular del Juzgado Central de Instrucción 1 de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz. Tras seis horas, y con Villar formalmente detenido, se trasladaron a las dependencias de la Real Federación Española de Fútbol en Las Rozas para continuar allí el registro de las pertenencias de su presidente. También en Madrid y a la misma hora, fue detenido el hijo del presidente Gorka Villar, y en Tenerife el vicepresidente económico de la RFEF Juan Padrón, y Ramón Ángel Hernández Baussou, secretario general de la federación tinerfeña.

Las cámaras de televisión de La Sexta fueron dando puntual noticia de los movimientos de la guardia civil y su famoso detenido, tanto en su domicilio como en la sede de la RFEF. Toda España fue testigo directo de cómo Villar entraba y salía del furgón policial. “Jaque mate el eterno presidente», titulaba al día siguiente el periódico La Razón (p. 48).

Dos días después (20 de julio), tras dos días de calabozo en el cuartel de la guardia civil de Las Rozas, el juez Santiago Pedraz decretó el ingreso en prisión comunicada y sin fianza de Ángel María Villar Llona, Gorka Villar Bollain y Juan Antonio Padrón Morales, así como la prisión eludible con 100.000 € de fianza de Ramón Ángel Hernández Baussou. Aunque tan solo once días después (31 de julio) se acordó la libertad bajo fianza, el daño ya era irreparable.

Sin posibilidad de entrar en detalles de casos judiciales que continúan sub iudice, en el presente artículo pretendemos describir lo que hemos dado en llamar la “tormenta perfecta” contra Villar, que tuvo como punto más mediático su detención e ingreso en prisión, pero que venía fraguándose desde un año y medio antes.

En efecto, desde finales de 2015 se había puesto en marcha una compleja sucesión de acciones administrativas y penales contra el presidente de la RFEF que siempre venían acompañadas de una magnífica repercusión mediática, facilitada precisamente por los inductores de aquellas acciones. Los actores de aquella tormenta fueron el presidente de la LFP Javier Tebas[1], el presidente del CSD Miguel Cardenal, el secretario general de la RFEF Jorge Pérez Arias, y Miguel Galán, presidente de una escuela de entrenadores madrileña con aspiraciones por tener un cargo federativo.

Al margen de la concreta aspiración de cada uno de los cuatro, todos ellos compartían un objetivo: impedir que Villar repitiera mandato en las elecciones que estaban previstas para el año 2016. La forma más eficaz era impedir que pudiera presentarse a las elecciones mediante una inhabilitación impuesta en vía penal o administrativa, y por si no lo conseguían buscaron un rival que pudiera hacerle frente electoral a un Villar acosado por los procedimientos y la insoportable presión de ciertos medios de comunicación.

A pesar de que las elecciones a la RFEF se retrasaron más de un año sobre el calendario inicialmente previsto, probablemente con el fin de preparar un candidato y dar más tiempo al desarrollo de los diversos procedimientos contra Villar, este consiguió sobrevivir con éxito a la “tormenta perfecta” y ganar las elecciones que finalmente se celebraron el 22 de mayo de 2017.

Cuestión diferente, que trataremos en un próximo artículo, fueron las consecuencias del ingreso en prisión y cómo la Comisión Directiva del CSD bajo la presidencia de un nuevo secretario de Estado, José Ramón Lete, acordó la suspensión de Villar y posteriormente el TAD su destitución de presidente de la RFEF. Como estas dos actuaciones no formaron parte de la “tormenta perfecta” inicialmente diseñada, sino que fueron consecuencias ulteriores de actuaciones llevadas a cabo por personajes diferentes, será cuestión que trataremos en ocasión posterior.

Prolegómenos: la situación de la RFEF tras las elecciones de 2012

Tras las elecciones celebradas el 16 de febrero de 2012, en las que Ángel María Villar ganó sin rival[2], se abría en la RFEF un periodo de calma. La Selección absoluta estaba en un momento dorado que le llevaría a ganar la segunda Eurocopa consecutiva en ese 2012 en Kiev, y desde el punto de vista institucional las circunstancias se mostraban excelentes, pues apenas un mes antes (13 de enero) el gobierno de Mariano Rajoy había designado como secretario de Estado para el deporte a Miguel Cardenal Carro, quien había sido miembro del Comité de Competición de la RFEF de forma ininterrumpida desde 2004 nombrado personalmente por Ángel María Villar.

Efectivamente los dos primeros años de mandato de Miguel Cardenal al frente del CSD fueron de excelente relación con la RFEF y con su presidente, hasta el punto de que se llegó a renunciar por tres años consecutivos (2012, 2013 y 2014) a la subvención del CSD para que el dinero llegara al resto de federaciones deportivas nacionales. También en 2013 se archivó el procedimiento penal abierto desde 2003 en el Juzgado de Instrucción 47 de Madrid iniciado por Javier Tebas mediante denuncia contra Ángel Villar y otros directivos. Tras el inicial sobreseimiento decretado en 2010 respecto de la mayor parte de acusaciones, la instrucción había quedado limitada al supuesto pago de viajes privados de algunos directivos y a la falta de justificación de algunas dietas[3].

A modo de ejemplo de la buena relación entre el CSD y la RFEF en aquellos momentos, resulta pertinente traer a colación unas declaraciones de Miguel Cardenal el día 6 de marzo de 2012, en que anunciaba cómo la junta directiva de la RFEF había decidido renunciar a la subvención del CSD a favor del resto de federaciones. Se expresaba así[4]:

He recibido una buena noticia. El presidente Villar ha anunciado que la junta directiva ha decidido acoger una petición que le trasladé en la primera entrevista que tuve con él para que la RFEF este año permita que la subvención que le corresponde se pudiera repartir entre otras federaciones que ya son 65 […]. Es un gesto que se debe agradecer y que vamos a recordar. El fútbol español es capaz de ajustarse el cinturón para que otras modalidades puedan llevar a cabo su tarea con suficientes medios y eficacia.

En términos parecidos se expresó Miguel Cardenal cuando meses después, el 17 de septiembre de 2012, Ángel Villar le trasladó la misma decisión respecto de la subvención de 2013 durante una visita al Consejo Superior de Deportes[5]:

Tengo que agradecer el gesto generoso de la Federación de Fútbol. Es un sacrificio, es una cantidad relevante, en torno a 3 o 4 millones de euros, que va a redundar en el resto de las federaciones […]. Se había hecho la invitación a que lo hicieran y el presidente lo ha trasladado a los órganos directivos de la Federación y lo ha confirmado. La invitación era implícita, si ya se le hizo el año pasado en otro escenario, Villar es inteligente y era evidente que se diera por aludido.

Un año después, el 16 de septiembre de 2013, la junta directiva de la RFEF aprobaba la renuncia por tercer año consecutivo a la subvención ordinaria del CSD de 2014, y Miguel Cardenal respondió en los mismos términos elogiosos de años anteriores[6]:

Es un detalle más de Ángel Villar, a quien agradezco personalmente de nuevo la sensibilidad que muestra en estos momentos donde el resto de deportes necesitan de ayuda. El fútbol, en este caso, la Federación, actúa de nuevo como hermano mayor del resto de los deportes y su propuesta a la Junta por tercer año consecutiva es necesario resaltarla públicamente.

El deterioro de la relación entre la RFEF y el CSD: huelga del fútbol español

Ya en el año 2014 desde la RFEF empezaron a percibirse algunos movimientos del CSD favorables a la LFP presidida por Javier Tebas que perjudicaban a los intereses de la RFEF. La primera ocasión fue la desigual minoración de la subvención correspondiente al dinero de las quinielas (4,55%), cuyo fin reglamentario es la obra y equipamiento del fútbol aficionado. En aplicación de las competencias atribuidas al CSD en virtud del RD 403/2013, de 7 de junio, la comisión directiva del Consejo acordó reducir un 26,25% la cantidad correspondiente a la RFEF, mientras que tan solo redujo un 10% la cantidad correspondiente a la LFP.

Lo más llamativo fue que, llegado el año 2014, el CSD retrasó sucesivamente el pago de la subvención de las quinielas, hasta que finalmente por resolución de 3 de febrero de 2015 acordó definitivamente no haber lugar al pago de los 2.856.630,00 € inicialmente concedidos a la RFEF, mientras que sí mantuvo el pago a la LFP.

Simultáneamente, durante el mismo 2014 el CSD empezó la tramitación de una serie de expedientes de reintegro de las subvenciones de los años anteriores. Se daba así la paradoja de que la RFEF había renunciado a tres anualidades de la subvención que lícitamente le correspondía, y simultáneamente el CSD incoaba acciones administrativas sobre subvenciones anteriores que se basaban en una incorrecta gestión documental del destino de los fondos pero que no ponían en duda que el dinero se había dedicado al fin para el que habían sido concedidas. Las cantidades concretas fueron las siguientes:

Anualidad

Fecha de resolución

Principal

Intereses

Total

2010[7]

13/02/2015

1.901.613,04 €

355.141,76 €

2.256.754,80 €

2011[8]

15/04/2016

1.196.848,29 €

241.617,80 €

1.438.466,09 €

2012[9]

10/05/2016

131.792,31 €

20.659,91 €

152.452,22 €

2013[10]

03/06/2015

757.987,00 €

757.987,00 €

2014[11]

03/02/2015

2.856.630,00 €

2.856.630,00 €

TOTAL

 

6.844.870,64 €

617.419,47 €

7.462.290,11 €

Es importante poner el foco en el hecho de que ninguno de los expedientes de reintegro halló indicio alguno de la comisión de hechos delictivos, sino simplemente de irregularidades contables. En otras palabras, los campos de fútbol estaban construidos, pero la RFEF no pudo demostrar documentalmente en qué concretas partidas se gastó el dinero. En caso de que el CSD en el curso de su labor inspectora hubiera encontrado elementos que pudieran suponer la existencia de delitos de fraude de subvenciones o incluso de apropiación indebida, habrían suspendido el procedimiento y dado cuenta alternativamente a la Fiscalía o a la jurisdicción penal. Pero nada de ello ocurrió, con independencia de la obligación para la RFEF de devolver ese dinero con intereses, con el menoscabo que supuso para las arcas federativas y para el fútbol modesto de toda España al que iban destinados esos fondos.

Simultáneamente se dio a conocer un informe redactado por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social sobre la actividad deportiva desarrollada en los clubes y entidades sin ánimo de lucro, de acuerdo con el mandato de la disposición adicional 16ª de la Ley 14/2013, de 27 de septiembre, de Apoyo a los emprendedores. De acuerdo con este estudio, los clubes aficionados serían considerados como entidades dotadas de ánimo de lucro y tendrían en consecuencia nuevas obligaciones fiscales y a establecer relación laboral con todas aquellas personas que, a cambio de una pequeña contraprestación por gastos, realizan cualquier función en el club (jugadores, entrenadores, masajistas…). La aplicación efectiva de este estudio supondría de facto el fin del fútbol aficionado.

Esta sucesión de actuaciones motivó una intensa reacción por parte del fútbol aficionado español, que era en definitiva el último perjudicado por las decisiones del CSD, tomando la decisión de ir a la huelga. Así, a partir del fin de semana del 15 de febrero de 2015 se suspendieron las competiciones, en periodos alternos, en los territorios de las federaciones asturiana, cántabra, guipuzcoana, vizcaína, alavesa, riojana, catalana, castellano leonesa, extremeña, ceutí, melillense, y canaria (Tenerife y Las Palmas). En el comunicado emitido por la junta directiva de la RFEF el lunes 16, se señalaban como causas de la huelga las siguientes:

a) Por el contenido del estudio efectuado por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social sobre la actividad deportiva desarrollada en los clubes y entidades deportivas sin ánimo de lucro.

b) Por el Proyecto de Real Decreto sobre comercialización centralizada de derechos audiovisuales de las competiciones profesionales.

c) Por la gravísima injerencia del CSD en la RFEF.

d) Por la severa disconformidad con el reparto de fondos procedentes de la Quiniela.

e) Por la exigencia de reintegro de subvenciones para obras de fútbol aficionado por el CSD del ejercicio 2010 y revisión justificativa de 2011, 2012 y 2013.

El comunicado terminaba con las siguientes palabras:

Una vez más, ofrecemos nuestra mejor capacidad de diálogo con el Gobierno de España, a través de la RFEF, representante de todos los estamentos del fútbol español.

Lejos de bajar la tensión, pocas semanas después esta llegó a su punto más alto con la aprobación el 30 de abril del RDL 5/2015, en el que se aprobó con rango de ley la comercialización conjunta de los derechos televisivos del fútbol profesional. Como consecuencia de ello, la AFE presidida entonces por Luis Rubiales, acordó convocar una huelga indefinida, lo que fue transmitido a la junta directiva de la RFEF en su reunión del 6 de mayo. A expensas de ello, la propia junta directiva acordó suspender las jornadas correspondientes a los campeonatos nacionales de Liga de todas las categorías a partir del 16 de mayo, dando de este modo diez días de moratoria al gobierno para negociar e intentar solventar los diferentes problemas planteados.

Para justificar la suspensión de las competiciones, insistimos, de todas las categorías incluidas las profesionales, la junta directiva de la RFEF emitió el siguiente comunicado:

El Real Decreto-ley 5/2005 sobre la comercialización de los derechos audiovisuales de las competiciones profesionales constituye una enorme falta de respeto a los derechos del fútbol español representados por la Real Federación Española de Fútbol. Son, entre otros, los siguientes:

a)      Se priva a la RFEF de la titularidad de los derechos audiovisuales de las competiciones de Primera División, Segunda División, Campeonato de España/Copa de Su Majestad el Rey y Supercopa. Dicha titularidad a favor de la RFEF está recogida en el artículo número 78 de los Estatutos de FIFA, en el 48 de UEFA y en los artículos 15 y 198 del Reglamento de la Real Federación Española de Fútbol. 2.

b)      Se priva a la RFEF de su condición como entidad organizadora de las competiciones de Primera y Segunda División. Dicha condición está recogida en la Ley del Deporte de 1990. Consecuentemente se la aparta de la venta de esos derechos. 3.

c)      Se priva a la RFEF de su participación en el órgano de gestión que regula la explotación de los derechos audiovisuales de Primera y Segunda División y, asimismo, del de autorizar la venta de dichos derechos en el extranjero, derechos de los que era titular.

d)      La RFEF no recibe ninguna cantidad de la venta de los derechos audiovisuales de Primera y Segunda División. Sólo actúa como “cartero” entregando a las federaciones territoriales de ámbito autonómico el 1%. El Gobierno indicará cuánto, en base al número de licencias en ellas y determinará su finalidad. El Gobierno establece, pues, la política de distribución y destino.

e)       La Real Federación Española de Fútbol ha sido ignorada a la hora del modo de reparto del dinero del fútbol entre los clubes profesionales, que es de un 90% para los de Primera División y de un 10% para los de Segunda, y también en el del Campeonato de España/Copa de Su Majestad el Rey, que es de un 90% para los clubes de Primera y Segunda División, y de un 10% para los de Segunda B y Tercera. ¿Por qué esos porcentajes y no otros?

f)        El Gobierno (Consejo Superior de Deportes) destina el 0,5% de los ingresos por los derechos del fútbol, que es dinero del fútbol y privado, para la Primera División femenina y distintos sindicatos de jugadores, entrenadores y árbitros, y el 1% para aplicar una política deportiva de ayuda en otras especialidades deportivas y a deportistas de élite. Ese 1,5% total, que es dinero del fútbol y privado, es más del que reciben (1%) todas las federaciones territoriales de fútbol de ámbito autonómico juntas.

g)      La RFEF aparece como garante de los clubes con la Seguridad Social y la Hacienda pública.

h)      Siete clubes que descienden de categoría, tres de Primera a Segunda y cuatro de Segunda a Segunda B, perciben un 3,5% de los ingresos por la venta de los derechos audiovisuales, lo que supone una cifra 3,5 veces superior a la de las federaciones territoriales.

Además, la RFEF quiere hacer constar su absoluta solidaridad con la Asociación de Futbolistas Españoles y lamenta el trato que ha recibido, al ser marginada, tanto a la hora del reparto como a la de no ser convocada a las negociaciones. La RFEF considera, también que todas estas actuaciones constituyen una gravísima falta de respeto a los derechos del fútbol español, a los de FIFA y de UEFA, pero quiere recordar que ya dijo “SÍ” al Real Decreto-ley 5/2015, mas no entregó un cheque en blanco, y que sigue dispuesta a cualquier diálogo que conduzca a la resolución del problema y dé respuesta a sus reclamaciones. La RFEF estima, además, que se podían haber alcanzado los mismos objetivos económicos para los clubes en la comercialización de los derechos audiovisuales si se hubiese producido la participación de todos los actores y desde el inicio, algo que no se ha hecho, y quiere aclarar que se ha reunido dos veces con el ministro de Cultura y Deporte José Ignacio Wert antes de la promulgación del Real Decreto e, igualmente, que solicitó repetidas veces el borrador del Real Decreto-ley que nunca le fue entregado. La RFEF se pregunta, finalmente, qué habría cambiado en el Real Decreto de haber acudido desde el comienzo de su elaboración, lo que nunca se produjo, a la vista de su contenido final, claramente intencionado.

Dos días después (8 de mayo) la LFP interpuso una demanda de conflicto colectivo ante la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional, interesando que se decretara la ilegalidad de la huelga y consecuentemente su nulidad de pleno derecho. Por su parte, la AFE notificó el 10 de mayo que la huelga tendría inicialmente una duración de siete días (del 16 al 21 de mayo), si bien se reservaban el derecho de ampliación en caso de que no fueran atendidas sus exigencias, que eran las siguientes:

a)      Que se abra un periodo de diálogo social y negociación con la Asociación de Futbolistas Españoles para consensuar un modelo equilibrado de gestión de comercialización de los derechos audiovisuales de] fútbol profesional. Es parte primordial de este objetivo alcanzar un acuerdo con la Liga Nacional de Fútbol Profesional y la Real Federación Española de Fútbol sobre las materias que a continuación se detallan y que afectan a los intereses profesionales de los Futbolistas profesionales, a fin de que dicho acuerdo sea asumido por el Gobierno.

b)      Que se pacte y se establezca una distribución más equitativa entre las distintas categorías del Campeonato Nacional de Liga de los ingresos provenientes de la venta centralizada de los derechos audiovisuales. En este sentido, la actual distribución legal de recursos obtenidos entre los Clubes de Primera División y de Segunda División «A» resulta desproporcionada; favoreciendo precisamente a los equipos que menores dificultades están teniendo para atender los compromisos con sus trabajadores y a aquellos que con más claridad se alejan en la fijación cíe sus niveles salariales del convenio colectivo de aplicación.

c)      Que se pacte y establezca un aumento de la cantidad distribuida al fútbol aficionado, especialmente a la categoría de 2ª división B, que palie el tremendo daño económico que la emisión audiovisual de los encuentros de competiciones profesionales está causando.

d)      Que se destine directamente a favor de las organizaciones sindicales de Futbolistas profesionales, en razón de su representatividad, un porcentaje tasado de los ingresos que pudieran derivarse de la venta centralizada de los derechos citados) para financiar sus gastos de funcionamiento, así como para el cumplimiento de los fines que le son propios.

e)       Que se constituyan legalmente garantías y preferencias de pago con los ingresos provenientes de la nueva regulación de la venta de los derechos audiovisuales, para la atención de las deudas salariales con los futbolistas y demás profesionales que tengan licencia federativa en el mundo del fútbol.

f)        Participación de la organización sindical de futbolistas españoles (AFE) en todos los órganos constituidos en el fútbol profesional, cuya actividad incide, conforme a la nueva regulación de comercialización de derechos audiovisuales, en los intereses y derechos de los futbolistas profesionales.

g)      Dotar a los futbolistas de una mayor seguridad jurídica en todo lo concerniente a la prestación de sus servicios, cumplimento de las condiciones pactadas y percepciones económicas. En este sentido, resulta especialmente grave la introducción de la modificación introducida por dicho Real Decreto-Ley en la Ley 10/1990 del Deporte (Disposición Final 2.4ª), que otorga un mayor reconocimiento a las decisiones unilaterales los órganos de la Liga de Fútbol Profesional, basadas en acuerdes privados que no necesitan la aprobación del CSD y que inciden enormemente en las condiciones laborales y en la carrera deportiva de los futbolistas profesionales.

La tensión de aquellos días, donde estaba en riesgo cierto el final de la Liga en todas sus categorías, incluidas las profesionales, tuvo sin embargo poco recorrido. Las medidas cautelares interesadas por la LFP fueron acordadas mediante Auto de 14 de mayo de 2015 dictado por la Sección Primera de la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional (ponente Ilmo. Sr. D. Ricardo Bodas Martín), que argumentó en el sentido de considerar que la huelga podría tener como objetivo la novación del convenio colectivo vigente entre la AFE y la LFP, lo que no estaría amparado en derecho. Además de ello, y en relación con las medidas cautelares, se pronunciaba en este sentido (fundamento jurídico quinto):

Por lo demás, se ha probado que la celebración de la huelga impediría concluir el campeonato de Primera y Segunda División B en las fechas indicadas, lo que provocará un grave desorden organizativo, cuya resolución es muy difícil de resolver por los compromisos internacionales de España y de los propios clubes, así como por las propias fechas de vacaciones de los futbolistas, sin olvidar que AFE anunció que se reservaba la ampliación de los días de huelga iniciales, lo que nos permite concluir que, si no se adoptara la medida solicitada, se producirían situaciones, que impedirían o dificultarían gravemente la tutela judicial que pudiera otorgarse caso de una eventual sentencia estimatoria, concurriendo, por tanto, los requisitos del art. 728 LEC.

Suspendida la huelga del fútbol español, solo dos semanas después (3 de junio) el CSD dictaba la resolución en el expediente de reintegro correspondiente a la subvención de 2013 en virtud del cual se acordó la devolución por parte de la RFEF de las cantidades que esta había dedicado a la construcción y reparación de campos de fútbol aficionado, obras efectivamente realizadas pero no suficientemente justificadas por los clubes e instituciones beneficiarias de la subvención.

Nueva orden ministerial sobre procesos electorales federativos

El 18 de diciembre de 2015 el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte presidido por el ministro Íñigo Méndez de Vigo, dictó la Orden 2764/2015 que regula los procesos electorales federativos, y en la se modificaban algunos puntos que hipotéticamente podían perjudicar a los intereses electorales de Ángel Villar: fundamentalmente, se reducía el porcentaje de votos de los árbitros, un estamento tradicionalmente partidario del presidente de la RFEF. Además, y entre otras cuestiones, se incorporaban nuevas reglas sobre la moción de censura en las federaciones, en el sentido de favorecer su interposición.

Como era de sobra conocido por el CSD, el mero hecho de la existencia de una norma emanada del Estado que influyera en el reglamento electoral de la RFEF era contrario al Código Electoral Modelo de la FIFA (29-10-2007), que en su art. 2 dice literalmente lo siguiente:

No se permite ninguna clase de injerencia gubernamental en el proceso electoral ni en la composición del cuerpo electoral (asamblea y congreso) de la asociación. Por lo tanto, no se aplicarán las normas gubernamentales que regulen las elecciones a los órganos internos electos de la asociación, ni tampoco se someterán las normas electorales de una asociación a la aprobación de ningún órgano gubernamental. […]

Simultáneamente, y de acuerdo con los estatutos de la FIFA (arts. 14 y 19), cualquier injerencia gubernamental sobre uno de sus miembros podía provocar sanciones, incluida la suspensión del derecho de participar en competiciones internacionales. Esto era sobradamente conocido por el CSD, que sin embargo tomó la decisión de introducir modificaciones en la Orden sin que existiera justificación alguna al respecto, salvo quizá el seguir aumentando la tensión con la RFEF, a la que sabía que ponía en una situación extremadamente delicada, tanto si aceptaba las modificaciones en su reglamento electoral como si no las aceptaba.

Ante esta tesitura, la RFEF optó por redactar un reglamento electoral conforme con la Orden de 2008, que para convocatorias anteriores había sido expresamente aprobado por la FIFA. Este nuevo reglamento fue enviado el 7 de enero de 2016 a todos los miembros de la asamblea general y fue posteriormente aprobado por la comisión delegada el 19 de enero. Al día siguiente (20 de enero) el reglamento fue remitido al CSD acompañado de la solicitud formal de cambio de criterios de la orden ministerial con el fin de que se adaptara a la Orden de 2008 y evitar así problemas con la FIFA. De acuerdo con el calendario propuesto, las elecciones a la presidencia de la RFEF se celebrarían el 22 de abril.

Como veremos en el siguiente epígrafe, el interés de Villar por celebrar las elecciones cuanto antes era evidente, pues en aquellas fechas se estaba fraguando la candidatura de su secretario general Jorge Pérez a la presidencia de la RFEF. De este modo, si el CSD aprobaba el reglamento electoral, no habría tiempo para que un candidato alternativo pudiera rivalizar con Villar.

Quizá fue ese el motivo por el que el CSD no respondió a las peticiones de la RFEF hasta el 18 de julio, siete meses después de que fueron planteadas, lo que alargó sucesivamente la celebración de las elecciones en la RFEF. Intentando evitar precisamente el retraso electoral, la RFEF interpuso recurso contencioso-administrativo contra la orden ministerial, interesando la adopción de medidas cautelares. En el recurso, la RFEF se expresaba en los siguientes términos:

[La orden vulnera] derechos fundamentales, en cuanto pretende que se aprueben por la Administración Pública los Reglamentos Electorales de dichas asociaciones privadas imponiendo determinados criterios, requisitos y formalidades para llevar a cabo los procesos electorales, lo que supone un atentado directo a la potestad de autoorganización de las entidades privadas, como es la RFEF, Y es que considera que la Orden impugnada llega a regular no solo la composición de las Asambleas Generales de las Federaciones Deportivas, sino también, la proporcionalidad en la representación de los estamentos implicados, lo que supone una injerencia de los poderes públicos”. Por este motivo, la RFEF interpuso recurso contencioso-administrativo ante la Audiencia Nacional con solicitud de medidas cautelares para la suspensión de los efectos de la orden.

Las medidas cautelares fueron desestimadas por Auto de 10 de marzo de 2016 dictado por la Sección Sexta de la Sala de lo Contencioso de la Audiencia Nacional (ponente Ilma. Sra. Dña. Ana Isabel Resa Gómez).

Sin embargo, es muy importante señalar que, en lo que se refiere al fondo, el recurso fue parcialmente estimado en virtud de la Sentencia 368/2017, de 2 de octubre, dictado por la misma sección y con ponencia del Ilmo. Sr. D. José Guerrero Zaplana. El fallo de la sentencia se expresó en estos términos literales:

Que estimando solo en parte el recurso contencioso-administrativo, interpuesto por el procurador de los tribunales Dª Beatriz María González Rivero, en nombre y en representación de Real Federación Española de Fútbol contra la Orden ECD/2764/2015, de 18 de diciembre, por la que se regulan los procesos electorales en las federaciones deportivas españolas, resolución que confirmamos por ser conforme a Derecho salvo lo previsto en el artículo 19.f) en relación a las mayorías precisas para que triunfe la moción de censura, mención que debe tenerse por no puesta.

Aunque año y medio más tarde, finalmente la justicia le dio la razón parcialmente a la RFEF considerando nula parte de la Orden Ministerial.


[1] Sobre anteriores actuaciones de Javier Tebas contra Villar, véase https://www.cihefe.es/cuadernosdefutbol/2021/09/el-tortuoso-camino-a-las-elecciones-de-la-rfef-de-2004/.

[2] https://www.cihefe.es/cuadernosdefutbol/2021/12/las-elecciones-a-la-rfef-de-2012-denuncia-de-manos-limpias-contra-angel-villar/

[3] https://www.cihefe.es/cuadernosdefutbol/2021/09/el-tortuoso-camino-a-las-elecciones-de-la-rfef-de-2004/

[4] https://as.com/futbol/2012/03/06/mas_futbol/1330988430_850215.html

[5] https://www.diariodenavarra.es/noticias/deportes/mas_deporte/2012/09/17/la_rfef_renuncia_por_segundo_ano_subvencion_del_gobierno_91804_1026.html

[6] https://www.europapress.es/deportes/futbol-00162/noticia-rfef-anuncia-propondra-junta-renuncia-subvencion-csd-tercer-ano-consecutivo-20130916193730.html

[7] Confirmada por la SAN (Sala de lo Contencioso, Sección sexta) en el recurso 41/2016. No consta en CENDOJ la sentencia.

[8] Confirmada por la SAN (Sala de lo Contencioso, Sección sexta) de 2-10-2017 (ponente Ilmo. Sr. D. José Guerrero Zaplana).

[9] Confirmada por la SAN (Sala de lo Contencioso, Sección sexta) de 19-3-2018 (ponente Ilmo. Sr. D. José Guerrero Zaplana).

[10] Confirmada por la SAN (Sala de lo Contencioso, Sección sexta) de 25-7-2018 (ponente Ilmo. Sr. D. Santiago Pablo Soldevila Fragoso).

[11] Confirmada por la SAN (Sala de lo Contencioso, Sección sexta) de 14-12-2017 (ponente Ilma. Sra. Dña. Ana Isabel Resa Gómez).




La tormenta perfecta contra Villar y las elecciones a la RFEF de 2017 (parte 2)

El distanciamiento de Villar y su secretario general: Jorge Pérez candidato a la presidencia de la RFEF

En este momento es pertinente detener la narración para explicar un punto imprescindible para entender los hechos ocurridos en aquellos momentos, y en particular por qué a Villar le beneficiaba celebrar las elecciones cuanto antes: la candidatura de Jorge Pérez a la presidencia de la RFEF.

Jorge Pérez había asumido el cargo de secretario general el día 1 de septiembre de 2004, el mismo año en que Miguel Cardenal ingresaba en el Comité de Competición de la RFEF, si bien había sido el hombre fuerte de la casa desde la destitución en enero de 2003 de Gerardo González, aunque con el cargo de coordinador general.

Según trascendió y el propio Jorge Pérez reconoció, en el año 2014 se puso a sí mismo un bonus de 416.666,67 € equivalente a 1,5 veces su salario y que la RFEF consideró desproporcionado. Por este motivo el presidente perdió definitivamente su confianza en él y fue progresivamente limitando sus funciones al despacho ordinario de sus atribuciones estatuarias, lo que se hizo con la aquiescencia de la junta directiva. Esta limitación de funciones, progresivamente en aumento, generó el descontento de Pérez, quien públicamente afirmaría sentirse víctima de las arbitrarias decisiones de Juan Padrón, siempre acríticamente respaldadas por Ángel Villar.

Tras una sucesión de rumores que acompañaron a Jorge Pérez desde finales del año 2015, finalmente el 2 de febrero de 2016 anunció públicamente su intención de presentarse a la presidencia de la RFEF en el programa El Larguero de la Cadena SER, dirigido por José Ramón de la Morena, uno de los periodistas más críticos con Villar desde la querella interpuesta por el grupo PRISA por la retransmisión de los partidos de los lunes[1]. Tan solo dos días después (4-2-2016), Javier Tebas afirmaba públicamente que ”es una opinión mía personal que tenía que haber un candidato alternativo [a Ángel María Villar] y creo que Jorge Pérez reúne las condiciones. Lleva más de 20 años en la casa y puede reunir lo que le hace falta a la Federación para el cambio, que tiene que ser desde dentro[2].

Por su parte, y aunque Jorge Pérez afirmaba no ser “un hombre de Tebas” y haber tomado la decisión de presentarse sin condicionamiento externo alguno, sí confirmaba explícitamente contar con el apoyo del presidente de la LFP: “me puse en contacto a través de un club con Javier Tebas y le dije ‘quiero presentarme, ¿estarías dispuesto a apoyarme?’ Y me dijo que sí” (Al primer toque, Onda Cero, 9-2-2016). Por su parte, el periodista Ángel Rodríguez en la misma entrevista afirmaba que “la gente de la calle piensa que Jorge Pérez es un hombre de Tebas, que Tebas ha colocado a Jorge Pérez como ariete contra Ángel Villar”.

A esa entrevista en la Cadena Ser se sucedieron otras como la señalada en Al primer toque (9-2-2016), Abc (11-2-2016), El partido de las 12 (12-5-2016) y As (19-7-2016), cuyo contenido era fundamentalmente el mismo: Pérez lamentaba el devenir de la RFEF desde que se habían limitado sus funciones y anunciaba su candidatura a la presidencia. “Desde hace dos años, la verdad, se están haciendo las cosas muy mal, se están cometiendo muchísimos erroresAl primer toque (9-2-2016). Esos dos años coincidían precisamente, claro, con la limitación efectiva de sus funciones ejecutivas dada la pérdida de confianza como consecuencia del cobro del bonus.

Por su parte, Tebas no dejó durante todo el año 2016 de mostrar su público y entusiasta apoyo a la candidatura de Jorge Pérez. Por ejemplo, en un desayuno informativo de Europa Press (10-11-2016), Tebas afirmaba rotundamente que “Jorge Pérez es el candidato idóneo[3].

La asamblea general de la RFEF apoya a Villar y primera querella

Como señalamos anteriormente, los planteamientos realizados por la RFEF respecto a la orden ministerial al CSD el 20 de enero de 2016 no fueron contestados hasta el 18 de julio. Sin embargo, en el mes de febrero el TAD emitió un informe en el que explicaba cómo, previo a poder hacer consideraciones sobre el fondo del reglamento, era necesario introducir expresamente determinadas modificaciones que exigían un cambio en los estatutos de la RFEF. Por este motivo Villar decidió convocar una asamblea general para el 22 de marzo.

En esta asamblea general se sometieron a votación ese cambio de estatutos y a refrendo el reglamento electoral en los términos aprobados por la comisión delegada de la RFEF el 19 de enero, si bien introduciendo la reducción de los asambleístas de 180 a 140 en los términos señalados por el TAD. Como ya era imposible celebrar las elecciones en la fecha inicialmente prevista del 22 de abril, la RFEF solicitó el permiso para celebrarlas en el segundo semestre con el fin de evitar la coincidencia del periodo electoral con la Eurocopa de Francia, lo que le fue concedido por el CSD el 3 de junio tras el informe favorable del TAD.

Varios días antes (17 de mayo) y como consecuencia de una denuncia de Javier Tebas, Miguel Cardenal denunció ante el TAD por entender que Villar estaba retrasando maliciosamente las elecciones, lo que según el presidente del CSD debía suponer su inhabilitación. Por su parte, y exactamente el mismo día (17 de mayo), Miguel Galán interponía querella criminal en los mismos términos.

Si bien ambas acciones, administrativa y penal, fueron desestimadas, sirvieron de forma muy eficaz para trasladar a la opinión pública que el retraso de las elecciones era únicamente imputable a Villar, cuando la realidad era justo la contraria, pues él habría sido el más beneficiado de que las elecciones se celebraran lo antes posible.

El día 3 de agosto el TAD archivó sin más trámite la denuncia de Miguel Cardenal, y lo hizo en términos que merecen ser reproducidos:

1º) La tramitación del Reglamento Electoral se inició con tiempo suficiente para que se procediese a su aprobación y pudiese iniciarse el proceso electoral dentro del primer cuatrimestre de dicho año, tal y como marca la normativa aplicable.

2º) Es razonable entender que si la Real Federación Española de Fútbol no procedió a corregir los defectos jurídicos puestos de manifiesto por el Tribunal Administrativo del Deporte y el Consejo Superior de Deportes, a pesar de haber sido requerida para ello, fue porque el Consejo Superior de Deportes no había resuelto acerca de su petición de cambio de criterio sobre dos de los aspectos más relevantes del contenido del reglamento como eran la moción de censura y la fecha de las elecciones.

3º) Igualmente es posible que si el texto aprobado en la asamblea de 22 de marzo no es remitido al Consejo Superior de Deportes para su aprobación hasta el 4 de mayo de 2016 es precisamente por la falta de respuesta del Consejo Superior de Deportes a su petición del mes de enero.

4º) Igualmente cabe entender que la solicitud de cambio de fechas para la celebración del proceso electoral se realizó el 27 de abril de 2016 porque no existía respuesta para una nueva redacción.

Por su parte, de la acción criminal interpuesta por Miguel Galán conoció el Juzgado de Instrucción 1 de Majadahonda (DPPA 333/2016), que sobreseyó mediante auto dictado el 5 de enero de 2017 (Ilma. Sra. Dña. María Gavilán Rubio).

Segunda querella: el caso Recreativo de Huelva

Como consecuencia de una denuncia presentada por Javier Tebas ante el CSD, el 11 de febrero de 2016 Miguel Cardenal interpuso una denuncia ante el TAD por un supuesto trato de favor con el que la RFEF habría favorecido al Recreativo de Huelva y al Marino de Tenerife.

La denuncia no tuvo recorrido alguno en la vía administrativa, pues fue archivada a limine por el TAD en una resolución dictada el 3 de agosto de 2016. Y ello a pesar de que el TAD es el órgano disciplinario integrado en el propio CSD cuyo presidente había sido el denunciante.

No corrió sin embargo la misma suerte la querella interpuesta por Miguel Galán el 14 de julio, a pesar de tener identidad subjetiva y fáctica con la acción resuelta por el TAD. Seis años después [31-3-2022] continúa en fase de instrucción ante el Juzgado 5 de Majadahonda (DPPA 315/2016).

Una segunda asamblea general de la RFEF apoya a Villar: destitución de Jorge Pérez

A partir del verano las fechas se suceden. La comisión delegada de la RFEF aprueba el 8 de septiembre un tercer reglamento que prevé la celebración de las elecciones para el 20 de diciembre y en el que se incorporan los aspectos señalados por el CSD y el TAD.

Sin embargo, en este caso la respuesta del CSD fue casi inmediata: recibió el reglamento el día 22 de septiembre y lo rechazó cuatro días después (26 de septiembre). Eso motivó que la RFEF denunciara una “actitud consciente y deliberadamente obstruccionista, dilatoria e impeditiva del CSD y su presidente”.

Previendo hipotéticos problemas por parte del CSD, y al mismo tiempo que envió al CSD el reglamento electoral aprobado por la comisión delegada de la RFEF, el presidente Villar convocó la asamblea general para el 11 de octubre con el fin de tener el refrendo de todo el fútbol español a ese nuevo reglamento electoral, tal y como ocurriría.

Al margen de ello, la asamblea fue el escenario elegido por Jorge Pérez para escenificar su enfrentamiento con Villar. El día anterior a la asamblea (10 de octubre), Pérez envió a Villar una carta a través del registro oficial de la RFEF con el fin de que se leyera en la asamblea. La carta se expresaba en los siguientes términos:

Sr. Presidente:

Tras un análisis pormenorizado de toda la documentación referente al proceso electoral de la RFEF 2016, y teniendo en cuenta las últimas reuniones en el seno federativo que han derivado en la convocatoria de la asamblea extraordinaria de mañana y una posterior reunión de junta directiva, considero que no se está informando adecuadamente de las consecuencias de eventuales acuerdos manifiestamente ilegales, tales como la aprobación por la asamblea de un reglamento electoral ya rechazado por el Consejo Superior de Deportes y, sobre todo, una hipotética y ulterior convocatoria de elecciones por parte del presidente de la RFEF y/o su junta directiva.

La convocatoria de elecciones, sin un reglamento aprobado por el CSD, es contraria a la Orden Ministerial que regula el proceso de las elecciones en todas las federaciones deportivas españolas, y los miembros de los órganos federativos que las aprueben pueden incurrir en un ilícito administrativo y/o penal que les conlleve graves consecuencias y sanciones.

Como secretario general de la RFEF, entiendo que es mi deber y responsabilidad procurar que las decisiones federativas sean acordes a la Ley española y a los propios Estatutos federativos (reconocidos por la FIFA) que en su artículo primero someten la institución a aquella de forma voluntaria. En este caso, la legalidad la marca la literalidad de las normas y disposiciones contenidas en la referida Orden Ministerial, a través de los informes y resoluciones del Tribunal Administrativo del Deporte y el propio CSD.

Le pido, Sr. Presidente, que se dé la máxima difusión al presente escrito y que se incluya en la documentación de la Asamblea y Junta directiva de mañana. Creo que es necesario y justo para todas las personas que integran las mismas. Por otra parte, y con objeto de no incurrir yo en responsabilidades no deseadas, le comunico que me abstendré en lo sucesivo de firmar cualquier escrito al respecto.

Atentamente, Jorge Pérez Arias, secretario general.

De acuerdo con la petición de Jorge Pérez, Villar pidió que se leyera públicamente la carta, de la que previamente se había dado copia a todos los asambleístas y a los medios de comunicación. Queda así recogido en el acta de la asamblea (pág. 7):

El señor Presidente señala que si el Secretario General de la RFEF quiere hacer alguna manifestación en relación con la antedicha carta, puede intervenir en este momento, posibilidad que el interesado no utiliza.

Indica entonces el señor Presidente que desea hacer algunas preguntas al señor Secretario General sobre el contenido de dicho escrito, que plantea acto seguido: ¿Por qué considera que «no se está informando adecuadamente de las consecuencias de eventuales acuerdos manifiestamente ilegales»?, según reza literalmente la carta. ¿Qué datos concretos tiene para tan grave afirmación?; ¿a qué eventuales acuerdos se refiere y por qué los considera manifiestamente ilegales?

El señor Secretario General no da ninguna respuesta a estas cuestiones.

Prosigue el señor Presidente preguntando al señor Secretario General a qué escritos se refiere cuando afirma en su carta que «con objeto de no incurrir yo en responsabilidades no deseadas, le comunico que me abstendré en lo sucesivo de firmar cualquier escrito al respecto». ¿Significa eso que hará dejación de sus funciones como Secretario General?

El señor Secretario General no responde a las preguntas formuladas por el señor Presidente, ni hace manifestación alguna.»

Al terminar de tratar todos los puntos del orden del día, y antes de concluir la asamblea, el presidente de la RFEF tomó la palabra y se expresó en estos términos literales:

Deseo poner en conocimiento a esta Asamblea General de la Real Federación Española de Fútbol, conocimiento del y al propio interesado, que es el secretario general, en virtud de mis facultades estatutarias desde este momento ceso al secretario general, qué pasará a desempeñar las funciones propias de su categoría profesional.

Si pública había sido la denuncia de Jorge Pérez de supuestas irregularidades y hasta ilegalidades, públicamente se hacía la destitución de su cargo como secretario general. De forma paralela y también el día anterior a la celebración de la asamblea, el secretario de Estado había enviado a Villar una carta de contenido muy similar a la de Jorge Pérez, que también terminó filtrada a los medios comunicación.

La misma noche de la asamblea Pérez comentó los hechos en el programa de José Ramón de la Morena, El transistor (Onda Cero, 12-10-2016). Veinte días más tardes (31 de octubre) y firmada por el propio Villar, la RFEF remitió la carta de despido por causas disciplinarias.

Jorge Pérez demandó a la RFEF el 19 de diciembre de 2016 por despido improcedente, en un pleito que conoció el Juzgado de lo Social 21 de Madrid y que resolvió mediante sentencia de 31 de marzo de 2017 (aclarada por auto de 16 de junio) a favor de Jorge Pérez en el sentido de reconocer la improcedencia del despido con obligación de indemnizarlo en la cantidad de 444.357,57 € o, alternativamente, readmitirlo en la RFEF con el pago de los salarios de tramitación por valor de 741,78 € diarios. Ambas partes recurrieron en suplicación ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, que resolvió mediante la Sentencia 368/2018, de 20 de abril (ponente Ilmo. Sr. D. Javier José París Marín), confirmar íntegramente la anterior resolución. El ulterior recurso de casación interpuesto por Jorge Pérez fue inadmitido a trámite mediante Auto de 9 de mayo de 2019 (ponente Excmo. Sr. D. José Manuel López García de la Serrana).

Al margen de lo anterior, la RFEF envió a Jorge Pérez ad cautelam una segunda carta de despido el día 7 de marzo de 2017 fundada en la participación del exsecretario general en los hechos relativos a una subvención concedida en 2010 por el CSD “para el fomento y fortalecimiento de políticas transversales en materia deportiva” que fueron las que dieron lugar al conocido como “caso Haití”.

Dimisión de Miguel Cardenal y aprobación definitiva del reglamento electoral

Apenas tres días antes de la celebración de esta segunda asamblea general se había conocido la noticia de que el Juzgado de Instrucción 36 de Madrid había llamado a declarar como investigado por malversación de fondos y otros cuatro delitos a Miguel Cardenal, como consecuencia de una querella interpuesta por el presidente de la federación de tenis, José Luis Escañuela, con quien también Cardenal tenía un enfrentamiento intenso desde hacía meses.

Esta imputación provocó la dimisión de Cardenal, que tuvo lugar el 8 de noviembre. Ocho días después (16 de noviembre), José Ramón Lete Lasa fue nombrado secretario de Estado para el Deporte. La RFEF recibió de muy buen grado el nombramiento, y así lo hizo público:

La Real Federación Española de Fútbol quiere hacer llegar su felicitación a José Ramón Lete Lasa por su nombramiento como presidente del Consejo Superior de Deportes, al tiempo que le desea todo tipo de éxitos en su nuevo cargo.

A partir de este momento todas las dificultades fueron diluyéndose. Aunque el 16 de diciembre el CSD rechazó el recurso de reposición interpuesto por la RFEF contra la decisión de 16 de septiembre de no aprobar el reglamento previo, el 9 de enero de 2017 el CSD aceptó que los futbolistas no profesionales pudieran elegir en circunscripción autonómica a sus representantes en la Asamblea, tal y como pedía la RFEF. Así pues, el 18 de enero la RFEF envío un nuevo reglamento electoral, que esta vez sí fue aprobado por el CSD el 31 de enero.

La importancia que cobró no solo para el fútbol sino para el país en general la cuestión surgida en torno a las elecciones de la RFEF se demuestra claramente por el hecho de que el propio presidente del gobierno, Mariano Rajoy, manifestó públicamente en Onda Cero (26 de enero) haber dado órdenes para resolver la cuestión, tan solo cinco días antes de que el CSD diera el sí definitivo:

Estoy convencido de que en pocas fechas se llegará a un entendimiento, que es el mejor procedimiento para resolver problemas. Son las instrucciones que tiene el nuevo Secretario de Estado de Deporte y el director general de Deportes.

El nuevo y definitivo calendario electoral, aprobado por la comisión delegada de la RFEF el 13 de febrero, acordó la celebración de las elecciones a la presidencia de la RFEF se celebrarían el 22 de mayo. De acuerdo con las diversas y sucesivas declaraciones públicas, se presentarían tres candidatos: Miguel Galán, Jorge Pérez y Ángel Villar.

Tercera querella: el caso Haití

Antes de glosar los meses previos a las elecciones es preciso volver a finales de 2016, concretamente al día 30 de diciembre, fecha en que Miguel Galán interpuso una tercera denuncia contra Ángel Villar, en esta ocasión por el supuesto fraude de una subvención concedida por el CSD a la RFEF en el año 2010, en lo que es conocido como el caso Haití.

El caso continúa en fase de instrucción en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 4 de Majadahonda, si bien el 9 de junio de 2021 se ha dictado auto por el que se sobresee el caso respecto a Ángel Villar de acuerdo con la petición de la Fiscalía.

Los últimos pasos hacia la reelección de Villar

Tras la aprobación del calendario electoral el 13 de febrero, las noticias sobre la campaña electoral se sucedieron. El día 24 de febrero Jorge Pérez anunció oficialmente su candidatura a la presidencia, y un mes después (24 de marzo) Miguel Galán renunció a favor de Pérez, según afirmaba en un comunicado: “para no perjudicar al otro candidato avalado por la Liga y el fútbol profesional”. En efecto, y aunque en los meses anteriores Jorge Pérez había reiterado no ser el candidato de Javier Tebas, nadie dudaba de que la pugna real en esta campaña electoral estaba entre Ángel María Villar y el presidente de la Liga.

A pesar de los diversos procedimientos administrativos y penales interpuestos contra Villar, la lucha con Jorge Pérez se demostró muy desigual desde el principio. A pesar de la intensísima campaña mediática en contra, Villar demostró pronto su éxito ante todos los estamentos del fútbol español. Tan es así que uno de los medios que mayor campaña habían hecho en contra de Villar, el diario As, ya anunciaba el 8 de abril una segura victoria[4]. El propio As, al dar cuenta el 29 de abril de los resultados a las elecciones a asambleístas titulaba tajantemente: “Villar arrasa y Jorge Pérez y Tebas impugnarán”[5].

Efectivamente, constatada la segura derrota que se les avecinaba, Jorge Pérez y Tebas dejaron de lado el proceso electoral y buscaron fórmulas para invalidarlo. Como venía ocurriendo desde hacía más de un año, era nuevamente la oposición a Villar la que pretendía evitar la celebración de las elecciones en la RFEF.

El 5 de mayo Jorge Pérez presentó un recurso ante el TAD interesando la nulidad de las elecciones a asambleístas, o subsidiariamente la nulidad del voto por correo. A este recurso se añadieron otros presentados por las federaciones autonómicas de Aragón y Andalucía, y por el Club Atlético Pinto. En todos los casos, la consecuencia del éxito de cualquiera de los recursos sería la repetición del proceso electoral. Simultáneamente, Pérez optó por no presentar los avales que afirmaba tener para ser candidato a la presidencia de la RFEF, remitiendo todas sus esperanzas a la anulación por parte del TAD del proceso electoral.

Consecuentemente, el 11 de mayo la Comisión Electoral de la RFEF proclamó al único candidato que había presentado los avales, Ángel María Villar. Al día siguiente (12 de mayo), todas las esperanzas de Jorge Pérez se esfumaron al conocerse que el TAD rechazó la adopción de las medidas cautelares interesadas y que, consecuentemente, las elecciones se celebrarían el 22 de mayo con Villar como candidato único.

Un último intento de Jorge Pérez fue el recurso ante la justicia ordinaria, interesando la adopción de medidas cautelarísimas en el mismo sentido. Sin embargo la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia también las rechazó, señalando que “la prosecución del proceso electoral, incluso su finalización, no supondría un impedimento para la estimación de la nulidad del proceso en caso de acreditarse la concurrencia de cual quiera de las causas previstas legalmente en los recursos que se instaran al efecto lo que generaría los efectos inherentes a la declaración de nulidad en su caso”.

Tal y como estaba previsto, el 22 de mayo se celebraron las elecciones, y Villar ganó con 112 votos a favor, 11 en blanco y ninguno en contra. La validez del proceso electoral fue definitivamente avalada por el TAD, que el 9 de junio resolvió rechazar todos los motivos de impugnación del proceso electoral alegados por las federaciones autonómicas de Aragón y Andalucía, el Club Atlético Pinto y Jorge Pérez Arias. De este modo, Ángel Villar conseguía definitivamente revalidar por octava vez su cargo como presidente de la RFEF.

El entonces ignorado caso soule

Al empezar este artículo hicimos referencia al caso soule y a la definitiva caída de Villar, que tuvo lugar apenas dos meses después de ganar las elecciones. En aquel momento pocas personas tenían conocimiento de la existencia de esta investigación, pues las diligencias instruidas (DPPA 35/2017) en el Juzgado Central de Instrucción 1 de la Audiencia Nacional se hallaban bajo secreto de sumario. Por supuesto, los investigados desconocían completamente su existencia.

Es relevante sin embargo citar algunos hitos que, aunque se conocieron con posterioridad, tuvieron lugar de forma paralela al proceso electoral y probablemente con el fin de intervenir en su resultado.

En primer lugar hay que señalar que quien interpuso la denuncia inicial fue Miguel Cardenal, y lo hizo ante la Fiscalía Anticorrupción el 11 de noviembre de 2015. A esta denuncia le sucedieron otros escritos ampliatorios de 14 de diciembre de 2015, 18 de enero de 2016, 25 de febrero de 2016 y 13 de abril de 2016.

Por su parte, y ya en periodo electoral, el 30 de enero de 2017 Jorge Pérez interpuso una denuncia también ante la Fiscalía Anticorrupción. Aunque las diligencias de la fiscalía eran secretas, resulta muy improbable que Jorge Pérez ignorara su existencia y sin embargo presentara él una denuncia ante el mismo órgano que estaba ya conociendo de aquellos hechos. El 15 de marzo Jorge Pérez ratificó su denuncia, y el 12 de abril aportó un pendrive con documentación extraída de la propia RFEF. Es llamativo cómo esta prueba documental no se aportó con la denuncia inicial y sí cuatro días después de que el diario As diera por segura la victoria de Villar.

Aunque estas actuaciones tenían lugar en absoluto secreto, parece claro que la voluntad de la oposición era que el caso soule estallara antes de las elecciones. Aunque no fue así y Villar consiguió ganar sus octavas elecciones, el estruendoso estallido del caso, que cinco años después continúa en instrucción [31-3-2022], terminó con la carrera de quien lideró el fútbol español en los años de mayores éxitos de nuestra historia.

Carta de 16 presidentes autonómicos en apoyo de Ángel Villar

Para terminar, entendemos procedente reproducir íntegramente una carta redactada por dieciséis presidentes de federaciones autonómicas el día 23 de febrero de 2017 tras una reunión en un hotel de Madrid. Aunque en ese momento no se tenía noticia de lo que finalmente sería el caso soule, esos presidentes decidieron hacer pública un texto muy contundente en apoyo de Villar ante lo que consideraban una operación de acoso y derribo injustificado e injusto.

Los firmantes de la misma fueron los presidentes de las Federaciones de Fútbol del Principado de Asturias (Maximino Martínez), Islas Baleares (Miguel Bestard), Canaria (Antonio Suárez), Cántabra (José Ángel Peláez), Castilla-La Mancha (Antonio Escribano), Castilla y León (Marcelino Maté), Catalana (Andreu Subies), Ceuta (Antonio García), Extremeña (Pedro Ángel Rocha), Madrid (Francisco Javier Díez), Melillense (Diego Martínez), Murcia (José Miguel Monje), Navarra (José Rafael del Amo), Rioja (Jacinto Andrés Alonso), Comunidad Valenciana (Vicente Muñoz) y Vasca (Luis María Elustondo).

El tenor literal de la carta es el siguiente:

El próximo 22 de mayo se celebrarán elecciones a la presidencia de la RFEF. Concluirá en ese preciso momento el proceso que situará al frente de la Real Federación Española de Fútbol al vencedor en las urnas. Las urnas son soberanas.

Un total de 140 electores decidirá quién conducirá los destinos de la RFEF a partir de ese instante. En ese preciso momento se pondrá fin a un proceso que algunas partes han convertido en especialmente tortuoso y muy difícil de hacer realidad. No ha sido el caso de la Real Federación Española de Fútbol, siempre dispuesta a la elaboración del Reglamento adecuado, ni de sus dirigentes y, en especial, de Ángel Villar, sometidos a una persecución sin precedentes. Como en todas ellas, sus autores tienen nombres y apellidos.

No hay precedentes en otros procesos electorales en federaciones deportivas de las trabas sufridas por la RFEF hasta conseguir un Reglamento aprobado. Todas las medidas emprendidas para tratar de conseguirlo fueron rechazadas por el Consejo Superior de Deportes que presidía Miguel Cardenal, en algunos casos tras haber sido aprobadas y en otros añadiendo nuevas exigencias. Miguel Cardenal no solo impidió la posibilidad de dar el visto bueno al Reglamento, sino que hizo uso inadecuado de la información de la que disponía, lo que exige un trato prudente y elegante, filtrándola interesadamente.

Pero hay otros involucrados en este largo acoso de años contra Ángel Villar y, en consecuencia, contra quienes gestionan la RFEF con intenciones que resultan evidentes. El auténtico motor de combustión de esos programas es Javier Tebas, presidente actual de la Liga de Fútbol Profesional, que buscó y encontró a un pre candidato, el ex secretario general de la RFEF. Este operativo está plagado de infinidad de agravios, medias verdades, acusaciones sin sentido y graves calumnias. El terceto ha emprendido acciones disciplinarias, acciones penales, descalificaciones constantes y manifestaciones insostenibles. Solo han conseguido con ello descubrir su auténtica cara. Demostrar qué son, quiénes son y cómo se manejan.

La historia de la persecución emprendida a título individual por Javier Tebas, presidente de la Liga de Fútbol Profesional, no es, sin embargo, un asunto reciente; sus compañeros de aventura, sí. Tebas la inició en 2003. Es, pues, un viejísimo anhelo que hasta ahora y para su desgracia, no le ha dado ningún resultado. Ni en los juzgados de lo penal, ni en otros, a los que acude con más que regular frecuencia, ni en las urnas. Los asuntos denunciados ante el Juzgado de lo Penal número 47 de Madrid fueron, entre otros, una presunta retención indebida de seguros concertados para jugadores de selecciones nacionales, otra presunta retención de ingresos de los clubes por las fichas profesionales de los jugadores, la demora en el reintegro de viajes y gastos particulares de familiares y directivos, y el contrato con la firma deportiva Puma. Asimismo, se abrió un expediente disciplinario por el Comité Español de Disciplina Deportiva, que en el mismo acto quedó suspendido hasta que se resolviera el procedimiento penal. El procedimiento penal fue archivado posteriormente.

A partir de entonces, y hasta ahora mismo, no han dejado de promoverse denuncias y actuaciones siempre con el mismo objetivo e idéntica finalización. Muchas de ellas se han producido con procesos electorales a la vista y en vigor, lo que no deja de ser extraordinariamente llamativo ni causa dudas sobre sus objetivos. En el mismo año 2003, el propio Javier Tebas, representante del C.D. Badajoz, y aliado con el presidente de una Territorial, presentó otra denuncia contra Ángel Villar por presunto abuso de autoridad, escudándose en la constitución de una hipoteca sobre los locales de la Real Federación Española de Fútbol con Caja Madrid, en garantía de la devolución de un préstamo de 18 millones de euros. La denuncia no fue admitida por el Consejo Superior de Deportes.

No contentos con los resultados de los dos primeros intentos, en 2006, el Comité Técnico de Árbitros de la Territorial de Aragón denunció al presidente de la RFEF y al presidente del Comité Técnico de Árbitros, Victoriano Sánchez Arminio, por no convocar este una reunión de las dos debidas de la Comisión de Coordinación lnterterritorial y Relaciones Externas del Arbitraje. Asunto gravísimo, sin duda. El Consejo Superior de Deportes instó al Comité Español de Disciplina Deportiva a la apertura de un expediente. Esta vez tampoco hubo sanción.

En 2007, cuatro años después, Javier Tebas y Roberto Dale solicitaron la reanudación del expediente suspendido por el CEDD en septiembre de 2003 con el mismo resultado: la denuncia fue desestimada. En 2008 [sic, fue 2012], Ignacio del Río entabló un contencioso administrativo por motivos electorales y el sindicato Manos Limpias una acción criminal por la misma razón. Una vez más no consiguieron sus objetivos.

La judicialización del fútbol es la primera de las constantes de quienes pretenden ganar por fuera lo que no son capaces de ganar ni deportivamente, ni, como se ha demostrado sobradamente, en un proceso electoral limpio y democrático, lo que las urnas han demostrado en todas las ocasiones. La persecución, sin embargo, no ha parado ni en medios ni en difusión. Lamentablemente para ellos, la respuesta de los electores ha sido terminante. En el actual proceso electoral, Javier Tebas lidera no solo el monopolio de la campaña de acoso, sino que respalda plenamente y avala a un pre candidato del que el primer día dijo que no era el más adecuado

El año 2015, Javier Tebas, en representación del Alcorcón, solicitó la apertura de expediente disciplinario contra el presidente de la RFEF y los miembros de la Comisión Delegada, entre los que se encontraban Vicente del Bosque y Carlos Velasco Carballo, por adoptar el acuerdo de suspender las competiciones a raíz del Real Decreto TV, Ley sobre Derechos Audiovisuales. Como había ocurrido en todos los casos precedentes, dicha apertura de expediente fue desestimada. Un año más tarde, esto es, en 2016, nuevamente Javier Tebas, ¡quién iba a decirlo!, solicitó la apertura de otro contra el presidente de la RFEF por la aprobación del presente Reglamento Electoral por la Comisión Delegada. Por enésima vez, esta denuncia contra Ángel Villar fue rechazada.

Todas estas acciones han estado salpicadas por multitud de declaraciones ofensivas hacia el presidente de la RFEF. Los acosadores no se han detenido ante nada, involucrando incluso a familiares y amigos de Ángel Villar, una demostración de ruindad que nada tiene que ver con el fútbol, ni, en el más extremo de los casos, con las diferencias de gestión o personales. Un modelo que define fielmente el perfil de ciertos personajes del fútbol y que han llegado a utilizar su dinero, el del fútbol, para constituir la Comisión de Clubes de Segunda B y Tercera y la Asociación de Clubes de Fútbol Femenino con carácter electoralista y contrarias al actual presidente de la RFEF y a los demás presidentes de federaciones de ámbito autonómico.

Representantes de estas asociaciones nos censuran por no defender al fútbol aficionado y no responder a sus escritos. Lo que nos faltaba: que critiquen a quienes desde siempre se ha volcado con el fútbol aficionado, campo, por cierto, que Jorge Pérez acaba de descubrir después de 25 años ignorándolo y sin haber visitado jamás por iniciativa propia una Territorial. Claro que la de las iniciativas no es, precisamente, una de sus virtudes.

Javier Tebas se ha significado especialmente durante todos estos años. Lo hizo casi en dos centenares de ocasiones. Seis veces denunció a Ángel Villar y seis veces fueron echadas abajo sus denuncias. Tebas añadió a su lista de agraviados y adversarios a futbolistas, clubes y árbitros. Sus desavenencias con la familia del fútbol son notorias. De los primeros, y valga como ejemplo, llegó a señalar que sabían el resultado de un partido (Levante-Real Zaragoza) con antelación y que habían sacado dinero de las apuestas (La Razón, 17 de marzo de 2015). También aseguró aventuradamente que «España no está preparada para ver a un futbolista en la cárcel” (El País, 8 de octubre de 2014); de los segundos afirmó que «se nos ha dicho que tenemos los mejores (árbitros) del mundo, pero esa clasificación no la encuentro por ningún lado» (La Gaceta. 17 de diciembre de 2013). Varios clubes nacionales también se han visto ofendidos repetidas veces.

Hace apenas un mes, el 5 de enero de 2017, una jueza de Majadahonda (Madrid) rechazó la querella presentada por Miguel Galán, uno de los pre candidatos a la presidencia de la RFEF, contra Ángel Villar por la dilación interesada del proceso electoral en la RFEF y no encontró indicios racionales de ilícito penal y archivó la querella. el tribunal administrativo del deporte, a instancia del secretario de estado, Miguel Cardenal, ya había resuelto con anterioridad (03/08/2016) que no se debía abrir expediente al presidente de la RFEF por dicho motivo. cabe recordar, a propósito de esto, que los miembros de este tribunal los nombra la comisión directiva del CSD, en parte, a propuesta del propio secretario de estado, en aquellos momentos, Miguel Cardenal.

Desencantado con sus resultados, Miguel Galán, que también perdió las elecciones a la presidencia de la Territorial de Madrid, confesó hace unas semanas en los medios de comunicación que abandonaba la batalla judicial que tanto tiempo y dinero le había costado. «No puedo seguir luchando para que otros se beneficien de mí. Va me he gastado 150.000 euros y sin Cardenal estoy solo. Se están aprovechando de mis querellas, les he hecho el trabajo sucio» (Diario AS, 6 de noviembre de 2016 y 4 de diciembre de 2016)».

Galán debe haber recuperado fuerzas no se sabe cómo pues no se explica de otra manera que a continuación abriera otro frente por los llamados casos Marino y Recreativo y una denuncia por el de Haití. Es fácil deducir quienes están tras todas acciones de Miguel Galán, al que han proporcionado informaciones verbales y documentales, y cobertura. Este precandidato ha sido denunciado por Ángel Villar por extorsión, coacciones, denuncia falsa y obstrucción a la justicia. Galán había pedido para retirar su querella una serie de insólitas exigencias: ser vicepresidente de la UEFA en el caso de que Villar se presentara a la presidencia, convertirse en vicepresidente primero de la RFEF, en el supuesto de que no la consiguiera … ¡y presidente de la RFEF si lo lograba! Eso amén de reclamar 240.000 euros y otras minucias como la de que Villar hablara con la Asociación Española de Futbolistas (AFE) para que esta retirara la querella contra él por un presunto delito de estafa, falsedad documental y un delito relativo al mercado y los consumidores estafa, y obtener una serie de prebendas para su propia asociación. Hay alguna que otra querella más de los alumnos de su Escuela de Entrenadores.

Jorge Pérez, ex secretario general de la RFEF, tampoco está libre de una investigación judicial por los llamados «casos Marino y Recreativo», al igual que Ángel Villar y otros dirigentes de la Real Federación Española de Fútbol en el número 1 de los de Majadahonda. No se entiende que ciertos personajes del fútbol y algunos medios de comunicación hayan magnificado con aviesas intenciones, y los intereses que todos conocemos, lo uno y silenciado lo otro. Todas esas acciones ponen en rotunda evidencia la existencia de una persecución perpetrada inicialmente hace mucho, que se ha mantenido en el tiempo y que se ha agudizado en la actualidad. Es decir que ha habido acoso y, en consecuencia, acosadores.

No hace falta ser un lince para advertir que tanta insistencia no tiene otro objetivo que el de tratar de conseguir por la vía judicial lo que nunca han podido lograr por la electoral y democrática, algo que persiguen infructuosamente desde hace 14 años. Esa persecución ha alcanzado su mayor intensidad en el actual proceso electoral con la presentación de tres acciones criminales y dos expedientes sancionadores falsos con la única intención de socavar el honor y crédito del presidente de la RFEF. Causa enorme estupor, desde el respeto debido a la discrepancia en la gestión deportiva, que a ellos se haya sumado un sector minoritario del fútbol que no valora los extraordinarios perjuicios que le han causado con esas acciones, ni contemplan estos actos carentes de toda ética como despreciables. Rayando el delito.

A la vista están, sin embargo, los catastróficos resultados que han obtenido.

Como consecuencia de la publicación de esta carta, Miguel Galán interpuso el 28 de febrero de 2017 denuncia ante la Comisión Electoral de la RFEF y posterior recurso ante el Tribunal Administrativo del Deporte (30-3-2017) como consecuencia de la resolución por silencio de la comisión. El 27 de abril de 2017 el TAD dictó resolución por la que se acordó declarar que esta carta suponía una infracción al deber de neutralidad que el art. 12.4 de la Orden ECD/2764/2015 impone a todos los órganos federativos.

Contra esta resolución se interpuso recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, que se resolvió mediante la Sentencia 495/2018, de 25 de julio, que desestimó íntegramente las pretensiones de los recurrentes. El posterior recurso de casación fue inadmitido mediante Providencia de 24 de enero de 2019 dictada por la Sala Tercera del Tribunal Supremo, contra la que se presentó recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional. El más alto tribunal admitió a trámite el recurso, y dictó finalmente la Sentencia 5/2021, de 25 de enero (ponente Excmo. Sr. D. Antonio Narváez Rodríguez) por la que desestimó íntegramente el amparo solicitado.

 


[1] https://www.cihefe.es/cuadernosdefutbol/2021/05/la-guerra-del-futbol-televisado-1996-y-la-primera-querella-contra-villar/

[2] https://www.20minutos.es/deportes/noticia/javier-tebas-apoya-jorge-perez-presidente-rfef-2665471/0/

[3] https://ecodiario.eleconomista.es/otros-deportes/noticias/7949505/11/16/Tebas-Jorge-Perez-es-el-candidato-idoneo-la-RFEF-se-ha-quedado-en-Cuentame.html

[4] https://as.com/futbol/2017/04/08/primera/1491602790_855727.html

[5] https://as.com/futbol/2017/04/28/primera/1493400461_296613.html




Historia de la acción benéfica: fútbol y toros, Elche (1923-1930)

Figura 1. Elche C.F. 1927 Fuente: Gambín, 2001

Figura 1. Elche C.F. 1927
Fuente: Gambín, 2001

Introducción

Sin duda, los primeros años del siglo XX son claves para el desarrollo de los seguros sociales en España tales como el seguro de enfermedad, de invalidez, de paro forzoso, vejez o maternidad; estos seguros, en el contexto de la beneficencia española, serán complementados por la generosidad de la sociedad de manera altruista y en relación con el ocio del momento: las corridas de toros, los partidos benéficos o las representaciones teatrales son un ejemplo de ello. El presente artículo tiene por objeto describir las acciones benéficas que realiza el Elche C.F. en el contexto local de la ciudad de Elche, así como mostrar las corridas de toros benéficas celebradas en el período de 1923-1930 dentro del contexto local de ocio. El periodo que transcurre entre 1923 y 1930 es un tiempo de transición en la historia de España en el que Primo de Rivera impulsa una política económica paternalista y de justicia social populista bajo el paraguas de la beneficencia provincial y municipal (Gómez, 2018:69-70).

Para el año 1923 el Elche C.F. ha ingresado en la Federación Valenciana de Fútbol y sus colores verde y blanco en su primera bandera “son ya un referente de unión entre sus aficionados” (Gambín, 2001:26-27), nace el Elche Football Club (ECF).

Corridas de toros y partidos benéficos en Elche

Las corridas de toros y los partidos benéficos de fútbol amenizan la ciudad, aportando ayudas para los más desfavorecidos. En 1924, el presidente del Elche comunica al semanario El Papagayo que dicha Sociedad Deportiva está organizando un partido de fútbol contra el Athletic de Valencia cuyo beneficio líquido se entregará al Asilo de Ancianos de la ciudad[1]; ese año será de gran interés la presencia del Real Madrid en la ciudad que acude a jugar dos partidos amistosos para la festividad de San Pedro (Gambín, 2001:34). Pronto, el Elche “se convierte en un símbolo identitario local de la una ciudad que crece y se sofistica durante la bonanza económica de los años veinte” (Monge, 2021:7).

En Mayo de 1925 juegan otro partido benéfico para el Hospital de la Cruz Roja (Gómez, 2020:151) la Real Sociedad de San Sebastián y el Club Natación[2]; ese mismo año se celebra un homenaje popular al equipo del Elche con una ofrenda de flores a la patrona en la Basílica de Santa María y se juega un partido ante el Rácing de Madrid (Gambín, 2001:38).

Figura 2. Nuevo campo de Altabix Fuente: Nueva Illice, 1926

Figura 2. Nuevo campo de Altabix
Fuente: Nueva Illice, 1926

El domingo 17 de Octubre de 1926 el Club inaugura “un campo propio en la partida de Altabix levantado por la generosidad de unos  las aportaciones económicas de otros para el disfrute de todo el pueblo” (Gambín, 2013:14).

Para socorrer a los soldados heridos o mutilados de África se anuncia una gran corrida de toros el 16 de Noviembre de 1924 a la que asistirán sus Majestades, los Reyes de España[3]; a primeros de Octubre de 1925 se organiza una magnífica becerrada a beneficio del ex matador de toros Julio Martínez (Templaíto)[4].

En Junio de 1925, el General Primo de Rivera visita Alicante; concurren el Alcalde y los señores de la Permanente, y el concejal, Diego Pascual Urbán:

“Al otro este bendito nombre (el de Elche), el General se reanimó y dijo: Elche, allí tengo yo una chispa. Nuestro alcalde replicó: “es cierto, mi general, y en este periódico puede ver V.E. la chispa de su ingenio”. El General desplegó entonces el último número de La Defensa, y entusiasmado leyó en voz alta aquel admirable, y, en cierto modo, profético pensamiento que estampó en el Álbum del Huerto del Cura. Admirado de su propia obra dijo: “esto lo escribí yo en el año 20”. Después, estrechando la mano del alcalde dijo: “yo pienso, yo quiero volver a Elche, donde tengo una palmera”. Era la chispa a la que el Jefe del Gobierno se había referido…”[5].

El Directorio en la ciudad no va a suponer un cambio profundo en la composición de la clase dominante, que continuó teniendo el poder político y una red clientelar local; los “nuevos hombres” de los que habla el semanario El Obrero seguirán sin resolver los problemas locales (Moreno, 1987:84).

Figura 3. Puerta principal del Asilo de San José Fuente: Levante, 1926; fotografía original de Tarí.

Figura 3. Puerta principal del Asilo de San José
Fuente: Levante, 1926; fotografía original de Tarí.

A beneficio del Hospital y el Asilo, el teniente de alcalde Francisco Quiles, articula una gran corrida de Toros prevista para el 18 de Octubre de 1925 y aplazada días después, en la que intervendrá la prensa local y figuras como Juanito Selva[6], Francisco Navarro y Miguel López Aroca[7]; finalmente, el 8 de Noviembre, se celebra el festejo y se adquieren los novillos que intervendrán y que pertenecen a la ganadería de la viuda de Sabino Flores de Peñascosa de Albacete; los toros asignados son el número 14 llamado “Cachirulo” de color negro, el número 25 de nombre “Graduñato” de color castaño, el número 30 tildado de “Sospechoso” de color negro y el número 33 “Tostón” de color negro[8]; en la plaza se forma con arena de colores el escudo de Elche y, debajo de él, el lema de la fiesta con la palabra Caridad; las señoritas Josefina Coquillat, Paquita Fenoll, María Alemañ y Conchita Grau desfilan seguidas de una representación del Ayuntamiento; la presidenta María Alemañ regala a los toreros una cigarrera de plata, una tabaquera de plata y unos gemelos de oro; el donativo total de la corrida asciende a 1.996,90 pesetas que se dividirán en dos partes de 996,90 pesetas para entregar a cada uno de los establecimientos beneficiados[9].

Respecto a la corrida de Toros en beneficio del Hospital y el Asilo aparece una noticia a modo de diálogo en Levante, que habla de la caridad que promueve estos acontecimientos refiriéndose a los “infelices beneficiados” y a unas pesetas “mitigadoras”; se habla de que lo consignado es “mezquino e insuficiente” habiendo dinero en el Ayuntamiento que pueda mejorar lo aportado; termina el artículo tratando la posición de la madre Superiora como “enarbolando la bandera de la piedad” y opinando sobre los organizadores del evento cuya recompensa será “el elogio incondicional de la Prensa, su aliada”[10].

Figura 4. Becerrada en la Plaza de toros de Elche, 1923 Fuente: Cátedra Pedro Ibarra – Colección José A. Carrasco Pacheco

Figura 4. Becerrada en la Plaza de toros de Elche, 1923
Fuente: Cátedra Pedro Ibarra – Colección José A. Carrasco Pacheco

Figura 5. Gran becerrada en la plaza de Toros de Elche, 12 Julio 1925 Fuente: Santiago Gambín, Cátedra Pedro Ibarra.

Figura 5. Gran becerrada en la plaza de Toros de Elche, 12 Julio 1925
Fuente: Santiago Gambín, Cátedra Pedro Ibarra.

La temporada 1926-1927 se inicia con el encuadre del equipo en el grupo A de la categoría regional; para 1928 el Elche es aceptado en la Federación Murciana lo que le permite participar en la Copa de España e inicia su primera gira al extranjero, rumbo a Orán (Gambín, 2013:14); para la temporada 1929-1930 los jugadores ya empiezan a cotizarse y se crean “unidades de reclutamiento” de socios en las sociedades ilicitanas (Gambín, 2001:49).

El 26 de Septiembre de 1926, tiene lugar otra “novillada de Beneficencia” a beneficio del Asilo de San José y el Santo Hospital patrocinada por el Ayuntamiento y organizada, de nuevo, por el teniente de alcalde Francisco Quiles Maciá, que es presidente de la Comisión de Beneficencia y Sanidad; este expone la conveniencia de su desarrollo en Agosto del mismo año[11]; los novillos pertenecen a las ganaderías de Celso Pellón y viuda de Romualdo Jiménez; el cartel de matadores se compone de “Román Muntaner, el Niño de la Alhambra, M. Mora que es paisano valiente y artista, y el madrileño Royaito”; las presidentas son “cuatro mozas rebosantes de juventud y simpatía”: Agripina Arronis, Ángeles Ferrández, Antonia Maciá y Asunción Brotons; sale a recoger la llave el caballista Jaime Torres Gomis[12].

María Rosa Gómez Martínez 

Universidad de Murcia

 

Fuentes y bibliografía

Semanarios y Actas Ayuntamiento

  • Amanecer
  • El Papagayo
  • Juventud
  • La Defensa
  • Levante
  • Acta 225, Sesión extraordinaria de 9 de Agosto de 1926

Publicaciones

  • Elche C.F. El valor de una historia. La fuerza de un sentimiento. https://www.elchecf.es/historia-ecf
  • Cátedra Pedro Ibarra – Universidad Miguel Hernández, Elche. http://www.elche.me
  • Gambín Hernández, Santiago (2001). 75 Aniversario. Historia del Elche C.F. (1922-1999). Elche: Excmo. Ayuntamiento de Eche y Caja de Elche.
  • Gambín Hernández, Santiago (2013). Hitos, mitos y leyendas del ELCHE C.F. Elche: Comisión organizadora 90 Aniversario ELCHE C.F.
  • Gómez Martínez, María Rosa (2018): Crónica de la pobreza. Orígenes de la Asistencia Social en una ciudad del mediterráneo. Elche, 1923-1930. Elche, Ed. Cátedra Pedro Ibarra – Universidad Miguel Hernández.
  • Gómez Martínez, M. R. (2020). Asamblea Local de Cruz Roja Española de Elche (1909-1930). Cultura de los Cuidados (Edición digital), 24 (57) 143-159. Recuperado de http://dx.doi.org/10.14198/cuid.2020.57.09
  • Monge Juárez, Mariano (2021). Industria y fútbol, historia social del ocio, Elche, 1896-1923, Cuadernos de fútbol: Primera revista de historia del fútbol español. Vol. 129, 1.
  • MORENO SAEZ, Francisco (1987): El movimiento obrero en Elche (1890-1931). Alicante, Instituto de Estudios “Juan Gil Albert”, Diputación Provincial de Alicante y Excmo. Ayuntamiento de Elche.

Índice de figuras

Figura 1. Elche C.F. 1927.

Figura 2. Nuevo campo de Altabix.

Figura 3. Puerta principal del Asilo de San José.

Figura 4. Becerrada en la Plaza de toros de Elche, 1923.

Figura 5. Gran becerrada en la Plaza de toros de Elche, 1925.

 


[1] Semanario El Papagayo, PH-350, Año II, Núm. 56 de 9 de Noviembre de 1924 y Semanario Nueva Illice, PH-74, Año XIII, Núm. 634 de 9 de Noviembre de 1924 (Archivo Histórico Municipal de Elche – AHME).

[2] Semanario Juventud, PH-42, Año I, Núm. 4 de 24 de Mayo de 1925  (AHME).

[3] Semanario La Defensa, PH-66, Año XIV, Núm. 683 de 16 de Noviembre de 1924  (AHME).

[4] Semanario Juventud, PH-42, Año I, Núm. 20 de 20 de Septiembre de 1925  (AHME).

[5] Semanario La Defensa, PH-66, Año XV, Núm. 711 de 7 de Junio de 1925 (AHME).

[6] Semanario Juventud, PH-42, Año I, Núm. 22 de 4 de Octubre de 1925, Núm. 23 de 11 de Octubre de 1925 y Semanario La Defensa, PH-66, Año XV, Núm. 727 de 4 de Octubre de 1925  (AHME).

[7] Semanario Levante, PH-45, Núm. 3 de 5 de Noviembre de 1925  (AHME).

[8] Semanario Juventud, PH-42, Año I, Núm. 25 de 25 de Octubre de 1925 (AHME).

[9] Semanario Juventud, PH-42, Año I, Núm. 26 de 1 de Noviembre de 1925 y Núm. 28 de 15 de Noviembre de 1925 (AHME).

[10] Semanario Levante, PH-45, Núm. 4 de 20 de Noviembre de 1925 (AHME).

[11] Acta 225, Sesión extraordinaria de 9 de Agosto de 1926, p.52 (AHME).

[12] Semanario Amanecer, PH-23, Año II, Núm. 45 de 26 de Septiembre de 1926 y Semanario La Defensa, PH-66, Año XVI, Núm. 774 de 19 de Septiembre de 1926 (AHME).




Luis Suárez Miramontes. 50 años de su último partido con España

El próximo día 12 de abril se cumplirán cinco décadas desde que el único Balón de Oro masculino nacido en nuestro país jugó su último partido internacional con la selección española.

Una trayectoria de 32 encuentros disputados -en tres ocasiones ejerció de capitán- más otros cinco de suplente y catorce goles marcados.

Suárez debutó un 30 de enero de 1957 contra Holanda, en encuentro amistoso disputado en el Estadio Santiago Bernabéu con victoria de España por cinco goles a uno. Arbitró el inglés Sr. Leafe, actuando como linieres los españoles Sr. Ortiz de Mendíbil y Sr. Caballero. España vistió con camiseta roja y pantalón azul. Para el recuerdo, la alineación: Ramallets, Orúe, Campanal II (capitán), Valero; Maguregui, Garay, Miguel, Kubala, Di Stéfano, Suárez y Gento. Junto con nuestro protagonista debutaron también Antonio Valero Yubero, del Sevilla FC, y Alfredo Di Stéfano Laulhe, del Real Madrid CF.

Cuando fue seleccionado para jugar ante Grecia en el que sería su partido de despedida con España, Suárez estaba a punto de cumplir los 37 años, hacía ya casi seis años que no había vuelto a ser llamado por el seleccionador. No jugaba desde el 15 de julio de 1966 cuando España se enfrentó a Suiza en el Mundial de Inglaterra. Ahora pertenecía a la Sampdoria italiana donde el entrenador Heriberto Herrera, que había sido compañero de selección con Suárez, no puso ningún inconveniente en permitir que el Niño de Oro pudiera despedirse de la selección. Nuestro mister Ladislao Kubala, para compensar la veteranía del gallego citó al madridista Santillana, que entonces tenía 19 años.

Este encuentro ante los helenos se disputaba en devolución al que se había celebrado en La Romareda de Zaragoza el 28 de octubre 1970 con victoria para España por 2-1, con goles de Luis y Quini.  En principio, el seleccionador informó a la Federación la relación de jugadores que se desplazarían a Grecia y que comprendía a los siguientes: Porteros: Iríbar y Reina, Defensas: Sol, Gallego, Tonono, De la Cruz y Jesús Martínez. Medios: Lora, Asensi, Marcial y Luis Suárez. Delanteros: Amancio, Aguilar, Quino, Gárate, Santillana y Rojo. Mientras tanto, se jugó la jornada de liga que correspondía al calendario,  resultando lesionados Amancio, Asensi y Jesús Martínez siendo sustituidos por Ufarte, Manolete e Hita, respectivamente. La prima establecida por ganar sería de cuarenta mil pesetas por jugador. De aquel partido de Zaragoza solo quedaban cinco jugadores: Iríbar, Sol, Gallego, Marcial y Gárate.

La expedición española partió hacia Salónica, haciendo escala en Macedonia, donde ya esperaba Luis Suárez. Fue presentado a sus compañeros ya que solo conocía por haber jugado con ellos anteriormente a Iríbar, Gallego y Ufarte. Suárez, que era una figura mítica en España, recogió la admiración del resto de la expedición, ídolo de la infancia de muchos de ellos.

Kubala dictaminó que si había penaltis, el lanzador sería Luis Suárez, y que los golpes francos serían para Marcial o Rojo, según fuera en la derecha o en la izquierda de la portería griega.

Por su parte, Grecia había ganado el mes anterior a Italia por 2-1, victoria que había supuesto una subida en el estado de ánimo tras la derrota anterior de febrero en casa ante Holanda (0-5).

En el estadio Kaftanzoglio, Suárez, que ejerció de capitán con el número diez en su camiseta, disputó los noventa minutos del encuentro concluyendo con empate a cero. Grecia pudo ganar pues le fue anulado un gol a Andoniadis a los 23 minutos.

Arbitró el yugoslavo Marijan Raus, acompañándole como linieres sus compatriotas Sparhoje y Gassac.

El seleccionador Ladislao Kubala cumplía su decimoquinto partido al frente de la selección presentando este once: IRIBAR, José Ángel Iríbar Cortajarena (Atlético de Bilbao); SOL, Juan Cruz Sol Oria (Valencia); TONONO, Antonio Alfonso Morales (Las Palmas); GALLEGO, Francisco Fernández Rodríguez (Barcelona); DE LA CRUZ, Jesús Antonio De la Cruz Gallego (Granada); MARCIAL, Manuel Pina Morales (Barcelona); SUÁREZ, Luis Suárez Miramontes (Sampdoria de Génova); MANOLETE,  Manuel Ríos Quintanilla (Deportivo de La Coruña); UFARTE, José Armando Ufarte Ventoso (Atlético de Madrid); QUINO, Joaquín Sierra Vallejo (Valencia); y ROJO, José Francisco Rojo Arroitia (Atlético de Bilbao).

En la segunda parte, HITA, Juan López Hita (Sevilla) sustituyó a Manolete; y  GÁRATE, José Eulogio Gárate Ormaechea (Atlético de Madrid), entró en lugar de Rojo. Y en el minuto 72,  LORA, Enrique Lora Millán (Sevilla) reemplazó a Quino.

En el banquillo quedaron REINA, Miguel Reina Santos (Barcelona); AGUILAR, Francisco Javier Aguilar García (Real Madrid); y SANTILLANA, Carlos Alonso González (Real Madrid).

Para De la Cruz supuso su debut con la selección; posteriormente jugó en otras cinco ocasiones con España.

Curiosamente, Suárez se alineó entre un jugador del Barcelona (Marcial) y otro del Deportivo de La Coruña (Manolete). Las dos camisetas de los equipos españoles que había vestido Don Luis.

Grecia, por su parte, presentó a Hristidis, Dimitriou, Synetopoulos, Nalmpantis; Toskas, Nikolaidis (Paridis, 72 minutos), Eleftherakis, Papaioannou (c), Koudas, Antoniadis y Pomonis (Kritikopoulos, 60 minutos).

Hasta Abril de 1972, “Luisito” Suárez había jugado estos encuentros con España:

Partido número 1: 30-1-1957. España, 5 – Holanda, 1:

Ramallets, Orúe, Campanal, Valero (debutante), Maguregui, Garay, Miguel, Kubala, Di Stéfano (debutante), Luis Suárez (debutante) y Gento.

Partido número 2: 10-3-1957. España, 2 – Suiza, 2.

Ramallets, Orúe, Heriberto Herrera (debutante), Canito (debutante), Maguregui, Garay, Miguel, Kubala, Di Stéfano, Luis Suárez (1 gol) y Gento.

Partido número 3: 31-3-1957. Bélgica, 0 – España, 5.

Ramallets, Olivella (debutante), Campanal, Garay, Maguregui, Zárraga, Miguel, Mateos (debutante), Di Stéfano, Luis Suárez (2 goles) y Gento.

Partido número 4: 8-5-1957. Escocia, 4 – España, 4.

Ramallets, Olivella, Campanal, Garay, Vergés (debutante), Zárraga, Miguel, Kubala, Di Stéfano, Luis Suárez (1 gol) y Gento.

Partido número 5: 6-11-1957. España, 3 – Turquía, 0.

Ramallets, Quincoces II, Garay, Segarra, Santisteban (debutante), Zárraga, Miguel, Kubala, Di Stéfano, Rial (sustituido por Luis Suárez a los 46 minutos) y Gento.

Partido número 6: 24-11-1957. Suiza, 1 – España, 4.

Carmelo, Quincoces II, Garay, Segarra, Santisteban, Zárraga, Miguel, Kubala, Di Stéfano, Luis Suárez y Gento.

Partido número 7: 13-3-1958. Francia, 2- España, 2.

Carmelo, Quincoces II, Garay, Callejo (debutante), Santisteban, Zárraga, Miguel, Kubala, Di Stéfano, Luis Suárez (1 gol) y Collar.

Partido número 8: 19-3-1958. Alemania, 2 – España, 0.

Carmelo, Quincoces II, Garay, Callejo, Santisteban, Gensana, Miguel, Kubala, Di Stéfano, Luis Suárez y Collar.

Partido número 9: 15-10-1958. España, 6 – Irlanda del Norte, 2.

Alonso, Quincoces II, Santamaría, Rafael Lesmes, Santisteban, Zárraga, J. Tejada, Kubala, Di Stefano, Luis Suárez (1 gol) y Gento.

Partido número 10: 28-2-1959. Italia, 1 – España, 1.

Alonso, Quincoces II, Santamaría, Segarra, Santisteban, Gensana, J. Tejada, Kubala, Di Stefano, Luis Suárez y Gento.

Partido número 11: 28-6-1959. Polonia, 2 – España, 4.

Ramallets, Olivella, Garay, Gracia (debutante), Segarra, Gensana, J. Tejada, Mateos, Di Stefano, Luis Suárez (2 goles) y Gento.

Partido número 12: 14-10-1959. España, 3 – Polonia, 0.

Ramallets, Olivella, Garay, Gracia, Segarra, Gensana, J. Tejada, Kubala, Di Stefano, Luis Suárez y Gento.

Partido número 13: 22-11-1959. España, 6 – Austria, 3.

Ramallets, Mestre (debutante), Garay, Gracia, Segarra, Gensana, Arteche, Eulogio Martínez (debutante), (Mateos, 77’), Di Stéfano, Luis Suárez (2 goles) y Gento.

Partido número 14: 17-12-1959. Francia, 4 – España, 3.

Ramallets, Olivella, Garay, Gracia, Vergés, Segarra, Arteche (Mateos), Kubala (Eulogio Martínez 46’), Di Stéfano, Luis Suárez (1 gol) y Gento.

Paretido número 15: 13-3-1960. España, 3 – Italia, 1.

Ramallets, Olivella, Garay, Gracia, Segarra, Gensana (Vergés 46’), Jesús Herrera (debutante), Eulogio Martínez, Di Stéfano, Luis Suárez y Gento.

Partido número 16: 10-7-1960. Perú, 1 – España, 3.

Ramallets, Rivilla (debutante), Garay (Santamaría 46’) Pachín, Vergés, Segarra, J. Tejada (Pereda 46’), Luis Suárez (2 goles), Di Stéfano, Peiró (Eulogio Martínez 65’) y Collar.

Partido número 17: 14-7-1960. Chile, 0 – España, 4.

Ramallets, Rivilla, Garay, Alvarito (debutante), Vergés (Vidal, debutante 46’), Segarra, Pereda, Eulogio Martínez, Di Stéfano (Tejada 75’), Luis Suárez y Collar.

Partido número 18: 17-7-1960. Chile, 1 – España, 4.

Ramallets (Araquistáin, debutante 46’), Rivilla, Garay, (Santamaría, 46’), Pachín, Segarra (Vidal, 46’), Vergés, Pereda, Luis Suárez (Eulogio Martínez 46’), Di Stéfano, Peiró y Collar.

Partido número 19: 24-7-1960. Argentina, 2 – España, 0.

Ramallets, Rivilla, Garay (Santamaría 46’), Alvarito, Vergés, Segarra, Pereda, Luis Suárez, Di Stéfano, Peiró y Collar.

Partido número 20: 26-10-1960. Inglaterra, 4 – España, 2.

Ramallets, Marquitos, Santamaría, Gracia, Vergés, Ruiz Sosa (debutante), Mateos, Del Sol, Di Stéfano, Luis Suárez (1 gol) y Gento.

Partido número 21: 30-10-1960. Austria, 3 – España, 0.

Ramallets (Araquistáin 85’), Rivilla, Santamaría (Garay 46’), Gracia, Ruiz Sosa, Del Sol, Pereda, Mateos (Chuzo, debutante 42’), Di Stéfano, Luis Suárez y Gento.

Partido número 22: 19-4-1962. País de Gales, 1 – España, 2.

Ramallets, Foncho (debutante), Santamaría, Calleja (debutante), Zoco (debutante), Gensana, Aguirre (debutante), Del Sol, Di Stéfano, Luis Suárez y Gento.

Partido número 23: 31-5-1962.Checoslovaquia, 1 – España, 0.

Carmelo, Rivilla, Santamaría, Reija (debutante), Segarra, Garay, Del Sol, Eulogio Martínez, Puskas, Luis Suárez y Gento.

Partido número 24: 3-6-1962. Méjico, 0 – España, 1.

Carmelo, Rodri (debutante), Santamaría, Gracia, Vergés, Pachín, Del Sol, Peiró, Puskas, Luis Suárez y Gento.

Partido número 25: 30-10-1963. Irlanda del Norte, 0 – España, 1.

Pepín (debutante), Rivilla, Olivella, Reija, Zoco, Félix Ruiz, Pereda, Del Sol, Zaldúa, Luis Suárez y Gento.

Partido número 26: 17-6-1964. España, 2 – Hungría, 1.

Iríbar, Rivilla, Olivella, Calleja, Zoco, Fusté, Amancio, Pereda, Marcelino, Luis Suárez y Lapetra.

Partido número 27: 21-6-1964. España, 2 – URSS, 1.

Iríbar, Rivilla, Olivella, Calleja, Zoco, Fusté, Amancio, Pereda, Marcelino, Luis Suárez y Lapetra.

Partido número 28: 27-10-1965. España, 4 – Irlanda, 1.

Betancort (debutante), Rivilla, Olivella, Reija, Glaria, Zoco, Ufarte, Pereda, Marcelino, Luis Suárez y Lapetra.

Partido número 29: 10-11-1965. Irlanda, 0 – España, 1.

Betancort, Rivilla, Olivella, Reija, Glaría, Zoco, Ufarte, Pereda, Marcelino, Luis Suárez y Lapetra.

Partido número 30: 13-7-1966. Argentina, 2 – España, 1.

Iríbar, Sanchís, Gallego (debutante), Eladio, Pirri (debutante), Zoco, Ufarte, Del Sol, Peiró, Luis Suárez y Gento.

Partido número 31: 15-7-1966. Suiza, 1 – España, 2.

Iríbar, Sanchís, Gallego, Reija, Pirri, Zoco, Amancio, Del Sol, Peiró, Luis Suárez y Gento.

Partido número 32, 12-4-1972, ya detallado contra Grecia.

Fue suplente en estos partidos:

2-4-1961: España, 2 – Francia, 0.

18-5-1961: España, 1 – Gales, 1.

6-6-1962: Brasil, 2 – España, 1.

23-6-1966: España, 1 – Uruguay, 1.

20-7-1966: Alemania Federal, 2 – España, 1.

A modo de resumidísima trayectoria deportiva, que requeriría un amplísimo dossier, Luis Suárez (La Coruña, 2 de mayo de 1935) inició su carrera deportiva en el Deportivo de La Coruña, desde donde llegó al F.C. Barcelona permaneciendo siete temporadas. Con los azulgranas conquistó dos ligas, dos copas de España y dos Copas de Ferias. En 1961 fichó por el Inter de Milán donde ganó tres Ligas y las Copas de Europa de 1964 y 1965. Con España triunfó con la Eurocopa de 1964. Y entre 1970 y 1973 estuvo en la plantilla de la Sampdoria de Génova. Fue el ganador del Balón de Oro en 1960; del Balón de Plata en 1961 y 1964, y del de Bronce del año 1965.

Como entrenador dirigió a varios equipos de España e Italia (entre ellos, a Inter, Sampdoria, Spal, Como, Cagliari, Deportivo de La Coruña, Albacete), siendo seleccionador de España Sub 21 desde 1980 a 1988, y de la absoluta desde 1988 hasta 1991.

Un libro relató su vida deportiva, escrito por Xan Fraga y titulado “Luis Suárez, Fútbol de Seda”.

Escribimos este artículo en reconocimiento a una de las máximas figuras del fútbol español e internacional de todos los tiempos.




La Copa Anís de la Asturiana, el gran hito del Club Deportivo Soledad

CD Soledad, 2 de julio de 1944 (El deporte en la barriada de la soledad, 1987)

CD Soledad, 2 de julio de 1944 (El deporte en la barriada de la soledad, 1987)

La instantánea que encabeza este artículo corresponde a la entrega del trofeo para el equipo campeón de la Copa Anís de la Asturiana, torneo disputado en Mallorca entre marzo y junio de 1944. La imagen encarna, con un espontáneo toque añadido de simpatía y humor, la esencia del fútbol humilde en nuestro país: vemos a los componentes del equipo campeón posando con el trofeo de la casa licorera en cuestión, más un obsequio inesperado: una botella de regalo para cada uno de ellos. Una gratificación doblemente significativa, ya que en esas categorías el fútbol era totalmente amateur y los jugadores cobraban poco o nada.

El club en cuestión es el Club Deportivo Soledad, de Palma (Mallorca, Islas Baleares), el que fuera durante décadas el más importante representante de la popular barriada palmesana y uno de los equipos de mayor tradición y trayectoria histórica de la capital balear, lamentablemente desaparecido. La foto cobra mayor importancia al tratarse de uno de los pocos triunfos del equipo palmesano y que, dadas las circunstancias, acabó por convertirse en una de sus victorias más recordadas; pírrica y modesta, pero alegre y simpática.

Dicho torneo representa la satisfacción de las pequeñas victorias para los equipos humildes, faltos de grandes resultados, por lo que la llegada de éstas siempre representaba un acontecimiento mayúsculo que se saboreaba doblemente. El paso del tiempo, la intrascendencia de estos torneos y la desaparición de sus protagonistas acabó por borrar su recuerdo, aunque en este caso el triunfo fue vivido con tanta satisfacción que pervivió con una fuerza excepcional, quizás por lo llamativo de una imagen con los jugadores y botella de anís en ristre, algo que le confiere un plus entrañable, a la par que nostálgico por un tiempo ya perdido, a lo cual hay que añadir la desaparición del club ganador en 2010.

Antecedentes

Calendario Copa Anís de la Asturiana (Baleares, 9 de marzo de 1944)

Calendario Copa Anís de la Asturiana (Baleares, 9 de marzo de 1944)

El 9 de marzo de 1944 se publicaba el calendario completo de la Liga Mallorca, torneo que se preveía jugar en la isla desde el 12 de marzo al 4 de junio de dicho año.[1] Participarían un total de seis equipos: el mencionado CD Soledad (Palma), CD Manacor, CD España (Llucmajor) y UD Poblense (Sa Pobla), además de los equipos reservas del CD Constancia (Inca) y CD Atlético Baleares (Palma).

Esta competición, de carácter oficial, se disputaba en Mallorca desde la temporada 1935-36 durante la segunda mitad de la temporada y servía para llenar fechas de competición a medida que la afición por el deporte rey crecía y era necesario dar espectáculo a los aficionados, un vez acabado el campeonato regional que solía disputarse durante la primera mitad de la temporada. Desde su creación, la Liga Mallorca solían disputarla los principales equipos de la isla y no estaba sujeta a ascensos y descensos, pues solía tener una única división y la participación dependía de las necesidades de los equipos de temporada a temporada.

La información periodística, con todo, no era exacta: realmente el torneo era dúplice y los partidos a disputar servirían para resolver dos competiciones. Por un lado, la mencionada Liga Mallorca, sin el concurso de los dos equipos de reservas mencionado (12 partidos en total), y por otro lado la Copa Anís de la Asturiana, con el añadido de éstos (30 partidos). Esta práctica era usual en la época y servía para disputar simultáneamente más de un torneo utilizando fechas similares de competición, aprovechando así algún patrocinio inesperado como debía ser este caso.

Como queda dicho, el torneo empezó el 12 de marzo de 1944. Mientras en la Liga Mallorca se disputaba un partido semanal, para la Copa Anís de la Asturiana se disputaban dos; de este modo se esperaba que ambas competiciones se resolvieran al mismo tiempo, compensando la diferencia de partidos por jugarse en uno y otro torneo. Durante su disputa tuvieron lugar los habituales aplazamientos de partidos, lo cual hizo que ambos torneos acabasen algo más tarde de lo esperado.

Desarrollo del torneo

UD Poblense, entre 1940 y 1942 (80 anys de futbol a sa Pobla, 1922-2002)

UD Poblense, entre 1940 y 1942 (80 anys de futbol a sa Pobla, 1922-2002)

Al finalizar la primera vuelta, en el torneo de Liga Mallorca la UD Poblense llevaba una marcha imparable: tres victorias en otros tantos partidos y 6 puntos. Le seguía el España, con 3 puntos, Soledad con 2 y Manacor con 1. A falta de tres partidos por jugar por cada equipo parecía que el equipo de Sa Pobla se llevaría holgadamente el torneo, pero la competición se entrelazaba con otra y, por tanto, había implicadas otras motivaciones.

Mientras tanto, en la Copa Anís de la Asturiana la situación era bien distinta. El reserva del Constancia lideraba la tabla con 7 puntos, seguido del Poblense con 6. Seguían España y Manacor con 5, luego el reserva del At. Baleares con 4 y cerrando la tabla el Soledad, con solo 3 puntos. Aquí no había un líder claro y la clasificación estaba mucho más apretada, los equipos debían jugar cinco jornadas y cualquiera podía ganar; como así fue.

Las circunstancias de la Copa Anís de la Asturiana, a la postre mucho más emocionante, mantuvieron viva de rebote la Liga Mallorca, cuyo desarrollo acabó también por apretarse hasta culminar ambos torneos con un final impensable a media competición. En apariencia sólo una cosa parecía clara: el Soledad era el peor equipo entre ambos torneos y parecía descartado para cualquier aspiración; nada más lejos de la realidad.

CD Manacor, principios de los años 40 (archivo Joan Caldentey Brunet)

CD Manacor, principios de los años 40 (archivo Joan Caldentey Brunet)

Durante la segunda vuelta el giro de los acontecimientos fue total. En el último partido de la Liga Mallorca, el España venció al Manacor (1-0) y logró empatar con el que fuera líder inalcanzable, el Poblense. Ambos acabaron con 7 puntos, seguidos del Soledad con 6 y Manacor con 4. Con el average particular empatado, tuvo que jugarse un desempate para dilucidar el campeón, que ganó el España (6-3) y se proclamó campeón del torneo. De esta manera el CD España hizo triplete, pues ya había ganado el campeonato de Primera Regional de Mallorca y luego el Campeonato de Baleares frente al CD Alayor (Menorca). Mientras tanto, el Soledad había remontado posiciones, aunque llegó tarde para tener opciones de victoria; no así en el otro torneo, como veremos.

Clasificación J G E P GF GC Pts.
CD España (Llucmajor) 6 3 1 2 7 7 7
UD Poblense (Sa Pobla) 6 3 1 2 10 9 7
CD Soledad (Palma) 6 3 0 3 13 8 6
CD Manacor 6 1 2 3 2 8 4

Desempate (25 junio): España 6 – 3 Poblense

Mientras tanto, la segunda vuelta de la Copa Anís de la Asturiana fue todavía más sorprendente. El mencionado partido España-Manacor era clave para definir el ganador final… que no se encontraba en el terreno del juego. Después de una remontada espectacular el Soledad había pasado del farolillo rojo a ostentar el coliderato con el Manacor, empatados a 11 puntos, pero éstos tenían pendiente el partido mencionado y un empate le bastaba para ser campeones. El España contaba con 9 puntos y se encontraba sin opciones, porque de ganar se daría un triple empate a 11 puntos que no les beneficiaba; pero salieron a ganar por sus opciones en la Liga Mallorca.

CD España, temporada 1943-44 (50 años de fútbol lluchmayorense)

CD España, temporada 1943-44 (50 años de fútbol lluchmayorense)

Al final, la victoria ya comentada del España sobre el Manacor dejó la Copa Anís de la Asturiana con un triple empate en cabeza. La clasificación final fue: Soledad, Manacor y España, 11 puntos; el Poblense con 10; y cerrando los reservas del Constancia con 9 y del At. Baleares con 8. El campeón fue el CD Soledad, gracias a su mejor coeficiente en los enfrentamientos directos. La segunda vuelta del equipo soledista había sido espectacular, pasando de la cola a campeón en la Copa Anís de la Asturiana y quedando a solo un punto del triunfo en la Liga Mallorca.

Las peculiares características de la disputa de un doble torneo, cuyas dinámicas se influenciaban mutuamente, ayudaron a un desenlace tan apretado como imprevisible.

Clasificación J G E P GF GC Pts.
CD Soledad 10 5 1 4 25 15 11
CD Manacor 10 4 3 3 17 14 11
CD España (Llucmajor) 10 4 3 3 15 15 11
UD Poblense 10 4 2 4 22 20 10
CD Constancia (reserva) 10 3 3 4 16 30 9
CD Atlético Baleares (reserva) 10 3 2 5 22 23 8

El 2 de julio de 1944 se celebró en el campo de Son Canals, propiedad del At. Baleares, la entrega oficial del trofeo. Se disputó un partido entre el equipo campeón y el reserva del At. Baleares, ganado por los soledistas por 3-0. Luego el once campeón recibió el trofeo en las circunstancias antes comentadas, cuya imagen volvemos a reproducir.

CD Soledad, 2 de julio de 1944 (El deporte en la barriada de la soledad, 1987)

CD Soledad, 2 de julio de 1944 (El deporte en la barriada de la soledad, 1987)

La plantilla de aquel equipo la formaban (de pie) Josep Oliver, Ramis (Morgan), Galera, Miquel Diego, Paco Giménez y Biel Rosselló; y (agachados) Quer, Tomeu Rosselló, Bernardí Vidal, Pau Prats i Pep Caimari. A la derecha, de pie y vestido de calle, no encontramos al entrenador sino a Juan Cabrera Chapa, representante del Anís de la Asturiana en Baleares y quien seguramente hizo entrega de la copa en nombre de la popular empresa licorera.

La foto plasma la entrega de un torneo menor e intrascendente, pues el torneo oficial era la Liga Mallorca y aún tenia mucho menos valor que el campeonato regional. Pero fue recordada como una de las grandes victorias del CD Soledad: un pequeño oasis en una trayectoria sin apenas victorias ni alegrías destacables, con una sonrisa de oreja a oreja y un dulce sabor a anís.

Por otro lado, la fórmula ensayada de la doble competición acabó gustando, y a partir de la temporada siguiente se creó una nueva competición: la Copa Presidente de la Federación, torneo de carácter anual, disputado con los mismos equipos y fechas de la Primera Regional de Mallorca más los filiales de equipos en categorías superiores. Se disputó de la temporada 1944-45 a la 1948-49.

Comentarios

Hace casi ocho décadas años de la disputa de una copa que congregó a los mejores equipos de Mallorca a nivel regional, salvo los presentes en categorías superiores: CD Constancia (en Segunda División), y RCD Mallorca y CD Atlético Baleares (en Tercera). Pese al tiempo transcurrido, todos ellos siguen existiendo y son instituciones de referencia en sus respectivas localidades. Todos, menos el campeón: el CD Soledad ¿qué ocurrió después con este equipo? ¿qué representó en su momento en el fútbol balear? Y sobre todo ¿por qué le dio tanta importancia a un trofeo aislado, donado por una casa licorera?

Inicios del CD Soledad

Nuestro club protagonista nació en la barriada homónima de la capital balear. El núcleo poblacional había nacido a finales del siglo XVI como un pequeño arrabal de carácter agrario, alrededor de un convento de la Orden de los Mínimos (luego convertido en iglesia parroquial del naciente núcleo, a raíz de la Desamortización de 1835), y que desde mediados del siglo XIX adquirió un carácter industrial que disparó su crecimiento y le confirió un marcado aire obrero y popular. Ya en pleno siglo XX, convertido en un arrabal totalmente industrial y en pleno crecimiento demográfico, aunque todavía separado del casco urbano de Palma, nació el club.

Constitución del CD Soledad (Última Hora, 18 de diciembre de 1930)

Constitución del CD Soledad (Última Hora, 18 de diciembre de 1930)

El 17 de diciembre de 1930 fue constituido oficialmente en junta general de socios el Club Deportivo Soledad.[2] [3] Su primer presidente fue Pascual Maroto Muñoz, aunque el equipo ya había disputado algunos partidos durante el año en curso. Poco después oficializó su situación en el Registro de Asociaciones del Gobierno Civil, requisito indispensable para poder federarse y disputar competiciones oficiales.[4] Esa misma temporada, la 1930-31, se federó en la Federación Balear de Fútbol. Su terreno de juego era Es Colomeret (o Son Perelló, según las fuentes) y su indumentaria se componía de camiseta azulgrana y pantalón negro (después azul), seguramente por influencia del FC Barcelona, aunque no podemos asegurar el motivo exacto de tal elección.

Fue inicialmente un equipo más y ya existían otros equipos de fútbol como el Rapid FC, Libertad FC o CD Republicano, conjuntos que por su nombre tenían un marcado perfil reivindicativo al identificarse intensamente con el tejido social del que provenían y al que representaban.

Inicialmente su local social estuvo en la calle de Manacor, 131 (entonces Once de Febrero, 405) en la manzana situada entre las calles Regal y Antoni Rosselló Nadal,[5] aunque luego fue cambiando de ubicación y se ubicó definitivamente hacia 1950 en el casino sito en la plaza parroquial,[6] esquina con el templo dedicado a la Virgen de la Soledad (de ahí el nombre del barrio). Aún puede verse hoy a un lado del portal del antiguo casino, hoy convertido en bar, una añeja placa con el nombre y el escudo del club.

Placa del antiguo local social del CD Soledad (archivo del autor)

Placa del antiguo local social del CD Soledad (archivo del autor)

Pronto el CD Soledad acabó por ser la sociedad deportiva de referencia de toda la barriada y predominó tanto social como deportivamente sobre el resto de los equipos de fútbol del barrio. Sin duda, el hecho de portar el nombre del barrio fue clave para forjar su representatividad.

Primeros años y desarrollo

Desde 1931 el CD Soledad compitió en el campeonato regional de Mallorca organizado por la Federación Balear y poco a poco se convirtió en uno de los clubes más fuertes de la ciudad, más allá de su barrio de origen. Su andadura empezó en la Tercera categoría de dicho campeonato, pronto ascendió a Segunda y encadenó varias temporadas como subcampeón de categoría, quedando a las puertas del ascenso a Primera de 1934 a 1936.

Durante la Guerra Civil la competición local se mantuvo y logró ascender a Primera en la temporada 1936-37, jugando durante dos temporadas. Logró ser tercero en la temporada 1938-39, su resultado más brillante; pero de manera tan inexplicable como oscura fue descendido de categoría esa misma temporada. En 1940, con la conversión del campeonato regional en división regional del campeonato de Liga española fue un asiduo de la Primera Regional.

CD Soledad, temporada 1933-34 (Ecos Deportivos, 29 de octubre de 1934)

CD Soledad, temporada 1933-34 (Ecos Deportivos, 29 de octubre de 1934)

En plena posguerra el CD Soledad siguió creciendo y se consolidó como un referente del fútbol palmesano. Con la desaparición de otros clubes insignes de la capital, como el Mediterráneo FC (1940) y el Athletic FC (1942), el CD Soledad se convirtió en el tercer equipo de la ciudad en antigüedad, solo por detrás de Mallorca y Atlético Baleares; también crecía en cuanto a masa social y nivel deportivo, aunque muy lejos aún de los dos grandes clubes. A pesar de intentarlo, el equipo se encontraba esos años con un “techo de cristal” infranqueable: durante quince temporadas seguidas en Primera Regional solía quedar muy bien clasificado (segundo o tercero), pero nunca alcanzaba el primer puesto que daba derecho a promocionar a Tercera División. En estas circunstancias llegó el pírrico triunfo de la Copa Anís de la Asturiana, que vino a paliar una situación de decepción permanente por un salto cualitativo al que el equipo optaba año tras año, pero que parecía no llegar nunca.

Años de esplendor

Por fin, en la temporada 1954-55 consiguió el ansiado ascenso a Tercera División. Entonces el equipo “explotó”, por fin, y dejó de ser un simple equipo de barrio. Llegaron sus mejores años, con un rendimiento ascendente temporada tras temporada y con la añadidura de poder enfrentarse en dicha categoría a los mejores equipos de las Baleares, entre ellos el mismísimo RCD Mallorca, que transitó por Tercera División entre 1954 y 1959. Fruto de su crecimiento, en 1959 se trasladó a un nuevo campo: Son Malferit, de titularidad municipal.

Su potencial creció de tal manera que en los años 60 llegó a ser un conjunto temible en Tercera División y uno de los equipos más poderosos del fútbol balear, capaz de tratar de tú a tú a cualquier rival. En las temporadas 1960-61 y 1964-65 quedó tercero en su grupo, quedando a un paso de jugar la fase de ascenso a Segunda División que jugaban los dos primeros. Además, en la temporada 1963-64 se hizo con la Copa Uruguay,[7] torneo de singular importancia jugado en Baleares durante los años 50 y 60. Entonces el CD Soledad era considerado uno de los grandes equipos de Mallorca, capaz de vencer a cualquiera.

CD Soledad, temporada 1963-64 y vencedor de la Copa Uruguay (futbolbalear.es)

CD Soledad, temporada 1963-64 y vencedor de la Copa Uruguay (futbolbalear.es)

Sin embargo, a finales de los años 60 su potencia empezó a flaquear. El barrio de la Soledad empezaba a transformarse a marchas forzadas, engullido por el casco urbano, la desindustrialización progresiva, el cambio de gustos y aficiones, los nuevos residentes… todo hizo que el barrio cambiara a marchas forzadas y el club, antaño fuerte y poderoso, empezara a flaquear social y deportivamente.

A todo ello hay que añadir un factor estrictamente deportivo: la construcción en sus aledaños del nuevo terreno de juego del CD Atlético Baleares: el Estadi Balear. Éste era el segundo equipo de la ciudad y su afición era muy similar en cuanto a extracción social a la del CD Soledad, de carácter humilde y trabajador, pero que había logrado tradicionalmente mejores resultados deportivos. Esto supuso una competencia que, gradualmente, fue mermando a los soledistas potencial y afición.

Años de humildad

En 1970 el CD Soledad perdió la categoría y volvió a categorías regionales. No se recuperó y su potencial fue quedando reducido al de un club más de barrio (tal como fue en sus inicios) durante los años 70, 80 y 90. Sus años de gloria habían acabado y el conjunto azulgrana se redimensionó, potenciando su fútbol base (que eso sí, llegó a tener un peso considerable) e incluso llegó a tener fútbol femenino en dos breves etapas (1970-71 y 2005-07), sobreviviendo desde entonces como un club pequeño y humilde, tanto como el barrio que le vio nacer. Durante varias décadas basculó entre Primera Regional y Regional Preferente, y solo en la temporada 1997-98 logró volver a asomar la cabeza en Tercera División; pero no pudo aguantar el ritmo y descendió esa misma temporada.

CD Soledad, temporada 1989-90 (Gran Enciclopèdia de Mallorca)

CD Soledad, temporada 1989-90 (Gran Enciclopèdia de Mallorca)

En 2004 cayó hasta Segunda Regional, entonces séptimo escalón de la competición nacional y muy lejos del tercer escalón que ostentó entre 1955 y 1970, cuando militó brillantemente en Tercera División. Pudo ser un bache puntual, soslayable como otros anteriores; pero fue el inicio de una deriva que acabó con la veterana entidad, debido a una serie de iniciativas desacertadas que precipitaron en pocos años la desaparición del club.

Últimos años. Auge y esperanza

En 2005 el club llegó a un acuerdo de fusión con el CD Paguera, entidad del municipio vecino de Calviá, que acababa de lograr el ascenso a Tercera División.[8] En realidad, fue una fusión por absorción del Soledad sobre el Paguera porque el club soledista mantuvo escudo y colores intactos, continuó jugando en su campo y obtuvo la plaza en Tercera División del CD Paguera, cuya masa social era en comparación muy reducida. Además de heredar su equipo femenino, situado en Primera Nacional (segundo nivel de competición), entonces uno de los más potentes de la isla. El club modificó su nombre por CD Soledad-Paguera, pero solamente durante una temporada. A priori, una operación redonda y el club volvía a Tercera División en un proceso que, después de todo, le permitía mantener sus señas de identidad.

En la siguiente temporada (2005-06) el equipo perdería la categoría; pero perseveró, y en la siguiente recuperó la Tercera División (esta vez sí, por méritos deportivos), aunque desmanteló el equipo femenino. En la temporada 2007-08 logró mantenerse con apuros, y la 2008-09 fue brillante: quedó quinto clasificado, rozando la fase de promoción a Segunda División B. El club mantenía una ilusionante línea ascendente y año tras año incrementaba su potencial, su nombre volvía a sonar con fuerza y recordaba aquel conjunto temible de los gloriosos años 50 y 60. Así cumpliría ocho décadas de vida con las mejores expectativas de futuro.

CD Soledad, temporada 2008-09 (futbolbalear.es)

CD Soledad, temporada 2008-09 (futbolbalear.es)

Caída y desaparición

Sin embargo, esta progresión llevaba aparejada una realidad preocupante a nivel institucional. Desde la fusión de 2005, los rectores del club apostaban por una dinámica de gasto excesivo y descontrolado que incrementaba la deuda de manera alarmante año tras año, hasta poner en riesgo la supervivencia del propio club. Esta política, a todas luces inviable, era efectiva a corto plazo gracias a los buenos resultados deportivos; además, a nadie le parecía mal que alguien hiciera lo posible para que el CD Soledad reverdeciera viejos laureles y volviera a ocupar un lugar de privilegio… hasta que el agujero económico fue tal que ni los éxitos deportivos sirvieron. Empezó el goteo de atrasos, denuncias, morosidades e impagos que no hacía presagiar nada bueno.

Al acabar la temporada 2008-09 y a pesar de su excelente papel, el CD Soledad fue descendido de categoría por impagos. En la temporada 2009-10, pese a unas dificultades económicas más que evidentes, se consiguió jugar la fase de ascenso a Tercera… pero esta vez salió cruz y no se ascendió. Ya no había pretextos para seguir, el modesto club no podía hacer frente a la deuda (que incluso acumulaba partidas de la temporada anterior) y el 29 de junio de 2010 presentaba su baja definitiva. Después de 80 años de historia, el Club Deportivo Soledad desapareció.

Escudo del Club Deportivo Soledad

Escudo del Club Deportivo Soledad

Epílogo

Después de su desaparición se creó el CD Soledad Atlético, un nuevo club heredero del anterior y con sus mismos signos de identidad, pese a ser sociedades totalmente diferentes. El nuevo club empezó de cero, limpio de deudas, y en 2013 alcanzó la Primera Regional con dos ascensos en tres temporadas.

Pero entonces surgieron problemas para seguir jugando en su campo de Son Malferit, donde jugaba desde 1959: fue vendido por el Ayuntamiento de Palma a la Federació de Futbol de les Illes Balears (FFIB) para construir allí su nueva sede y reformar el terreno de juego. Entonces el inquilino principal pasó a ser el CD Atlético Baleares, quien pactó con la FFIB parte de la reforma del campo aprovechando su mayor músculo financiero, y el Soledad Atlético quedó relegado a un segundo plano. Esto estancó su progresión deportiva.

En la temporada 2015-16 el CD Soledad Atlético se fusionó con el CD Montuïri, club del municipio homónimo que militaba en Tercera División, que pasaba por graves problemas económicos. La estrategia era similar a la llevada a cabo diez años atrás: hacer una fusión por absorción y heredar la plaza de Tercera División del club absorbido; así nacía el CD Soledad-Montuïri. Se volvía a la misma senda que llevó a la desaparición del club original, pero esta vez el desenlace fue más breve y desgraciado.

Nada más ejecutar la operación el club fusionado se encontró sin campo, pues el CD Atlético Baleares se hizo con el alquiler de todas las instalaciones del campo de Son Malferit. Esto culminaba el proceso que había llevado al club de ser la principal entidad deportiva de Son Malferit a verse, incluso, fuera de su barrio. El CD Soledad-Montuïri aún pudo jugar “exiliado” en Montuïri, en el campo del club absorbido, lejos de la Soledad e incluso fuera de la capital palmesana. Jugar lejos de su afición acabó siendo letal, y a todo ello se sumó el peso de las deudas del club absorbido, que acabaron siendo inasumibles. Finalmente, a finales de temporada el club desapareció al ser absorbido por el CF Platges de Calvià.[9]

En esta ocasión nada ni nadie tomo el relevo y así acabó definitivamente la historia del principal club deportivo de la barriada de La Soledad. Su muerte no solo representaba la desaparición de un club histórico, uno de los más representativos de Palma y el tercero en antigüedad: también fue consecuencia de la crisis y evolución de un barrio que hasta entonces había mostrado su fuerza a través del asociacionismo deportivo en múltiples facetas. Así, en otras disciplinas deportivas podríamos destacar dos clubes de patinaje artístico: el CP La Soledad y CP Las Estrellas, de brillante trayectoria especialmente durante los años 60, cuando su actividad llegó a tener repercusión nacional e incluso internacional; pero esto daría para otro artículo aparte y mucho más extenso.[10]

A día de hoy el principal club de fútbol de la barriada es de facto el CD Atlético Baleares (presente por partida doble con el Estadi Balear, por un lado, y Son Malferit, como ciudad deportiva, por el otro) y en mucho menor grado el Pilares la Soledad CF, fundado en 1999.

Iglesia parroquial del barrio de la Soledad (Wikipedia)

Iglesia parroquial del barrio de la Soledad (Wikipedia)

El CD Soledad nació auspiciado por unas fuerzas vivas emergentes y ávidas de proyección social, entre otros frentes, a través del deporte. Como en muchos otros casos son múltiples y complejos los factores que provocaron su nacimiento y desarrollo, los cuales sobrepasan el ámbito meramente deportivo. Y cómo no, tal como fueron diluyéndose, dieron lugar a su desaparición. La entidad basaba su razón de ser en la vitalidad de la sociedad barrial que lo rodeaba, más que en las victorias y oropeles deportivos. Y cuando en sus últimos años el resultadismo pasó a ser prioritario en pos de recuperar la relevancia de antaño, pero sin la base social suficiente para sostenerlo, se precipitó su final.

Conclusiones

El club fue un superviviente nato, cuya existencia se fundamentaba en la profunda identificación con su base social, haciendo gala de la modestia y la humildad propia del barrio que le dio nombre. Los contados títulos oficiales que obtuvo fueron éxitos fugaces, sin continuidad y de escasa trascendencia. Tan solo destaca un campeonato de Segunda Categoría del extinto campeonato insular (1937), dos Ligas Mallorca (1948 y 1952), la mencionada edición de la Copa Uruguay (1964) y un título de Primera Regional (1993). Por el contrario, abundan los segundos puestos (hasta doce en diferentes categorías) y los terceros, entre los cuales cabe destacar los logrados en Tercera División (1961 y 1965).

Por todo ello, no es de extrañar que el éxito más recordado y valorado entre su afición fuese uno intrascendente, pero a la vez el más vistoso: el triunfo en la Copa Anís de la Asturiana de 1944, que proporcionó a los valerosos jugadores del humilde club una de las primas más exiguas económicamente, pero sin lugar a dudas más dulce y agradable a sus paladares. A ello hay que añadir la voluminosidad del trofeo, cuyo tamaño destacaba con carácter propio en las vitrinas del club.

Por desgracia, cuando el CD Soledad desapareció todo su patrimonio se perdió y la galería de trofeos fue desmantelada, acabando en un mercadillo de ocasión. Desconocemos cuál fue el destino de la Copa Anís de la Asturiana; tal vez acabara malvendida, en manos de un trapero, o en el desguace de un chatarrero. Un triste final para uno de los triunfos más recordados del CD Soledad (sino el que más), club insigne del fútbol modesto y popular de Palma, exponente de un barrio y una sociedad que ya no existen, que el tiempo ha ido borrando del recuerdo y que con la desaparición del club azulgrana se hubiera perdido de manera definitiva de no ser por la simpática foto que encabeza este artículo.

En toda esta historia (jugadores, aficionados, club, etc.) tan solo queda un superviviente: la marca de anís, que fundada en 1895 sigue funcionando a pleno rendimiento.

Publicidad de Anís de la Asturiana, 1944

Publicidad de Anís de la Asturiana, 1944

Bibliografía

Libros y obras de referencia

—  Anuario de la Real Federación Española de Fútbol

—  AA.VV.: Gran Enciclopèdia de Mallorca

—  Club Deportivo España: 50 años de fútbol lluchmayorense: 1923-1973. Llucmajor: Imprenta Moderna, 1973.

—  Comas, Bernat (Beco): El deporte en la barriada de la soledad. Palma, 1987.

—  Payeras Llull, Joan; Llabrés Vanrell, Joan: 80 años de futbol a sa Pobla. 1922-2002. Sa Pobla. Ajuntament de Sa Pobla, 2003.

Publicaciones periódicas

—  Baleares

—  Diario de Mallorca

—  Ecos Deportivos

—  El Día

—  Futbolbalear.es

—  Infobalear.com

—  Última Hora

Archivos

Archivo Joan Caldentey Brunet


[1] Calendario de la Primera División de la Liga Mallorca. Baleares, 9 de marzo de 1944

[2] C.D. Soledad. Última Hora, 18 de diciembre de 1930

[3] Nueva Junta. El Día, 19 de diciembre de 1930

[4] Sociedad “Club Deportivo Soledad”. Carpeta 1621, expediente 1896, tomo 2º, folio 286

[5] Anuario de la Real Federación Española de Fútbol (1934), pág. 23

[6] Anuario de la Real Federación Española de Fútbol (1951), pág. 94

[7] La Copa Uruguay de fútbol en Baleares. Un torneo olvidado. Cuadernos de Fútbol, n. 131

[8] El Soledad compra la plaza del Paguera de Preferente. Infobalear.com, 19 de mayo de 2005

[9] El Platges de Calvià anuncia que absorbe al Montuïri Soledad. Diario de Mallorca, 2 de junio de 2016

[10] La Soledat. Gran Enciclopèdia de Mallorca. Vol. XVI, pág. 346-348




Futbolistas 4 – Clubes 0 (primer tiempo)

Desde que en 1926 el fútbol patrio fuera declarado actividad profesional, hasta mediados los 80, el limbo legislativo por donde deambularan los hombres del balón acabó convirtiéndolos en vasallos, mientras sus clubes se transformaban en señoríos feudales. Hoy nos sorprende la existencia de países donde el contratante requisa pasaportes y documentaciones a muchos empleados, convirtiéndolos de facto en mano de obra semiesclava. Pues bien, durante más de medio siglo, los entes federativos de casi toda Europa, incluida España, apuntalaron disparates muy similares entre dictámenes de obligado cumplimiento, por más que chirriasen ante cualquier ejercicio de Derecho comparado. Los futbolistas de elite, incluso los más señeros, pudieran ser vistos por la ciudadanía como ricos prematuros, caprichosos y hasta indolentes, cuando en realidad no dejaban de ser aves vistosas, encerradas en jaulas de oro. Porque, sujetos a la conveniencia o el albur de sus clubes, atados a ellos de por vida útil si así se antojara al mandamás de turno, venían a ser por cuanto al pisoteo de sus propias voluntades, algo así como siervos atados al amo en pleno siglo XX.

Entre nosotros, además, invocar derechos ciudadanos hasta el despunte de los 80 comportaba riesgos. El régimen devenido de la Guerra Civil, autoritario e inmovilista, hacía gala de una visión muy particular al respecto. Imperaban las obligaciones, la afección incondicional, y cada verso suelto era visto como cacofonía en rima asonante. Sólo tras la defunción del dictador, cuando no pudo sostenerse aquella organización vertical, apuntalada sobre un culto cesáreo a la figura de Francisco Franco, los obreros -“productores” en la jerga del régimen-, las mujeres -mayoritariamente confinadas en el hogar o las sacristías- y los futbolistas de 1ª y 2ª División -según la prensa “nuestros ases”- iniciaron su particular revolución, con ritmo dispar y mediante fórmulas diversas. Para todos ellos en particular, y más en abstracto para otros colectivos, la constitución del primer gobierno socialista al rebufo de una sainetera intentona golpista, constituyó magnífico acicate. Corría el otoño de 1982, cuando con la más alta participación democrática posfranquista (el 79,97 % de votos emitidos), Felipe González, como cabeza de lista en el PSOE, era elegido presidente por el 48,11 % de los votantes, siguiéndole el líder del Partido Popular con casi la mitad de escaños.

Convencidos de que había llegado su momento, los jugadores de fútbol agremiados en una “AFE” revitalizada tras superar días de indefinición, desplantes y tomaduras de pelo, volvieron a la carga con el denuedo de quienes llevan tragada mucha hiel. Así las cosas, hicieron suyo el axioma de los entonces denominados sindicatos de clase: “Pidamos la luna y contentémonos con unos rayos de sol”. En otras palabras, a las demandas de antaño, desatendidas una y otra vez desde la patronal, incluso tras comprometer su cumplimiento, unieron otras de mucho más difícil encaje. Vaya, como ilustración, el desglose de reivindicaciones extraído del formulario sindical.

Futbolistas4Clubes001Por no variar, los clubes siguieron en sus trece sin renovar siquiera el ya pretérito argumentario: “Están decididos a cargarse el fútbol. Por ceder a sus demandas, nos han arruinado. El público lleva tiempo desertando de los estadios, mientras los causantes del problema continúan mostrándose insaciables. ¿Cómo vamos a encarar nuevos gastos, mientras crecen los números rojos?. Si tan listos son, que constituyan cooperativas y tomen las riendas de sus clubes. En cuatro meses, la petanca o el parchís nuevo deporte nacional”.

Hubo reuniones a dos e incluso tres bandas, mientras Pablo Porta, todavía presidente federativo, aunque de salida, embridado primero, y sometido a cerco político y mediático después, siguiera comportándose con olímpico desprecio desde su búnker en la calle Alberto Bosch. Un inútil subir y bajar escaleras, disimulando las ganas de no hacer nada desde los clubes, mientras al colectivo de jugadores se le agotaba la paciencia. Así las cosas, el sindicato AFE presentó demanda de conflicto colectivo, a renglón seguido de que sus miembros votasen la posible declaración de otra huelga. El 4 de setiembre de 1984, todas las cabeceras periodísticas se hicieron eco del último saldo, escuetamente: 551 partidarios del parón; en contra 37, y 7 abstenciones. Saldo abrumador, que desmenuzado en detalle ofrecía otros matices.

Cada plantilla profesional fue llamada a la mesa, y allí, uno a uno, los futbolistas fueron depositando su voto. Muchos jugadores, todavía sin equipo al no haberse iniciado la competición, quedaron sin ejercer su derecho, por más que asistieran a la Asamblea. Tampoco se trataba de votar sí o no a la huelga, dejando para más adelante fecha y exigencias, sino de elegir día y mes, una vez aprobadas las demandas. Y sobre este capítulo, el resultado fue el siguiente:

Partidarios de convocar la huelga el día 9 de abril. – 372.

De llevarla a la práctica el día 30.- 163.

De declararla dentro de dos meses. – 16.

Contrarios a la huelga en cualquier fecha. – 37.

Abstenciones sólo 7.

Triunfaba la idea del ataque fulgurante, sin dar tiempo a que los clubes se organizaran, conscientes de que el chantaje y las presiones pudieran muy bien cernirse sobre todos en muy distintas formas. Si la huelga triunfaba, conforme preveían, imperaba el convencimiento de forzar la definitiva intervención del Consejo Superior de Deportes, es decir de la política, luego de que el programa del nuevo presidente de gobierno contemplase drásticas reformas en la organización y composición de las áreas cultural y deportiva. Por cierto, la plantilla del Real Valladolid quedaba señalada, al no secundar la convocatoria huelguista.

A la salida de aquella reunión, distintas voces mostraron sus puntos de vista. Juan Gómez “Juanito”, estrella internacional del Real Madrid, fiel a su estilo se expresó sin pelos en la lengua: “El diálogo no sirve. Hemos llegado a esta situación porque sólo las medidas de fuerza hacen funcionar a la gente en este país, o al menos logran que algunos muevan el culo en los despachos. Las palabras estaban agotadas en la AFE, puesto que ni la Administración ni la Federación nos hacían ningún caso. Ha sido una decisión muy pensada y no creo que nadie incumpla lo acordado. Tampoco temo represalias; cuando la gente está unida como nosotros, no hay miedo”.

Abel, atacante del Hércules, cifraba su esperanza en la unidad sindical como antídoto de posibles represalias. “Hemos tomado una decisión muy dura, porque estamos convencidos de su necesidad ante nuestras graves diferencias con la Administración y los clubes. Nos están negando derechos comunes a todos los trabajadores, de ahí esta huelga que va a ser larga y dura”.

Aitor Aguirre, ariete del Athletic Club y Racing de Santander, cabeceador temible en sus remates a pecho descubierto, tampoco tenía miedo ante el previsible conflicto: “El futbolista, llegados a este punto, ya no teme nada. El público debe entender que tenemos derechos, como cualquier otro colectivo. Y no, no veo solución, al menos de cara al próximo domingo. Lo que no se ha conseguido en cuatro años es improbable pueda lograrse en una semana”.

Juan Gómez, “Juanito”, ante Quique, en un Real Madrid - Atlético la temporada 82-83. Ambos, aunque sobre todo el primero, se significaron durante los días más combativos del sindicato AFE.

Juan Gómez, “Juanito”, ante Quique, en un Real Madrid – Atlético la temporada 82-83. Ambos, aunque sobre todo el primero, se significaron durante los días más combativos del sindicato AFE.

Miguel Ángel, portero gallego del Real Madrid, mostraba mayor preocupación ante el sentir del público, que hacia unas improbables represalias o la irrupción de esquiroles. “Debemos comunicar claramente nuestras pretensiones, justo lo que no se hizo otras veces, cuando se indujo a pensar que obrábamos por capricho. Si la gente profundizase un poco, estaría de nuestra parte”.

César, también guardameta enrolado en el Hércules, consideraba a la ordenanza laboral primer caballo de batalla. Y como otros muchos compañeros, negaba que la huelga se convocara para beneficiar a los poderosos: “Si no se ha llegado a nada en tantos meses, sería un milagro alcanzar acuerdos en cuestión de días. Esperamos mejoras en el sistema de Seguridad Social, en la ordenanza laboral y de índole fiscal. Presionar es la única salida, sobre todo ante la Administración, quizás quien más deba moverse ahora. El plante nos beneficia a todos”.

Ángel de los Santos, hombre hecho a sí mismo, redimido por el fútbol de una infancia, hasta el punto de cursar el bachillerato y una carrera universitaria mientras pateaba el césped, tampoco veía factible cualquier solución inmediata. “La huelga en principio es indefinida, aunque esperamos no resulte muy larga. Ya sé que ante ellas alguien siempre se siente perjudicado. Nosotros mismos fuimos víctimas muchas veces, con las de los pilotos aéreos, por ejemplo. El público debe entender que no vamos contra ellos, sino en favor de un deporte que es de todos”.

Juan Señor, cotizado internacional del Real Zaragoza, modosito pero certero en sus dardos, deambulaba entre la confianza y un comprensible recelo ante la posible manipulación del público, orquestada desde los medios informativos: “El comité de huelga está dispuesto a negociar, siempre que el acercamiento se lleve a cabo en términos razonables. Pero me gustaría arrancar de una vez todos esos prejuicios sobre nuestro colectivo. Que si somos millonarios, que si esto o lo otro. Soy muy consciente de que el público y los socios van a ser los primeros perjudicados, y les pido comprensión. No vamos a la huelga para sacar más dinero, sino reivindicando condiciones laborales que a ellos ya les asisten”.

Moré, capitán del Real Valladolid, concernido por el no a la huelga de sus compañeros blanquivioletas, quiso salir del atolladero ante el redactor vallisoletano José Miguel Ortega, obviamente sin conseguirlo: “Los jugadores del Valladolid estamos satisfechos con el comportamiento del club y la seriedad con que afronta sus compromisos. Pero esta situación atañe a todo el ámbito profesional, y desde el primer momento aseguramos nuestro pláceme a la opinión mayoritaria”. Como es lógico, Ortega quiso saber si no era cierta su negativa a significarse como huelguistas. Y Moré, centrocampista fino, optó por lanzar balones fuera con la espinilla: “El voto fue individual y secreto, de modo que no caben las especulaciones sobre si apoyó una cosa u otra”.

Surgían, obviamente, los primeros temores a verse señalado. Porque tanto José Ortega, como la casi totalidad del gremio futbolero, estaban al corriente sobre el mayoritario “no” de aquel elenco. Así que 24 horas después, el propio Moré volvía a plantarse ante los medios, como portavoz del elenco, negando la mayor: “Aunque los profesionales de este club no tengamos queja del trato que se nos dispensa, ello no implica desacuerdo sobre las medidas de reivindicación expuestas por la AFE. De manera que, si bien el voto fue individual y secreto, en evitación de equívocos o situaciones desagradables, no tenemos inconveniente en aclarar que la mayoría del equipo respaldó la huelga con su voto afirmativo”.

Puro arte de birlibirloque. Votaron “no”, creyendo eludir problemas, y cuando esa postura los colocaba en delicada situación ante sus compañeros, se desdecían en público. Ante la abrumadora victoria del “sí”, aquellos 37 noes carecían de dueño.

Los clubes, entre tanto, desde el otro lado de la trinchera se echaban las manos a la cabeza. El Elche C. F. debía viajar hasta Alicante para enfrentarse al Hércules en partido de rivalidad. No había sido buena la pretemporada ilicitana, y ello repercutía en la libranza de abonos. Un buen resultado ante los de la capital, con toda seguridad animaría a los renuentes. De ahí que un portavoz sintetizase: “La peor noticia en el peor momento. Pase lo que pase, el mal ya está hecho”.

Para el gerente del Valencia, la medida era “exagerada, porque así no van a ver resueltas sus reivindicaciones”. El presidente del bilbaíno Athletic Club, bragado en la gestión empresarial, tras considerarlo “un mal para el fútbol en general, y sobre todo para el aficionado”, no dejaba de reconocer alguna razón en el hartazgo de los futbolistas: “Comprendo que quienes no han cobrado quieran soluciones, y no buenas palabras. Me refiero a jugadores de todo el ámbito nacional”. Su colega en el Real Zaragoza distribuía culpas casi equitativamente: “Entre todos estamos maltratando al fútbol, y eso puede traer consecuencias. Entiendo las peticiones, pero confío en que el plante no llegue a producirse”. El máximo mandatario del Hércules evaluaba posibles pérdidas, luego de haber cosechado un triunfo a domicilio en La Romareda: “Justo ahora, en un magnífico día para la taquilla. Con dos positivos y cuando toca recibir a la hinchada de nuestros vecinos. Esta medida afecta sobre todo a los clubes económicamente pobres”. Luis De Carlos, cabeza visible de un rico, como teóricamente era el Real Madrid, también se aferraba al paño de lágrimas: “Coloca a nuestro fútbol en su posición más crítica. Si ya atravesamos momentos de especial gravedad, ahora la situación pudiera hacerse irreversible. Tanto el Comité de Fútbol Profesional como los clubes, deberíamos haber conocido las pretensiones de la AFE mucho antes. Ahora no hay tiempo para hablar con tranquilidad. Además aquí nadie ha tenido en cuenta al público, y su reacción puede resultar peligrosa. A ver si matamos la gallina de los huevos de oro”.

Satrústegui, delantero centro de la Real Sociedad, e internacional. Un club de cantera, como el guipuzcoano, contemplaba con espanto las reivindicaciones de AFE. Si se aboliera el derecho de retención podrían volar sus cotizadas estrellas, quejosas desde hace tiempo en lo económico, al ser muy conscientes de su auténtico caché.

Satrústegui, delantero centro de la Real Sociedad, e internacional. Un club de cantera, como el guipuzcoano, contemplaba con espanto las reivindicaciones de AFE. Si se aboliera el derecho de retención podrían volar sus cotizadas estrellas, quejosas desde hace tiempo en lo económico, al ser muy conscientes de su auténtico caché.

El presidente blanco olvidaba que desde el sindicato AFE venían alzándose voces desde hacía cuatro años, y que la patronal, constituida primero en Asociación del Fútbol Español, y luego en Liga de Fútbol Profesional, comprometió acuerdos a la postre incumplidos, mientras desde la Federación Española Pablo Porta seguía declarándose incompetente ante ambos bandos. Otros mandatarios también negaban la mayor. Como el vicepresidente del Murcia, Juan Valverde: “Lo de la huelga es un absurdo; están equivocados. Ciertas reivindicaciones no me parecen mal, pero esos aspectos no puede resolverlos ningún club”. A Gabriel Rojas, presidente del Sevilla, todo se le antojaba nefasto: “Un error absoluto. Y reconozco que su declaración me ha pillado por sorpresa”. El directivo “colchonero” José Manuel Caro, ante el retiro vacacional de Vicente Calderón, coincidía en que el conflicto llegaba “en un momento inoportuno, dada la abundancia de contratiempos. No niego su razón en algún punto, pero estimo que el tronco de esas reivindicaciones compete a la Administración”. Fermín Ezcurra, ejemplo de gestión ateniéndose al equilibrio financiero, opinaba que “una situación así no se arregla por la fuerza, sino alrededor de una mesa, exponiendo claramente qué puede concederse y lo que resulta imposible”. El máximo responsable bético, Martínez Retamero, si bien aseguraba vio venir el plante, nunca pensó pudiera contar con la anuencia de casi todos los futbolistas. Y añadía: “Desde luego, vendieron bien su mercancía. No los futbolistas, sino quienes han promovido el desatino. Aunque en su amplia mayoría esas reivindicaciones no competen a los clubes, sino a la Administración. Las que afectan a los clubes son del todo inaceptables, como su participación en las quinielas o cada retransmisión televisiva. Aseguran cobrar poco, ¿verdad?. Pues muy bien. Si les parece podemos hacer públicos los ingresos de cada uno, para ver qué considera la opinión pública”.

El donostiarra Erostarbe (seudónimo de Javier Aranjuelo), periodista de cuerpo entero, se mostró incisivo sondeando la impresión del presidente blanquiazul, más afectado que otros, como club de cantera, si se aboliese el derecho de retención. Y obtuvo una respuesta clara: “En ese punto concreto podemos salir muy perjudicados. Cuidamos nuestra cantera al máximo nivel, como prueban los resultados, promoviendo nuevos valores futbolísticos. Hacemos de ellos profesionales bien remunerados. Pero se nos limita esa tarea si, cuando empiezan a triunfar, debemos prescindir de los más destacados. Entonces apaga y vámonos, porque resulta que se nos irán los verdaderamente buenos, mientras debemos respetar hasta su término los contratos de quienes no sobresalgan”.

Con el propósito de discutir el problema global y sus particularidades más específicas, el gijonés Vega-Arango, presidente de la Liga de Fútbol Profesional que tenía convocada una reunión de su Comité Ejecutivo, decidió invitar a todos los presidentes de 1ª, 2ª, 2ª División “B” y 3ª, con carácter de urgencia. Se avecinaba un duelo al sol, o en el OK Corral, por evocar títulos del “far-west” hollywoodense.

Pero, ¿qué era la AFE durante esos días, luego de varios proyectos de huelga revocados a última hora, con una acampada de futbolistas ante el portón federativo, exigiendo liquidar deudas, y sin apenas afiliación entre el amplio contingente de extranjeros emigrados a nuestro fútbol?.

Organigrama de AFE, en 1984. Pocos mandos y en general bien avenidos.

Organigrama de AFE, en 1984. Pocos mandos y en general bien avenidos.

Se había constituido el 15 de febrero de 1978, y entonces el universo futbolístico se lo tomó como ocurrencia o humorada. Trascurridos algo más de 6 años, y luego de muchas vicisitudes, contaba con 1.200 afiliados entre todas las categorías, siendo su presidente Juan José Iriarte, y los vicepresidentes el futbolista activo Jesús Mª Zamora (Real Sociedad) y Romero Rivas. También eran futbolistas sus vocales Juan  Gómez “Juanito”, Juan Señor, Gordillo, Aitor Aguirre, Quique, Mantilla, Alfonso Abete y González Movilla, conocido en las alineaciones por su segundo apellido. La secretaría general corría a cargo del “merengue” Ángel de los Santos Cano, en tanto actuaba como gerente sindical José Luis López, encargo de la coordinación general. El departamento de publicidad corría a cargo de Sánchez Barrios, centrocampista de ataque poco después despedido en medio de una densa polvareda, y los abogados Fermín Bretón y Ricardo Recuerda detentaban la asesoría jurídica. De la administración general se ocupaban cuatro empleados. Tan sólo cobraban de la AFE, como trabajadores en nómina, 9 personas: su gerente, Sánchez Barrios, los abogados y el personal administrativo. Toda la cúpula directiva trabajaba desinteresadamente, en lo económico. El alquiler de la sede suponía un costo anual de 923.320 ptas., y aquellos 9 asalariados desarrollaban su tarea ininterrumpidamente de 8 de la mañana a 6,30 de la tarde.

Los ingresos sindicales dependían casi al 50 % de las cuotas sociales -incluidas las de algún jugador retirado-, y el “marchandising”, reducido éste a poco más que los derechos sobre una simpática mascota, impresa en barajas infantiles, camisetas y material escolar. Los réditos financieros, aun en momentos de alta remuneración a los depósitos, apenas constituían una nimiedad. Y desde hacía tiempo, la AFE reclamaba a la FEF un censo fiable de futbolistas en todas las categorías. O sea el desglose de clubes y plantillas, negado sin ningún argumento desde el círculo del para entonces cuestionadísimo Pablo Porta. Una herramienta por demás necesaria en el devenir de cualquier sindicato, como fácilmente se entenderá. Esos 1.200 afiliados se distribuían de este modo: 850 de 1ª, 2ª y 2ª “B”, con 350 militando en 3ª, categoría en principio no profesional, o ya retirados de la práctica activa. Estos últimos, los que colgadas las botas seguían contribuyendo, ascendían a 25. José Luis López, su gerente, había manifestado no ha mucho cierta insatisfacción sobre la cifra de afiliados, “porque debían estar todos los jugadores profesionales. Me parece ilógico que si las ventajas conseguidas redundan en beneficio general, los medios económicos imprescindibles para su consecución corran a cargo de unos pocos. Lo natural es que la afiliación continúe incrementándose”.

El propio José Luis López denunciaba las artimañas de ciertos clubes con sus jugadores más jóvenes: “Sé que están tomando represalias, si deciden afiliarse. Hay equipos donde la sindicación está muy mal vista”. Obviamente, tampoco podían pedirse heroicidades a los recién llegados, bien de los equipos filiales o tras un par de años cedidos con ficha amateur. Otro problema, como se ha dicho, lo representaba un amplio espectro de extranjeros. Entre ellos, los más proclives a integrarse eran los sudamericanos, con Argentina, a la cabeza. Jorge Valdano, Kempes, Amarilla, Calderón, o Metgod, por ejemplo, eran miembros de pleno derecho. Muchísimo más tibios, los súbditos de la hoy desmembrada Yugoslavia. Y el resto ni se daban por aludidos, salvo raras excepciones, al contemplar nuestro país como una opción entre lo turístico y profesional, sin otro propósito que hacer caja. Los alemanes Schuster y Uli Stielike, dos estrellas de relumbrón, rechazaron abiertamente el carné, si bien el segundo se brindó a ayudar en lo posible, si así se lo pidieran. Diego Armando Maradona, por su parte, jugó en Vigo ante Rumanía con la selección de la AFE, el partido de carácter recaudatorio. Adujo, entonces, que la AFE era una buena causa, pero cuando le propusieron afiliarse nada quiso saber del asunto, pese a la reiteración de llamadas telefónicas. Por cuanto a clubes respecta, los más implicados eran Real Sociedad y Athletic, ambos con toda la plantilla afiliada. En el polo opuesto destacaban Real Club Deportivo Español y F. C. Barcelona. Para el ejercicio en curso, la AFE pretendía ser consecuente, no organizando el partido entre su selección y otro potente equipo. Entendían que roto el acuerdo entre sindicato y clubes, tampoco era cuestión de poner en un brete con sus respetivas entidades a los seleccionados. Coherencia supina, y respeto hacia los suyos.

Desde el otro lado de la trinchera, los clubes acudieron al llamamiento de Vega-Arango dispuestos a dar batalla, aunque ello implicase una inmolación numantina. Si los profesionales se negaran a jugar, disputarían la jornada con sus cuadros juveniles. ¿Qué estaba prohibido reventar huelgas legales de ese modo?. Pues muy bien, a ver si la Administración, tan concernida como ellos mismos por el despliegue de reivindicaciones, tenía el cuajo de sancionarles. “¡Si quieren guerra, nosotros tenemos mejores armas!”, aseguran se escuchó en pleno debate.

Presupuesto del sindicato AFE, para 1984. Poco más de 21 millones de ptas., frente a los miles de millones manejados por los clubes y el tonelaje de la apisonadora federativa. Un David sin honda, contra Goliat y toda su artillería.

Presupuesto del sindicato AFE, para 1984. Poco más de 21 millones de ptas., frente a los miles de millones manejados por los clubes y el tonelaje de la apisonadora federativa. Un David sin honda, contra Goliat y toda su artillería.

La huelga constituyó un éxito, aunque hasta la víspera siguiera especulándose sobre la posibilidad de una desconvocatoria. Hubo plante de los profesionales, sin que desde los clubes pudieran hacer otra cosa que contabilizar pérdidas. Si los libros mayores del fútbol ya estaban sobrecargados de tinta roja, aquellos partidos sin espectadores, entre formaciones de juveniles forzados a competir por pura cerrazón mental y contraviniendo la Ley de Huelga, aún acentuaron déficits. Hubo que pechar con gastos de desplazamiento, minutas arbitrales, salarios de porteros, acomodadores y empleados de taquilla… Una ruina, por demás perceptible. En el partido At. Madrid – Osasuna sólo se recaudaron 387.000 ptas. En el Hércules – Elche, medio millón raspado. Apenas 330.000 en el Valladolid – Racing. Sólo 400.000 en el F. C. Barcelona – Zaragoza, y la misma cifra en un Sporting – Real Madrid que disputado con los primeros equipos debería haber registrado cifras récord. En el Real Murcia – Betis, 300.000. El campo más poblado fue Mestalla, hasta arrojar un saldo en taquillas de 775.000 ptas., midiéndose los juveniles valencianos a los del Real Club Deportivo Español. Muy cerquita por cuanto a cifra, el tesorero del Sevilla contabilizó 750.000 rindiendo visita los cachorros bilbaínos. El sonrojo más intenso se lo llevó el contable de la Real Sociedad: 100.000 ptas. justas, en su desvirtuado partido ante el C. D. Málaga. En muchos campos no hubo ni para cubrir la factura arbitral. Eso en 1ª División, porque en 2ª faltaron pañuelos con los que enjugar tantísimo llanto.

Otro damnificado colateral fue el Patronato de Apuestas Mutuas, el 1-X-2, para entendernos. Porque el desplome en la recaudación quinielística, ante la incertidumbre que envolvía esa jornada, resultó apabullante. Sólo 522.836.505 ptas. Casi mil millones menos que lo ingresado esa misma fecha el año anterior. Y de rebote, la onda expansiva alcanzaba también al “Botabola”, denominación de la quiniela portuguesa. Porque como su selección nacional disputaba un partido ante Suecia, clasificatorio para el Mundial-86, se había optado por incluir en sus boletos partidos de nuestra Liga. Las noticias sobre el conflicto entre clubes y AFE lógicamente traspasaron lindes fronterizos desde Tuy, Fuentes de Oñoro, Badajoz o El Rosal, de modo que la incertidumbre también hizo presa en los apostantes lusos. Jornada negra, en suma, para los quinielistas ibéricos y sus respectivos organizadores.

Por cuanto respecta a nuestro Patronato, sus dirigentes ya llevaban algún tiempo anticipándose a los acontecimientos. Si cuatro años antes todo les pilló de improviso, esta vez no, al menos en lo tocante a lo organizativo. Que iba a producirse una sustancial merma de ingresos, lo daban por descontado. Si en 1980 la recaudación sufrió un recorte de 400 millones, dándose por supuesto que a última hora se alcanzaría algún acuerdo, en setiembre de 1984, después de subir el precio de cada apuesta y ante la firme convicción de los jugadores de fútbol, el desplome por fuerza debía ser mayor. Pero habría quinielas. Nada de anular la jornada, puesto que se había habilitado un método para que los niños de San Ildefonso cantaran cada resultado, extrayendo bolitas de un bombo. Este procedimiento se había inaugurado el 6 de setiembre de 1981, ante otro conflicto. El número de unos, equis y doses encerrados en el bombo correspondía a la media de sus respectivas frecuencias durante la temporada anterior. Quedaban pues al albur de la casualidad, y no del potencial deportivo, los resultados en choques de fácil pronóstico, cuando menos en teoría. Y eso, claro, ahuyentaba a los peñistas mejor organizados, a los inversores, antes que amantes del fútbol o devotos de un club, puesto que existían agrupaciones con gestión profesional, garantes de opíparos rendimientos. Aquella primera vez, el sorteo ofreció 8 “X” y ningún “2”. Hubo aplausos en el salón, ante el imaginario empate del Real Madrid en Atocha, y los acertantes de 14 se convirtieron en millonarios, bien es verdad que por los pelos. En vísperas del nuevo sorteo, los responsables quinielísticos distaban mucho de tenerlas todas consigo.

La Quiniela, otro damnificado más de la huelga. Su recaudación estuvo incluso por debajo de las jornadas que incluían pronósticos del “Calcio”. En la imagen boleto del año 1971 que otorgara  un premio récord.

La Quiniela, otro damnificado más de la huelga. Su recaudación estuvo incluso por debajo de las jornadas que incluían pronósticos del “Calcio”. En la imagen boleto del año 1971 que otorgara un premio récord.

Para empezar, esa huelga pudiera ser un simple temblor de tierra, preludio de ulteriores erupciones volcánicas. Tanto el sindicato AFE como la Liga de Fútbol Profesional, pedían con boca de fraile sin pararse en mientes. Los responsables sindicales amagaban de continuo con exigir una parte del pastel quinielístico, entendiendo que sin su concurso no habría sobre qué apostar. Paralelamente, los clubes reclamaban a través de la LFP elevar su percepción del 1 % sobre lo recaudado, hasta el 5 % como mínimo, y ya había voces adelantando que una vez cubierto ese primer logro, la meta debía fijarse en el 10 %. “Si no tragan, acudimos a los tribunales para que desautoricen la utilización de nuestros equipos -llegó a exponer cierto portavoz de club-. O mejor aún, registramos un consorcio, damos la patada al Patronato y nos quedamos con la quiniela”. En medio de tal panorama, los sorteos del día 9 de setiembre, en 1984, y la semana siguiente, el 16, con bolas azules, rojas y amarillas, estuvieron envueltos en no escasa desazón.

Dejó más detalles el sorteo del 16, puesto que una suma de declaraciones cruzadas alejaron del foco informativo a la quiniela inaugural. Javier de Górgolas, administrador del Patronato de Apuestas Mutuas, y el notario Rafael Ruiz Gallardón, presidieron el sorteo que en virtud de la norma promulgada en el Boletín Oficial del Estado con fecha 15 de agosto, establecía tablas con 51 bolas rojas (“unos”), 30 azules (“equis”), y 19 amarillas (“doses”). Minutos antes de procederse al sorteo, se llevó a cabo la sustitución del bombo previsto, antiguo y lento, por otro más ágil. Ante unos 200 curiosos, Juan Campos y Mario Fonseca, niños de San Ildefonso, procedieron a la extracción y el canturreo. Estaban en juego el 55 % de los poco más de 471 millones recaudados. Una cifra equivalente a las de diez o doce años atrás, que acabaría saldándose en reparto de pedrea. Uno de los niños hizo saltar la carcajada cuando inquirió, muy serio, si había ganado el Real Madrid. “Pero hombre -le respondieron-, si tú mismo has sacado la bola”. Y él, impertérrito, requebró: “Ya, pero eso era de mentirijilla. ¿El Madrid qué ha hecho de verdad?”.

En resumen, los futbolistas se adelantaban en aquel partido contra sus clubes, con un golazo por la escuadra. Amparados en el desconcierto del adversario, siguieron bombeando balones sobre el área. La patronal evaluaba daños. Al Valladolid, las dos semanas de plante le habían costado 19 millones de ptas. Gonzalo Alonso, su presidente, presupuestó 14.000 socios, y sólo se habían expedido 12.400 carnés. Al inevitable desfase era preciso sumar la congelación de créditos bancarios, puesto que ante un panorama impredecible las entidades financieras optaron por cerrar el grifo. Afrontar el pago final por la contratación de Jorge “Polilla” Da Silva, se antojaba imposible en tales condiciones. Y sin el brillante delantero, adiós al sueño de prosperar en Europa, o lucir a su estrella por campos de tronío con la esperanza de traspasarlo a muy buen precio. El jugador, en cambio, se mostraba más optimista. “No creo que me devuelvan al Defensor de Montevideo -dijo-, porque a todas las partes nos interesa un acuerdo. Y tampoco me parece que los problemas económicos derivados de la huelga justifiquen mi retorno a Uruguay”. Su presidente discrepaba, al tiempo de encomendarse, para variar, a los santos celestiales y la buena voluntad de la plantilla: “La única posible salida pasa por superar la eliminatoria europea contra el Rijeka, y que en la siguiente ronda nos corresponda un equipo muy taquillero, puesto que esa eventualidad no fue presupuestada”.

Octavilla de la Asociación de Futbolistas, invitando a la participación electoral de sus afiliados.

Octavilla de la Asociación de Futbolistas, invitando a la participación electoral de sus afiliados.

Los jugadores acreditaban más visión de realidad que muchos mandatarios, porque “Polilla” Da Silva siguió siendo emblema blanquivioleta, hasta incorporarse al At. Madrid. El fútbol uruguayo estaba tan al borde de la quiebra que no podía permitirse el lujo de reabsorber a nadie, y la entidad castellana ni mucho menos vivía en solitario tanto apuro. En el Sevilla, la merma de taquillas supuso una devolución de las letras con que se pretendía pagar a la plantilla. El malestar se hizo tan evidente como para que el centrocampista Juan Carlos se entrevistase con la directiva, exponiendo el sentir de sus compañeros. Algunos precisaban el ingreso inmediato de cuanto se les debía, y otros, como Grande o Jiménez, a quienes se prometieron fichas del primer equipo, seguían cobrando como jugadores del Sevilla Atlético. De momento sólo cabía garantizar los salarios mensuales. Las primas de fichaje, que representaban la mayor cuantía, colgaban del alero. Hércules, Elche, Racing de Santander, Español, y sobre todo C. D. Málaga, frisaban la lipidia. Los portavoces de AFE exigían solución urgente sobre puntos trascendentales, como la constitución de un fondo de garantía salarial, ante antiguos y futuros impagos, el derribo del derecho de retención y suprimir los límites de edad para competir en 3ª, circunstancia que impedía el ejercicio profesional a muchos hombres en perfectas condiciones. Al mismo tiempo, Romà Cuyàs, Consejero Superior de Deportes, apretaba a los clubes y ponía en su punto de mira al periclitado presidente federativo Pablo Porta, un cero a la izquierda en su afán por seguir soldado a la poltrona, aunque ello implicase total inacción, difuminando su cobardía tras la Liga de Fútbol Profesional. Tan lamentable fue su comportamiento que el 14 de setiembre un jurista prestigioso, como Antonio Mª Muntañola, asesor jurídico del F. C. Barcelona, ya no quiso seguir mordiéndose la lengua.

“Aquí se acaba Porta y lo que él ha significado, porque no cabe duda que la Administración está decidida a sepultarle -dijo desde la Ciudad Condal, según recogiesen distintos medios-. Someterse al arbitraje del director general de Trabajo era entrar en la boca del lobo, siendo evidente que su dictamen iba a estar mediatizado, al emitirse bajo la coacción que toda huelga comporta. Algo que en rigor jurídico resulta inaceptable”. Añadió también que se estaba quemando a un hombre válido, como Vega-Arango, “mientras Porta trata de mantenerse al margen de la situación”. Y que a su modo de ver, la AFE optaba por “revolucionarlo todo, moviéndose a impulsos políticos, y no de índole laboral, puesto que sus reivindicaciones engloban a cuatro estamentos diferentes: La anulación del Real Decreto, al poder judicial; promulgar una ordenanza laboral, al poder legislativo; el Fondo de Compensación y Garantía, a la Federación Española; y el resto a los clubes. No se trata, pues, de una demanda laboral, sino política”.

Vicente Del Bosque, caricaturizado por Cronos. Fue carismático y activo miembro de la directiva en AFE, años atrás. Aunque algunos medios periodísticos considerasen errónea la elección de Iriarte como rector del sindicato, simplemente por ser futbolista de tercer rango, acreditó de sobra su valía.

Vicente Del Bosque, caricaturizado por Cronos. Fue carismático y activo miembro de la directiva en AFE, años atrás. Aunque algunos medios periodísticos considerasen errónea la elección de Iriarte como rector del sindicato, simplemente por ser futbolista de tercer rango, acreditó de sobra su valía.

Dispuesto a no dejar títere con cabeza, Muntañola arremetió también contra el sindicato de futbolistas, achacándole responsabilidad o funciones que ni siquiera competían a los colegios profesionales: “La AFE tendría que ser responsable sobre la profesionalidad de sus afiliados, es decir que los jugadores posean licencias profesionales, tal como sucede en el golf, el tenis y otros deportes, y así sería la primera interesada en mantener cierto orden”. Como colofón, añadía: “La actual situación está dirigida. Se trata de una conducta física de la Administración socialista, empeñada en apoderarse de las próximas elecciones federativas, paso previo a su propósito de hacer suyo todo el fútbol”.

Afirmaciones maximalistas y ampliamente discutibles, bajo cuya humareda ni mucho menos salía ileso un presidente visto desde la Administración, el colectivo de futbolistas y los propios clubes, como problema a extirpar. Por una vez, viendo al adversario tan dividido, desde la cúpula sindical deportiva se atisbaban tiempos mejores. Lo confirmaba entre líneas su cabeza visible, Juan José Iriarte, hombre humilde y franco, al concluir que el tiempo y la justicia estaban dándoles la razón. No solía prodigarse en los medios, y a diferencia de sus predecesores, Juan  Manuel Asensi o Joaquín Sierra “Quino”, era futbolista oscuro, desconocido para gran parte de la afición, y por tanto sin apenas carisma popular. Razones que justifican de sobra algún apunte biográfico.

Navarro de Garralda, nació en marzo de 1954 y allá por setiembre del 84, estrenada la treintena, llevaba un año casado y tenía un niño. Desde el equipo infantil del Club Atlético Osasuna pasó a la cantera del C. D. Pamplona, coincidiendo en edad juvenil con jugadores como De Andrés, Satrústegui o Iriguíbel. Fichó luego por el Sabadell, desde donde lo cedieron al Barbastro y Mataró, antes de regresar a la disciplina vallesana. Ya fuera de la Creu Alta, buque hacia Palma para enrolarse en el R. C. D. Mallorca, Manacor y Constancia de Inca. Una vez se definió de este modo como jugador: “Bueno en 3ª, regular en 2ª “B”, de relleno en 2ª y pésimo para 1ª, puesto que nunca alcancé ese rango”. Al margen del fútbol había terminado la carrera de Aparejador, o como ya se decía entonces Arquitecto Técnico, y le faltaban tres asignaturas para culminar 4º curso de Arquitectura. “Tengo un poco abandonada esta carrera -se condolió al tomar las riendas sindicales-, porque en Palma no hay Universidad. El año pasado me matriculé en Barcelona, pero era imposible obtener provecho con tanto mar de por medio. Además, desde hace cuatro años estoy en la Escuela de Pintura Libre de Palma”. Hijo de albañil y con una madre que al crecer su descendencia empezó a trabajar de dependienta, políticamente se definía como hombre de raíces y principios. “Mis padres se sacrificaron mucho para que yo estudiase, de manera que ahora soy yo quien está en deuda. De ellos admiro su honradez, espíritu de superación, desprendimiento y buena voluntad. Siendo esa mi historia, me tengo por hombre de izquierdas, aunque no haya podido votar por cosas del censo. Es lo que tiene estar de paso”.

Abiertamente reconocía su déficit formativo. “Empecé a leer  muy tarde, porque nuestro sistema educativo no impulsa el placer de la lectura. Mi primer tocadiscos lo tuve con 24 años, así que estoy en plena etapa de preparación, adquiriendo conocimientos que un día espero encauzar”. Como sindicalista, se veía “sin gran carisma, pero con la voluntad de articular una organización participativa, donde no se tomen decisiones por la voluntad de una sola persona, sino dejando que todos opinen”. Puesto que a cualquier hombre se le puede medir en parte por cuanto piensa de sus colaboradores y adversarios, sus palabras al respecto siluetaban a un joven cabal y ponderado. Para él, Cabrera Bazán, catedrático de Derecho, antiguo asesor del sindicato y paladín en la defensa de los futbolistas y sus derechos, era “un ejemplo a seguir, puesto que luchó por el alumbramiento de la AFE sin recibir todo el reconocimiento que merece”. Sobre Vega-Arango, presidente de la Liga Profesional, aseguró no conocerle mucho, “aunque presidiendo el órgano que aglutina a los clubes, tiene la misión de hacer que el fútbol evolucione hacia la modernidad. Lo malo es que no lo veo con fuerza suficiente”. Con relación a Quino, le faltaban epítetos laudatorios: “En mi opinión, una persona que a nivel humano te alegras de conocer. Su rectitud es admirable”. También tenía un alto concepto de Juan Gómez “Juanito”: “Valiente, sensible, y con una visión clarísima de lo que es el fútbol y cuanto representa”. Acerca de José Luis Núñez, presidente del F. C. Barcelona, se pronunciaba con una mezcla de admiración y reproche: “Ha hecho desaparecer del Barcelona aquel espíritu representativo de un pueblo, al convertirlo en una empresa mercantil. Económicamente, su buena mano parece envidiable”. Tampoco Romà Cuyàs, Consejero de Deportes, escapaba al análisis: “Sólo el tiempo dirá si su gestión es buena o mala, como ocurre con cuantos ocupan cargos políticos. Pero dentro de la moderación presumible en quienes administran un país, se esfuerza por solucionar problemas de difícil arreglo”. En cambio no aplicaba paños calientes con Pablo Porta, al afirmar: “Los hombres inteligentes se esfuerzan para que la sociedad evolucione, y él ha hecho lo contrario. La situación actual es fruto de su desastrosa gestión”.

Ni los clubes, ni la Liga de Fútbol Profesional, el sindicato de futbolistas y el partido político en el poder, soportaban ya la fútil prosopopeya de un presidente federativo invisible en momentos complicados, timorato a la hora de la verdad, empeñado en hacerse fuerte con la división de los demás, calculador, receloso y aferrado al sillón federativo con doble capa de pegamento. Sus días estaban contados, aunque ni futbolistas ni clubes ganaron nada con quien habría de sustituirle en breve. Y mientras el relevo tenía lugar, en la AFE no descansó nadie. Primero se interpuso una demanda contra todos los clubes, por atentar gravemente contra el derecho de huelga sustituyendo a profesionales por juveniles, cuando el contrato laboral de los primeros seguía vigente. Luego litigando contra el derecho de retención. Y entre una cosa y otra, viendo engrosar el caudal de afiliados.

Un tribunal condenó primero a los clubes por conculcación de derechos a sus trabajadores en huelgua. Otro, la Magistratura Nº 13, fechaba finalizando setiembre la ilegalidad del derecho de retención, por ser contraria al ordenamiento jurídico en materia laboral. Cierto que los clubes anunciaron de inmediato la interposición de un recurso, y que sobre el decisivo partido entre dos bloques tan antagónicos, aún quedaba pendiente de disputa el segundo tiempo. Pero mientras ambos elencos trazaban planes en sus respectivos vestuarios, acababa de subir otro gol al tanteador, anotado por la judicatura contra la patronal futbolística.

Esa segunda mitad se vislumbraba apasionante.




El sindicato de profesionales del fútbol 1936-1937 – Tercera parte

Capítulo IV: El Sindicato ante la Liga del Mediterráneo

Las palabras de Ignacio Soler Damians eran tan ciertas como que hay que respirar para sobrevivir. Y el fútbol profesional necesitaba las competiciones que habían sido suspendidas por la guerra: no había Campeonato Nacional de Liga. O se inventaban algo que cubriera el hueco o desaparecía el profesionalismo.

Ya cuando el Madrid FC no fue aceptado oficialmente por la Federación Catalana de Fútbol para participar en el Campeonato de la Serie A se dijo que se podría organizar una competición en la que entrasen los equipos más fuertes de Valencia, Cataluña y Madrid. La idea se quedó en el aire a falta de una Federación Española que se encargase de llevarla a cabo.

Sin embargo, casi dos meses más tarde y a falta de dos jornadas para que acabase la Serie A, concretamente el 10 de diciembre de 1936 se publicó en El Mundo Deportivo la siguiente noticia:

Casi por sorpresa hubo anoche en la Federación Catalana una reunión de clubs para tratar de una propuesta que ha sido hecha por la Federación Valenciana y clubs levantinos, encaminada a la organización de un torneo entre los cuatro clubs Valencia, Hércules, Levante y Gimnástico con los cuatro mejor clasificados en el Campeonato de Cataluña.

De la posibilidad de un torneo entre Cataluña y Levante ya se habló hace algún tiempo, cuando se trataba de la participación del Madrid en nuestro Campeonato, pero esta sugerencia que fue hecha por un representante del Barcelona no había tomado pie hasta ayer.

Al entrar anoche en la Federación nos vimos sorprendidos por la presencia en las oficinas federativas del señor Rodríguez Tortajada, teniente de alcalde de Valencia y actual presidente del Valencia FC, al cual acompañaban el buen amigo Colina y el compañero Molina directivo del Gimnástico valenciano.

Pero en esa reunión no hubo fumata blanca. Reunidos aparte los representantes de los seis clubs de la Seria A con el presidente de la Federación Catalana de Fútbol, Ramón Eroles, dieron una negativa como respuesta. Fue Rosendo Calvet, el delegado barcelonista quien así lo hizo público:

Se ha decidido no aceptar, en principio, la proposición valenciana. Al Barcelona le interesaría jugar el torneo, pero habiéndose manifestado algún club en otro sentido, el deber del Barcelona es el de situarse al lado de los clubs catalanes.

Jaime Casamitjana, delegado del CD Español fue más directo:

No interesa el torneo. Los desplazamientos son costosos y en las actuales circunstancias nos parece que una competición, como por ejemplo la Liga catalana, después del Campeonato de Cataluña, sería lo más indicado.

También en la misma noticia se recogía el siguiente comentario:

De otra parte sabemos que los delegados valencianos visitaron ayer el Sindicato de Profesionales del Fútbol y que se les dijo en dicha secretaría que sería visto con buenos ojos por dicho organismo la celebración del proyectado torneo.

La posible Liga del Mediterráneo para el Sindicato de Profesionales del Fútbol se convirtió en una muy buena propuesta para mantener la actividad futbolística. Aunque ese sería ya el objetivo de la nueva junta directiva del sindicato, porque terminado el proceso fundacional el 18 de diciembre se celebraron elecciones y salió la nueva directiva:

Presidente: Patricio Caicedo (entrenador del CD Español)

Vicepresidente: Pedro Solé (CD Español)

Secretario: José Luis Zabala (entrenador del Gerona FC)

Tesorero: Antonio Franco (FC Barcelona)

Contador: Francisco Betancourt (FC Badalona)

Entre sus principales objetivos, como era de esperar, estaba organizar una nueva competición que garantizase los ingresos suficientes para cubrir los sueldos de las plantillas profesionales.

Los delegados de clubs de la Serie B, el señor Vidal del Júpiter y el señor Miró del Sans, recuperaron la idea de Ramón Eroles, que durante el mes de diciembre había dejado de asistir a las reuniones del Consejo directivo de la Federación Catalana de Fútbol: una liga que juntase a los catorce equipos de la Serie A y de la Serie B, contabilizándose a su vez los partidos entre los equipos implicados como torneo de promoción.

Era una solución con defecto. Cierto que cubría 26 fechas, pero privaba a los equipos de Segunda Preferente del derecho a promocionar a la Serie B, o lo que es lo mismo, libraba a los últimos equipos de la Serie B de bajar a Segunda. Así se publicaba en El Mundo Deportivo del 30 de diciembre como se respondió a tal propuesta:

Los clubs de la Primera B han propuesto a la categoría superior que al propio tiempo de jugar la Liga, los seis clubs afectados por la promoción a Primera Categoría puntúen aparte para promocionar jugándose en esta puntuación cuatro puestos de ascenso a la Categoría A que ha de ser ampliada a ocho clubs para la temporada próxima y en estos cuatro puestos de ascenso entran en juego el Badalona y el Sabadell que han resultado colistas del Campeonato.

En cambio en lo que afecta al descenso a la Preferente, los clubs de la Categoría B han sido egoistones, ofreciendo una generosa ampliación con un añadido de cuatro puestos más para ampliar el grupo con vistas a la temporada próxima, librándose del descenso invitando a los clubs de la Preferente a que entre sí, en un grupo de seis entre los mejor clasificados, eliminen por puntos a dos de ellos y pasen los cuatro vencedores a engrosar sus grupos.

Pero Badalona y Sabadell no aceptaron porque seguían corriendo el riego de descender, mientras que los últimos clasificados de la Serie B se libraban de ello. Los equipos de Segunda Preferente tampoco quedaban satisfechos con esta propuesta. Estos enfrentamientos trajeron como consecuencia la dimisión del delegado de Primera A, el señor Roca, que fue sustituido por el doctor Güell.

Con la tensión en el ambiente el Comisariado de Educación Física y Deportes se frotaba las manos. Sabía que la supuesta Liga Catalana con catorce equipos solo acrecentaría las deudas de los equipos profesionales tanto por las flojas recaudaciones en los partidos contra rivales muy inferiores como por el número de desplazamientos, dado que el radio de acción se ampliaba en muchos kilómetros.

Parecía que no había otra alternativa, pero no se contaba con el irreductible José Rodríguez Tortajada. El presidente del Valencia FC, aprovechando un partido amistoso entre el Barcelona y el Valencia en la Ciudad Condal reiteró la oferta de un torneo entre catalanes y valencianos. La idea de montar una competición valencianocatalana cobraba cuerpo según El Mundo Deportivo del 8 de enero de 1937:

En este punto, días después, no hace muchos, se juega el Barcelona-Valencia en Las Corts y de nuevo los valencianos aprovechan el viaje para volver a poner sobre el tapete la cuestión del Torneo Cataluña-Valencia, dando ciertas garantías económicas a los clubs catalanes. Los seis de la Primera A estudiaron conjuntamente el proyecto de nuevo cuño y presentaron a los valencianos las condiciones en que participarían en dicho Torneo. Y, a estas horas, es casi seguro que los valencianos han dado su conformidad y la fecha del 24 de los corrientes para dar comienzo al mismo.

El cambio de estrategia de los clubs valencianos, que aceptaron pagar a los catalanes una compensación económica por los desplazamientos provocó un cisma entre los equipos catalanes:

Como es lógico los de la Primera B están que muerden, pues de no jugar la promoción y llevarse a efecto el Torneo Cataluña–Valencia, que lo jugarían diez clubs y terminaría el 23 de mayo próximo -¡nada menos!- quedarían poco menos que en paro forzoso, ya que los cuatro últimos clasificados de su categoría se librarían de la quema jugando la promoción con los seis mejor clasificados de Segunda Preferente.

De nuevo el tema de las promociones se convertía en el principal obstáculo. Y sería el detonante para que reapareciese Ramón Eroles, tratando de dinamitar -¿seguía instrucciones del Comisariado?- el acuerdo entre clubs valencianos y catalanes:

Por si esto no fuese una razón de bastante peso, queda también una nota que la Federación Catalana ha remitido a los clubs en el día de ayer, dándoles cuenta de algunos acuerdos tomados en la reunión celebrada por el Consejo directivo el miércoles último y en la que se dice:

“Torneos de promoción. También es acuerdo del Consejo directivo empezar los torneos de promoción en las diversas categorías una vez terminados los partidos de los diversos grupos del Campeonato de Cataluña. Por consiguiente, dichos torneos se iniciarán el día 31 de enero o el 7 de febrero próximo, en el caso de surgir dificultades para empezarlo en la referida fecha del 31”.

También nos informamos anoche de que, por su parte, el Consejo de la Federación, en la misma reunión, tomó el acuerdo de autorizar a los cuatro clubs no afectados por la promoción para que puedan participar libremente en cualquier competición, dando por descartada ya la proyectada Liga de Cataluña.

El 9 de enero de 1937 en los locales de la Federación Valenciana de Fútbol se confeccionó el calendario de la Liga del Mediterráneo. O mejor dicho, los calendarios, porque se hizo uno con los diez equipos previstos y otro sin contar con el Sabadell y el Badalona. Este doble calendario anticipaba que los dos clubs fuertes, FC Barcelona y CD Español, estaban dispuestos a jugar la nueva competición por encima de todo, incluida la solidaridad con Badalona y Sabadell. A su regreso los seis clubs de la Serie A se reunieron con su delegado federativo e hicieron la siguiente declaración:

Los clubs de la Primera Categoría A, de acuerdo con su delegado representante, esperan que el Consejo federativo nos dará estas facilidades por no perjudicar a los clubs afectados por la promoción, que, por otra parte, saben que tienen la obligación ineludible de jugar. Tan sólo piden que sea aplazado su comienzo para que no se les perjudique en sus intereses.

Y recibieron la negativa por parte de la Federación Catalana de Fútbol que además confirmó que las promociones comenzarían el 31 de enero o el 7 de febrero a más tardar.

Este revés confirmó que la unidad entre los seis equipos de la Serie A ya venía rota desde Valencia. Sus respectivos delegados tuvieron una áspera reunión en los locales del FC Barcelona el 19 de enero. Debían resolver un dilema: seguir juntos y desacatar las órdenes de la Federación Catalana de Fútbol o abandonar a su suerte al Sabadell y al Badalona. Del final de la reunión dio cuenta El Mundo Deportivo:

Finalmente salieron los delegados de los clubs Gerona, Granollers. Sabadell y Badalona por una puerta de escape abandonando el local. Iba también con ellos el consejero federativo Güell, representante de la categoría en la Federación, y por más que intentamos obtener detalles de lo acontecido, no obtuvimos respuesta.

Y comprendimos, por las caras, que las buenas relaciones habían quedado rotas y que algo trascendental había sucedido en la reunión y que probablemente la Liga Oficial Levante Cataluña no empezaría el domingo próximo.

En efecto, quedaban arriba los delegados del Barcelona y del Español y aguardamos pacientemente su salida, que no tardó en producirse. También ellos parecían algo preocupados y si bien en principio nos recibieron con alguna reserva, terminaron por resumir en pocas palabras lo sucedido y los acuerdos tomados.

No hay en concreto otra cosa que lo siguiente: los cuatro clubs clasificados de la Primera Categoría A, disciplinados ante todo, y no queriendo perjudicar a los clubs de la Federación que se han ratificado en mantener las promociones para el día 31 del corriente sin aceptar aplazamiento alguno, han acordado, después de conferenciar con Valencia, que la Liga Oficial Levante Cataluña quede reducida a ocho participantes, para que Sabadell y Badalona puedan concurrir a la promoción.

FC Barcelona y CD Español esgrimieron la mejor excusa: su lealtad a la Generalidad Catalana y a la persona que la representaba en la Federación Catalana de Fútbol. Así lo expresaban sus respectivos delegados:

Hasta el último instante hemos defendido la participación de seis clubs considerando casi como nuestros los intereses de Badalona y Sabadell, pero viendo que no han sido aceptadas las proposiciones de aplazamiento de las promociones por las demás categorías y el Consejo federativo, cuyo presidente ostenta la representación de la Generalidad, no hemos querido ponernos en contra de la voluntad de la mayoría. Eso es todo.

Lógicamente, esa postura legalista no satisfizo en absoluto a los clubs Sabadell y Badalona que se sentían claramente perjudicados. Ambos clubs publicaron una nota conjunta aclarando lo sucedido y declarando abiertamente el respaldo recibido por el Sindicato de Profesionales del Fútbol.

Porque, efectivamente, hasta este momento el Sindicato de Profesionales del Fútbol se había mantenido un tanto en la retaguardia. Desde el principio se había manifestado a favor del torneo con los valencianos y mientras las conversaciones fueron fructificando en una línea positiva no tomaron parte. Todo iba bien hasta que FC Barcelona y CD Español se desentendieron de CE Sabadell y FC Badalona. Entonces empezaron a hacer acto de presencia, primero en la Federación Catalana de Fútbol. Una visita de la que el 21 de enero El Mundo Deportivo daba el siguiente testimonio:

La visita a la Federación Catalana del Sindicato de Profesionales del Fútbol, de una parte era para comunicar al Consejo de la Federación que vería con gusto la participación de Sabadell y Badalona en la Liga Oficial Levante Cataluña.

Los consejeros Eroles, Güell, Pi y Peiró, que les recibieron, procuraron hacerles ver que la posición del Consejo en este asunto no tenía nada de ilegal y que se habían limitado a dar cumplimiento a la voluntad de los clubs de las distintas categorías, que pedían el comienzo de las promociones inmediatamente después de terminado el Campeonato de Cataluña, y a esto, y no a otra cosa, se había limitado su gestión.

Parece, sin embargo, que los visitantes no quedaron satisfechos con las explicaciones dadas por el Consejo federativo. Formaban la comisión visitante Caicedo, Zabala, Franco, Betancourt y Cangrós y salieron de la presidencia sin haber llegado a un acuerdo, existiendo la impresión de que es muy probable que el Sindicato quiera intervenir directamente a favor del Sabadell y el Badalona para que concurran a la Liga por encima de todas las disposiciones oficiales y hacer que sean aplazadas las promociones.

Esto de un lado. Por otra parte, el consejero Güell, después de haber cambiado impresiones con el Badalona y los delegados de los clubs que se hallaban en la Federación, pero no pudieron hacerlo con el Gerona y el del Barcelona por hallarse ausentes en aquel momento, se nos ha dicho que puso en conocimiento del Consejo federativo, aunque deseando que se mantuviera en secreto su actitud hasta que pudiera dar conocimiento de ello a Barcelona y Gerona, que dimitía el cargo por el cual fue elegido hace unos días precisamente.

Este punto, que oficialmente no hemos podido comprobar, pero que según se nos ha dicho es cierto, obedece a una cuestión de delicadeza por parte del compañero Güell, quien, al parecer, no considera muy de acuerdo con su intervención como consejero en este asunto, los cambios de criterio que en pocos días se han manifestado en los clubs de la categoría por él representada.

La marejada que el martes pasado se produjo en la reunión de la Primera Categoría A continuó ayer con intensidad en la Federación de Fútbol. Veremos si el buen sentido se impondrá finalmente y si se encauzarán las cosas con la debida serenidad, ya que en los momentos actuales no parece muy procedente complicar la marcha del fútbol profesional, sino, por el contrario, allanarle todos los obstáculos en beneficio de aquellos que más interesados están para que no se entorpezca su trayectoria.

Bien se avisaba desde El Mundo Deportivo que no eran tiempos favorables como para forzar la situación para el fútbol profesional.

Con la intención de dar una respuesta conjunta e irrevocable del sector de trabajadores del fútbol se convocó una asamblea extraordinaria para el siguiente sábado día 23 en los locales de la UGT, calle Diputación 277, bajo.

Afortunadamente en El Mundo Deportivo del 24 de enero se publicó una crónica pormenorizada de la asamblea, con lo que nos podemos hacer una idea de que los intereses enfrentados ya habían alcanzado al seno del propio Sindicato:

Ayer tarde tuvo lugar en un local de la UGT sito en la calle Diputación la asamblea del Sindicato de Profesionales del Fútbol, convocada para resolver el caso de la posible participación de Sabadell y Badalona en la Liga Oficial de Cataluña y Levante y el comienzo de las promociones acordado para el día 31 por la Federación Catalana.

Con asistencia de un centenar de asociados empezó la reunión ocupando la mesa los miembros del Consejo Directivo del Sindicato, Caicedo, Zabala, Ramón, Franco, Betancourt, Solé, Cangrós y Vantolrá, presidiendo Caicedo, el cual dio por empezado el acto poniendo en antecedentes a los reunidos, de las causas de la convocatoria. Advirtió a todos que habiendo notado que muchos jugadores iban ya aleccionados por sus clubs el deber de todos era recapacitar y darse cuenta de la importancia de la reunión.

A continuación, Zabala dio lectura de un resumen en el que se detallaba la gestación del pleito planteado por la disposición federativa de dar comienzo a las promociones y el perjuicio que con ello se causa a Badalona y Sabadell así como la postura del Consejo del Sindicato al ponerse al lado de estos clubs en convencimiento de que les asistía la razón en pedir que no se les excluya de la competición levantino-catalana.

Fueron leídas unas cartas de Sabadell y Badalona dirigidas al Sindicato pidiéndole que les apoyase en defender sus intereses dañados por el perjuicio que representaba esto para sus jugadores y dio cuenta la presidencia de una visita hecha a la Federación Catalana del Sindicato a favor de la participación de los dos clubs en el torneo liguero y de las explicaciones dadas por el Comité de la Federación aclarando que se ha limitado en todo a dar cumplimiento de las disposiciones tomadas por los propios clubs de las distintas categorías. También dijo Caicedo que la Asamblea había sido convocada por sugerencia de la Federación al objeto de conocer el criterio de los Profesionales del Fútbol y acatar su decisión en definitiva. Recalcó Caicedo que el asunto a resolver era grave y que de él dependía quizás la eficacia del Sindicato. Quelas promociones nunca se han jugado en esta fecha y que procedía dar facilidades a Badalona y Sabadell buscando una fórmula que bien podría ser el aplazamiento de las promociones jugando los clubs de las demás categorías una Liga Catalana.

Intervino Vilaseca, del Martinenc, diciendo que no comprendía como de la aprobación o no del punto de vista del Consejo del Sindicato, ya que si se iba a una votación y una mayoría de votos imponía un acuerdo no podía esto dar ligar a quebranto alguno para ella. Dijo además que si defendían los intereses de los jugadores de Sabadell y Badalona olvidando que los demás clubs de las distintas categorías son en mayoría y se verían privados de jugar hasta la terminación de la liga levantina competiciones de interés.

Caicedo insiste en la proposición de una Liga Catalana, replicándole Vilaseca que una liga de esta naturaleza tendría el carácter de una serie de partidos amistosos sin objeto alguno y con gastos de desplazamiento que llegarían a cubrirse y que lo procedente sería jugar ahora la promoción.

Schild del Badalona manifiesta que el Consejo del Sindicato no merecía quedar en situación difícil por haber apoyado a Badalona y Sabadell y que todos debían apoyarlo. Añadió que Vilaseca miraba las cosas desde su club, pero que ignoraba los gastos que lleva hechos el Badalona en su campo y que el Campeonato de Cataluña no ha dado el rendimiento que ahora podía dar una competición de liga oficial. Que era muy justo que se diera a Sabadell y Badalona facilidades ya que ellos no se negaban a jugar la promoción.

Interviene Sánchez, exdirigente del Sindicato, diciendo que dentro de tres meses nadie sabe lo que puede suceder y que es preciso por ello resolver la fórmula que beneficie a un mayor número de asociados. Cree que el perjuicio es mucho mayor que Sabadell y Badalona concurran a la liga, dejando en cambio para más adelante las promociones. Dice además que poca diferencia hay de Sabadell y Badalona a los clubs de las demás categorías porque también sus jugadores no son profesionales completos y que no ve el perjuicio que puede reportarles jugar ahora la promoción.

Gracia, del Sabadell, contesta que en su club hay por lo menos cuatro o cinco profesionales netos.

Sánchez propone que los demás socios del Sindicato, si el jugar la promoción puede causar perjuicio económico a los jugadores de Sabadell y Badalona, abonen una cuota especial que pueda cubrir lo que no alcancen los sueldos que dejen de percibir. Ante una intervención de la presidencia, dice que no ve el porqué pueda el Sindicato decidir si se vota en contra y que todavía saldrá fortalecido según sea el resultado de la votación.

Intervienen los entrenadores Santpere y Bru para apoyar al Consejo Directivo en su gestión. A preguntas de Bru, dice la presidencia que el Barcelona les remitió una carta dándoles cuenta del acuerdo tomado de prescindir de Badalona y Sabadell para jugar la liga, habiéndose antes acordado que serían los seis clubs del Grupo A los que tomarían parte de ella.

Pedrol pide la palabra para defender la posición del Barcelona. Dice que su club apoyó hasta el último momento la participación de seis clubs, apurando todos los medios, pero que este apoyo como era lógico había de tener un límite. No podía el Barcelona, ante la disposición federativa de que jueguen las promociones, colocarse al lado del Sabadell y Badalona y en contra de los demás clubs de la Federación cuyos intereses le son tan estimables como los de aquellos.

Bru pide le aclaren si la Federación para tomar acuerdos relacionados con la competición de liga pidió la aquiescencia del Sindicato y dice que los jugadores no deben olvidar que en todo caso la Federación representa unos intereses “patronales” y que los jugadores no deben olvidar esto, para imponer sus derechos.

Se produce un pequeño lío y Franco se ve obligado a intervenir para poner orden indicando que se abstengan de pedir “palabras previas”.

Buj, del Sabadell, dice que hay que mirar el beneficio de todos y que si en temporadas anteriores se hacía una liga al terminar el Campeonato de Cataluña, que no es justo no se reconozca a Sabadell y Badalona el derecho que tienen de jugarla también ahora.

Hay varias intervenciones algo embarulladas. Cristiá, del Badalona, dice que lo que importa es defender los intereses del Sindicato y que deben tener en cuenta que la reunión que se está celebrando no es más que una “maniobra” de la Federación contra el Sindicato de jugadores.

Por fin surge la proposición de una votación. Sánchez interviene diciendo que sea cual sea el resultado de la votación que no se diga que en él se ha ido contra nadie. Además recoge unas palabras de Bru diciendo que la Federación está presidida por un representante de la Generalidad, que esto no hay que olvidarlo y que el momento presente no es muy apropósito para intentar un “acto de fuerza” contra aquel organismo y mucho menos para un asunto como el que se debate.

Vantolrá aclara que la Federación aceptará sin duda lo que los profesionales del fútbol decidan en la asamblea.

Hay varias intervenciones y Zabala se levanta finalmente para decir desde la mesa que los clubs de la primera categoría que volvieron atrás en sus acuerdos desplazando a Sabadell y Badalona no tuvieron en cuenta el parecer de sus jugadores y que estos debieron ser consultados y que todo junto, clubs y Federación, ha sido como una puñalada que se ha pretendido dar al Sindicato en la forma hábil de llevar este asunto.

Bru cree que la Federación reconoce su error desde el momento que dice aceptará lo que el Sindicato decida y que lo que procede es avalar la gestión del Comité del Sindicato.

No hay manera de llegar a un acuerdo y en medio de una verdadera confusión surge una proposición incidental de Sánchez, que Caicedo lee a la asamblea. La proposición es de aplazamiento del acto por no haber sido convocado con los tres días de anticipación que exige cierto artículo del reglamento. Sánchez aclara que la reunión podrá ser aplazada para el martes próximo ya que es muy tarde para resolver un asunto en el que el acuerdo resulta tan problemático.

Cristiá, en contra, presenta una proposición en el sentido de que se conceda un voto de confianza al Consejo para  que busque una fórmula que resuelva el conflicto sin dañar a la segunda categoría.

Vilaseca insiste que no hay fórmula posible si se perjudica a una gran mayoría de jugadores para favorecer en cambio a dos clubs solamente.

El debate aumenta en vivacidad y acaba en un diálogo entre Franco y Vilaseca en el que no consiguen convencerse mutuamente en sus puntos de vista.

Dámaso insiste en que sea aplazada la asamblea como pedía Sánchez. No se accede a ello y la mesa propone votar la proposición de confianza al Comité para que obre como le parezca mejor en el sentido de no lesionar los intereses de Badalona y Sabadell, ni tampoco los de los demás clubs.

Los jugadores no perteneciente a la Primera Categoría A se retiran al fondo de la sala, mientras van votando los de aquel grupo.

Hecha la votación, el Consejo da cuenta de que le ha sido otorgado el voto de confianza por treinta votos a favor y ninguno en contra, levantándose la sesión.

La Asamblea había sido caótica. Pese a que el presidente, el entrenador españolista Patricio Caicedo, mostró una postura favorable a la participación de Badalona y Sabadell en la Liga del Mediterráneo, pronto el debate se le escapó de las manos puesto que, al igual que en la Federación Catalana de Fútbol, surgieron los intereses particulares de los demás clubs. Llamaba la atención el supuesto compromiso del presidente incautador, Ramón Eroles, de aceptar la decisión del Sindicato, fuere la que fuere. Pero estuvo más listo Alberto Sánchez, exsecretario del Sindicato y jugador del Barcelona, al recordar que la asamblea no cumplía uno de sus requisitos reglamentarios y por lo tanto no sería válido acuerdo alguno. Con ello evitaba que el Sindicato se pronunciase oficialmente sobre el caso, aunque el Consejo Ejecutivo, al menos ganó un voto de confianza para negociar en representación de todos. En otras palabras, no se había adelantado nada porque es lo que se había estado haciendo hasta ese momento.

El Consejo directivo del Sindicato, armado con ese voto de confianza asambleario, tuvo al lunes siguiente una reunión previa para fijar estrategia y seguidamente se desplazó a los locales de la Federación Catalana de Fútbol y negociar con su directiva. Esto fue lo que pasó, según El Mundo Deportivo:

Estaban presentes en el local los consejeros Guardia y Peiró y ausente el presidente incautador, señor Eroles y el consejero Pi.

Los representantes del Sindicato conferenciaron durante largo rato con los federativos y fueron llamados a la secretaría los delegados de Sabadell y Badalona.

Al parecer la ponencia sindical les invitó, en busca de la ansiada fórmula a que accediesen a jugar la promoción pero hubo por parte de los requeridos una actitud irreductible que hizo imposible todo acuerdo.

Hoy vuelve a reunirse el Comité Ejecutivo del Sindicato y la pelota continúa en el tejado, esperando los numerosos clubs de las distintas categorías afectadas por la promoción y los cuatro de primera categoría a que se encuentre una solución a gusto de los clubs Badalona y Sabadell que se consideran dañados en sus intereses.

Por su parte, los cuatro clubs catalanes libres de promoción confirmaban que el próximo fin de semana empezarían la competición levantinocatalana sin Badalona y Sabadell.

Esta noticia dejaba al Sindicato en muy mal lugar. El caso era que ya no tenía fuerza porque estaba roto por su mitad. El domingo 24, un día después de la caótica asamblea, se había jugado un Español-Barcelona amistoso que permitió un intercambio de opiniones entre los jugadores de ambos equipos. Posteriormente se reunieron y acordaron, a favor de sus intereses personales, ratificar las decisiones que habían tomado las juntas directivas de sus respectivos clubs. A su vez, los jugadores del Badalona y miembros del Consejo Ejecutivo del Sindicato habían puesto su cargo a disposición del presidente. Era la comprobación que en la Serie A había dos niveles: los profesionales absolutos y los profesionales a medias y no compartían los mismos intereses.

Finalmente, el Sindicato de Profesionales del Fútbol publicó en El Mundo Deportivo con fecha del 28 de enero la siguiente nota:

Ya se conocía el documento firmado por nuestros seis primeros clubs, para tomar parte en el torneo con Levante. Inmediatamente, otro acuerdo tomado en la Federación, obliga a Badalona y Sabadell a jugar las promociones acordadas, eliminándoles por lo tanto del Torneo con Levante.

Creado este conflicto, el Comité ejecutivo, tras detenido estudio, consideró que es un acto de injusticia el que se ha cometido con estos dos clubs, y acuerda defenderlos con todo entusiasmo para que el pacto firmado sea respetado.

El conflicto va adquiriendo grandes proporciones y el Comité resuelve hacer una visita a la Federación, con el fin de conocer más a fondo el problema. En esta entrevista sacamos la consecuencia de que la Federación no ha intervenido para nada y por ello todo sigue en la misma tesitura.

Esta delicada situación nos obligó a celebrar una Asamblea extraordinaria, teniendo en cuenta que, a pesar de que reglamentariamente el tiempo de diez días que marcan nuestros estatutos no podía usarse por falta del mismo, consideramos que la gravedad del momento nos obligaba a presentarnos ante nuestros afiliados y que fuera la Asamblea la que considerase la validez o no de la misma.

A pesar del voto de confianza que obtuvo este Comité en dicha Asamblea, acordamos, en vista del desarrollo de la misma, que esta fuera considerada como no válida. Previa nueva reunión, se hizo una última visita a la Federación Catalana. En esta reunión se conocieron datos, aportados por el camarada Guardia, que desconocíamos, pero que, en definitiva, no resolvían tampoco el problema.

En vista de los resultados obtenidos, se acuerda tomar una determinación definitiva en el sentido de prescindir, por el momento, de todo cuanto no sea el bien general.

Se mantiene el punto de vista de que se ha cometido, por parte de un sector futbolístico, un acto de indelicadeza.

Que en vista de que el conflicto actual no tiene solución completa, y de que en los actuales momentos una determinación enérgica causaría un perjuicio incalculable a toda la colectividad, se acuerda que, como mal menor, jueguen la promoción el Badalona y el Sabadell, sin olvidar de que en caso de que estos dos clubs salieran perjudicados en sus intereses monetarios, nos pondremos inmediatamente a disposición de los mismos incondicionalmente en el sentido de reparar dichos perjuicios.

Este acuerdo se toma por unanimidad, con la salvedad de los camaradas Ramón y Betancourt, que por razones de delicadeza, se abstienen de votar y ofrecen sus cargos al Comité.

El secretario: José Luis Zabala.

La nota, además de hacer un resumen del recorrido hasta el momento en el conflicto, tiene un aire más que de resignación, de derrota. La dimisión de Ramón y Betancort era la confirmación del fracaso del Sindicato en su actuación como tal y se agravaba con la nota conjunta que publicaron las directivas de Badalona y Sabadell:

Que la primera actuación pública del Sindicato de Profesionales del Fútbol deja en situación bien equívoca a su Comité ejecutivo que consiente y ampara –aunque con el paliativo de aceptarlo como mal menor- la injusticia cometida con dos clubs que por su historial eran merecedores de un trato bien diferente.

Y sucedió que…

  • el 31 de enero de 1937 se jugó la primera jornada de la Liga del Mediterráneo con ocho equipos.
  • el 3 de febrero en la reunión en los locales de la Federación Catalana de Fútbol de los equipos implicados en la promoción se les comunicaba que la Serie A sería ampliada a ocho equipos y por tal motivo Badalona y Sabadell no pondrían en juego sus plazas sino que participarían en el torneo de manera amistosa siendo puntuables solo los partidos entre los cuatro equipos de la Serie B que aspirasen a ganar las dos plazas para completar la ampliación…

Tanto discutir sobre las promociones para acabar en que no se jugarían. Como decía el Borracho de Luces de Bohemia: ¡cráneo prevelegiado!

(continuará)




Los equipos de la Liga. Girona Futbol Club

GironaFC001GironaFC002Girona Fútbol Club (Clasificación-51). Con las puntuaciones que se obtengan de la temporada 2021-22, quedará situado en el puesto 50.

Se adjuntan los datos numéricos del Girona Fútbol Club en las temporadas que ha militado en 1ª División y 2ª División. Aparece en el primer cuadrante los jugadores, partidos disputados por todos los jugadores siendo titulares, goles anotados, penaltis transformados, goles encajados en propia puerta, tarjetas rojas o expulsiones con las que han sido sancionados. A continuación en el siguiente cuadrante, los puntos obtenidos: por temporadas, goles, tarjetas y puntos totales que ha conseguido el equipo, según los coeficientes de puntuación otorgados en “Baremación de jugadores. La valoración de los futbolistas”, que se ha detallado en el artículo nº 80 de esta revista digital.

Jugd.

Ptd.1ª

Ptd.2ª

Gol 1ª

Pen.1ª

P/P 1ª

Gol.2ª

Pen.2ª

P/P 2ª

TR1ª

TR2ª

347

836

8.162

87

12

5

1.054

86

21

4

93

Pt.Tpda.1ª

Pt.G.1ª

Pt.Exp.1ª

Pt.Tpda.2ª

Pt.G.2ª

Pt.Exp.2ª

Ptos

527’432

80’2

-6.0

3.554’588

569’79

-88’8

4.637’210

Desglose de Temporadas del Girona Fútbol Club.-

Denominación

Temporadas

Gerona Foot-ball Club

1930-1941

Gerona Club de Fútbol

1941-1980

Girona Fútbol Club

1980 en adelante

 

Categorías

%

1ª División

2

2’25

2ª División

24

26’97

2ªB División

13

14’60

3ª División

44

49’44

Regional

6

6’74

T O T A L

89

100

Composición de los jugadores del Girona Fútbol Club.-

Jugadores 347 de los que 25 han sido porteros.

División

Titulares

Goleadores

Otr.Jugd.

Suplentes

T.21/22

Total

17

4

8

2

31

157

67

84

15

10

333

1ª y 2ª

15

2

17

TOTAL

159

69

92

17

10

347

Titulares: Son los jugadores que han sido los titulares de cada equipo, por haber disputado entre los 11 jugadores que componen el equipo incluido el portero más minutos en las jornadas de cada temporada que el resto de los jugadores del equipo.

Goleadores: Aparecen los jugadores que han anotado goles y no han sido titulares de los equipos en la temporada.

Otros Jugadores: Son los jugadores que no han sido titulares de los equipos en las temporadas y tampoco han anotado algún gol, pero si han actuado de titulares en alguna o varias jornadas de alguna temporada.

Suplentes: Son los jugadores que han intervenido sustituyendo a algún compañero de equipo no siendo titulares en ninguna jornada y que tampoco han anotado algún gol.

Lugar de nacimiento de los jugadores del Girona Fútbol Club.-

306 (88’18%) jugadores nacidos en España. 41 (11’82%) jugadores nacidos en países del extranjero. La mitad de los jugadores han nacido en la comunidad de Cataluña 174 (50’14%). Las provincias de Girona y Barcelona acaparan muy destacadas el mayor número de jugadores. (45’5%).

País/Provincia

Jugadores

%

País/Provincia

Jugadores

Girona

87

25’07

Argentina

6

Barcelona

71

20’46

Las Palmas

6

S/D

20

5’76

S.C.Tenerife

6

Madrid

15

4’32

Sevilla

6

Lleida

8

2’31

Tarragona

6

Is. Balerares

7

Vizcaya

6

Murcia

7

Uruguay

4

Navarra

7

Otras

78

Valencia

7

T O T A L

347

Jugadores más destacados del Girona Fútbol Club.-

Se relacionan en el cuadrante que se acompaña a los 30 jugadores del Girona Fútbol Club que han obtenido mayor número de puntos. Se reflejan las temporadas que han pertenecidos al equipo, las temporadas que han sido titulares, los goles anotados en sus diversas facetas, las tarjetas rojas o expulsiones con las que han sido sancionados, los puntos que han obtenido según baremación, los partidos disputados como titulares en el equipo y el número de la clasificación que tienen entre los 20.549 jugadores evaluados. Muy destacado está el goleador Stuani seguido de  los gerundenses Granell y

Pere Pons. 17 son los jugadores catalanes que ocupan las primeras posiciones.

Stuani

Stuani

Consumado goleador que anota goles de imponentes remates de cabeza con facilidad.

Granell

Granell

Centrocampista organizador, líder y temperamental

Pere Pons

Pere Pons

Centrocampista de clase y creación. Ídolo para los hinchas y ejemplo de sacrificio, esfuerzo y constancia.

Borja García

Borja García

Mediapunta ofensivo, fuerte con potencia y rápido que aporta goles desde la banda.

Migue

Migue

Defensa con muchas temporadas en el equipo, que aporta veteranía y experiencia. Anotó el gol que supuso el ascenso a la 2ª División.

Portu

Portu

Centrocampista ofensivo con desborde, rápido y con mucha brega y participación en el juego del equipo, que se prodiga en asistencias a sus compañeros y en donde también anota goles.

Juanpe

Juanpe

Defensa central líder de la defensa, sobrio y buen juego aéreo, con excelente físico. Se incorpora al ataque al balón parado.

Farró

Farró

Jugador muy longevo en el equipo, titular indiscutible que jugaba de defensa. Deportista íntegro y muy querido por la afición.

Ramalho

Ramalho

Defensa polivalente que puede actuar de lateral derecho o central

Jandro

Jandro

Jugador de gran talento, técnica y eficacia goleadora.

Jugadores

TDI.

TPF.

Prov/País

Tt.

1G

1P 1pp

2G

2P 2Pp Ex.

Puntos

Ptd

Clasif.

1

Stuani

2017/18

2021/22

. uruguay

3

40

10

 

39

14

 

1

115,784

118

 292

2

Granell A.

2014/15

2020/21

girona

6

1

   

13

4

 

1

93,429

191

 2.904

3

Pere Pons

2012/13

2018/19

girona

5

1

   

3

   

2

83,477

181

 2.591

4

Borja García

2015/16

2021/22

madrid

5

3

   

14

   

1

80,098

146

 1.155

5

Migue G.

2008/09

2013/14

barcelona

6

     

6

 

1

3

79,960

211

 3.008

6

Portu C.

2016/17

2018/19

murcia

3

20

1

 

8

     

79,344

106

 1.118

7

Juanpe R.

2016/17

2021/22

las palmas

4

5

   

4

   

1

77,304

142

 2.243

8

Farró

1934/35

1942/43

girona

6

 

1

69,396

88

 4.074

9

Ramalho J.

2013/14

2020/21

vizcaya

3

1

 

2

4

   

3

68,351

149

 3.473

10

Jandro C.

2010/11

2014/15

asturias

4

     

36

14

 

1

68,030

128

 1.270

11

FelipeSanchón

2008/09

2016/17

barcelona

3

     

35

9

 

1

62,276

118

 3.524

12

Aday B.

2014/15

2020/21

barcelona

2

2

1

1

5

   

1

58,208

129

 4.645

13

Alcalá P.

2015/16

2019/20

murcia

4

2

   

5

 

2

2

56,766

123

 3.479

14

Francàs

1935/36

1942/43

barcelona

5

   

55,559

71

 3.717

15

Dorca

2008/09

2011/12

girona

4

     

5

   

2

55,366

142

 1.329

16

José M.

2008/09

2012/13

barcelona

5

     

1

   

3

53,223

150

 5.159

17

Trías M.

1934/35

1950/51

girona

3

     

4

   

2

52,753

73

 4.661

18

Isaac B.

2012/13

2015/16

barcelona

3

             

48,440

128

 4.138

19

Bernardo E.

2017/18

2021/22

. colombia

3

1

   

2

4

47,953

93

 1.570

20

Ferrer Jos.

1934/35

1942/43

girona

4

 

11

 

47,768

56

 5.591

21

Bono Y.

2016/17

2018/19

, canadá

3

   

1

       

46,323

83

 3.270

22

Richy

2011/12

2016/17

pontevedra

2

     

6

 

1

2

43,259

109

 4.696

23

Espelt

1956/57

1958/59

barcelona

3

     

25

7

 

1

42,458

93

 3.883

24

Eloi

2012/13

2017/18

girona

3

     

8

1

   

38,995

88

 6.406

25

Matamala J.

2008/09

2013/14

girona

2

     

5

   

1

38,064

94

 3.900

26

Sandaza

2014/15

2016/17

toledo

2

     

25

3

   

37,794

62

 5.162

27

Trujillo J.

1935/36

1940/41

las palmas

2

22

 

37,250

37

 3.833

28

Espada

1940/41

1942/43

girona

3

 

7

2

 

35,733

46

 2.429

29

Tébar

2009/10

2012/13

madrid

3

     

4

 

1

3

35,680

95

 4.192

30

Maffeo

2015/16

2019/20

barcelona

2

     

1

   

1

35,104

77

 5.415

Goleadores del Girona Fútbol Club.-

Se detalla en la relación que se adjunta a los goleadores del Girona Fútbol Club que más goles han anotado en el Campeonato Nacional de Liga, aparecen los goleadores que han marcado más de 20 goles en 1ª y 2ª Divisiones, figuran también los goles anotados en lanzamientos de penaltis. Ricardo Cristhian Stuani ha sido el jugador más goleador en 1ª y 2ª Divisiones, siendo el pichichi de la competición de 2ª División en la temporada 2019-20 con 29 goles. En la competición de 1ª División en la temporada 2017-18 anotó 21 goles.

Stuani

Stuani

Jugadores

TDI.

TPF.

1G

1P 2G 2P

Jugadores

TDI.

TPF.

1G

1P 2 G 2P
Stuani

2017/18

2021/22

40

10

39

14

Medina P.

1948/49

1949/50

23

1

Portu C.

2016/17

2018/19

20

1

8

Trujillo J.

1935/36

1940/41

22

Jandro C.

2010/11

2014/15

36

14

Javi Acuña

2011/12

2012/13

20

 
Fel. Sanchón

2008/09

2016/17

35

9

Peragón

2009/10

2010/11

20

2

Espelt

1956/57

1958/59

25

7

Xirau

1949/50

1950/51

20

2

Sandaza

2014/15

2016/17

25

3

Otros

27

1

757

34

Fontanet

1950/51

1950/51

24

  T O T A L    

87

12

1054

86

Mejores alineaciones del Girona Fútbol Club.-

El Girona Fútbol Club ha participado en la competición de 1ª División en 2 temporadas, consiguiendo el 10º puesto en la temporada 2017-18. Desde la temporada 2008-09 ha figurado en las competiciones de 1ª y 2ª Divisiones en 14 temporadas consecutivas. Las fotografías han sido extraídas de las publicaciones PACO de Juan Algar.

2017-18  (1ª-10): Bono; Maffeo, Bernardo, Ramalho, Mojica; Juanpe, Borja García, Portu; Pere Pons, Stuani, Granell.

Formación 2017-18: Arriba: Aday, Stuani, Timor, Alcalá, Juanpe, Bernardo, Bono.  Agachados: Maffeo, Portu, Granell, Pere Pons.

Formación 2017-18: Arriba: Aday, Stuani, Timor, Alcalá, Juanpe, Bernardo, Bono.
Agachados: Maffeo, Portu, Granell, Pere Pons.

2018-19  (1ª-18) : Bono; Alcalá, Bernardo, Pedro Porro, Aleix García; Granell, Juanpe, Pere Pons; Borja García, Stuani, Portu.

Formación 2018-19. Arriba: Stuani, Alcalá, Ramalho, Bernardo, Iraizoz. Agachados: Borja García, Douglas Luiz, Portu, Pere Pons, Granell, Raúl Carnero.

Formación 2018-19. Arriba: Stuani, Alcalá, Ramalho, Bernardo, Iraizoz.
Agachados: Borja García, Douglas Luiz, Portu, Pere Pons, Granell, Raúl Carnero.

2016-17  (2ª-2)  : Bono (René); Pere Pons, Alcalá, Ramalho, Portu; Borja García, Aday, Granell, Juanpe; Sandaza, Lopo.

Formación 2016-17: Arriba: Aday, Bono, Alcalá, Juanpe, Ramalho, Longo Abajo: Borja García, Portu, Cifuentes, Pere Pons, Granell.

Formación 2016-17: Arriba: Aday, Bono, Alcalá, Juanpe, Ramalho, Longo
Abajo: Borja García, Portu, Cifuentes, Pere Pons, Granell.

2014-15  (2ª-3)  : Isaac; Cifu, Lejeune, Ramalho, Richy; Granell, Pere Pons, Eloi; Mata, Sandaza, Felipe Sanchón.

Formación 2014-15: Arriba: Becerra, Richy, Lejeune, Sandaza, Eloi, Ramalho. Abajo: Coris, Cifuentes, Pere Pons, Felipe Sanchón, Granell.

Formación 2014-15: Arriba: Becerra, Richy, Lejeune, Sandaza, Eloi, Ramalho.
Abajo: Coris, Cifuentes, Pere Pons, Felipe Sanchón, Granell.

2012-13   (2ª-4)  : Dani Mallo; José, Chus Herrero, Migue, David García; Luso, Juanlu, Tébar, Jandro, Felipe Sanchón, Javi Acuña.

Formación 2012-13: Arriba: Dani Mallo, Richy, Tébar, Migue, Luso. Abajo: Javi Acuña, Eloi, Juanlu, Jofre, David García, Txiki.

Formación 2012-13: Arriba: Dani Mallo, Richy, Tébar, Migue, Luso.
Abajo: Javi Acuña, Eloi, Juanlu, Jofre, David García, Txiki.

2015-16  (2ª-4)  : Isaac; Alcalá, Kiko Olivas, Lejeune; Javi Álamo, Clerc, Pere Pons, Granell; Eloi, Mata, Borja García.

Formación 2015-16: Arriba: Becerra, Richy, Mata, Lejeune, Eloi, Kiko Olivas. Abajo: Felipe Sanchón, Clerc, Pere Pons, Aday, Granell.

Formación 2015-16: Arriba: Becerra, Richy, Mata, Lejeune, Eloi, Kiko Olivas.
Abajo: Felipe Sanchón, Clerc, Pere Pons, Aday, Granell.

2020-21  (2ª-5) : Juan Carlos; Calavera, Bernardo, Santi Bueno, Franquesa; Gumbau, Bárcenas, Cristóforo, Monchu; Samu Sáiz, Sylla.

2019-20  (2ª-5)  :Juan Carlos (Riesgo); Maffeo, Aday, Alcalá, Juanpe, Mojica; Borja García, Gumbau, Granell; Jairo, Stuani.

Formación 2019-20. Arriba: Aday, Marc Gual, Juanpe, Ignasi Miquel, Alcalá, Juan Carlos. Abajo: Maffeo, Borja García, Diamanka, Jairo, Granell.

Formación 2019-20. Arriba: Aday, Marc Gual, Juanpe, Ignasi Miquel, Alcalá, Juan Carlos.
Abajo: Maffeo, Borja García, Diamanka, Jairo, Granell.

1948-49  (2ª-10): Pujolrás C.; Virgili, Cros, Serra ., Miernau; Franch; Anjaumà, Medina, Mateu T., Huguet, Camps.

2010-11  (2ª-11): Santamaría; José, Dani Bautista, Serra A., Migue; Tébar, Dorca, Chechu, Moha; Jandro, Peragón.

Formación 2010-11. Arriba: Tébar, Kiko Ratón, Noguerol, Dorca, Dani Mallo, Migue. Abajo: Dani Bautista, Jandro, Chechu, Peragón, Luso.

Formación 2010-11. Arriba: Tébar, Kiko Ratón, Noguerol, Dorca, Dani Mallo, Migue.
Abajo: Dani Bautista, Jandro, Chechu, Peragón, Luso.

Clasificación y puntos del Girona Fútbol Club.-

Se relacionan las temporadas que el Girona Fútbol Club ha participado en las competiciones de 1ª y 2ª Divisiones con los puntos y clasificación obtenida, en letra negrita se indican las temporadas que estuvo en la competición de 1ª División. Figura en 14 temporadas consecutivas en las competiciones de 1ª y 2ª Divisiones, desde la temporada 2008-09.

Tpdas

Ptos.

Clas.

Tpdas Ptos

Clas.

1934-35

12

II-4

2009-10

52

14

1935-36

21

II-1

2010-11

57

11

1939-40

15

III-3

2011-12

49

15

1940-41

26

II-4

2012-13

71

4

1941-42

15

II-5

2013-14

51

16

1942-43

11

II-6

2014-15

82

3

1948-49

22

10

2015-16

66

4

1949-50

27

I-9

2016-17

70

2

1950-51

27

I-16

2017-18

51

10

1956-57

37

I-9

2018-19

37

18

1957-58

33

I-9

2019-20

63

5

1958-59

25

I-15

2020-21

71

5

2008-09

49

16

2021-22

Jugadores más expulsados del Girona Fútbol Club.-

En el cuadrante adjunto se relacionan los jugadores del Girona Fútbol Club que más veces han sido expulsados, aparecen las temporadas que han pertenecido al equipo. Albert Serra en las dos temporadas que estuvo en el equipo fue expulsado en 5 ocasiones. 4 expulsiones fueron sancionadas en los minutos finales de los encuentros.

Serra

Serra

Jugadores

TDI.

TPF.

1T 2T Ex.
Serra A.

2008/09

2010/11

 

5

5

Bernardo E.

2017/18

2021/22

2

2

4

Peragón

2009/10

2010/11

 

3

3

Rubén Alcaraz

2015/16

2016/17

 

3

3

Migue G.

2008/09

2013/14

 

3

3

Ramalho J.

2013/14

2020/21

 

3

3

Tébar

2009/10

2012/13

 

3

3

José M.

2008/09

2012/13

 

3

3

Otros

2

68

70

T O T A L

4

93

97

Goleadores en propia puerta del Girona Fútbol Club.-

Se relacionan a los jugadores del Girona Fútbol Club que han tenido el infortunio de encajar goles en propia puerta. Se expresan las temporadas que ha pertenecido al equipo. Jonás Ramalho encajó dos goles en propia puerta en la competición de 1ª División.

Ramalho

Ramalho

Jugadores

TDI.

TPF.

1pp 2pp
Ramalho J.

2013/14

2020/21

2

Alcalá P.

2015/16

2019/20

2

Lejeune

2014/15

2015/16

2

Tortolero

2009/10

2011/12

2

Otros

3

15

T O T A L    

5

21

Jugadores del Campeonato del Mundo y Europa del Girona Fútbol Club.-

Se adjunta relación de jugadores que han figurado en el Girona Fútbol Club y que han disputado las fases finales de los Campeonatos del Mundo y Campeonatos de Europa. En letra negrita aparecen los jugadores que pertenecían a la disciplina del equipo y que jugaron dichos Campeonatos. Aparece el país, el Campeonato del Mundo (M) y el Campeonato de Europa (E) que figuró, las temporadas que se alinearon en el equipo, así como la clasificación que ostentan entre los 20.549 jugadores evaluados por el sistema de baremación que se ha detallado.

 Mojica

Mojica

Stuani

Stuani

 

Selección de Españoles.-

Jugadores

TDI.

TPF.

Prov/País

Nombre y Apellidos

E

Clasifi.

Gerard L.

2008/09

2010/11

barcelona

Gerard López Segú

E00

 2.464

Selección de Extranjeros.-

Jugadores

TDI.

TPF.

País

Nombre y Apellidos

M/E

Clas.

Bárcenas

2020/21

2020/21

,  panamá

Edgar Yoel Bárcenas Herrera

M18

 6.325

Doumbia S.

2018/19

2018/19

.costa marfil

Seydou Doumbia

M10

 13.605

Mojica

2016/17

2019/20

. colombia

Johan Andrés Mojica Palacio

M18

 4.238

Stuani

2017/18

2021/22

. uruguay

Christian Ric. Stuani Curbelo

M14/18

 292

Jugadores internacionales del Girona Fútbol Club.-

Selección de Españoles.-

Jugadores

TDI.

TPF.

Prov/País

Nombre y Apellidos

Clasifi.

Aldekoa

1956/57

1956/57

vizcaya

Emilio Aldekoa Gómez

 1.825

Castillo J.

1935/36

1935/36

murcia

José Car. Castillo García-Tudela

 2.655

Curta J.

1940/41

1941/42

girona

José Puig Puig

 799

Mata J.

2014/15

2015/16

madrid

Jaime Mata Arnáiz

 1.352

Pedro Porro

2018/19

2018/19

badajoz

Pedro Antonio Porro Sauceda

 8.925

Solé P.

1939/40

1939/40

barcelona

Pedro Solé Junoy

 381

Selección de Extranjeros.-

Jugadores

TDI.

TPF.

País

Nombre y Apellidos

Clas.

Bernaus

2008/09

2009/10

,andorra

Marc Bernaus Cano

 3.450

Bono Y.

2016/17

2018/19

marruecos

Yassine Bounou

 3.272

Choco Lozano

2017/18

2019/20

,  honduras

Anthony Rubén Lozano Colón

 3.451

Diamanka

2019/20

2019/20

.senegal

Pape Maly Diamanka

 4.717

Kayode

2017/18

2017/18

.nigeria

Oleranwaju Ayobami Kayode

 15.725

Lekic D.

2015/16

2015/16

,serbia

Dejan Lekic

 3.933

Marlos Moreno

2017/18

2017/18

. colombia

Marlos Moreno Durán

 13.604

Moha Y.

2009/10

2011/12

.marruecos

Mohamed El Yaagoubi Youbi

 1.558

Muric

2020/21

2020/21

kosovo

Arijanet Anan Muric

 18.342

Olunga

2017/18

2017/18

.kenia

Michael Olunga Ogada

 13.487

Relaciones familiares del Girona Fútbol Club.-

En el cuadrante que se inserta se adjunta a los jugadores que han figurado en el Girona Fútbol Club y que han tenido alguna relación familiar de hermanos. Figuran con el mismo número los jugadores que han tenido la relación de hermanos. Se detallan las temporadas que han pertenecido al equipo, así como la clasificación que disponen entre los 20.549 jugadores evaluados.

Los hermanos José y Ángel Martínez Cervera

Los hermanos José y Ángel Martínez Cervera

Jugadores

TDI.

TPF.

Fam.

Nombre y Apellidos

Clasificac.

Curta Ju.

1956/57

1958/59

156H

Juan Puig Puig

 7.300

Curta J.

1940/41

1941/42

156H

José Puig Puig

 799

Ángel M.

2010/11

2010/11

411H

Ángel Martínez Cervera

 5.978

José M.

2008/09

2012/13

411H

José Martínez Cervera

 5.159

Ribera I

1956/57

1956/57

490H

Jaume Ribera Frontera

 9.043

Ribera J.

1956/57

1957/58

490H

José Ribera Frontera

 4.754

Jugadores con más partidos de titulares del Girona Fútbol Club.-

Se detallan en esta relación a los jugadores del Girona Fútbol Club que han disputado más de 106 partidos como titulares en el equipo en las competiciones de 1ª y 2ª Divisiones. Se significan las temporadas que han pertenecido al equipo. Los jugadores catalanes: Migue, Granell y Pere Pons han sido los más alineados con destacada diferencia sobre sus seguidores.

Granell

Granell

Migue

Migue

Pere Pons

Pere Pons

Jugadores

TDI.

TPF.

Prov/País

Ptd

Jugadores

TDI.

TPF.

Prov/País

Ptd

1

Migue G.

2008/09

2013/14

barcelona

211

9

Aday B.

2014/15

2020/21

barcelona

129

2

Granell A.

2014/15

2020/21

girona

191

10

Isaac B.

2012/13

2015/16

barcelona

128

3

Pere Pons

2012/13

2018/19

girona

181

Jandro C.

2010/11

2014/15

asturias

128

4

José M.

2008/09

2012/13

barcelona

150

12

Alcalá P.

2015/16

2019/20

murcia

123

5

Ramalho J.

2013/14

2020/21

vizcaya

149

13

Fel.Sanchón

2008/09

2016/17

barcelona

118

6

Borja García

2015/16

2021/22

madrid

146

Stuani

2017/18

2021/22

. uruguay

118

7

Dorca

2008/09

2011/12

girona

142

15

Richy

2011/12

2016/17

pontevedra

109

Juanpe R.

2016/17

2021/22

las palmas

142

16

Portu C.

2016/17

2018/19

murcia

106

 

Los jugadores nacidos en la comunidad de Cataluña predominan en las alineaciones titulares del Girona Fútbol Club.-

Se detallan las alineaciones titulares del Girona Fútbol Club en la que predominan jugadores nacidos en la comunidad de Cataluña. Así en las alineaciones de las temporadas que se relacionan aparecen en letra negrita los jugadores nacidos en la comunidad de Cataluña.

1939-40 (2III-3): Francàs; Caritg, Farró; Solé, Bremon, Trías, Madern, Rancel; Pascual, Tarradellas, Clarà.

1941-42 (2ªII-5): Francàs; Curta J., Farró, Trías, Bremon, Ferrer, Sagristá, Colomer; Espada, Barbé, Cambra.

Formación 1941-42: Arriba: Francàs, x, Colomer, Curta, Trías, Trujillo, Ferrer. Agachados: Farró, X, Espada, Gómez.

Formación 1941-42: Arriba: Francàs, x, Colomer, Curta, Trías, Trujillo, Ferrer.
Agachados: Farró, X, Espada, Gómez.

1942-43 (2ªII-6): Francàs; Farró, Fusellas; Trías, Espada, Mateu.; Ferrer, Portabella, Isán, Colomer, Villabeitia.

Formación 1942-43. Arriba: Ferrer, Francàs, Colomer, Farró, Portabella, Villabeitia, Isán, Mateu. Agachados: Barbé, Fusellas, Trías.

Formación 1942-43. Arriba: Ferrer, Francàs, Colomer, Farró, Portabella, Villabeitia, Isán, Mateu. Agachados: Barbé, Fusellas, Trías.

1957-58 (2N-9) :  Surribas; Curta Ju., Fábregas, Garriga, Lacasa, Muñoz; Manel, Espelt, Pujolràs L.; Viñas, Ribera.

1940-41 (2S-4): Francàs; Curta J., Farró; Gómez, Mota, Trujillo, Ferrer; Carrés, Barceló,Tarradellas, Espada.

1948-49  (2ª-10): Pujolrás C.; Virgili, Cros, Serra, Miernau; Franch; Anjaumà, Medina, Mateu T., Huguet, Camps.

Formación 1948-49: Arriba: Pujolrás, Mateo, Mateu, Virgili, Miernau, Masós, Yagüe. Agachados: Huguet, Anjaumà, Grabuleda, Camps, Serra.

Formación 1948-49: Arriba: Pujolrás, Mateo, Mateu, Virgili, Miernau, Masós, Yagüe.
Agachados: Huguet, Anjaumà, Grabuleda, Camps, Serra.

1956-57 (2N-9) : Isidro; Muñoz, Araújo, Fábregas, Pallàs, Curta Ju.; Ribera, Serrat, Pujolràs L.; Viñas, Espelt.

Jugadores extranjeros del Girona Fútbol Club.-

Los jugadores nacidos en el extranjero del Girona Fútbol Club han sido 41 el 11’82% del total de jugadores. En letra negrita aparecen los jugadores nacidos en el extranjero. Las temporadas que ha militado en la competición de 1ª División son las que más porcentaje de jugadores nacidos en el extranjero ha habido en el equipo.

2020-21  (2ª-5) : Juan Carlos; Calavera, Bernardo, Santi Bueno, Franquesa; Gumbau, Bárcenas, Cristóforo, Monchu; Samu Sáiz, Sylla.

2020-21: 11 (34’375%) de 32 jugadores. 4 Uruguay: Cristóforo, Santi Bueno, Stuani, Zeballos. 1 Panamá: Bárcenas. 1 Colombia: Bernardo. 1 Argentina: Bustos.

1 Malí: Kebe. 1 Suiza: Muric. 1 Senegal: Sylla. 1 Brasil: Yan Couto.

2017-18  (1ª-10): Bono; Maffeo, Bernardo, Ramalho, Mojica; Juanpe, Borja García, Portu; Pere Pons, Stuani, Granell.

2017-18: 10 (40%) de 25 jugadores. 3 Colombia: Bernardo, Marlos Moreno, Mojica.

1 Canadá: Bono. 1 Honduras: Choco Lozano. 1 Brasil: Douglas Luiz. 1 Nigeria. Kayade. 1 Kenia: Olunga. 1 Camerún: Soni. 1 Uruguay: Stuani.

Formación 2017-18. Arriba: Kayode, Alcalá, Stuani, Juanpe, Mojica, Iraizoz. Abajo: Maffeo, Muniesa, Pere Pons, Granell, Borja García.

Formación 2017-18. Arriba: Kayode, Alcalá, Stuani, Juanpe, Mojica, Iraizoz.
Abajo: Maffeo, Muniesa, Pere Pons, Granell, Borja García.

2018-19: 10 (38’46%) de 26 jugadores. 2 Colombia: Bernardo, Mojica.

2 Uruguay: Cristóforo, Stuani. 1 Canadá: Bono. 1 Brasil. Douglas Luiz.

1 Costa Marfil: Doumbia. 1 Corea Sur: Paik. 1 Inglaterra: Roberts. 1 Camerún: Soni.

Formación  2018-19. Arriba: Stuani, Juanpe, Valery, Bernardo, Bono.

Abajo: Aleix García, Portu, Borja García, Pere Pons, Raúl Carnero, Pedro Porro.

Formación  2018-19. Arriba: Stuani, Juanpe, Valery, Bernardo, Bono. Abajo: Aleix García, Portu, Borja García, Pere Pons, Raúl Carnero, Pedro Porro.

Formación 2018-19. Arriba: Stuani, Juanpe, Valery, Bernardo, Bono.
Abajo: Aleix García, Portu, Borja García, Pere Pons, Raúl Carnero, Pedro Porro.




Competiciones europeas de la temporada 1971-72. La debacle de los equipos españoles.

El Campeonato de Liga de la temporada 1970-71 había finalizado con esta clasificación: Campeón, Valencia con 43 puntos, que jugaría la Copa de Europa; segundo, Barcelona, con los mismos puntos (subcampeón por goal average), participaría en la Recopa por haber sido el vencedor de la Copa del Generalísimo; y en los siguientes puestos, Atlético de Madrid (42 puntos), Real Madrid (41 puntos), Atlético de Bilbao (35 puntos) y Celta (35 puntos), lo harían en la Copa de la UEFA.

Desde los comienzos de las competiciones europeas en 1955, los equipos españoles participantes, con mayor o menor éxito final, habían ido desarrollando sus eliminatorias en los dos años que se incluyen en cada ejercicio. Pero hubo una excepción. En la temporada que comenzó en agosto de 1971 y finalizó en Mayo de 1972, ninguno de ellos se clasificó para continuar compitiendo en 1972. En cuatro meses escasos, todos fueron eliminados en el periodo que transcurrió desde Agosto a Noviembre de 1971. En 1972, todos a pensar en la siguiente temporada europea.

El Celta fue eliminado el 29 de septiembre; por su parte, el Atlético de Madrid, lo hizo el 6 de octubre; y Valencia, Barcelona, Real Madrid y Atlético de Bilbao, cayeron el 3 de noviembre.

Veamos el desarrollo de lo que aconteció aquellos meses.

VALENCIA C.F. (Copa de Europa):

Fue el primer equipo en iniciar la temporada europea de los equipos españoles.  Aquel verano de 1971 habían causado baja el portero Pesudo, así como Jara, Poli y Ansola, incorporándose Meléndez (Baracaldo), Lico (Español), Adorno (Racing Club de Avellaneda), Esteve (Villarreal) y Quino (Betis). Jugó la primera eliminatoria contra el U.S. Luxemburgo, al que venció en casa el 19 de agosto por tres goles a uno.  Los visitantes se adelantaron en el marcador a los quince minutos empatando los valencianos doce minutos más tarde con gol de Forment. En la segunda parte dos nuevos goles, obra de Claramunt I –de penalti- y de Valdez en el descuento dieron la victoria al equipo che. El entrenador Di Stéfano presentó estos jugadores: Abelardo, Sol, Aníbal, Martínez, Vidagañy, Claramunt I, Sergio, Lico, Forment, Paquito y Valdez. No realizó sustituciones. En el encuentro de vuelta, jugado el 24 de agosto en el Estadio Achille Hamerel Stadium, nueva victoria, esta vez por cero a uno, con gol marcado por Forment a los 17 minutos de la primera parte. Un partido con claro dominio de los valencianistas que pasaron a la siguiente ronda con esta alineación: Abelardo, Barrachina, Sol, Anibal, Vidagañy, Lico, Jesús Martínez, Paquito, Sergio, Forment (sustituido por Claramunt II en la primera parte) y Valdez.

En la siguiente eliminatoria tocó en suerte a los yugoslavos del Hajduk Split. El 15 de septiembre se jugó en Valencia el partido de ida con resultado de empate a cero. Un tiro el poste y un gol anulado al Valencia, sumado al mal arbitraje del irlandés Sr. Carpenter al que Di Stéfano calificó como “el peor arbitraje que vi en mi vida”, dejaba la eliminatoria abierta para la vuelta. Según las crónicas, los jugadores valencianos pecaron de individualismo lo que, sumado a la rapidez y decisión de los defensores balcánicos, hizo que el marcador no se utilizara en los 90 minutos. Los locales formaron con Abelardo, Barrachina, Aníbal, Sol, Antón, Claramunt I, Jesús Martínez (sustituido por Forment a los 65 minutos), Paquito, Sergio, Adorno y Valdez.

En Split, el 29 de septiembre, hazaña del Valencia empatando a un gol, clasificándose para la siguiente eliminatoria por el valor doble de los goles marcados en campo contrario en caso de empate (regla desaparecida en 2022). Claramunt I marcó a los 56 minutos empatando el gol que llevaba de ventaja el Hadjuk desde el primer cuarto de hora, aunque ambos equipos merecieron anotar más goles por las oportunidades de las que gozaron. Esta vez, “formidable” arbitraje del alemán Tachender.  El Valencia formó con Meléndez, Sol, Aníbal, Jesús Martínez, Antón, Lico, Claramunt I, Adorno (sustituido por Sergio a los 79 minutos), Claramunt II, Forment (sustituido por Paquito al inicio de la segunda parte) y Valdez.

En la posterior ronda, el 20 de octubre se presentaron en Valencia los húngaros del Ujpest Dozsa. Muchas expectativas para esta eliminatoria, lo que hizo que el estadio de Mestalla estuviera a rebosar, entre ellos el seleccionador español Ladislao Kubala. Como novedad anterior al inicio del encuentro, no hubo tracas ni pólvora en salvas, pues la UEFA había vetado estas manifestaciones bajo “pena de excomunión y castigo”, ahí queda eso.  Pero en esta ocasión hubo un adversario enfrente que no dejó jugar a los locales. Un único gol marcado a los 54 minutos por Dunai II dio la victoria a los del Ujpest. Aquel equipo tenía en sus filas a jugadores de primer nivel como Hovarth, Fazekas, Bene, Toth y el propio Dunai II. Por el Valencia, como novedad respecto a anteriores partidos, fue la presencia en el once inicial del defensa Tatono que junto con Meléndez, Sol, Jesús Martínez, Antón, Claramunt I, Claramunt II, Lico, Adorno, Paquito y Sergio formaron por parte local. Vidagañy sustituyó a Jesús Martínez al comienzo de la segunda mitad y Forment hizo lo propio con Adorno a los 57 minutos. En la vuelta, adiós a la participación en la Copa de Europa. Pesando como una losa el resultado de Valencia, derrota por dos goles a uno en Budapest el 3 de noviembre. Los húngaros marcaron dos goles seguidos en los minutos 51 y 53 que dejaron prácticamente sentenciado el partido y la eliminatoria. Aunque pocos minutos después anotó Valdez, ya no se alteró el marcador. Pese a la derrota no pudo haber quejas, pues el arbitraje del yugoslavo Gulucavic fue calificado como excelente. En el partido de la despedida de la competición jugaron los 90 minutos Meléndez, Barrachina, Tatono, Sol, Antón, Claramunt I, Lico, Forment, Claramunt II, Valdez y Sergio.

F.C. BARCELONA (Recopa):

Después del sinsabor del subcampeonato liguero, en el verano del 71 causaron baja en la plantilla azulgrana los jugadores Franch, García Castany, Mora, Ramoní y Zaldúa. Se incorporó Roselló, procedente del Rayo Vallecano.

En la primera eliminatoria de la Recopa se enfrentaron al modesto equipo del Distillery, de Irlanda del Norte. El 15 de septiembre jugó el Barcelona en el estadio de Windsor Park, logrando vencer sin mucha oposición por un gol a tres, con un gol de Alfonseda y dos de Asensi. Los azulgranas se adelantaron por dos veces en el marcador, los irlandeses redujeron diferencias mediada la segunda parte y faltando cinco minutos para la finalización el centrocampista Asensi estableció el resultado definitivo. Lo único negativo fue la lesión de Alfonseda, con esguince de tobillo, que ponía en duda su participación en el partido a disputar en Barcelona. Jugaron Reina, Rifé, Gallego, Torres, Eladio, Costas, Juan Carlos, Zabalza, Rexach, Alfonseda (sustituido por Bustillo a los 53 minutos) y Asensi.

En la vuelta, dos semanas después, sin problemas. Escasa asistencia al estadio, apenas unos diez mil espectadores y victoria inapelable por cuatro a cero, ¡ todos marcados por Marcial !, lo que de por sí fue lo más destacable de aquella noche. Rinus Michels, manifestó que “más que un partido, había sido un entrenamiento”. A la media hora, Marcial ya había anotado los dos primeros tantos; en la segunda parte, otros dos goles para finalizar aquella eliminatoria. Jugaron Sadurní, Rifé, Gallego (Fusté a los 79), Eladio, Torres, Costas, Rexach (sustituido por Alfonseda a los 65 minutos), Juan Carlos, Dueñas, Marcial y Asensi.

Como curiosidad anexa al partido, en la información de la época se publicaba esta nota informativa: “El fútbol por TV, los domingos, a debate. El tema del fútbol por televisión ha saltado a la mesa federativa y será sometido a encuesta entre los clubs para saber a qué carta quedarse, en definitiva, sobre si es conveniente o no que cada domingo se ofrezca desde la pequeña pantalla un encuentro del calendario de Primera División, generalmente”. Lo que han cambiado los tiempos en cincuenta añitos de nada…

Al Barça le correspondió eliminarse en octavos de final con los rumanos del Steaua de Bucarest. El 20 de octubre, en Barcelona, derrota inesperada pues aunque estrellaron dos tiros en los postes, no pudieron evitar ser vencidos por cero a uno, gol que llegó a las redes barcelonistas a los dos minutos de partido. Fue un gol de mala suerte, disparó desde lejos Nastase, blocó Sadurní pero se le escapó de las manos y el balón entró en su portería. No parecía que pudiera ser definitivo, pero no se pudo ni siquiera empatar y así mantener esperanzas para el encuentro a jugar en Bucarest. Para entonces, el entrenador Michels ya era pesimista, afirmaba que “en pura lógica, debemos ser eliminados”, en contraposición de Stanescu, preparador rumano se expresaba así “No está sentenciada la eliminatoria”. El Barcelona jugó con Sadurní, Rifé, Gallego, Torres, Fusté, Costas, Rexach, Marcial, Dueñas (sustituido por Dueñas al comienzo de la segunda parte), Martí Filosía y Asensi (entró Zabalza a los 67 minutos).

El 3 de noviembre, de nuevo derrota. Esta vez por dos goles a uno. Aunque se adelantaron los azulgranas recién iniciada la segunda parte por mediación de Asensi, dos goles de Nastase –uno de penalti- dejaron a los catalanes sin opciones de continuar en la Recopa. Como curiosidad, el Barcelona jugó sin su habitual camiseta azulgrana, luciendo una blanca para no coincidir con los colores de los locales que, jugaron con camiseta roja con cuello y vueltas azules. El equipo estuvo formado por Reina, Rifé, Gallego, Torres, Eladio, Costas, Asensi, Alfonseda, Marcial, Rexach y Fusté.

CELTA DE VIGO (Copa de la UEFA)

La temporada la configuraron los gallegos con respecto a la anterior con las altas de Sanromán (Gran Peña), Navarro (Hércules), Yáñez (Compostela), Domínguez (Deportivo de la Coruña) y Alarcia (Mallorca). Y las bajas de Miñán, Isabelo, Herminio, Chemanel, Barros y Costas.

En la primera ronda le correspondió eliminarse el equipo escocés del Aberdeen FC. El 15 de septiembre, para empezar, quien falló fue el público, solamente media entrada en Balaídos; después, el equipo se encargó de defraudar a los asistentes. Dos goles, con la firma de Harper y de Rivera en propia puerta dejaron casi sentenciada la eliminatoria a favor del los visitantes (0-2).

El equipo vigués presentó esta alineación: Gost; Pedrito, Manolo, Domínguez, Hidalgo; Juan, Rivera, Almagro; Lezcano, Rodilla y Jiménez. Rivas salió en la segunda parte sustituyendo a Almagro.

En la vuelta, el día 30 del mismo mes, de nuevo derrota, esta vez por 1-0. El Celta mejoró su imagen de la ida; Alarcia detuvo un penalti lanzado por Harper y Rodilla tuvo en la primera parte una clara oportunidad para haberse adelantado en el marcador. Pero, lo que son las cosas, de nuevo Harper, en el último minuto, marcó el gol de la victoria escocesa y con ello la rápida despedida  de los vigueses en la competición. Aquel día el Celta formó con  Alarcia, Pedrito, Rivas, Navarro, Manolo, Benítez, Lezcano, Juan, Rodilla, Almagro y Suco. En el segundo tiempo salieron Rivera por Almagro y Jiménez por Suco.

ATLETICO DE MADRID (Copa de la UEFA)

El club atlético había dado la baja a Capón, Benegas y Leirós, incorporando a Cabrero y Becerra (ambos procedentes del Newell’s Old Boys argentino) y a Leal (Atlético Madrileño) para afrontar la temporada.

El 15 de septiembre  se enfrentaron en el estadio Vicente Calderón al Panionios de Atenas, a los que vencieron por dos a uno, con goles de Becerra e Irureta por parte madrileña. Partido duro y áspero de los visitantes, a lo que el presidente heleno Antonio Galinas comentó una vez finalizado el partido: “Yo les garantizo que el Atlético será objeto en Atenas  de la mayor atención deportiva. Y que nuestro público se ha de portar lo mejor posible”. Con mal arbitraje del irlandés Sr. Wilson, Marcel Domingo presentó a estos jugadores: Rodri, Melo, Jayo, Calleja, Adelardo, Eusebio (sustituido por Ovejero a los 31 minutos), Salcedo (Orozco compareció en su lugar tras el intermedio), Luis, Gárate, Irureta y Becerra.

En la vuelta, el 6 de octubre, con todo por decidir,  derrota de los españoles por uno a cero y, en consecuencia, eliminados por el valor doble de los goles marcados fuera de casa. Con respecto al partido de ida, salió Ovejero como defensa central, la media la formaron Adelardo e Iglesias, jugando en la delantera Alberto en lugar de Becerra. Quique sustituyó en el minuto 34 a Calleja, lesionado; y Orozco, en la segunda parte, sustituyó a Gárate.

Mal partido atlético, que no supo o no pudo ser más eficaz ante la portería helena después de que el griego Ingoglou marcara de penalti a los cincuenta y tres minutos. Según las crónicas de la época el arbitraje del árbitro rumano Sr. Pirvus fue calificado como malísimo y casero, lo que no disculpó el mal juego realizado por el Atlético.

Consecuencia o no de esta eliminación tan temprana, Marcel Domingo fue relevado del banquillo el 3 de noviembre; según la información facilitada por representantes del club se indicó que: “ha habido mutuo acuerdo” “es normal, según marchaban las cosas”. Fue sustituido por Max Merkel “mister látigo”, pero esa es otra historia.

 ATLETICO DE BILBAO (Copa de la UEFA).

Después de una buena temporada, obteniendo um meritorio quinto puesto en la clasificación liguera, en el equipo vasco dejaron su plantilla los jugadores Zamora y Zugazaga; reforzándose con Marro y  Navarro (procedentes del Bilbao Atlético).

En la primera eliminatoria que disputó ante el Southampton el 15 de septiembre en el partido de ida jugado en el estadio The Dell, con arbitraje del italiano Sr. Godella, el Atlético (así tal cual, Atlético, como estaba establecido en aquellos años) obtuvo un buen resultado, si bien no pudieron evitar ser derrotados por dos a uno. Iríbar detuvo un penalti a Channon a los cinco minutos siendo el mejor de su equipo. Los bilbaínos formaron con Iríbar, Sáez, Echeberría, Guisasola, Larrauri, Villar (Carlos 72’), Argoitia (Ortuondo, 56’), Uriarte, Arieta, Rojo II y Rojo I. Los vascos se adelantaron en el marcador a los 58 minutos con gol de cabeza de Arieta, pero los británicos empataron seis minutos después y marcaron el gol de la victoria cuando faltaban diez minutos para que finalizara el encuentro.

En la vuelta, jugado el 29 de septiembre, y con saque de honor por los afamados ciclistas Eddy Merckx y Luis Ocaña, victoria sufrida de los de Ronnie Allen por dos a cero, con goles de Ortoundo y Arieta a los 69 y 90 minutos respectivamente. Formaron con la misma alineación del partido de ida, incorporándose Igartua en sustitución de Villar, y Ortoundo por Argoitia, ambos en la segunda parte.

En la siguiente eliminatoria le tocó en suerte a los alemanes del Eintracht de Braunschweig. En la ida, el 20 de octubre, de nuevo obtuvieron un resultado que daba esperanzas para el partido a celebrar en San Mamés, aunque perdieron por dos a uno. Arieta adelantó a su equipo a los 15 minutos empatando dos más tarde los teutones, anotando el gol de la victoria poco antes de finalizar el primer tiempo. La alineación, prácticamente con los jugadores habituales de aquella temporada: Iribar, Sáez, Echeberría, Larrauri, Guisasola; Igartua, Uriarte; Argoitia (sustituido por Ortoundo a los 51 minutos), Arieta, Rojo II y Rojo I.

En Bilbao, el 3 de noviembre, mal resultado y la correspondiente eliminación de Europa. Respecto a las alineaciones anteriores, hubo dos novedades en el  once inicial, Beitia por Echeberría (baja por amigdalitis) y Estéfano (tras meses de ausencia por lesión había reaparecido el domingo anterior en partido de liga ante el Valencia –empate a uno en San Mamés-) por Villar. El atlético formó con  Iribar, Sáez, Beitia, Larrauri, Guisasola, Igartua, Uriarte, Estéfano (lesionado de nuevo, fue sustituido en el descanso por Ortoundo), Arieta, Rojo II y Rojo I. Los alemanes jugaron al contraataque y lograron empatar a dos. Se adelantaron en el marcador a los 26 minutos de la primera parte; empató Uriarte al final del primer tiempo, pero los visitantes volvieron a ponerse por delante en el marcador cuando faltaban veinte minutos para el final del encuentro; de nada sirvió el gol del empate definitivo en el último minuto por parte de Rojo I. Allen se lamentaba al final “dos errores, dos goles” y a olvidarse de Europa.

REAL MADRID C.F. (Copa de la UEFA):

Por su parte, el Real Madrid había dado la baja en su plantilla a Betancort, Calpe, De la Fuente, González, Sanchís, Manolín Bueno, Gento y Planelles. Renovación generalizada en los blancos. Se incorporaron esa temporada García Remón (procedente del Oviedo), Corral (Santander), Verdugo (Córdoba), Santillana (Santander), Aguilar (Santander) González (Santander) y Anzarda (River Plate).

En la ida de la primera eliminatoria, los madrileños se enfrentaron al Basilea suizo. El 15 de septiembre, victoria por un gol a dos en el estadio St. Jakob, marcados por Aguilar y Santillana, en los minutos 33 y 75 respectivamente, remontando el marcado anteriormente por los locales. Ambos jugadores, recién incorporados a la disciplina blanca fueron los jugadores más destacados sobre el césped. El Madrid alineó a García Remón, Verdugo, Benito, Zunzunegui, Grosso, Zoco, Aguilar, Grande, Santillana, Velázquez (entró en su lugar Fleitas a los 77 minutos) y Anzarda.  El partido del Santiago Bernabéu del 29 de septiembre no fue fácil para los madrileños, si bien, obtuvieron una nueva victoria con idéntico resultado, dos a uno a su favor, marcados en la segunda parte por los mismos goleadores que en Basilea, Aguilar y Santillana. El interior Velázquez fue increpado por parte del público al realizar éste un corte de mangas a los espectadores del “sublateral bajo aledaño al fondo norte”, que ya es especificar. Los blancos presentaron la misma alineación con la única modificación de Amancio por Grande. De Felipe sustituyó a Zunzunegui  a los 35 minutos, y a los 70 se retiró Amancio siendo reemplazado por el centrocampista Grande. Eliminatoria resulta.

En la ida de los dieciseisavos, el 20 de octubre, los holandeses del P.S.V. Eindhoven visitaron el estadio Santiago Bernabéu, de donde salieron derrotados por tres goles a uno, con presencia de 80.000 espectadores en las gradas. Al minuto ya ganaban los madrileños con gol de Eduardo Anzarda, los tulipanes empataron veinte minutos después, y mediada la primera parte, Aguilar volvió a adelantar a los merengues. En la segunda parte, gol de Amancio, de penalti y a esperar la vuelta. Cuando faltaba poco tiempo para finalizar el partido el guardameta Van Beveren fue alcanzado por un bote lanzado desde el graderío, interrumpiéndose el juego durante unos minutos que fueron añadidos al tiempo reglamentario. Al respecto, el delegado de la UEFA, el portugués Afonso de la Cerda manifestó que  “Realmente poco pude ver. Yo creo que el portero chocó con un fotógrafo saliendo rebotado” …en fin, cosas que pasan.

Miguel Muñoz alineó a García Remón, Touriño, Benito, Verdugo, Grosso, Zoco, Aguilar, Amancio (sustituido por Grande a los 70 minutos), Santillana, Velázquez (reemplazado por Pirri a los 29 minutos) y Anzarda.

En el partido en Eindhoven, el 3 de noviembre, con discutido arbitraje del Sr. Kunnge, de Alemania Democrática, el Madrid -que vistió de rojo para la ocasión- dijo adiós a la competición. Fueron vencidos por dos a cero, el primero marcado a los ocho minutos de comenzado el partido (en posible fuera de juego) y el segundo a los diez de comenzada la segunda parte. El Madrid reclamó un gol que el alemán anuló a Pirri faltando seis minutos para finalizar el partido y que pudo cambiar la eliminatoria. El presidente Sr. Bernabéu calificó el encuentro como “robo”. Así pues, por el valor doble de los goles marcados en terreno contrario en caso de empate, los holandeses pasaron a los octavos de final. Por su parte, los del PSV mostraron su malestar por no haber sido expulsado Benito en una acción del partido, justificándose el colegiado en la defectuosa iluminación del estadio y en la niebla existente, pese a su intención de haber seguido el juego de cerca.

En fin, debacle de los equipos españoles aquella temporada europea.




Resumen estadístico de todas las temporadas del FC Barcelona IV. Temporada 1902-1903.

RESUMEN DE LA TEMPORADA: 1902 – 1903

TODAS LAS COMPETICIONES RELEVANTES JUGADAS EL CAMPEONATO NACIONAL DE LA COPA DE ESPAÑA
Su Majestad el Rey
·Alfonso XIII·
El Barça no se inscribió y rehusó la invitación recibida.

COPA ALFONS MACAYA·EL CAMPEONATO
·NAC.CATALÁN·
El Barça jugó 1 Partido y se retiró por discrepancias.
Con 5 Equipos inscritos.
LA COPA DE
BARCELONA
EL CAMPEONATO
NAC. CATALÁN
Nueva Competición jugada en la misma Temporada. Con 8 Equipos inscritos.
TOTAL DE LOS PARTIDOS DE COMPETICIÓN Y QUE SON CONSIDERADOS·OFICIALES·

 

LOS TROFEOS MENORES, LAS COMPETICIONES NO OFICIALES Y LOS PARTIDOS
AMISTOSOS
TODOS LOS
TOTALES GENERALES
FINALES
LOS TÍTULOS CONSEGUIDOS INVITAC. REHUSADA JUEGA, Y SE RETIRA ES CAMPEÓN (2º) Y LOS TOTALES = 1 Y SON DIVERSOS ACUMULADOS = 2
Y LOS JUGADORES Partidos Goles Partidos Goles Partidos Goles Partidos Goles Partidos Goles Partidos Goles
Lluís d’OSSÓ i Serra «Amigo de Gamper y Gaudí» · ·

1

·

12

8

13

8

14

15

27

23

Bernat de LASSALETA i Perrín ‘Catedrático e Ing.’ · ·

1

1

11

6

12

7

12

19

24

26

George MEYER «Jugaba con un ojo de vidrio» · ·

1

·

12

2

13

2

6

2

19

4

Arthur Frederick WITTY Cotton · ·

1

·

11

·

12

·

6

·

18

·
Josep VIDAL i /..?../ «Atleta, Ciclista y Pelotari» · ·

1

·

11

·

12

·

6

·

18

·
Hans-Maximiliam GAMPER Häessig «Capitán 1º» · · · ·

12

30

12

30

6

11

18

41

Vicenç REIG i Falomir «Juga. y Presidente 22 Días» · · · ·

11

·

11

·

7

·

18

·
Udo STEINBERG = «SOOTER» Werle «Directivo» · ·

1

1

9

6

10

7

6

11

16

18

John PARSONS i Alexander · ·

1

·

6

1

7

1

7

·

14

1

Lluís Puelles i PÀMIES «Pelotari» · ·

1

·

1

·

2

·

9

·

11

·
Charles HEREFORD «Soldado Ejército Británico» · · · ·

10

·

10

·

1

·

11

·
Stanley Charles HARRIS · · · ·

8

3

8

3

2

·

10

3

Alfons Almasqué i Domènech «ALMASQUÉ I» · ·

1

·

1

1

2

1

7

3

9

4

Josep LLOBET i Llobet · ·

1

· · ·

1

·

8

1

9

1

Emil Rudolf GASS · · · ·

8

1

8

1

1

·

9

1

Bertomeu TERRADAS i Brutau «1º Pres. Catalán» · · · ·

3

·

3

·

6

·

9

·
Josep QUIRANTE i Pineda «Atleta y Ciclista» · · · ·

3

·

3

·

6

·

9

·
FRANCESC GUARDIOLA i /..?../ · · · · · · · ·

6

·

6

·
Pere CABOT i Roldós · · · · · · · ·

5

·

5

·
Josep MARÍN i /..?../ «Directivo del Club» · · · · · · · ·

5

·

5

·
José María JORRO · · · · · · · ·

4

4

4

4

/..?../ COSTAL /..?../ · · · ·

2

·

2

·

2

·

4

·
RENÉ Víctor Fenouillière Saoul «Sold. 1a G. M.» · · · · · · · ·

3

1

3

1

Albert Almasqué i Domènech «ALMASQUÉ II» · · · · · · · ·

3

·

3

·
George Stephen Saint de NOBLE i Bywater · · · · · · · ·

3

·

3

·
Henrich Hans FISCHER · · · · · · · ·

3

·

3

·
F. LÓPEZ /..?../ · · · · · · · ·

3

·

3

·
Emil Maximilian GAISSERT Buhler ‘Fam. Gamper’ · · · ·

1

·

1

·

1

·

2

·
Arthur LEASCK Mace «Tenista» · · · · · · · ·

2

2

2

2

Joan BARGUÑÓ i Ribas · · · · · · · ·

2

·

2

·
Josep Felicià ELIAS i Juncosa «Corredisses» · · · · · · · ·

2

·

2

·
/..?../ LLOPART i /..?../ · · · · · · · ·

2

·

2

·
J. «Junior» Morris Yrisarri «MORRIS III» · · · · · · · ·

1

·

1

·
Manuel DEL CASTILLO de Aréchaga · · · · · · · ·

1

·

1

·
Joaquín MASCARÓ Vaquer · · · · · · · ·

1

·

1

·
FRANCISCO GUTIÉRREZ /..?../ · · · · · · · ·

1

·

1

·
/..?../ SUBIRACHS i /..?../ · · · · · · · ·

1

·

1

·
/..?../ PUIGVERT i /..?../ · · · · · · · ·

1

·

1

·
/..?../ CASTELLÀ i /..?../ · · · · · · · ·

1

·

1

·
/..?../ ARÉVALO /..?../ · · · · · · · ·

1

·

1

·
/..?../ CAMPBELL · · · · · · · ·

1

·

1

·
EUSEBI GARCÍA i Camps ‘Prof. Esgrima'(Català FC) · · · · · · · ·

1

·

1

·
Artur Vere Scott JOHNSON (Madrid C F) · · · · · · · ·

1

·

1

·

Jugadores Rivales, marcando en Propia Puerta

· · · · · · · ·

2

2

2

2

Goles Pendientes, y que no se han encontrado

· · · · · · · ·

4

26

4

26

TOTALES GENERALES FINALES

0

0

10

2

132

58

142

60

173

97

315

157

Y YA EN ESTA MISMA TEMPORADA

COPA – SE JUGABA SOLO POR: INSCRIPCIÓN, INVITACIÓN O SER CAMPEÓN FEDERADO

EL BARÇA YA NO SE INSCRIBIÓ, Y LUEGO TAMBIÉN REHUSÓ LA INVITACIÓN RECIBIDA

COPA MACAYA – EL BARÇA JUGÓ UN SOLO PARTIDO Y SE RETIRÓ POR DISCREPANCIAS

COPA DE BARCELONA – COMPETICIÓN PARALELA A LA: COPA MACAYA, Y EQUIVALENTE
TAMBIÉN AL: CAMPEONATO CATALÁN – Y LUEGO LAS 2 FUERON DADAS POR VÁLIDAS

Y FALTA POR ENCONTRAR, 26 GOLES DE 4 PARTIDOS




Resumen estadístico de todas las temporadas del FC Barcelona V. Temporada 1903-1904.

RESUMEN DE LA TEMPORADA: 1903 – 1904

TODAS LAS COMPETICIONES RELEVANTES JUGADAS EL CAMPEONATO NACIONAL DE LA COPA DE ESPAÑASu Majestad el Rey

·Alfonso XIII·

El Barça no se clasificó, y la Final no se jugó.

CAMPEONATO NACIONAL DE LIGA CATALÁN 1ª ·CATEGORÍA·Ya definitivo, y con 9 Equipos inscritos. TOTAL DE LOS PARTIDOS DE COMPETICIÓN Y QUE SON CONSIDERADOS·OFICIALES· LOS TROFEOS MENORES, LAS COMPETICIONES NO OFICIALES Y LOS PARTIDOS

·AMISTOSOS·

TODOS LOS

TOTALES GENERALES

·FINALES·

LOS TÍTULOS CONSEGUIDOS

Y NO CLASIFICADO

Y 4º CLASIFICADO

Y LOS TOTALES = 0

Y SON DIVERSOS

ACUMULADOS = 2

Y LOS JUGADORES

Partidos Goles Partidos Goles Partidos Goles Partidos Goles Partidos Goles

Josep QUIRANTE i Pineda «Atleta y Ciclista»

· · 9 9 9 9 12 3 21 12

Arthur Frederick WITTY Cotton

· · 10 2 10 2 8 · 18 2

Carles COMAMALA i López de Delpan

· · 12 15 12 15 5 1 17 16

Bernat de LASSALETA i Perrín ‘Catedrático e Ing.’

· · 9 10 9 10 6 8 15 18

J. «Junior» Morris Yrisarri «MORRIS III»

· · 8 · 8 · 6 · 14 ·

Udo STEINBERG = «SOOTER» Werle «Directivo»

· · 7 5 7 5 6 3 13 8

Francesc SANZ i de Gabilondo «Directivo»

· · 4 · 4 · 8 3 12 3

Josep VIDAL i /..?../ «Atleta, Ciclista y Pelotari»

· · 8 · 8 · 4 1 12 1

Romà FORNS i Saldaña «La Locomotora»

· · 7 12 7 12 4 1 11 13

Stanley Charles HARRIS

· · 7 2 7 2 3 · 10 2

Virgílio DA COSTA Neves

· · 7 1 7 1 3 · 10 1

Juli MARIAL i Mundet ‘Presidente Fed. Cat. Fútbol’

· · 8 · 8 · 2 · 10 ·

Joan SOLER i Lluch «El Largo» ‘Pelotari y Ciclista’

· · 5 · 5 · 5 · 10 ·

George MEYER «Jugaba con un ojo de vidrio»

· · 4 1 4 1 3 1 7 2

José María JORRO

· · 1 · 1 · 6 5 7 5

Joan FONTANET i /..?../

· · 4 · 4 · 3 · 7 ·

Abelardo Mas i Muntó «MAS I»

· · 2 · 2 · 4 · 6 ·

George Stephen Saint de NOBLE i Bywater

·

·

4

·

4

·

2

· 6

·

Lluís d’OSSÓ i Serra «Amigo de Gamper y Gaudí»

·

·

1

·

1

·

4

4 5

4

FRANCESC GUARDIOLA i /..?../

·

·

1

·

1

·

4

· 5

·

Josep LLOBET i Llobet

·

·

1

·

1

·

4

· 5

·

/..?../ ELLERS

·

·

3

·

3

·

1

· 4

·

/..?../ SAMPONS i /..?../

·

·

·

·

·

·

4

1 4

1

Esteve FLAQUER i /..?../

·

·

1

·

1

·

3

· 4

·

Josep ORTIZ i /..?../ ‘Tenista y Presi. del Hispánia’

·

·

1

·

1

·

2

· 3

·

Arseni COMAMALA i López de Delpan

·

·

3

·

3

·

·

· 3

·

Enri. ‘Henry’ Ramón Morris de Olea «MORRIS II»

·

·

1

·

1

·

2

· 3

·

John MACKENZIE

·

·

3

·

3

·

·

· 3

·

/..?../ DURÁN i /..?../

·

·

2

·

2

·

1

· 3

·

Josep MARÍN i /..?../ «Directivo del Club»

·

·

·

·

·

·

3

1 3

1

George S. WILLIAMS

·

·

·

·

·

·

3

· 3

·

Hans-Maximiliam GAMPER Häessig «Capitán 1º»

·

·

1

·

1

·

1

· 2

·

Lluís GARRIGA i Roig

·

·

2

·

2

·

·

· 2

·

Henrich Hans FISCHER

·

·

2

·

2

·

·

· 2

·

Ernest XIFRÀ i Girbal «Fotógrafo»

·

·

·

·

·

·

2

· 2

·

Manuel SOLER /..?../

·

·

·

·

·

·

2

· 2

·

Juan POMBO /..?../

·

·

·

·

·

·

2

· 2

·

/..?../ Mas i /..?../ «MAS II»

·

·

·

·

·

·

2

· 2

·

John PARSONS i Alexander

·

·

1

·

1

·

·

· 1

·

A. J. SMART

·

·

1

·

1

·

·

· 1

·

Alfons Almasqué i Domènech «ALMASQUÉ I»

·

·

·

·

·

·

1

1 1

1

Emil Maximilian GAISSERT Buhler ‘Fam. Gamper’

·

·

·

·

·

·

1

· 1

·

Francisco «Paco» BRU Sanz

·

·

·

·

·

·

1

· 1

·

Josep DÉNIEL i Graells

·

·

·

·

·

·

1

· 1

·

Enric VINYES i /..?../

·

·

·

·

·

·

1

· 1

·

/..?../ PUIG i /..?../

·

·

·

·

·

·

1

· 1

·

/..?../ PANADÉS i /..?../

·

·

·

·

·

·

1

· 1

·

Joaquim CARRIL i de Monasterio (RCE Espanyol)

·

·

·

·

·

·

1

· 1

·

Benigno Juan Agap. Bela. Lan. ‘BELAUSTE’ (RCEE)

·

·

·

·

·

·

1

· 1

·

ISIDRE DOMÈNECH i /..?../(Club X=RCE Espanyol)

·

·

· · · · 1 · 1 ·

Francesc VIVES i /..?../ (Real Club Esp. Espanyol)

·

·

· · · · 1 · 1 ·

Jugadores Rivales, marcando en Propia Puerta

·

·

· · · · · · · ·

Goles Pendientes, y que no se han encontrado

·

·

· · · · 3 10 3 10

TOTALES GENERALES FINALES

0

0

140 57 140 57 144 43 284 100

Y YA EN ESTA MISMA TEMPORADA

COPA – EL BARÇA NO PUDO CLASIFICARSE PARA JUGARLA, Y TAMPOCO SE JUGÓ LA FINAL ENTRE LOS 2 FINALISTAS, FUE CAMPEÓN EL ATHLETIC CLUB, SIN JUGAR NINGÚN PARTIDO

CAMPEONATO CATALÁN – ORGANIZADO POR LA FEDERACIÓN CATALANA, Y SUSTITUYÓ DEFINITIVAMENTE A LAS: COPAS MACAYA, Y DE BARCELONA

Y FALTA POR ENCONTRAR, 10 GOLES DE 3 PARTIDOS




RocknRolla: Los Atleti-Barça de los 90

Una nueva era

Desde su llegada al banquillo blaugrana en 1988, Johan Cruyff se caracterizó por unos planteamientos revolucionarios que chocaban con los tradicionales sistemas que poseían el resto de equipos españoles. El holandés gozaba de la condición de ídolo de la grada por sus años como jugador, especialmente por el campeonato de 1974, donde el astro holandés lideró a un Fútbol Club Barcelona que rompió, al fin, con una larga sequía de títulos.

Con una personalidad carismática y avalado por sus tres Balones de Oro, el nuevo inquilino del banquillo más complicado de la Ciudad Condal poseía un discurso ambicioso y que no se contentaba con conseguir resultados. Usando su estampa y aquel modelo que aprendió de Rinus Michels y la célebre “Naranja Mecánica” (subcampeones del mundo en 1974), el técnico marcaría pronto distancia con la junta directiva de Josep Luis Núñez y los medios de comunicación, acuñando la expresión “el entorno” para referirse al aura negativa y fatalista que muchas veces, según su percepción, oteaba por el club.

Michael Robinson y Carlos Martínez, quienes iniciaron una fecunda sociedad como narradores de los partidos para Canal +, recordarían las sorpresas que deparaban sus charlas con Cruyff. El técnico les señalaba cómo iba a jugar apostando por los extremos y sin un delantero centro de referencia. Bajo la apariencia de boutade, existía un ambicioso plan que ya había puesto en práctica durante su formación en el Ajax de Ámsterdam.

Paralelamente, otro de los clubes históricos, el Atlético de Madrid, acababa de iniciar también una andadura diferente. La elección de Jesús Gil y Gil como presidente en 1987 de la institución vino salpicada de polémica y auspiciada por el fichaje de Paulo Futre, estrella del Oporto y uno de los futbolistas más codiciados por toda Europa.

Hasta ese momento, los blaugranas poseían diez entorchados ligueros, seguidos muy de cerca por los rojiblancos con ocho. Asimismo, ambos clubes gozaban de prestigio europeo, aunque con la sensación de que les pesaba una maldición en la Copa de Europa (finales de Berna, Bruselas y Sevilla). La llegada de Cruyff marcaría un punto de inflexión para el Barcelona, mientras que el Atlético se sumergiría en un proceso de inestabilidad, no exento de algunos momentos destacados, como veremos a continuación.

“El Holandés Volador” y su clara impronta se sumaron a la heterogénea mezcla en un banquillo colchonero altamente inestable, si bien con inquilinos tan ilustres y eficaces como Luis Aragonés entre otros, propiciando desde finales los ochenta un choque futbolístico que alcanzó su máxima expresión a lo largo de la siguiente década.

Empieza el espectáculo

El nuevo Barcelona de Cruyff iba exhibiendo ciertos síntomas de mejoría tras años traumáticos en el club blaugrana. La derrota en la final europea ante el Steaua de Bucarest en 1986 vino acompañada del fenómeno que sería conocido como “El motín del Hesperia” (abril de 1988), tal vez el momento más crítico del mandato de Núñez.

Usando a la carismática figura de un entrenador que gozaba de prestigio en el Camp Nou y con un staff técnico que incluía a hombres de la casa como Carles Rexach, la campaña 1988/89 siguió siendo tensa para el presidente, quien se enfrentaría en las elecciones a la candidatura de Sixte Cambra. Ambos aspirantes tuvieron palabras severas para referirse al otro oponente, algo que venía salpicado de la incapacidad del nuevo proyecto para arrebatar el torneo liguero a un Real Madrid que se hallaba firmemente instalado en la competición de la regularidad con la Quinta del Buitre.

Con una arriesgada propuesta que era criticada por los rivales y de forma interna en el propio club, Cruyff necesitaba de algún entorchado que justificase la fe en su andadura. Se le reclamaba desde el público responsabilidad por alguna extravagancia como el fichaje del delantero paraguayo Julio César Romero. Por ello, los cuartos de final de la Copa del Rey ante el Atlético de Madrid parecían una oportunidad propicia para cambiar la tendencia.

Pese a iniciarse el duelo con un penalti casi inmediato para los azulgranas, Abel Resino sorprendió a Roberto Fernández deteniendo el lanzamiento. Los colchoneros estaban tan o más motivados que sus contrincantes en la eliminatoria, puesto que se encontraban afincados en un discreto quinto puesto en Liga.

La escuadra rojiblanca estaba comandada por Colin Addison desde el mes de enero; leyenda de la FA Cup, consiguió el puesto por su buen desempeño como entrenador en el Celta de Vigo. Llegó al Manzanares como ayudante de Ron Atkinson, quien empezó a perder crédito tras una derrota en Barcelona y por confrontaciones con jugadores como Donato Gama da Silva. El baile de místeres sería una constante dentro de la gestión deportiva de Jesús Gil y Gil, fenómeno perfectamente analizado en la monografía que le dedicó Iván Castelló.

Sea como fuere, el club tuvo un baluarte en Baltazar Maria de Morais Júnior, un goleador de facilidad pasmosa cara a la definición en el área. Cruyff permitió a atacantes como Txiki Begiristain cambiar con libertad de banda para intentar desconcertar a la zaga rival. Sin embargo, Addison parecía poco preocupado por dar la posesión a los locales, siempre que ello permitiera rápidos contraataques que hombres como Paulo Futre o Baltazar convertían en sumamente peligrosos.

En la grada se encontraba el lesionado José María Bakero, uno de los hombres de confianza de Cruyff, además de Ronald Koeman; el central holandés había cerrado su fichaje con el Barcelona el pasado mes de enero. Transcurrida media hora de juego, Julio Alberto usó su habilidad con la pierna izquierda para abrir el marcador con una potente falta directa.

Apenas cinco minutos después, una galopada de Baltazar volvió a instaurar las tablas. Aunque hubo claras oportunidades para los visitantes, el marcador no se movería hasta recién comenzado el segundo tiempo, cuando Serna se vio forzado a derribar a Baltazar, quien ya enfilaba hacia los dominios de Zubizarreta. El brasileño no perdonó desde los once metros para colocar el 1-2.

Irónicamente, aunque era una de las facetas futbolísticas que menos entrenaba Cruyff, el Barcelona halló consuelo a balón parado, cuando Eusebio Sacristán colgó un centro que permitió a Roberto redimirse de su anterior error. Lejos de desesperarse, los madrileños aguardaron con paciencia para volver a explotar la velocidad de Futre por las bandas. El portugués justificó la confianza dando un pase de la muerte a Baltazar que Zubizarreta no pudo evitar. Cruyff apostó por seguir atacando, incorporando a un delantero como Ernesto Valverde por Miquel Soler.

Cuando el encuentro agonizaba, Luis Milla, el dorsal 4 de aquel Barcelona, logró conectar un pase que Roberto peinó para que Julio Salinas rematase a placer. La figura de Milla, futbolista de origen aragonés y formado en las secciones inferiores barcelonistas resultó fundamental en aquellos comienzos de Cruyff, puesto que el entrenador estaba convencido de que era imprescindible para su propuesta tener un termómetro en el medio campo que interpretase su filosofía. Sin un físico deslumbrante, Milla sería esencial durante aquella campaña y la siguiente.

Nuevamente Baltazar, aprovechando una excelente asistencia de Donato, volvió a superar al portero culé, si bien Aloísio Pires logró despejar el balón cuando iba directo a las redes.

Aquellos seis goles fueron el perfecto resumen de un fútbol atractivo y donde dos armas (el fútbol de toque y los veloces contraataques) se combinaban para brindar encuentros que parecían de otra época. Ninguno de los dos contendientes podía saberlo, pero acababan de inaugurar una tradición para la década que estaba a punto de abrirse.

La vuelta, no obstante, únicamente tuvo un color: el Vicente Calderón disfrutó de una goleada por 4-0 que fulminó las esperanzas de los visitantes. Desde el temprano tanto de Donato, los rojiblancos dominaron todas las facetas posibles, destacando los desequilibrios de Futre y el olfato de Baltazar a la hora de penalizar cualquier mínimo descuido.

De forma paradójica, Addison sufrió un fuerte descrédito por la eliminación en semifinales ante el Real Madrid. Mientras tanto, Cruyff, el hombre al que había superado en el torneo del KO, fue su verdugo en Liga (3-0) para que Gil lanzase su cese. El holandés, por su lado, consiguió garantizarse un año más tanto con el triunfo de Núñez en las urnas como por la victoria (2-0) obtenida a costa de la Sampdoria por la Recopa.

Primeros conatos de rivalidad

La temporada 1989/90 no sería nada fácil para el Atlético de Madrid. El club del Manzanares se vio pronto apeado del torneo copero, además de sufrir la eliminación a manos de un adversario tan cercano como el Real Madrid. Un duro revés para Javier Clemente, verdadera apuesta de la presidencia para el banquillo colchonero, incluyendo invitación al entrenador para participar en el programa televisivo “Tribunal Popular” en defensa del controvertido dirigente.

El entrenador vasco había sido una firme promesa del Athletic de Bilbao que vio truncada su carrera por las lesiones. No obstante, logró destacados éxitos con el equipo de sus amores que se tradujeron en dos ligas consecutivas. Tampoco decepcionó con el Club Deportivo Espanyol, con el cual logró el subcampeonato de la Copa de la UEFA.

Resulta interesante apuntar que el presidente Núñez barajó seriamente su incorporación al Barcelona, incluso antes que Cruyff. De hecho, diferentes entrevistas hechas a Clemente, quien llegaría a ser seleccionador de España, confirman que recomendó una serie de jugadores (Julio Salinas, José María Bakero, Andoni Zubizarreta, etc.) que luego serían pilares básicos de los futuros éxitos azulgranas.

Sea como fuere, Clemente era uno de los más críticos con la pizarra de su colega holandés, especialmente por los riesgos que asumía atrás. De hecho, uno de sus triunfos más prestigiosos fue en la primera vuelta por 1-0 en la visita del club catalán. Amante de los conjuntos ordenados y que sabían protegerse, el enfoque del nuevo míster maniató aquellas promesas goleadoras que se habían podido vislumbrar la campaña previa cuando ambos contendientes se cruzaban.

Con dos propuestas divergentes, tanto Atlético de Madrid como Barcelona se mostraron irregulares en el formato doméstico. Varias voces cuestionaron severamente en los mentideros del club madrileño algunos fichajes (por ejemplo, los de Eugenio Bustingorri y “Pizo” Gómez) que no llegaron a cuajar, mientras que la escuadra azulgrana quedó lejos de una Quinta del Buitre lanzada a otro entorchado.

Si bien los rojiblancos vencieron a domicilio a los de Cruyff, fue un triunfo que no pudo disfrutar un cesado Clemente, cuyo lugar fue ocupado por Joaquín Peiró. El nuevo responsable del área técnica logró un meritorio cuarto puesto, pero sería despedido la siguiente campaña de una forma inverosímil: por su mal rendimiento en el trofeo Ramón de Carranza (Cádiz) durante la pretemporada.

Por su lado, el Barcelona volvió a fiarlo todo a una final. En Mestalla, lograrían batir (2-0) al Real Madrid para impedir el doblete del máximo oponente. Aquel éxito permitió a Cruyff serenar el entusiasmo del conjunto blanco, el cual había logrado batir todos los registros goleadores en Liga con John Benjamin Toshack. Tras el enfrentamiento de Mestalla, el preparador galés reclamó ácidamente cuentas al desempeño copero de iconos como Hugo Sánchez o Emilio Butragueño, a quienes responsabilizó por la falta de acierto en el área de Zubizarreta.

Uno de los grandes movimientos del mercado de fichajes para el Barcelona sucedió con la contratación de Michael Laudrup, jugador muy dotado técnicamente, el cual ansiaba salir de un riguroso Calcio transalpino donde su escuadra, la Juventus de Turín, no tenía las características adecuadas para que brillase su juego. Con él, Cruyff quería poner a prueba sus teorías del falso 9, es decir, un delantero atípico que obligase a los centrales españoles, acostumbrados al marcaje individual, a quedar descolgados y abriendo mucho las posibilidades de los extremos.

Para ello solamente necesitaba una última pieza que logró el siguiente curso y que posteriormente sería pretendida en varias ocasiones por Jesús Gil: Hristo Stoichkov.

Nacimiento del Dream Team

Josep María Minguella era uno de los hombres de confianza del equipo directivo de Núñez a la hora de realizar los fichajes internacionales. Siguiendo las instrucciones de Johann Cruyff y Charles Rexach, el agente llevaba meses trabando contacto con dirigentes del CSKA de Sofía, la institución deportiva más importante de Bulgaria.

El objetivo era Hristo Stoichkov, un goleador de mucho temperamento y que poseía una velocidad punta ideal para abrir espacios desde la banda. Había sido Bota de Oro junto con el mexicano Hugo Sánchez, aunque Cruyff albergaba ciertos recelos por el choque cultural que podría suponerla salir del deporte bajo la órbita comunista y entrar en un club como el Barcelona.

En el lado más positivo, su temperamento ganador y ambicioso quizás fuera justo lo que necesitaba un club plagado de buenos futbolistas, pero quizás presas de dinámicas autocomplacientes en ocasiones. El inconformismo que Stoichkov había demostrado en una eliminatoria CSKA-Barcelona en la Recopa era justo lo que estaban buscando. Además, dio pruebas de su calidad con una vaselina espectacular sobre Zubizarreta.

De inmediato, la llegada del nuevo fichaje reforzó a compañeros como Laudrup, cuyos imaginativos pases al hueco eran perfectamente aprovechados por el atacante zurdo. Aquella campaña, las ideas de Cruyff estaban muy asimiladas; incluso a pesar de la marcha de Luis Milla, para quien se encontró un recambio idóneo en Pep Guardiola, uno de los centrocampistas más interesantes de La Masía en aquellos años.

Como revelaría posteriormente en su biografía, el futbolista búlgaro se inyectó de optimismo desde su debut en partido oficial frente al Espanyol, marcando el único tanto en Sarrià. Intentando frenar su entusiasmo, el experimentado Ronald Koeman buscó que el recién llegado fuera consciente de que la Liga española sería un complicado viaje de altibajos.

Pese a ello, las dinámicas del fútbol de toque, cimentado en los ingeniosos rondos que Rexach y Cruyff montaban, y la mayor experiencia de la plantilla llevaron a un inicio deslumbrante de los azulgranas, incluyendo varias goleadas ante oponentes poderosos como el Valencia (3-0).

Hasta la jornada 9 no se produjo la primera derrota para los pupilos del holandés: fue en el Vicente Calderón, donde Tomislav Ivic había impuesto un sólido sistema defensivo, apoyado por el ya conocido talento de Futre y un fichaje muy promocionado por el Gilismo: Bernd Schuster. El medio teutón se vio obligado a abandonar el Barcelona, tras haber sido considerado el mejor jugador en las filas blaugranas en aquellos días, en plena disputa con Terry Venables. Ello fue bien aprovechado por Ramón Mendoza, convirtiéndose el ex blaugrana en un refuerzo excelente para Emilio Butragueño y sus compañeros de cantera.

La edad y problemas de lesiones que arrastraba desde su encontronazo con Andoni Goikoetxea, central de Athletic de Bilbao, le habían hecho perder la velocidad y capacidad de ser un todocampista, virtudes que exhibió en la Eurocopa de Italia (1980). Pese a ello, su inteligencia, experiencia, potente disparo y capacidad de lanzar precisos pases desde la larga distancia hacían, en palabras de periodistas como Juan Carlos Crespo, que se le juzgase como una especie de quarterback para sus equipos.

Schuster, por ende, pudo presumir de haber estado en tres de los conjuntos más históricos de la Liga Española. Fue él quien abrió el marcador aquella noche, usando con maestría su empeine derecho para dejar sin reacción a Andoni Zubizarreta. Previamente, la noticia del choque fue la lesión de Ronald Koeman, aquejado de una tendinitis que se agravó hasta el punto de obligar a una rápida intervención que le tendría de baja buena parte del campeonato.

En opinión de Abel Resino, el defensa holandés era uno de los puntos fuertes del líder blaugrana, puesto que podía combinar en largo, controlaba la zaga y suplía la lentitud con su colocación, además de ser temible a balón parado. Su ausencia fue bien aprovechada por Futre y Manolo Sánchez, los dos goleadores del disciplinado sistema de Ivic.

Con todo, la zaga colchonera tampoco estaba exenta de problemas. Agresivo y explosivo con sus cambios de ritmo, Stoichkov puso en dificultades a algunos de los mejores defensas rojiblancos. Fruto de una disputa con Roberto Solozábal, el búlgaro logró un lanzamiento de falta que se le escapó a Abel de entre los guantes.

El empate parecía más que positivo para un Barcelona desbordado, pero finalmente perderían su condición de invictos en el Manzanares. Desde su posición de extremo derecho, Futre rompió el fuera de juego gracias a Jon Andoni Goikoetxea, polivalente futbolista a quien Cruyff movía en distintas posiciones del campo. Con su usual manejo de los recortes, el luso engañó a Zubizarreta y cuantos zagueros azulgranas acudieron en su ayuda.

Después de dos minutos del gol del antiguo astro del Oporto (70), Schuster tuvo la oportunidad de firmar un doblete al disponer de una pena máxima señalizada por Teodoro Valdés Sánchez. De cualquier modo, Zubizarreta logró adivinar la intención del disparo a cargo del alemán, especialmente gracias al aviso de Guillermo Amor, quien conocía a la perfección a Schuster, puesto que él estaba en la cantera blaugrana durante los mejores años de su rival.

El revés en el Calderón resultó casi insoportable para Stoichkov, cuyo sueño de que sus compañeros y él terminasen imbatidos el torneo quedó hecho añicos. Empezó a dar patadas a la puerta del vestuario visitante hasta el punto de recibir la advertencia del personal del Atlético de Madrid. Sea como fuere, Jesús Gil quedó impresionado del temperamental goleador,

Si bien el partido había resultado apasionante, Ivic había logrado con su sistema impedir el ida y vuelta que podían provocar ambos contendientes. A través de una pizarra rigurosa y la formación 5-3-2, el Atlético colocaba sus cimientos en carrileros efectivos como Tomás y Juan Carlos, acompañados de centrales experimentados como Ferreira. El afamado ataque de Cruyff no podía encontrar allí su ritmo con tanta sencillez como frente al resto de escuadras españolas.

Pese a la baja de Koeman, el Barcelona logró mantener su idea de juego con resultados efectivos. A la altura de la jornada 19, logró un triunfo de prestigio ante el Real Madrid (2-1). Con los blancos relegados a la quinta posición, parecía que el Camp Nou podría hacer buena, tras tantos años, la expresión “¡Aquest any sí!” con la que intentaban exorcizar viejos demonios de reveses pasados.

Líderes casi indiscutidos, únicamente el sólido Atlético de Madrid parecía ser capaz de darles caza. El conjunto colchonero se hizo fuerte a través de la defensa, particularmente merced a Abel Resino, quien hizo bueno su apodo como El Gato de Velada. Además de ser Zamora con apenas 17 goles encajados en 33 jornadas, estableció un nuevo récord de imbatibilidad, superando al mítico portero italiano Dino Zoff, establecido en 1.142 minutos.

Los rojiblancos trabajaron con ahínco hasta que Luis Enrique cabeceó, el 1 de abril de 1991, un remate al poste que Abel luego no pudo sacar. La jugada de los asturianos, auspiciada por un buen centro de Javier Manjarín rompía 1.275 minutos de auténtico cerrojo en su portería. Nacho Montero y Miguel Ángel Guijarro, en su interesante obra Leyendas del Atlético de Madrid siguen destacando esta hazaña como uno de los hitos en la historia del club.

El único inconveniente fue que, más allá del olfato goleador de Manolo Sánchez y Futre, además de la potencia de golpeo a cargo de Schuster, el proyecto de Ivic nunca tuvo las cifras de producción necesarias en la faceta ofensiva para oponerse a un Barcelona que, si bien encajaba más tantos en contra, terminaba compensándolo de forma magistral por su creatividad arriba.

Eso se sostendría incluso ante fatalidades que, en otras coyunturas de la institución catalana, habrían podido ser nefastas. Por culpa de su adicción al tabaco, Cruyff fue sometido a una operación a vida o muerte de la que afortunadamente salió recuperado, llegando a protagonizar un ingenioso anuncio donde daba diferentes toques a una caja de tabaco, expresando su renuncia a dicho hábito. Con el tiempo, supliría los cigarrillos con los célebres Chupa Chups. Sea como fuere, durante su convalecencia la escuadra se quedaba sin su gran líder en el banquillo.

Como Stoichkov rememoraría en su biografía, Charly Rexach resultó clave para mantener el ritmo. Si el genio holandés se caracterizaba por imponer la máxima presión, especialmente a las “vacas sagradas” (los mejores jugadores y con contratos abultados), su segundo se encargaba de relajar el ambiente en el vestuario, compartiendo la misma filosofía futbolística, pero con una relación más cómplice ante la plantilla. El 10 de marzo de 1991 Rexach podría decir a su buen amigo que “la máquina seguía funcionando”, puesto que el Barcelona dio una exhibición, venciendo 0-6 en San Mamés. En La Catedral del balompié español, la devastadora velocidad de Stoichkov, autor de 4 goles, allanó el camino.

Solamente el Atlético fue capaz de seguir en mayor o menor grado el ritmo blaugrana, aunque con el empate a uno en el Camp Nou en su visita al Barcelona el 30 de marzo de 1991 la Liga pareció claramente decantada. Se exhibieron los problemas del sólido conjunto de Ivic para aspirar realmente al título. Costaba mucho crearles ocasiones, pero estaban abonados a resultados cortos que les hacían empatar con frecuencia, algo que el Barcelona aprovechaba con su buen desempeño como visitante y frecuentes goleadas cuando defendía condición de local.

Curiosamente, el Barcelona celebró el título tras recibir una humillación en el Ramón de Carranza: 4-0 fue el correctivo que infligió el Cádiz a los jugadores de un ya recuperado Cruyff en la jornada 34. El Atlético tuvo la oportunidad de prolongar la espera del alirón, si bien no logró superar su compromiso en Atotxa.

El encuentro en tierras donostiarras vino precedido de bajas muy sensibles (Futre, Manolo, Abel, etc.) que se mezclaron con rendimientos inferiores a lo esperado, especialmente en casos como el del delantero Gerhard Rodax.

Los colchoneros se adelantaron y dispusieron de diversas ocasiones, casi todas iniciadas de las botas de Schuster. Finalmente, la Real igualó y logró alejar el espectro de la promoción mediante un cabezazo de John Aldridge que fue muy festejado igualmente en la Ciudad Condal, puesto que significaba el final a seis años de sequía liguera.

Una oleada de euforia invadió Barcelona, algo que protagonistas como Stoichkov vieron incluso como algo contraproducente, puesto que el equipo descuidó la preparación de la final de Recopa ante el Manchester United. Pese a haber eliminado por el camino a equipos tan reputados como la Juventus de Roberto Baggio, Róterdam fue testigo de la derrota de los pupilos de Cruyff ante los ingleses.

Con todo, tanto Fútbol Club Barcelona como Atlético de Madrid aspiraron a otra oportunidad de alzar un trofeo. La Copa del Rey les emparejó en unas semifinales apasionantes donde se medían los dos mejores clubes del campeonato español.

Sin embargo, fiel al estilo de constantes cambios y maremotos frente a la prensa, Gil sorprendió al cesar a Ivic en vísperas de viajar al Nou Camp. La noticia fue totalmente inesperada para la plantilla, a partir de entonces comandada por Iselín Santos Ovejero.

En vísperas de la festividad de Sant Joan, el público barcelonista volvió a disputar de la buena puesta en escena ofensiva de los suyos, pese a ser importante el dato estadístico de que en todo el curso habían sido incapaces de batir a su perseguidor en duelo directo.

Teodoro Valdés Sánchez tendría constantes preocupaciones durante el arbitraje del duelo, puesto que aquí empezó a forjarse una rivalidad que se haría constante en la década: Tomás Reñones frente a Hristo Stoichkov. El búlgaro logró anotar en el minuto 7 del choque, pero se anuló la acción por fuera de juego. Las cámaras de televisión mostraron que no hubo tal, pero uno de los problemas del gran fichaje de Núñez aquel curso radicaba en que su velocidad punta le hacía vivir al límite en esa clase de acciones, complicando las decisiones de los jueces de línea.

Ángel Jesús Mejías, al igual que había sucedido en Liga, suplía la baja de Abel, el portero menos batido aquel año en España. El meta tuvo trabajo, especialmente por un gran remate de Eusebio Sacristán al larguero, además de las constantes internadas de Begiristain.

De cualquier modo, ese constante asedio al área colchonera estaba ofreciendo huecos que Paolo Futre aprovechó de manera magistral, transcurrida la media hora, para sorprender a Zubizarreta con una vaselina. Irónicamente, el crack portugués era bastante criticado por Cruyff, quien lo juzgaba un futbolista hecho únicamente para los sistemas de contragolpe.

Sea como fuere, el aparentemente descentrado rival del Manzanares estaba mostrando una afectación nula a su cambio de inquilino en el banquillo. Conscientes de que el Barça se volcaría arriba, hombres como Schuster confiaban en poder asistir con pases largos a sus atacantes en furiosas contras.

No tuvieron que esperar mucho. Con habilidad, Manolo regateó a Koeman y dio una cómoda ventaja a los suyos en el minuto 60. La buena actitud local se desmoronó por completo, incluyendo una fea acción de Stoichkov sobre Mejías que le valió su segunda amarilla. Con 10 jugadores, la remontada parecía una misión imposible.

Lejos de ampararse en la Liga ya conseguida, Cruyff sacó su célebre “látigo” con el que exponía a sus mejores discípulos cuando no le gustaba la actuación sobre el césped. Cargó con especial dureza con Stoichkov, cuestionando su inteligencia y pidiendo a la directiva de Núñez una sanción ejemplar. Como en anteriores duelos con los rojiblancos ese curso, no hubo facilidad blaugrana para anotar. De cualquier modo, el férreo cerrojo de Ivic estaba aflojándose tras su marcha, algo que ya anticipaba la exhibición que ya se había empezado a intuir a finales de los ochenta.

Aquellos días de verano debieron de ser inquietantes para el Hristo Stoichkov, especialmente debido a que corría una fuerte rumorología sobre el posible desembarco del mexicano Hugo Sánchez para reforzar la ofensiva culé. Ya pretendido en el pasado, el infatigable goleador mexicano había sido rechazado por Terry Venables, pero ahora podía suceder que, al igual que Schuster, el ariete pudiera ser uno de los pocos deportistas que militasen en Real Madrid, Atlético y Barcelona. No obstante, la presidencia dudaba de la impopularidad de aquella maniobra, puesto que el goleador azteca había tenido constantes roces con el público blaugrana, además de ser uno de los ídolos del Santiago Bernabéu.

El 29 de junio se produjo el segundo acto de las semifinales, uno donde ya sí observaremos todos los rasgos de la incipiente rivalidad que iba a surgir. Cruyff no tenía miedo en esa clase de situaciones límite a recibir más goles, puesto que la eliminatoria ya estaba cuesta arriba, haciendo un plan audaz que se encuentra bien analizado en la monografía sobre el desempeño histórico del Barcelona en la Copa del Rey escrita por David Salinas: Stoichkov, Julio Salinas y Begiristain debían buscar el remate a la primera oportunidad, especialmente abastecidos por una zona ancha de creación donde el míster azulgrana ubicó a Laudrup, Bakero y Goikoetxea.

Por su lado, Ovejero se sabía con una importante ventaja que le permitiría ser conservador en el Vicente Calderón: colocó cinco defensas, confiando en que sus adversarios correrían muchos riesgos atrás que permitirían sentenciar con la velocidad de Futre.

En opinión de Cruyff, Julio Salinas era la clase de 9 que necesitaba su proyecto. Tras haber sido pieza importante en el Athletic de Bilbao de Javier Clemente y en el Atlético de Madrid, aceptaba bien las suplencias sin que estas le privasen de ambición y fortaleza psicológica para salir a rendir bien los minutos de los que dispusiese. En el Calderón lo demostró al rematar con fortuna en el minuto 20, con un disparo que a Mejías se le escapó de entre sus pies.

Aquella calurosa velada fue complicándose para los anfitriones cuando Koeman botó un centro a balón parado que José María Bakero remató con potencia de cabeza. Con apenas 1’72 metros de altura, el antiguo centrocampista de la Real Sociedad se iría revelando como un excelente cabeceador, especialmente conectado con el tipo de balones de los que abastecía el holandés. Si bien el guardameta rojiblanco pudo rechazarlo, Salinas únicamente tuvo que empujar el esférico para certificar su doblete en apenas seis minutos.

A poco de terminar la primera parte, Ansuátegui Roca observó el derribo de Fernando Muñoz García, popularmente conocido como Nando, a Paolo Futre. En opinión del colegiado, una falta digna de tarjeta roja, algo que hizo saltar a Cruyff de su banquillo como un resorte. Con inferioridad numérica, los visitantes no pudieron defender bien una jugada de estrategia de los de Ovejero rematada por Ferreira. Cruyff ya había sido expulsado por sus protestas junto con Nando, lo cual dejó la responsabilidad de la dirección técnica a Rexach.

Tras el descanso, los de Ovejero sentían que tenían más de medio billete para la final de Copa del Rey en el Santiago Bernabéu. De hecho, Antonio Orejuela estuvo a punto de levantar a la grada con un disparo elevado que terminó impactando en el larguero defendido por Zubizarreta.

Como sucederían en varias ocasiones durante el periplo azulgrana de los noventa, sería Koeman quien desatascaría una situación complicada con sus potentes disparos a balón parado. Corría el minuto 70 cuando la barrera rojiblanca consiguió rechazar su chut, pero el holandés golpeó a la primera el rebote para sorprender a Mejías. El 1-3 abría de nuevo las opciones del campeón liguero.

Pese al meritorio esfuerzo, los locales supieron mantener la compostura. En caso de llegar a la hipotética prórroga, los blaugranas estaban en inferioridad, además de muy agotados. Ello fue aprovechado perfectamente por Tomás en la banda, quien usó todo el pundonor que poseía para sobrepasar la abierta zaga blaugrana, dando un pase de la muerte a Manolo. Soler buscó frenarle sin éxito.

Rexach utilizó una de las soluciones preferidas de su amigo Cruyff cuando tocaba una reacción a la desesperada: sacar a José Ramón Alexanco para ocupar la posición de falso 9. Con su envergadura de 1’84 metros, el expeditivo defensa vizcaíno era un veterano que disponía de pocas titularidades en aquel nuevo Barcelona, pero gozaba de respeto en el vestuario y fue elogiado por su forma de sustituir a Koeman durante la lesión del holandés.

Para alimentar las quejas de Cruyff, el colegiado terminó echando también a Koeman y Ferrer. A diferencia del Camp Nou, el entrenador del Barça cargó las tintas contra el árbitro, exonerando a sus pupilos. Por su lado, Ovejero admitió haberlo pasado mal en una vuelta que intuyó más sencilla inicialmente.

El pase a la final fue un bálsamo para el proyecto de la directiva de Jesús Gil, puesto que permitió alzar la copa en un reñido encuentro ante el Mallorca (1-0 en la prórroga, gol de Alfredo). No obstante, nadie fue consciente de que aquel segundo duelo de las semifinales iba a macar la pauta de los futuros desafíos entre blaugranas y rojiblancos: ofensivas sin freno del rival que fuese en desventaja, alternancia en el marcador, jugadas al límite, polémicas arbitrales y opciones para ambos contendientes con filosofías de juego tan complementarias como placenteras para el público.

Un pulso verdadero

Pese a las expectativas creadas por aquel último partido en el torneo del KO, el siguiente duelo entre Barcelona y Atlético de Madrid pareció alejarse de aquel ritmo vertiginoso. Buscándose un entrenador consagrado para controlar el vestuario, los rojiblancos lograron la incorporación de Luis Aragonés, quien ya tenía consideración como ídolo del Calderón desde sus días de jugador. Apodado El Sabio de Hortaleza, constituía uno de los pocos casos donde un deportista había pasado de futbolista a máximo responsable del área técnica de la noche a la mañana. En esta nueva etapa a orillas del Manzanares, Aragonés sentía que poseía una plantilla idónea para practicar su filosofía predilecta: el contraataque.

Por su lado, Cruyff disponía del aval liguero para intentar dar, de una vez por todas, el asalto a la asignatura pendiente del club blaugrana: la Copa de Europa. Consciente de lo bien que se habían reforzado dos rivales directos, el Real Madrid se encomendó a un hombre que sería muy importante para entender la historia de este artículo: Radomir Antic, el estratega serbio que logró que el club blanco se clasificase in extremis para la UEFA tras un año turbulento.

Adelantando la posición de Fernando Hierro y contando con iconos como Emilio Butragueño en busca de recuperar la competición doméstica, la institución presidida por Ramón Mendoza protagonizó un espectacular comienzo, encadenando victoria tras victoria.

Por ello, la Supercopa se convirtió en una buena oportunidad para Barcelona y Atlético. El primer partido en feudo colchonero se resolvió al final por una magistral contra dirigida por Michael Laudrup, asistente de Guillermo Amor. El canterano batió a Diego Díaz de un potente disparo raso cuando expiraba un encuentro donde Zubizarreta encadenó varias acciones de mérito en la suerte del mano a mano.

Aquel buen resultado fue un alivio para un Barça que había iniciado su defensa del título de forma dubitativa. Además, Cruyff logró solventar también una visita que siempre le resultaba complicada desde que llegó a la Ciudad Condal: su escuadra logró un valioso positivo al empatar a uno en el Santiago Bernabéu. Los medios más críticos con el holandés recordarían que sus atractivas propuestas tomaban más recaudos cuando visitaba el estadio de su máximo rival deportivo.

La situación tampoco resultaba sencilla para los hombres de Luis Aragonés, los cuales ya habían perdido (1-0) en su visita liguera al Camp Nou. Como puede observarse, la temporada 1991/92 no parecía pronosticar los futuros despliegues ofensivos y anotaciones altas que caracterizarían los espectaculares partidos que iban a venir.

Para la vuelta de la Supercopa, Aragonés encontró varias claves que le beneficiaron. Una de ellas fue explotar la velocidad de Carlos Aguilera como carrilero, habilidad que causaba muchos problemas a un Barcelona que dejaba muchos espacios atrás. Alfredo Santaelena, el héroe del título copero ante el Mallorca, casi sorprendió a Zubizarreta con una vaselina que impactó en el larguero. Pronto pudo resarcirse del fallo tras la asistencia filtrada por Sebastián Losada.

Intentando evitar la prórroga, el Barcelona se volcó en la segunda parte. Puesto que solamente podían jugar tres extranjeros al unísono en aquellos momentos, Cruyff pudo volver a comprobar la cierta controversia que generó el fichaje de su compatriota Richard Witschge: avalado por su nuevo entrenador como la mejor pierna izquierda en El Viejo Continente, el holandés tuvo que compartir minutos con compañeros ya consagrados como Laudrup o Stoichkov. Particularmente el búlgaro empezaría a quejarse de las frecuentes sustituciones que sufría en aras de ir integrando al recién llegado en los sistemas.

Precisamente a un disparo de Stoichkov bien repelido por Diego, Bakero logró aprovechar el rechace para dar el primer trofeo del año a su escuadra. El antiguo donostiarra iría todavía más lejos el siguiente mes, salvando una fría noche de Kaiserlautern al conectar un cabezazo tras falta indirecta botada por Ronald Koeman. Aquel gol en el minuto 87 permitió al Barcelona seguir vivo en la máxima competición continental, algo que calmó unas aguas turbulentas para Cruyff, cuyo mal inicio de liga parecía estar comprometiéndole ante un sector de la junta directiva de Núñez.

Sea como fuere, tanto Cruyff como Luis Aragonés supieron ir poniendo presión sobre el liderazgo del Rea Madrid. Acompañado en la táctica psicológica por su buen amigo Rexach, el técnico holandés iría cuestionando el juego de los blancos, afirmando que ganaban, pero no convencían. En esa misma corriente parecían moverse importantes programas radiofónicos de la época como el de José María García, estrella de Antena 3 Radio.

Por su parte, Aragonés señaló la importancia del derbi en el Vicente Calderón. A pesar de estar 6 puntos por detrás de los de Antic, el técnico buscó dar una imagen relajada, afirmando que quedaba mucho campeonato. Al final de los 90 minutos, los rojiblancos habían recortado la distancia a 4 y llevaron a la primera derrota de la escuadra blanca.

Aunque hubiese otros motivos, aquel eco mediático y la capacidad de sus perseguidores para permanecer inasequibles al desaliento fueron estrechando la cabeza del campeonato. El 26 de enero de 1992 se produjo un ajustado triunfo en el Santiago Bernabéu: aunque sus pupilos ganaron 2-1 a Tenerife, Antic tuvo que sufrir los pitos de la grada, algo que fue el preludio de su cese por Leo Beenhakker, asociado al periplo más vistoso de la Quinta del Buitre.

Para el técnico serbio fue un duro revés profesional del que, irónicamente, se beneficiaría mucho el Atlético de Madrid unos años después. Conforme ello sucedía, el Barcelona iba cada vez recuperando su antigua confianza, especialmente motivado por su buen desempeño en la Copa de Europa.

Por su lado, el Atlético tuvo buenas actuaciones en la Recopa, incluyendo exhibiciones ante instituciones históricas como el Manchester United, si bien quedó apeado en cuartos de final por el Brujas. En el bando blaugrana, la gran desilusión fue ser eliminados de la Copa del Rey por el Valencia a las primeras de cambio.

Un reflejo de la igualdad liguera se dio el 14 de marzo de 1992. Tras haberse visto atrás del Real Madrid a comienzos de la campaña, tanto Atlético de Madrid como Barcelona fueron aspirando a los puestos de cabeza. Por ello, los hombres de Luis Aragonés se hallaban ante una oportunidad única de arrebatar dos puntos a un rival directo.

Las cámaras de televisión no supieron hasta última hora si podrían entrar en el Calderón, fruto de un pulso del presidente rojiblanco con la Liga Española en materia de derechos de tanteo con Telemadrid. Nadie podía imaginar que ambas escuadras iban a firmar uno de los mejores duelos de todo el curso.

Muy pronto, los rojiblancos se adelantaron en el marcador: en el minuto 6, Bernd Schuster mandó una precisa asistencia que Manolo Sánchez, goleador indiscutible para El Sabio de Hortaleza durante aquella campaña, mandó a las redes protegidas por Zubizarreta. Se trataba de un golpe importante para los intereses de Cruyff, quienes se hallaban en plena persecución del conjunto blanco. Con todo, cundía preocupación por la baja de Michael Laudrup, uno de los mejores talentos de Europa en aquellos instantes.

Ante un sonriente Jesús Gil desde el palco, los locales empezaron a aguardar a los blaugranas, sabedores de que iban a tener ocasiones de poner en práctica su demoledor contraataque. Apenas tardaron diez minutos en volver a colocar a Manolo en situación de ventaja, algo aprovechado por el ariete para convertir de nuevo con un poderoso disparo.

El staff técnico culé decidió entonces que Robert Witschge abandonase la banda izquierda para hacer un marcaje personal a Schuster, el centrocampista más incisivo del primer tiempo. Tras el descanso, esa función pasaría a ser responsabilidad de Miguel Ángel Nadal.

Aragonés sorprendió en varias parcelas del campo a su colega holandés, incluyendo la desconcertante posición de Aguilera como falso lateral que propició confusión.

El descanso fue la oportunidad de intentar reordenar algunas cuestiones para el once catalán. Cruyff reconoció le inexistencia del sector izquierdo, donde ni Witschge ni Begiristain eran capaces de sacar nada productivo. Tampoco cabía esperar muchas aportaciones de Stoichkov, superado por la física vigilancia de Juan Manuel López.

El aguerrido López ya había hecho ruido la anterior campaña, pero sería con Aragonés cuando el joven empezó a mostrar todo su potencial y pundonor. En el futuro, el atacante búlgaro blaugrana admitió que se trató de uno de sus oponentes más nobles, entregado y leal con el adversario a la hora de chocar.

La entrada de Goikoetxea permitió que el Barça penetrase por la derecha, además de venir acompañado de Julio Salinas, capaz de aguantar el balón de espaldas e intentar generar espacios para las llegadas de sus compañeros.

Fruto de un despiste en las líneas rojiblancas, Eusebio logró filtrar una pelota que Miguel Ángel Nadal aprovechó para fusilar a Abel con un potente disparo. Impertérrito, Luis Aragonés decidió, pasada casi media hora del segundo tiempo, sacar a Gabriel Moya por Manuel Alfaro de la Torre.

Pese al tanto del mallorquín, el Atlético de Madrid tuvo casi de inmediato la oportunidad de convertir el tercer gol. Schuster volvió a conectar a la perfección con Manolo, quien no aprovechó por una vez el trabajo de alemán para completar el hat-trick.

Como era costumbre, los visitantes asumían muchos riesgos volcando hombres en el área de Abel, hecho que se traducía en segundas oportunidades de suma claridad como un mano a mano de Manolo que Zubizarreta logró desviar a córner. Sancionado por sus declaraciones sobre el estamento arbitral, es probable que la presencia de un jugador tan vertical como Paolo Futre hubiera dado un posible tercer tanto a los anfitriones.

Stoichkov, en una noche desafortunada del búlgaro, pagó sus frustraciones con López, motivo para que Díaz Vega le enseñase una segunda tarjeta amarilla que hizo jugar al Barcelona con diez uno de sus duelos más complicados. No obstante, el azar iba a mostrar su mejor rostro a los blaugranas.

Con ventaja numérica, todo parecía propicio para la afición del Vicente Calderón. Sea como fuere, un balón fácil cedido por su defensa se convirtió en envenenado para Abel Resino. El guardameta esperaba controlarlo con sencillez, pero le botó en una de las rodillas, propiciando un alejamiento que Bakero aprovechó con más rapidez que nadie, superando al meta y anotando un valioso 2-2 que se convertiría en crucial tras saberse ese mismo día que el Real Madrid caía 1-0 ante la Unión Deportiva Logroñés.

El vibrante choque, uno de los mejores de aquella Liga, sirvió de metáfora de lo cerca que, en esta ocasión sí, el proyecto presidido por Gil estuvo a punto de alcanzar el ansiado título. En otro reñido, polémico y emocionante duelo en el Santiago Bernabéu, los colchoneros perdieron 3-2 y se despidieron de las aspiraciones matemáticas al entorchado, aunque se tomaron la revancha deportiva en Copa del Rey, volviendo a dicho escenario para batir a su rival y vecino. Los goles de Schuster y Futre certificaron el buen estado de forma de los del Manzanares.

Las cosas acabaron incluso mejor para los pupilos de Cruyff. Lograda la ansiada Copa de Europa, con un fútbol asociativo y que regalaba goleadas, los blaugranas llegaron vivos a la última jornada a expensas de un posible tropiezo del Real Madrid. Frente al Tenerife, irónicamente el último oponente que tuvo Antic como míster blanco, se dio un 3-2 en contra de los madrileños que mandó la Liga hacia el Nou Camp.

¿Un rival inabordable?

El potencial del Atlético de Madrid de Luis Aragonés a principios de la década de los noventa puede haber sido bastante subestimado. La plantilla defendió la siguiente campaña su condición de rey de torneo del KO con una excelente participación en la Recopa, donde llegaron a las semifinales tras batir a adversarios como el Olimpiakos.

No obstante, en una eliminatoria muy reñida de semifinales, el poderoso Parma, futuro campeón de la edición, logró imponerse después de que se produjera un hecho curioso: ambos ganaron en el domicilio del rival. Pero 0-1 en suelo transalpino resultó insuficiente por la regla de los goles dobles obtenidos fuera de casa, haciendo válido el 1-2 en el Manzanares que lograron los pupilos de Nevio Scala.

La eliminación vino acompañada, hecho recogido por periodistas como José Miguélez, de un fuerte escándalo al final del encuentro, fruto de las polémicas arbitrales e intensidad de 180 minutos de gran equilibrio. Tomás, Schuster, Toni, Vizcaíno y Juanito fueron sancionados, de la misma manera que su presidente, quien no podría estar en el palco durante los próximos seis encuentros de competiciones continentales.

Habiendo acariciado conseguir el galardón, para el club rojiblanco aquel revés vino junto a una multa de 100.000 francos. Quedaba la sensación de una tensa relación con la UEFA desde los cuartos de final ante los atenienses, donde, incluso habiendo superado la ronda, fueron penados con una sanción por valor de siete millones de pesetas.

Hechos que verdaderamente empañaron a un proyecto que quizás tenía una plantilla demasiado corta para sobrellevar tres competiciones, pero que podía ser una amenaza seria en cualquier eliminatoria. Si bien pertenecería al género de fútbol ficción, Paolo Futre y un Schuster todavía con recursos suficientes para ser decisivo, habrían podido disfrutar de la Copa de Europa con las actuales reglas donde no es condición sine qua non el haber alzado una Liga que, en aquellos momentos, parecía el campo predilecto del Barcelona de Cruyff.

Así lo notaron los colchoneros cuando recibieron al vigente campeón en el Vicente Calderón. Apenas era la tercera jornada, pero los blaugranas presentaron su nueva candidatura con un Stoichkov mortífero en su velocidad, firmando un hat-trick que luego refrendaría Guillermo Amor para un contundente 1-4.

Fue un severo correctivo que, indudablemente, hizo tener más recaudos a los pupilos de Luis Aragonés cara a la Supercopa que se celebró en octubre. José Ángel de la Casa, comentarista para TVE, subrayaba las concepciones tan contrapuestas de ambos aspirantes en su propuesta futbolística. Sea como fuere, aquella campaña la tendencia parecía mostrar que el fútbol de toque del Barcelona estaba más engrasado que nunca.

Particularmente, Stoichkov estaba mostrándose casi imparable, aunque, fiel a su carácter, también al límite del reglamento. En una acción no apreciada por el colegiado Juan Ansuátegui Roca, golpeó a Tomás para ganar una carrera por la banda. No obstante, pese a rondar por el área de Abel Resino en muchas ocasiones, fueron los visitantes quienes se marcharon con un 0-1 prometedor al descanso.

El tanto fue un certero cabezazo de Patxi Ferreira, el cual había mandado otro a la madera de Zubizarreta antes de estrenarse. Nuevamente, las jugadas a balón parado suponían un potro de tortura para los de Cruyff. Además, fueron ignoradas las protestas de López y Ferreira de que Ferrer había intentado desviar el remate con la mano, siéndole perdonada una amarilla con la que pudo marcharse al concluir el primer tiempo.

Si Gabriel Moya había probado a Zubizarreta previamente, Paolo Futre pudo hacer otro tanto en la reanudación por una mala cesión de Ferrer que se fue envenenando. Rozando el 0-2 en varias ocasiones, no podían imaginar los visitantes el vuelco de acontecimientos de esos 45 minutos.

Como en anteriores ocasiones, incluso a base de ligeros empujones, Stoichkov superó a sus marcadores para dar un pase de la muerte a Julio Salinas. El empate inspiró a los locales, cuyo juego de circulación llevó a buenas triangulaciones que Begiristain aprovechó para superar a Abel. El meta rojiblanco, a seis minutos del final, no pudo repeler un centro de Pep Guardiola, algo que aprovechó a placer Begiristain.

La vuelta sería una apuesta del Atlético por explotar la velocidad de Futre. Sin embargo, la efectividad de los azulgranas fue contundente en su primera aproximación: otro gol de un Begiristain que estaba exhibiendo su usual sentido del desmarque y con precisión perfecta ante Abel. El gol enfrió los ánimos de la grada, aunque el partido recuperó intensidad cuando, con su oportunismo característico, Manuel restauró las tablas a la media hora.

En esta ocasión, la posición previa de Futre fue muy protestada por los defensas de Cruyff. Con su habitual don para ver los espacios, Michael Laudrup dio una asistencia magistral a Bakero, cuyo disparo fue atajado por Abel. El primer tiempo se caracterizó por los constantes saques de esquina a cargo de los anfitriones, con Luis Aragonés buscando explotar las funciones de Aguilera como carrilero.

Stoichkov fue el protagonista de la segunda parte. Inicialmente, por perdonar un mano a mano, pero lograría redimirse al poco tiempo para anotar el 1-2. El polivalente Jon Andoni Goikoetxea estaba causando estragos por la banda izquierda.

El nuevo título parecía confirmar la tendencia de una creciente hegemonía blaugrana en la naciente década de los noventa. Sin embargo, el Barcelona entraría en una crisis importante que tuvo varios puntos de inflexión. El peor de todos para el proyecto deportivo fue la rápida eliminación en los octavos de final en la Copa de Europa. Habiendo empatado 1-1 en tierras rusas, los hombres de Cruyff desperdiciaron un 2-0 inicial para verse remontados 2-3 por el CSKA de Moscú.

Años después, Jorge Valdano recordaría la manera en que el estratega holandés respondió a los medios tras el varapalo, acusando a la directiva de no entender nada de fútbol. Esos juegos de provocación podían cimentarse cuando los resultados acompañaban, pero a finales de enero de 1993 se produjo una nueva derrota en el Santiago Bernabéu, lugar que permanecía invicto ante el míster del Barça (quien sí ganó allí en su etapa como futbolista).

El caprichoso bombo copero deparó una eliminatoria ante el Atlético de Madrid, sumido asimismo en una crisis de rendimiento en el campeonato doméstico. Nicolau Casaus, célebre diplomático de la gerencia Núñez y amigo personal de Jesús Gil, afirmaría que el duelo fue decidido por “las piernas de seda” de Michael Laudrup. En efecto, el danés fue quien abrió el marcador, pero su verdadera incidencia fue la apertura del campo con sus imaginativos pases. Pese al valeroso planteamiento de Luis Aragonés al inicio, la ofensiva visitante iba creciendo y, tras las expulsiones de Donato y Ferreira en la segunda parte, el Calderón tuvo que resignarse a un severo 0-5. El danés fue ovacionado por la grada colchonera en un hermoso gesto deportivo.

Seguían siendo duelos con altos registros goleadores, pero todo caía en el mismo bando aquella campaña. José Omar Pastoriza, apodado El Pato, fue llamado por Jesús Gil para sustituir a Luis Aragonés. Se trataba de una destitución dolorosa, puesto que El Sabio de Hortaleza era toda una institución rojiblanca.

El calendario quiso que, antes de la vuelta en el Nou Camp, el nuevo míster tuviera que visitar la Ciudad Condal el mismo mes en Liga. Sabedor de que lo importante era evitar otra desmoralizadora derrota, el planteamiento de los madrileños fue subir la agresividad y no permitir facilidades al oponente.

El partido fue sumamente bronco, con cuatro expulsados: Juan Vizcaíno por el Atlético, mientras que Guillermo Amor, Bakero y Koeman también tuvieron que abandonar el campo. Pese a la ventaja numérica, los visitantes únicamente lograron empatar a uno, si bien fue un alivio teniendo en cuenta los anteriores precedentes.

De cualquier modo, ello influenció la vuelta copera, donde los suplentes del Cruyff se tomaron un choque casi de trámite con ribetes de gran ocasión. Goran Vucevic y otros actores secundarios de la plantilla protagonizaron una velada donde se impusieron por 6-0 a sus homónimos rojiblancos.

Aunque había eliminado al vigente campeón, el Barcelona se quedaría a las puertas de la final tras ser apeado por el Real Madrid en unas reñidas semifinales. Por fortuna para el crédito de Cruyff, ya tenían alzada la Supercopa de Europa frente al conjunto alemán del Werder Bremen.

Así, con altibajos, la campaña 1992/93 no pudo acabar mejor para los blaugranas, puesto que el Tenerife comandado por Jorge Valdano logró volver a repetir victoria en la última jornada a costa del Real Madrid. Suponía el tercer campeonato consecutivo del Barcelona, que empezaba a establecer diferencias en esa competición con otro histórico, un Atlético de Madrid que logró, al igual que los tinerfeños, clasificarse in extremis para la UEFA.

Simplificación en el área

Diferentes estudios sobre la evolución futbolística del Dream Team de Cruyff señalan la irrupción de Romário de Souza Faria como un giro al estilo de ataque barcelonista. Fichado del PSV Eindhoven, el delantero brasileño supuso una simplificación para sus compañeros una vez llegasen al área rival. En ocasiones alejado de todo lo demás que ocurriese en el campo, en los metros finales Romário era capaz de anotar con una facilidad pasmosa, además de conseguir goles de bella creatividad.

En cierto sentido, ello supuso que la escuadra trenzase menos pases para elaborar durante la campaña 1993-1994, aunque las cifras se mantenían por el potencial que poseía la dupla Stoichkov-Romário. En su debut liguero, el recién llegado confirmó todas las expectativas de su nueva afición al lograr un hat-trick ante la Real Sociedad que él hizo parecer fácil por su sangre fría ante portería.

Sin embargo, si hay un rival ante el que su inspiración pareció multiplicarse fue el Atlético de Madrid. El Vicente Calderón no podía esperar presenciar aquel 30 de octubre de 1993 uno de los encuentros más alocados de aquella década.

Tal vez fue El Mundo Deportivo el medio que mejor escenificó la sensación que tuvieron los hombres de Cruyff al culminar los noventa minutos a orillas del Manzanares: “Increíble” fue el titular del medio favorable al Barcelona, mostrando una de las muchas internadas de Romário en una jornada donde sumaría otros tres goles, pero no pudo festejar la victoria.

Aquel sábado el deportista carioca volvió a justificar la reputación que le dio Jorge Valdano: “jugador de dibujos animados”. Antes del primer cuarto de hora, la inteligente movilidad de Txiki Begiristain rompió el fuera de juego para asistir a placer a su compañero brasileño, quien batió al meta Diego con un disparo raso.

Los rojiblancos no se amilanaron, respondiendo pronto con un remate en plancha de Manuel Sánchez que Zubizarreta sacó con maestría bajo palos. Formado en la cantera de Lezama con otros guardametas de estilo sobrio como Cedrún, el portero vasco inició con seguridad sus acciones, sin saber una noche de pesadilla que enturbiaría su relación con Cruyff.

Igual que le sucedería a Rafael Alkorta poco después, Solozábal sufrió uno de los desconcertantes regates de Romário, a través de una maniobra individual genial que le dejó en el minuto 24 para otro mano a mano con Diego. Sin excesivos alardes, los visitantes se bastaban de su mágico 9 para colocar un 0-2 que Pedro intentó recortar con un poderoso remate que fue rechazado por Zubizarreta.

Cada vez que los pupilos de “Cacho” Heredia, otro ex jugador rojiblanco tornado míster, se recomponían, Romário se inventaba algo que hundía sus esperanzas. Apenas superada la media hora, se inventó una vaselina solamente evitada por el larguero.

El danés Michael Laudrup necesitaba poco para darse cuenta del estado de inspiración de su ariete. Apenas un minuto después de haber asustado al Calderón, Romário recibió un maravilloso pase de su centrocampista, quien intuyó perfectamente el hueco que iba a aprovechar su camarada. Tras controlar, volvió a batir a Diego. El 0-3 debía suponer un durísimo golpe para un Atlético en una campaña incierta y con resultados muy por debajo de lo esperado.

Sin embargo, ante un clásico rival, mantuvieron el pundonor. En los minutos de descuento del primer tiempo, López conectó un cabezazo tras saque de esquina que fue a la madera. No pensaban rendirse pese a tener en frente a uno de los delanteros más asombrosos que habían pasado por el campeonato español.

Visiblemente dolido para los micrófonos de Telemadrid, Kiko Narváez habló con cierto tono de desengaño a pie de campo. Se mostró escéptico con seguir intentando contragolpes, animando a los suyos a presionar desde más arriba. Cualquier otra cosa permitiría al Barcelona tocar el balón a placer. Medalla de oro en los Juegos Olímpicos, en la selección había coincidido con rivales de aquel día como Pep Guardiola o Ferrer, así como futuros compañeros rojiblancos Solozábal, quien ejerció las labores de capitán.

Fichaje ilusionante, el jerezano no estaba logrando hacer explotar su innegable talento ofensivo en el Calderón. Pese a ello, sus plegarias iban a ser escuchadas en aquella ocasión.

Nada más volver de vestuarios, un malentendido del centro del campo culé propició una pérdida que el veloz Kosecki aprovechó para plantarse delante de Zubizarreta, dando un atisbo de esperanza a su causa (1-3).

La grada tardó poco en animar con energía tras esa inyección de moral, algo que se disparó ocho minutos después cuando Pedro tuvo un golpe franco que ejecutó de maravilla. Zubizarreta intentó colocar una mano fuerte, pero el disparo terminó en las redes. El 2-3 fue demasiado para Cruyff, quien optó por colocar a uno de sus especialistas en marcajes, Juan Carlos, sobre Kosecki. Sacrificó para ello a Pep Guardiola. No obstante, el ariete polaco se sentía cómodo hasta el extremo en los partidos de ida y vuelta, fruto de su gran velocidad. Irónicamente, el entrenador blaugrana había afirmado en pretemporada que los colchoneros salían ganando al cambiar al icónico Paolo Futre por el jugador que había debutado en España vistiendo los colores de Osasuna. Kosecki no encontró continuidad a lo largo de sus dos campañas en la capital española, dejando, eso sí, aquella velada de gloria para el recuerdo, su mejor actuación.

Un mal rechace aéreo de Albert Ferrer permitió otra carrera del goleador polaco, cuyo disparo fue medido a la meta culé. En esta mitad, López pudo contener mejor a Romário, amparado también en la mayor permisividad que el colegiado López Nieto estaba dando a la hora de sancionar los contactos.

Irónicamente, sería Pirri el expulsado en los compases finales del choque. Un agarrón de Juanito a Romário cuando el partido expiraba no fue sancionado, hecho que permitió que los locales armasen una contra que hubiera hecho las delicias de Luis Aragonés. Kosecki armó un dos contra dos que culminó con una certera asistencia a Caminero (4-3).

El antiguo jugador del Valladolid explotó de júbilo. Su adaptación al Manzanares fue complicada, especialmente por los malos resultados deportivos. Sin embargo, era uno de los centrocampistas con más llegada en España durante aquellos años, hasta el punto de que Javier Clemente le convocaría para el Mundial de Estados Unidos (1994).

Muchos años después, ante el periodista Enrique Ortego, Caminero rememoraría las causas detrás de aquellos espectaculares duelos que atraían a la gente hacia el estadio: “Éramos dos equipos muy abiertos, con mentalidad de atacar, de llegar rápido a la portería. Nosotros jugábamos con la línea casi en el medio del campo. Ellos prácticamente igual con su 1-4-3-3. Eran partidos incluso demasiado abiertos. Ahora es complicado ver encuentros como esos. En uno llegué a ir perdiendo 0-3 y ganamos 4-3. Y en otro, ir ganando 0-3 y 2-4, con cuatro goles de Pantic, y perder 5-4… Algo que recuerdo muy bien es que en esos partidos tanto el Camp Nou como el Calderón estaban siempre llenos”.

Se trata de un diagnóstico profundamente certero que va a verdaderas razones en los sistemas de juego que explican los entresijos de dos fórmulas con resultados explosivos cuando se mezclaban. No obstante, Cruyff no podía permitirse recurrir a la pizarra en rueda de prensa, preocupado por el rendimiento de los suyos, incluso con Guardiola ironizando que eran capaces de hacer Historia de todas las formas posibles.

Uno de los más señalados fue Zubizarreta. Guardameta casi indiscutido, aquella campaña sería la más tensa de su carrera, acompañada de alguna suplencia en beneficio de Carles Busquets y su posterior despido tras la final europea de Atenas, donde el AC Milan de Fabio Capello apabulló a un Dream Team que se antojaba favorito en el duelo disputado en Atenas.

Después de años exitosos, el exigente técnico holandés tenía problemas para lidiar con cuatro extranjeros de máximo nivel. El máximo damnificado era Michael Laudrup, quien incluso terminaría haciendo las maletas para marcha al máximo rival: el Real Madrid. Con todo, el danés terminaría reconociendo, ya retirado, junto a su agotamiento en la relación con el entrenador, pensaba que el Barcelona estaba agotando una etapa y tenía muchos mundialistas en sus filas que iban a tener un serio bajón de rendimiento físico la campaña 1994/95.

Pero aquellas predicciones distaban todavía de aparecer en el horizonte. Alternando grandes momentos y goleadas como el 5-0 al Madrid en enero, los vigentes campeones protagonizaban debacles como un 6-3 en La Romareda. Irregulares al máximo, muchos pronósticos iban señalando que el “Súper” Deportivo de la Coruña de Arsenio Iglesias iba a hacerse con el título. Marcos Gendre ha recopilado de manera emotiva la historia oral de esa ambiciosa apuesta de la junta directiva de Augusto Lendoiro para llevar a los coruñeses desde las fases de promoción a codearse con los mejores.

Mauro Silva o Bebeto se alternaban con hombres de la casa como Fran. Sagazmente, la secretaría técnica traía a jugadores muy válidos (por ejemplo, Aldana) que ejercían de eficaces suplentes en sus conjuntos de procedencia, pero ahora sentían atracción por los cantos de sirena provenientes de Riazor. En sus Informes Robinson, el equipo de Canal + ha indagado en las causas que llevaron a este fenómeno branquiazul a unos años dorados, evocados con nostalgia por periodistas de la talla de Nacho Carretero.

Como habían hecho con el Real Madrid las dos campañas anteriores, Cruyff y Rexach intentaban adelantar sus encuentros para colocar presión extra sobre el líder gallego. El técnico holandés llegó a granjearse la antipatía de la afición coruñesa, pero su táctica iría funcionando paulatinamente, especialmente debido a que el Barça firmaría una segunda vuelta de ensueño.

Una de las grandes exhibiciones sirvió, además, para tomarse la revancha ante los rojiblancos, quienes, en un rasgo clásico de aquella etapa de la presidencia de Jesús Gil y Gil, habían vuelto a mover su banquillo. Santos Ovejero llevaba pocos días en sustitución de José Luis Romero para afrontar a una escuadra blaugrana en plena efervescencia.

El partido incluso superó en goles a la noche memorable del 4-3. El Camp Nou tardó poco en celebrar el primer gol, obra de Romário, una maravillosa vaselina que pilló desprevenido a Abel Resino. El estado de euforia se tradujo en pañuelos blancos y ovaciones en la grada, donde estaban incluso iconos de la sección de basket azulgrana como Juan Antonio San Epifanio, “Epi”.

Sin embargo, los rojiblancos consiguieron aprovechar la rapidez de Kosecki, quien sacó un penalti a Koeman que Pedro transformó con frialdad frente a Zubizarreta en el 21.

Previamente, equipos tan regulares como el Deportivo de La Coruña habían caído abatidos 3-0 en ese mismo escenario, donde incluso el Real Madrid sufrió una manita de goles. Además, al tempranero tanto se unió la doble amonestación a Vizcaíno poco después. Pese a ello a través del centro del campo, el Atlético supo encontrar su ritmo, amparado en la inspiración de Caminero, además de juntar su media más a la zaga.

A diferencia de muchos otros oponentes que se medían a los madrileños en aquellos años, Cruyff se había hecho célebre por tomar una decisión con respecto al habilidoso delantero extremeño Manolo Sánchez. Como confesaría en varios libros y ante amigos como Jorge Valdano, el técnico holandés creyó hallar una solución para enfrentarse a un avispado ariete cuyo punto fuerte era desmarcarse con rapidez. Pichichi en la liga del curso 1991/92, Manolo quizás se sorprendiese por el hecho de que los blaugranas nunca le colocasen un defensa personalizado para él.

El míster del Barcelona se jactaría de que recibía mucho menos castigo del goleador que la mayoría. Sea como fuere, su teoría en este sentido podría refutarse viendo varios de los pasajes de este artículo. En la ocasión que nos ocupa, Manolo volvió a equilibrar numéricamente el partido al recibir un codazo de Ronald Koeman y haría mucho daño a los defensores azulgranas.

De hecho, en pleno dominio visitante, el colegiado Andújar Oliver erró al no señalar un penalti de Zubizarreta sobre Pirri. De haberlo hecho, el guardameta, titular con la selección española, habría sido expulsado y los locales habrían tenido que afrontar aquella intensa velada con nueve hombres.

Romário volvió a golpear pasada la media hora con otro de sus fabulosos controles. No obstante, se le señaló un fuera de juego inexistente. En la réplica, Pirri mandó un centro que Manolo remató con velocidad al palo cambiado de la portería culé. El 1-2 parecía abrir un nuevo encuentro donde quizás el ritmo de juego se atenuase. Nada más lejos de la realidad.

Stoichkov admitía motivarse especialmente ante el Atlético de Madrid. Solía tener agrias batallas contra defensas como Tomás Riñones o Juanma López, si bien admitía sentir debilidad por la calidad de jóvenes como Caminero, a quien veía destinado a marcar el ritmo del combinado de Javier Clemente. En aquella ocasión, usó su certera zurda para empatar a 2-2 apenas cinco minutos después, a través de una falta magistralmente ejecutada, aprovechando también la ausencia del especialista Koeman.

Las alternativas se sucedían, aunque serían los pupilos de Santos Ovejero los más certeros justo antes de que culminase la primera parte. Ello no era fruto del azar. Sin el central holandés, la defensa blaugrana solía sufrir mucho aquella campaña. Kosecki y Manolo usaban su capacidad para generar espacios, obligando a muchos desplazamientos de Miguel Ángel Nadal. Ello fue aprovechado con energía por Caminero, un gran llegador que cabeceó otro centro de Pirri para marchar a vestuarios con el liderato en el marcador.

La reanudación mostró todo el potencial ofensivo que atesoraban los de Cruyff. Una de las decisiones tácticas más controvertidas de Ovejero fue la temprana sustitución de Caminero por Benítez, una modificación de esquema que daba mordiente arriba, aunque sacrificaba creatividad en la medular.

Tras poco más de diez minutos, Romário, quien ya había dado serios avisos a Abel en la segunda parte, fue derribado entre Tomás y Pedro. Justo cuando el Camp Nou se preparaba para celebrar la reinstaurada igualdad en el electrónico, Abel intuyó perfectamente el disparo, con el búlgaro resbalándose al intentar acudir a su propio rebote.

Lejos de sufrir un bajón anímico, el Barcelona siguió insistiendo con un peso destacado de Sergi Barjuan y su desborde por la banda. Desde la media, Pep Guardiola buscaba pases incisivos. Uno de ellos fue aprovechado por Iván Iglesias en el 64 para probar al meta colchonero. El rechace fue controlado por Romário. El ariete carioca, casi desde el suelo, logró dibujar una vaselina que superó al cancerbero y a los defensas visitantes que buscaban proteger las redes. Tras mucha deliberación y protestas de los de Ovejero, el tanto no subiría al marcador por una posición irreglamentaria más que dudosa.

La diferencia era el estado mental de un Barcelona mucho más firme e insistente. La velocidad de Stoichkov permitió casi de inmediato otra internada por la banda donde asistió a placer a Romário, quien enloqueció junto con la grada tras las anulaciones previas.

Quedaban veinticinco minutos y Romário aprovechó con suma habilidad que los visitantes empezaban a volcar hombres en el otro campo. Guardiola supo intuir su desmarque para que el brasileño ganase un duelo crucial con López, batiendo con habilidad a Abel. Había consumado otro hat-trick en el minuto 73.

La ausencia de Caminero restaba ideas a los de Ovejero, algo que aprovechaba el internacional de la canarinha para captar la atención de sus marcadores.  Stoichkov lo aprovechaba instintivamente para cortar y rematar a placer una sutil asistencia en el minuto 80 que aseguraba un triunfo crucial.

A modo de curiosidad, durante un clásico duelo durante años, mantenido entre Tomás Riñones y el delantero búlgaro del Barcelona, saltó una liebre al Camp Nou que obligó a Andújar Oliver a detener el choque.

Para mantener el nivel de polémica, el colegiado andaluz expulsó por protestas a Stoichkov y a López por otra dura entrada. La campaña 1993/94 regaló dos enfrentamientos espectaculares que merecían un lugar destacado en la histórica rivalidad. Romário ayudaba a aumentar los registros barcelonistas desde lo individual, mientras que Caminero suponía un añadido fascinante para el centro del campo rojiblanco.

Los derroteros de los dos oponentes fueron distintos. Los de Cruyff alcanzaron un cuarto entorchado milagroso tras superar previamente su maldición en el Santiago Bernabéu, a través de un valioso gol de Guillermo Amor. Un lanzamiento desde los 11 metros de Miroslav Djukic pudo acabar con la hegemonía blaugrana, pero fue detenido por el meta valencianista González.

Ya con Jorge D’ Alessandro dirigiendo los designios de la nave atlética, los colchoneros tuvieron que recurrir al empuje del Vicente Calderón para batir 2-0 al Rayo Vallecano de David Vidal. Los coqueteos incluso con el descenso escenificaban un año terrible en lo deportivo que escenificaba la inestabilidad de la directiva de Jesús Gil.

Manteniendo la tradición

Barcelona y Atlético compartieron una sensación de desazón la campaña 1994/95. Con cuatro ligas consecutivas y siendo una presencia fuerte en Europa, los culés se verían adelantados por el ritmo del nuevo Real Madrid de Jorge Valdano y el excelente Deportivo de La Coruña de Arsenio Iglesias. La inesperada y contundente derrota en la final continental de Atenas (4-0) convenció a Cruyff de tomar decisiones extremas: pilares como Zubizarreta marchaban, mientras que Goikoetxea fue reemplazado por Xavier Eskurza. Romário, ídolo de la anterior campaña, iría forzando con su indisciplina y poco esfuerzo en el campo su marcha de regreso a Brasil en un curso futbolístico que no culminó.

Con todo, el peor golpe fue la marcha del danés Michael Laudrup a un rival directo como los blancos. Fruto del desgaste de su relación con el míster holandés que le trajo del ostracismo en la Juventus, ahora sus asistencias las estaban disfrutando atacantes como Iván Zamorano o Emilio Butragueño. Además, su pronóstico del bajón en la curva de rendimiento de sus antiguos camaradas se cumplió de manera casi profética.

Pese a ello, la afición del Nou Camp pudo disfrutar en la sexta jornada de uno de los encuentros más codiciados por las cadenas de televisión. Aparecía de visita el Atlético de Madrid, ahora dirigido por Francisco Maturana.

Iván Castelló, uno de los grandes expertos en la turbulenta gestión de Jesús Gil y Gil con el Atlético, recuerda como un diario internacional como El Tiempo de Bogotá lamentaba que uno de los entrenadores de moda se metiera en “el matadero” que estaba siendo el Vicente Calderón para su gremio. Maturana logró gestas como el 0-5 de Colombia a Argentina en El Monumental, pero pronto se sorprendió por el miedo imperante en una plantilla con talento, pero cohibida por la falta de paciencia cuando no acompañaban los resultados.

Tras una pretemporada discreta por tierras inglesas, el enésimo proyecto de Gil llegaba necesitado a la Ciudad Condal. Andrés Astruells, director adjunto de Mundo Deportivo, calificó aquella velada como el partido más excitante que se podía ver en el campeonato. No pudo estar más acertado.

Desde el primer momento, los visitantes presionaron muy arriba, propiciando malas salidas con los pies de Carles Busquets, además de obligar a “El Pitu” Abelardo a cometer una fea entrada sobre su compañero olímpico Kiko Narváez, en una acción que Simeone reclamó como roja al ser el último hombre antes de que el goleador andaluz se plantase ante la portería contraria.

Casi de inmediato, llegó otra polémica. Stoichkov cargó con agresividad sobre Toni para desequilibrarle. Puesto que el árbitro Ansuátegui Roca no señalizó nada, el búlgaro consiguió mandar un centro que Diego no pudo interceptar. Romário únicamente tuvo que empujar el balón a las redes. Tras haber protagonizado una sincera amistad en su primer año juntos, los dos delanteros azulgranas se estaban mostrando frialdad en el curso. David Airob captó en una precisa fotografía el abrazo entre ambos que la grada quiso ver como un guiño a que volverían los días felices.

En la medular, el evento permitió algún duelo entre dos líderes de vestuarios que se habían desafiado ante la prensa: Simeone denunció que Koeman tenía mucha bula arbitral, algo aprovechado por el holandés para recordar en la prensa que el argentino no estaba exento de dureza.

Tras haberse hecho un nombre en el Sevilla, Simeone era un exuberante futbolista que, según le había enseñado Carlos Salvador Bilardo, podía catalogarse de “todocampista”. Nadie podía saberlo, pero su nombre terminaría convirtiéndose en esencial para la historia atlética.

El mayor dolor de cabeza para la zaga de Cruyff estaba siendo Kiko, hasta el punto de que Abelardo tuvo que arriesgar para sacarle el balón con limpieza cuando el andaluz ya encaraba a Busquets. En una triangulación perfecta, el ex del Cádiz controló con el pecho y dio un sutil cabezazo que Pirri aprovechó para fusilar la portería blaugrana durante el minuto 26.

No contento con ello, luego aprovechó un regalo inesperado del portero local para estar cerca de sorprenderle con una vaselina al más puro estilo Romário.

Pasada la media hora se produjo otro momento histórico. Desde su irrupción en el primer equipo, Guardiola se había visto presionado por Cruyff para mejorar su remate desde fuera del área. Particularmente en los golpes francos, el jugador canterano recibió el apoyo de su frecuente compañero de habitación: Ronald Koeman. Armando la pierna con gran rapidez tras un rechace de la zaga rojiblanca, Guardiola sorprendió a Diego con su zurda para mandar la pelota justo por toda la escuadra en su debut anotador en la liga española.

A partir de entonces, la inercia no pudo ser más positiva para el vigente campeón. Pirri recibió amarilla por una patada a destiempo sobre Koeman, mientras que Toni casi se mete un gol en propia puerta intentando evitar un fácil remate de Romário.

Finalmente, el tanto llegaría a balón parado con una hábil conexión entre Koeman y Stoichkov que el segundo aprovechó hábilmente para usar su pierna predilecta, la zurda. Ante la incredulidad del staff técnico de Maturana, Ferrer lanzó otro disparo desde fuera del área a la cruceta.

Las dos únicas islas para un Atlético desbordado resultaron ser Kiko, maestro en controlar de espaldas, y Simeone, el cual se aplaudió a sí mismo tras hacer un caño a Bakero, capitán azulgrana.

Tal vez teniendo en mente su reciente remontada ante el conjunto de Cruyff, el Atlético salió dispuesto a todo, olvidando la desventaja. Con rapidez, Kiko conectó un pase al espacio que Kosecki aprovechó con rapidez para plantarse delante de Busquets, quien logró desbaratar la ocasión manifiesta.

Los hombres de Maturana consiguieron aislar a Romário, además de poner en serios aprietos a un Barcelona con dificultades para salir jugando desde su área. De hecho, un malentendido en la medular acabó con Pirri encarando hacia portería, saliéndose su disparo por apenas centímetros. Casi al instante, Kosecki volvió a probar los puños de Busquets. Fue la última intervención del jugador polaco, reemplazado por Adolfo “El Tren” Valencia. Altamente promocionado en su Colombia natal, había llegado a militar en el Bayern de Múnich, aunque su andadura en el Atlético no fue exitosa, si bien ante el Barcelona firmaría algunas de sus mejores actuaciones, puesto que era veloz y aprovechaba los huecos que ofrecía el sistema de Cruyff.

Busquets estaba siendo el mejor de su bando en este tramo, venciendo en el mano a mano a un Kiko Narváez escurridizo para Koeman. Uno de los causantes del cambio de tendencia estaba siendo Caminero, gran recuperador de balones. El antiguo jugador del Valladolid dio un pase de la muerte a Simeone que Busquets intuyó perfectamente cerrando sus piernas para evitar el segundo gol rojiblanco.

Aisladamente, Romário generaba problemas cuando Guardiola lograba conectar algún pase con él, usando sus habilidosos controles de pecho para desequilibrar el marcaje de Tomás Riñones.

Cruyff sustituyó a su capitán, Bakero, en beneficio de la frescura y polivalencia que podía darle Guillermo Amor. En algo atípico para el Camp Nou durante esos años, la posesión del balón estaba siendo muy equilibrada (53% para los anfitriones y un 47% para los de Maturana).

Llegada la media hora, Amor logró filtrar un pase a Romário, quien habilidosamente evitó el fuera de juego y luego penalizó a Diego con una de esas vaselinas que tantos problemas dieron a su colega Abel Resino. Consiguió vencer en carrera corta, su especialidad, a Rocha. El 4-1 pareció una sentencia y el público quería volver a soñar con ver la mejor versión del ídolo brasileño, absolutamente desconectado del equipo desde que se marchó al torneo mundial de Estados Unidos.

Con síntomas de agotamiento, la retaguardia rojiblanca no logró interceptar un pase de Guardiola que dejo solo a Stoichkov, quien no estuvo acertado a la hora de definir. Del 5-1 se pasó con rapidez al 4-2 mediante la recuperación de una pelota perdida por Koeman que Simeone aprovechó a la perfección para asistir a Kiko durante el minuto 36.

El encuentro que parecía cerrado se haría largo a los blaugranas, especialmente cuando Caminero abrió juego hacia la banda donde Simeone asistió a Valencia. El ariete colombiano logró elevar la pelota para sobrepasar a Busquets, provocando la desesperación de Cruyff en la banca por cómo estaban permitiendo tocar a sus oponentes. Simeone recogió con furia el balón de las redes para espolear la remontada de los suyos.

Sin embargo, los de Maturana estaban dejando mucho espacio atrás, algo que Romário aprovechó para dar un medido pase que habría habilitado a Amor para una fácil ocasión de no haber sido por el instinto de Tomás, el cual logró impedir la acción justo a tiempo para los intereses de los suyos.

Finalmente, el duelo quedó finalizado con aquellos 7 goles en otra sesión memorable para la audiencia y público que lo pudo disfrutar a pie de campo. Sería una de las escasas alegrías para un Barcelona que sufriría un gran proceso de desgaste aquel año. De dominador, pasó a tener severos problemas para aspirar a plazas que diesen acceso a la UEFA.

La situación colchonera era incluso peor. Al menos, los blaugranas celebraron la Supercopa de España, mientras que el proyecto de Jesús Gil afrontaba un febrero peligroso: 15 puntos y zona de promoción. Jorge Roberto d’ Alessandro, quien fuera portero destacado en la mejor etapa de la Unión Deportiva Salamanca, manejaba la nave en el banquillo cuando el caprichoso bombo copero les hizo marchar a la Ciudad Condal para la ida de los octavos de final.

Los dos tradicionales antagonistas volvían a cruzarse. Pasar aquella ronda permitiría salvaguardar los muebles a uno de ellos y aspirar seriamente a un título para la sala de trofeos. El pasional estratega argentino fue importante para salvaguardar a la escuadra en los albores de la campaña 1993/94 de descender, pero Gil lo cambió de inmediato por Francisco Maturana. Ahora, volvía e iba a vivir uno de sus momentos más felices en la banca rojiblanca.

Pese a ello, la ida de los octavos iba a empezar muy mal para los madrileños. Stoichkov botó un córner en el minuto 2 que “El Pitu” Abelardo cabeceó de manera magistral para abrir una nueva fiesta de goles entre ambos contendientes.

Con todo, si alguien iba a recordar siempre la velada sería Julen Lopetegui. El portero hacía su debut oficial con la elástica del Barcelona, precedido por un gran rendimiento con el Logroñés. No podía imaginar que, apenas pasado un cuarto de hora, se vería obligado a derribar a Caminero en una ocasión manifiesta de gol por parte del vallisoletano. Díaz Vega la expulsó, lo cual obligaría la sustitución Beguiristáin por Angoy, fichaje controvertido y debatido por la prensa al ser el yerno de su entrenador. Con sangre fría, Simeone igualó el partido.

Sin importar la desigualdad numérica, el Barcelona logró mantenerse bastante bien la primera mitad. De hecho, fruto del juego de toque, Abelardo incluso estuvo cerca de conseguir el doblete cuando remató en el área pequeña de Abel Resino.

Al descanso, serían en esta ocasión los locales quienes tendrían algunos reproches a Díaz Vega. No por el claro penalti a Camino, sino por posibles indulgencias con Kosecki y Solozábal, puesto que ambos coquetearon con una segunda amarilla.

En el vestuario culé ya no estaba un afligido Lopetegui, quien optó por marcharse a casa para seguir viendo el transcurso del partido por televisión. Al igual que frente al Zaragoza en su bautismo de fuego en el marco blaugrana, había terminado siendo expulsado.

D’Alessandro acertó con el cambio al mover a Geli por Valencia. El jugador sudamericano no estaba encontrándose cómodo en el Manzanares, si bien volvería a anotar de nuevo en la Ciudad Condal. Un pase filtrado de Kiko le permitió avanzar para encarar a Angoy, sorteando el intento de entrada de Koeman. El 1-2 exigía mucho a los catalanes, especialmente con diez hombres sobre el césped.

Uno de los recursos fue la capacidad de Hagi a balón parado. El futbolista rumano probó a Abel con un golpeo franco, además de intentar centros al área rojiblanca. Considerado “el Maradona de los Cárpatos”, Cruyff siempre había mostrado interés por este técnico atacante que había estado previamente en el Real Madrid.

De cualquier modo, Kiko volvió a castigar en el 68 con otra de sus sorprendentes asistencias. Pirri no desaprovechó la ocasión para lanzar con contundencia ante Angoy (1-3). La repetición televisiva mostró que el asistente estaba ligeramente adelantado, algo no advertido por el juez de banda.

Con el encuentro expirando, el genio del jerezano volvió a aparecer en otro contraataque magistralmente ejecutado. Valencia logró vencer el pulso con Angoy para colocar un marcador que, como confesó su entrenador a Quique Guasch a pie de campo, resultaba muy emotivo para la recuperación.

En efecto, la suerte pareció girar. Los colchoneros se mantuvieron invictos cuatro partidos, mientras el Barcelona recibía un correctivo en El Sardinero (5-0). La relación entre Stoichkov y Cruyff pasaba por uno de sus clásicos altibajos. De cualquier forma, el técnico holandés no pensaba renunciar a la eliminatoria. Blindó al vestuario cara al viaje a Madrid, retrasando a propósito el desplazamiento para llegar sin el tiempo a conceder la rueda de prensa. Pese a haber descartado al capitán Bakero o no contar con gente tan lesionada de la importancia de Koeman o Amor, pensaba poder sorprender a su rival.

De inmediato, el Vicente Calderón vio a un Barcelona de mayor agresividad. Hagi se movía con libertad por las bandas derecha e izquierda. Precisamente el rumano logró sorprender a Abel pasados los ocho minutos con un magnífico remate que exhibía la calidad de su zurda.

El dominio no se materializó en más goles, algo que penalizó Caminero en los estertores de la primera mitad. Una mala salida de Lopetegui le permitió controlar un saque de esquina para anotar pese a tener cuatro defensas blaugranas alrededor de la portería. La moral de la escuadra azulgrana vaciló y pronto Valencia fue objeto de penalti por parte de Sergi. Al fin, Lopetegui pudo resarcirse del partido de ida al atajarlo.

Al poco de regresar de vestuarios, Tomás arrolló a Xavier Escaich. El defensa rojiblanco tuvo alguna palabra poco amistosa con Stoichkov, puesto que ambos hombres se profesaban una antipatía clara en el campo por el rigor con el que defendían sus colores. El búlgaro ejecutó la pena máxima, acabando con una sequía que había iniciado desde el mes de diciembre.

El único islote para los jugadores rojiblancos era Valencia, quien reclamó un posible agarrón de la defensa rival en una de sus internadas. Sea como fuere, con superioridad numérica, el Barcelona tardó pocos minutos en volver a poner a otro de los suyos, Iván Iglesias, a boca de gol. Derribado por Toni, volvió a ser el búlgaro con sangre fría quien engañó a Abel con un lanzamiento idéntico al anterior. Visiblemente complacido, Cruyff hacía gestos de calma para un partido que se ponía favorable a sus intereses, si bien Caminero reaccionó con pundonor para recuperar balones en la medular.

A falta de doce minutos, Valencia consiguió otra arrancada que pilló desprevenida a la zaga visitante, siendo derribado por Sergi, aunque de forma difusa entre dentro y fuera del área.

El duro disparo de Toni fue centrado, algo que permitió a Lopetegui rechazarlo. Justo cuando las fuerzas de ambos contendientes comenzaban a flaquear, Abel Resino detuvo una jugada a Jordi Cruyff usando las manos fuera del área permitida. Ante las ásperas protestas del capitán, Arturo Daudén Ibáñez le enseñó la segunda amarilla del día. La preocupación en el Calderón era máxima.

Jesús Gil pagó una primera extra a toda la plantilla tras otra demostración de la capacidad de sufrimiento de su club.

En aquel año tan convulso, Guardiola destacó el compromiso exhibido por la plantilla barcelonista. Solamente conseguirían alzar la Supercopa de España frente al Zaragoza, aunque lograron in extremis mantener un récord del club (siempre disputar competiciones continentales) después de un gol agónico de Jordi Cruyff en San Mamés que les clasificaba para UEFA.

D’Alessandro fue cesado en el mes de febrero de 1995, algo que le impidió volver a medirse a aquel Barcelona en transición. Su sustituto terminó siendo el ex seleccionador argentino Alfio “El Coco” Basile, el último míster que dirigió a Diego Armando Maradona en la Copa del Mundo. Icono de Racing como jugador, Basile se hizo un director de campo carismático por su personalidad y cercanía a los jugadores, algo que le hizo revertir un tanto la situación liguera. Justo lo contrario de su colega holandés.

“He perdido el control de la situación”, admitió un Cruyff tenso a pocos días de un partido de Copa de Europa ante el París Saint Germain. Curiosamente, Gil dedicó palabras de apoyo al entrenador holandés, afirmando que había malacostumbrado a los suyos con tantas temporadas exitosas. Basile siempre se sintió orgulloso de haber abatido a un rival tan célebre y eso que tuvo bajas tan sensibles como la de Diego Pablo Simeone.

Eso permitió a Carlos Bonellí, corresponsal de Mundo Deportivo, vivir con el centrocampista argentino aquella jornada donde los rojiblancos se quitaron algunos sinsabores. No podían ni imaginar el escándalo que aguardaría unas jornadas después, cuando Gil entraría a pedir cuentas a algunos de sus jugadores por el mal rendimiento durante un empate a cero en Las Gaunas.

Las cámaras de televisión captaron varios momentos vergonzosos, pero ninguno como la tristemente célebre frase: “Yo al negro le corto el cuello”. Se reveló que era una amenaza nada velada a Valencia. Basile quedó indignado ante aquella falta de respeto a la plantilla y terminaría aprovechando el programa de radio de José María García para medirse con Gil y terminar retirándose poco después de aquel proyecto deportivo.

Los del Manzanares quedaron en un discretísimo decimocuarto puesto en la Liga. Para colmo de males, Raúl González Blanco, un jugador formado en las categorías inferiores colchoneras, debutaba de la mano de Jorge Valdano y Ángel Cappa para convertirse en el atacante de referencia para el Real Madrid durante los siguientes años. Como recuperaría el programa Conexión Vintage, Raúl incluso había aparecido en espacios televisivos siendo felicitado por Gil por los goles obtenidos o una charla del joven en el vestuario con Bern Schuster el mismo día que culminó el récord de imbatibilidad de Abel.

En algunos mentideros se recordaría que la administración del presidente rojiblanco y sus recortes en dichas secciones permitieron al gran rival en la capital española hacerse con una figura que se convertiría en un incomodísimo rival para las siguientes campas.

No obstante, de aquellas infructuosas etapas, iba a surgir un momento culmen para la institución.

La revolución de Antic

Radomir Antic se había visto arrastrado colateralmente por la revolución de Cruyff en el Barcelona. Durante la campaña 1990/91, el entrenador serbio llegó a un Real Madrid en crisis de resultados para iniciar una remontada que llevó al club blanco a conseguir una meritoria clasificación a la UEFA.

El siguiente año se inició todavía mejor, con récord de puntos inicial y novedades tácticas como adelantar la posición de Fernando Hierro. El malagueño anotó gran cantidad de goles y el equipo se afianzó pronto en el liderato. Sin embargo, su forma de entender el deporte chocaba con la plasticidad y emoción que estaba imprimiendo el Barcelona del técnico holandés.

El periodista José Miguélez no duda en afirmar que su destitución por orden de Ramón Mendoza en beneficio del Leo Beenhakker marcó una sed de revancha deportiva que aupó a Antic a aceptar la oferta de Jesús Gil durante el verano de 1995. El presidente rojiblanco, tras dos años decepcionantes en rendimiento, se había ganado una merecida fama de cesar entrenadores con suma facilidad.

Consiguiendo cumplir una de sus supersticiones, la única condición del balcánico fue firmar un lunes y obtener jugosas promesas en materia de primas deportivas. El dirigente aceptó, puesto que el recién llegado al banquillo del Calderón aceptaba ir renovando anualmente y sus emolumentos resultaban discretos en comparativa con otros místeres.

De inmediato, logró parar algunas operaciones que, a su juicio, iban a debilitar el proyecto deportivo colchonero. Se acabaron las especulaciones acerca de que Kiko Narváez iba a ser traspasado al Zaragoza. De la misma forma, insistió en el fichaje de un jugador desconocido para la liga española: Milinko Pantic, centrocampista del Panionios griego. La prensa incluso especuló que se trataba de algún favoritismo personal. De cualquier modo, lo que le gustaba a Antic radicaba en que era un consumado especialista a balón parado y hasta prometió a Gil poner de su propio dinero para costear la operación.

Asimismo, pronto dio otro espaldarazo de confianza a Luboslav Penev. Aunque el búlgaro había formado una dupla sensacional con Stoichkov durante el Mundial de Estados Unidos (1994), su final en Valencia fue amargo por el cáncer testicular que se le diagnosticó. Desmintiendo los pronósticos más agoreros, el Atlético se cercioró de que su recuperación era completa y el nuevo míster afirmó que sería el 9 de referencia para acompañar a Kiko.

Partidario de plantillas cortas y once titulares que la afición memorizaría de carrerilla, Antic jamás cuestionaba dos posiciones: el goleador (Penev) y el dueño de la portería. Por aquel entonces, Miguel Ángel Ruiz llevaba meses observando con atención a José Francisco Molina, un joven guardameta que, cosa atípica en aquella etapa, destacaba por su buen juego de pies.

El problema era que Gil y el propio cuerpo técnico temían las goleadas que el equipo de Molina, el Albacete, recibió en la fase de promoción ante el Salamanca. Sea como fuere, Ruiz insistió y consiguió tanto su incorporación como la del defensa albaceteño Santi. Fiel a sus principios, Antic afirmó que Molina sería su titular indiscutible en Liga y Copa, algo que le llevó a ser tajante con el guardameta Diego Díaz Garrido, cuya salida del club fue áspera, debido a que el serbio dudaba que fuese capaz de asumir una suplencia tan prolongada.

Recientemente, la cadena Movistar + ha realizado un interesante reportaje sobre aquellas transformaciones que sucedieron en el Vicente Calderón para explicar una campaña 1995/96 que resultaría histórica. Consciente de la baja moral existente en la platilla por los últimos cursos, incluyendo coqueteos con el descenso, la preparación física fue muy rigurosa para empezar en septiembre con gran intensidad, logrando puntos que dieran una tranquilidad inmediata.

No todo resultó sencillo. Por ejemplo, Antic estaba convencido de que resultaba prioritario fichar a Robert Prosinecki, talento altamente promocionado desde sus días en el Estrella Roja. El centrocampista conocía a Antic de sus años con el Oviedo y se mostraba receptivo tras haber visto malogrado su rendimiento en el Santiago Bernabéu por las lesiones. Con todo, también era un futbolista muy del gusto de Cruyff, quien logró que el Barcelona apareciese justo cuando Ramón Mendoza lo liberaba para hacerse con sus servicios.

Ese golpe no restó fuerza a una sólida pretemporada de la escuadra del Manzanares. Aunque él prefería a cancerberos como Santiago Cañizares, Antic apostó de inmediato por arropar a Molina. Su apuesta iba a ser un 4-4-2 con la defensa muy adelantada. El propio portero expresó sus dudas sobre los intentos de vaselina que iba a sufrir por abandonar tanto las redes, pero el serbio le afirmó que por cada uno de esos tantos que recibiesen, iban a ganar decenas de posesiones y balones adversarios al anfiteatro.

La presión iba a ser una constante, además de la verticalidad propia de la Premier League. Toni y Geli, dos antiguos centrocampistas, estaban cómodos reconvertidos en finos laterales ofensivos que iban a desgastar mucho a los oponentes.

Si bien el Real Madrid de Jorge Valdano defendía título liguero, pronto se intuyó que el equipo de la capital española con más opciones jugaba en el Calderón. Asimismo, tras una temporada en barbecho, Cruyff y Rexach parecían querer iniciar una nueva etapa para recuperar la hegemonía en el campeonato doméstico. Toni Frieros brindó una obra que analizaba esa nueva generación forjada en la cantera que querían diseñar.

Pronto, el Atlético comenzó dando muestras de que su ilusionante pretemporada no era ningún espejismo. Pantic abastecía perfectamente a gente como Kiko o Penev, mientras que talentos como Caminero se encontraban en uno de los mejores picos de su carrera profesional.

Una de las pruebas que la opinión pública aguardaba para el ilusionado conjunto rojiblanco era recibir al Barcelona. Antic sorprendió en rueda de prensa al afirmar que no temía nada de los blaugranas. Se trataba de una afirmación que rompía con el famoso fenómeno de “el Pupas”.

Con su portero titular lesionado, Cruyff recurrió a Lopetegui, quien iba a cubrir la meta culé en uno de los días que más atareada iba a estar. Demostración de lo en serio que se tomaba a aquel oponente, baste pensar que el usualmente ofensivo Barcelona intentó tomar recaudos defensivos, dejando en el banquillo a los centrocampistas de mayor creatividad como de la Peña o Prosinecki, una de las peticiones frustradas para Antic.

Hubo celebridades en el césped antes del saque inicial, con el obsequió del club anfitrión a Abraham Olano, uno de los ciclistas más importantes durante aquella época en España.

Pronto, el Vicente Calderón se asemejó a una grada inglesa aquella noche, puesto que sus jugadores cumplieron los preceptos del estratega serbio: hacer un fútbol vertical a la inglesa, celebrándose cada saque de esquina. Fruto de uno de esos córneres, “El Pitu” Abelardo cometió una ingenua mano que Penev castigó a la perfección desde los once metros.

Juan E. Rodríguez Garrido ha rescatado de la hemeroteca la elogiosa reacción de Cruyff tras ver al renovado Atlético de Antic. El técnico holandés admitió que el resultado podía haber sido perfectamente 7-1.

No le faltaba razón, puesto que los colchoneros incluso demostraron que podían marear a sus contrincantes con una de las armas predilectas del Dream Team: ofensiva al primer toque. Kiko fijaba de maravilla las posiciones de los centrales, algo que fue aprovechado con maestría por “El Cholo” Simeone para triangular con Caminero, el cual superó a Carreras y dejo una asistencia a boca de gol que Penev remató en el minuto 12.

Lo inquietante es que Lopetegui estaba siendo el mejor de los suyos, salvando un mano a mano de Penev, el cual no logró materializar una genial asistencia de Kiko.

En una entrevista a El País poco antes del encuentro, Pep Guardiola había afirmado que el Barça quedaba desnudo cuando no tenía la pelota. Justa esa fue la percepción en 45 minutos de apabullante dominio local, con Pantic estrellando un lanzamiento milimétrico en el poste.

Hubo síntomas de reacción a través de la brillantez individual de Luis Figo, quien se movía de una banda a otra para generar dificultades a los laterales de Antic. Asimismo, Roger estuvo cerca de sorprender a Molina a balón parado. Con todo, escasos argumentos tras haber sufrido semejante asedio.

Uno de los pocos problemas de Pantic en su primer año en España era su fondo físico. Solía desfondarse tras las primeras partes, algo que permitió al centro del campo blaugrana respirar. Nada más producirse la reanudación, Toni Velamazán se aproximó con peligro a portería.

Sin embargo, Caminero no dudó en tomar las riendas de las operaciones, combinando con mucha malicia para dar manifiestas ocasiones de gol a Simeone y Kiko.

El Barça se atascaba intentando sacar el esférico jugado desde su área, además de estar demasiado exigido y parsimonioso para arma alguna contra que pudiera reducir diferencias.

Cruyff tuvo que dar recambio a un Lopetegui con molestias, sacando a su yerno Jesús Angoy. Previamente, ya había introducido a Óscar por Carreras, haciendo lo propio entre Hagi y Kodro. Esas probaturas contrastaban con la confianza de Antic que mantuvo a sus once hombres los noventa minutos.

Tras muchas ocasiones a bocajarro, Caminero hizo justicia a los méritos del Atlético al controlar y rematar un balón en el aire. Aunque Angoy hizo intervenciones de mérito ante hombres como Simeone, fue uno de los lanzamientos más sencillos el que se le desvió para colocar el 3-0. Transcurría el minuto 82 y, ante una grada entregada, el Atlético buscó divertirse esos últimos minutos con toques de espuela y otra clase de florituras.

Fue en esos momentos de mayor desorden donde Abelardo subió al centro de campo para filtrar un pase que el rumano Hagi aprovechó en la banda izquierda para dar una asistencia a Velamazán, salvaguardando la honra visitante.

Pero los rojiblancos confirmaron que iban a ser los protagonistas del curso.

El duelo atípico

Pese al titubeante inicio, el Barcelona fue logrando encarar mejor la campaña 1995/96, sobreviviendo en la copa de la UEFA a través de eliminatorias tan emocionantes como la mantenida ante el PSV Eindhoven.

Estando en semifinales, los de Cruyff habían obtenido un valioso empate a dos goles en Múnich ante el poderoso Bayern. También iban recortando puntos en liga al líder rojiblanco hasta el punto de depender de sí mismos tras batir a la Real Sociedad.

Todas esas cuestiones hacían que los culés tuvieran muchas expectativas en la cita que se iba a producir el 10 de abril de 1996 en Zaragoza. Allí, el club azulgrana aspiraría a alzar la Copa del Rey tras superar a un incómodo Numancia en cuartos final. Los numantinos fueron la escuadra revelación del torneo del KO y se convirtieron en el favorito de todas las otras aficiones españolas por su pundonor y condición de modesto 2ºB. Tras empatar a dos en Los Pajaritos, Cruyff cargó las tintas contra sus jugadores.

Por el contrario, la andadura de los de Antic vaticinaba un divertido torrente de goles. Durante la tercera ronda, habían batido al Mérida en una eliminatoria que incluyó un apasionante 4-4 en la antigua colonia fundada por Augusto. De igual forma, en las semifinales se encontraron con un viejo conocido: Luis Aragonés. Antiguo ídolo del club y uno de sus mejores técnicos, les planteó un juego a la contra que dañó en muchas ocasiones el entramado defensivo de Antic.

En la ida de Mestalla, el Valencia se fue al descanso 2-0. Pese a ello, los colchoneros lograron reaccionar. Tras la expulsión de Engonga por una entrada por detrás a Caminero, Pantic lograba convertir el lanzamiento a balón parado en el empate a dos. El choque culminó con un 3-5 que todavía tuvo cierto interés por el 1-2 que logró el conjunto Che a la orilla del Manzanares. En aquel duelo por disputar el título en tierras aragonesas, destacaron las guerreras dialécticas y en el palco que mantuvo Paco Roig contra su antiguo jugador Penev. El búlgaro siempre estuvo en desacuerdo con la forma de proceder de su entonces presidente durante su etapa recibiendo quimioterapia, aprovechando la ocasión para recordárselo.

Con esos precedentes, se podía esperar un festival de goles en La Romareda. De cualquier modo, finalmente Antic y Cruyff optaron por un duelo sumamente táctico. De la Peña fue descartado por el holandés, quien parecía haber tomado nota de la lección recibida en el Calderón, ajustando los mecanismos atrás. En el sector derecho, el Atlético encontraba sus mejores aportaciones de la mano de Geli, Caminero y Pantic.

Una de las decisiones más discutidas y que explican este atípico duelo con pocas ocasiones radicó en la decisión del staff técnico catalán de colocar a Pep Guardiola sobre Kiko. Desde sus primeros tiempos, cuando se le adjudicó una función similar para vigilar a Emilio Butragueño, el de Santpedor no se veía en una situación similar.

Hubo fatalidades como la lesión de Albert Celades. Juan F. Rodríguez Garrido, en su vibrante recuerdo de aquella cita copera, no duda en afirmar que el canterano estaba siendo el mejor blaugrana en una velada donde Luis Figo o Gica Hagi no hallaron su ritmo.

Sergi Barjuan desde el lateral derecho fue el autor en el minuto 79 de una internada que Jordi Cruyff peinó al larguero de Molina, en una acción que pudo cambiar el curso de aquella temporada.

Llegados a la prórroga, Cruyff lamentó haber realizado todos los cambios, puesto que el sobresfuerzo defensivo de Guardiola le generó unas molestias musculares que le mermaron mucho durante el tiempo extra. Los hombres de Antic también dieron muestras de fatiga tras el derroche de energía.

En el minuto 102, los papeles parecieron cambiarse en el libro de Antic, puesto que Pantic, el hacedor de centros, recibió un preciso balón de Geli para rematar un cabezazo que atravesó las piernas de Busquets.

Recientemente, en el documental de Movistar +, Solozábal ha protestado ásperamente su expulsión por acumulación de amarillas en el minuto 116. En este caso, debe señalarse que Manuel Diaz Vega fue consecuente con su criterio, expulsando apenas un minuto después a Sergi por el mismo motivo. Si bien se podía coincidir o no con su listón en las faltas, trató a ambos finalistas con la misma vara de medir.

Por ello, la cita del 20 de abril en la Ciudad Condal quedó marcada en rojo por Antic. El serbio había planteado una partida de ajedrez donde los laterales serían esenciales. Como reveló en el programa Fiebre Maldini, se dieron instrucciones de no defender a “El Chapi” Ferrer hasta que no estuviera a 30 metros del área de Molina. La idea era alejar al veloz jugador de los centrales blaugranas, más lentos y con problemas de recuperación.

De la misma forma se debía proceder con el veloz Sergi Barjuan. Se trataba de una asunción de riesgos que funcionaría de forma admirable para la causa visitante.

Apenas transcurridos diez minutos de partido, Miguel Ángel Nadal intentó arrinconar a José Luis Pérez Caminero, quien pareció retroceder para luego hacer un magistral regate que le permitió avanzar a placer y dar un pase de la muerte a Roberto Fresnedoso, quien estaba debutando esa temporada con los rojiblancos tras su andadura en el Espanyol.

La maniobra quedaría en el imaginario popular de la liga hasta el punto de que un cineasta como Pedro Almodóvar la incluyó en su film Carne trémula (1997). A modo de anécdota, Fresnedoso recordaría haber acudido al cine a verla, quedando su pareja y él perplejos de que ni siquiera se dijese su nombre en el tramo seleccionado donde todo se focalizaba en la jugada de Caminero. El propio protagonista admitió que su sensacional acción, en ocasiones, le había encasillado cuando se hablaba de aquel año, limitando toda su aportación a aquel lance con Nadal, con quien siempre ha afirmado tener una magnífica relación por ser compañeros en la selección dirigida por Javier Clemente.

El Barcelona buscó reaccionar a través de sus mejores talentos creativos: Iván de la Peña y Luis Figo. Precisamente el portugués logró superar a Geli para mandar un preciso centro que Jordi Cruyff acertó a rematar de espaldas para sorprender a Molina en el minuto 25. En una imagen para la posteridad, el hijo fue corriendo para abrazar a su padre en el banquillo: el momento familiar le sirvió asimismo para dar algunas instrucciones.

Fueron los momentos de mayor poder azulgrana tras el subidón anímico del empate Aprovechando el sistema de Antic, de la Peña sorprendió con una elegante vaselina que se fue desviada por centímetros.

Altamente promocionado desde su juventud, el cántabro era uno de los prospectos futbolísticos más promocionados de su generación, a la altura de Raúl González. Sin embargo, pese a un innegable talento y visión de juego privilegiada para asistir, no hallaba continuidad y tuvo una relación de altibajos con Cruyff.

Al descanso, las espadas estaban por todo lo alto. Los locales debían ganar y, al menos, intentar igualar el goal average. No obstante, todos los planes de la afición culé se desmoronaron nada más iniciarse la segunda parte, cuando un disparo desde fuera del área de Vizcaíno pilló desprevenido a Carles Busquets, a quien se le escurrió el remate tras intentar interceptarlo.

Cruyff dispuso adelantar todavía más las líneas, caldo de cultivo para feroces contraataques visitantes. Prados García, colegiado de la velada, cometió un error al anular un gol a Caminero, quien había superado los intentos de agarrón por parte de Sergi Barjuan para batir con un disparo entre las piernas a Busquets. Lejos de desanimarse por esa señalización, los de Antic mantenían un fuerte vigor físico que contrastaba con el desplome de un Barcelona que estuvo mucho más sólido en la primera mitad.

Hasta su sustitución en el minuto 76 por Fortune, Caminero fue el mejor talento sobre el campo. Emulando a de la Peña, sorprendió desde fuera del área con una vaselina que únicamente fue rechazada por el poste.

La buena noticia para Cruyff fue el buen marcaje de Abelardo a Penev, el cual parecía estar firmando una segunda parte del torneo inferior a su excelente arranque. De la Peña siguió sosteniendo al Barça con buenos pases filtrados. Quizás buscando recordar la mística del Dream Team, se dio entrada a José María Bakero. Sea como fuere, el héroe de Kaiserslautern no logró conectar bien un cabezazo a bocajarro ante Molina.

Perfectamente asistido por Kiko, Biagini mató el encuentro casi al final, fijando un 1-3 que sentenciaba por completo el pulso de Barça y Atlético por la liga. Esa derrota apuntaló a un Barcelona que acabó frustrado y con el cese de Cruyff a escasos días del final, provocando un cisma para la afición.

Con el incómodo perseguidor esquivado, el Atlético no pudo descansar hasta el final, puesto que Luis Aragonés y su Valencia lograron un épico triunfo en el Calderón 2-3) que estrechó mucho la puntuación. El Sabio de Hortaleza aprovechó la oportunidad para presionar ante los medios a Jesús Gil, quien tuvo declaraciones desaforadas en victorias agónicas ante conjuntos como el Salamanca (2-1), rival ya descendido que se esforzó demasiado, a ojos del polémico presidente, para ganar en Madrid.

Finalmente, con El Cholo Simeone aporreando las puertas del hotel de la concentración de su equipo para evitar la siesta, el líder preparó las vísperas de la disputa con el Albacete. El 2-0 acabó con muchos sinsabores a principios de la década de los noventa, al fin llegaba un entorchado liguero que estaba marcado en la lista de objetivos desde aquel fichaje de Paulo Futre.

Gil incluso felicitó a Aragonés y su Valencia por el sprint final, en uno de sus momentos más felices en el palco colchonero. Neptuno volvió a adornarse con bufandas rojiblancas y su dominio en marco nacional resultaba indiscutible.

Antes de marchar, Cruyff dejó atados varios fichajes de interés. Por ejemplo, el habilidoso extremo portugués Luis Figo o el central francés Laurent Blanc. La Quinta del Mini no pudo seguir su andadura, aunque quedaban jóvenes como de la Peña y pilares cruyffistas como Pep Guardiola o Guillermo Amor.

Con un Atlético sólido y aspirante a todo, el Barcelona debía ser quien afrontase una transición. Y sería la campaña 1996/97 la que confirmó estos duelos como los más vibrantes del campeonato español en aquella década.

RocknRolla: La máxima expresión de duelo

Irónicamente, hubo una desgracia compartida por las dos instituciones, Barça y Atlético, a poco de arrancar la pretemporada. Los problemas de césped en el Camp Nou obligaron al Barcelona a solicitar poder disputar el encuentro de ida de la Supercopa de España en el estadio olímpico de Montjuïc. De la misma forma, la directiva colchonera tuvo que hacer lo propio por un problema de orugas en el Vicente Calderón, algo que llevó a situaciones curiosas como el debut del vigente campeón liguero ante el Celta de Vigo en el Santiago Bernabéu.

El primer encuentro de la Supercopa fue muy especial para Ronaldo Nazário de Lima, la incorporación estrella que había enamorado a la directiva de Núñez. Al igual que su compatriota Romário, había deslumbrado en la escuadra holandesa el PSV antes de llegar a España.

En teoría, el Atlético era campeón de Liga y Copa, pero debería batir a los blaugranas, subcampeones en el torneo del KO, por las normas de la competición, al no darse el galardón de forma automática por doblete.

Periodistas de la Ciudad Condal como Quique Guasch habían advertido que el público azulgrana estaba expectante por ver al nuevo ídolo del proyecto post-Cruyff, puesto que apenas tuvo minutos en el trofeo veraniego Joan Gamper. En apenas cinco minutos, el ariete brasileño demostró que su velocidad y potencia de disparo eran mortíferas herramientas frente a la disposición táctica de Antic que tantos quebraderos de cabeza dio a los blaugranas la pasada campaña.

Era el primer año sin el legendario holandés. En su lugar llegó Robert William Robson, popularmente conocido como Bobby Robson, símbolo de los banquillos ingleses y hombre de temperamento diplomático. Su propuesta parecía, a simple vista, más conservadora que la de su predecesor, pero incluso sus máximos detractores terminarían reconociendo que blindó al vestuario en una campaña de transición delicada. Entre su staff técnico, le acompañaba José Mourinho, un prometedor y ambicioso estudioso del fútbol portugués que fue acusado de ser un simple “traductor” al hacer las veces de intérprete para su primer entrenador en la sala de prensa.

A diferencia de la Quinta del Mini, el nuevo proyecto culé trajo jugadores muy consolidados del campeonato como Luis Enrique, alternados con la clase brasileña de Ronaldo o Giovanni Silva. Los grandes dispendios incluyeron incluso hacer un banquillo poderoso, con el pichichi del pasado curso, Juan Antonio Pizzi, un rematador nato.

Pronto, el defensor de los títulos domésticos pudo comprobar ese potencial. Tras un primer aviso en galopada, Ronaldo, muy cómodo con el dorsal 9 de los locales, logró batir a Molina con un potente disparo raso desde fuera del área que pasó cerca de su poste derecho. A través de las jugadas a balón parado botadas por Pantic, los visitantes se aproximaron al área de Baía, incluyendo las airadas protestas de Simone ante una posible mano de Miguel Ángel Nadal.

Sin complicarse en exceso, los de Robson se apoyaban en un Ronaldo que dejo jugadas que no solamente eran propias de su explosividad, sino también de calidad técnica: un caño a Radek Bejbl, promocionado fichaje de Gil tras una gran Eurocopa, logrando los primeros aplausos y murmullos de aprobación por parte del público catalán.

Tanto Luis Figo como Stoichkov, recuperado ese año tras un agitado paso por el Parma italiano, intercambiaban bandas en aras a desconcertar a sus defensores, algo que el luso aprovechó pasada la media hora para hacer un preciso centro que Giovanni remató a placer de cabeza.

El desarrollo del partido mostraba a un Barcelona más expeditivo atrás, con un número llamativo de faltas en la primera parte, casi doblando al Atlético en esa faceta. Aprovechando la estrategia, Juan Eduardo Esnaider acertó a remachar de cabeza un nuevo balón colgado con precisión por Pantic. El 2-1 anticipaba un nuevo duelo con muchos goles.

Todavía existían rasgos propios de la era Cruyff, algo que se observó con las acciones protagonizadas por Baía con los pies, insistiéndose en que el guardameta del Barça fuese uno más en la elaboración desde atrás. El guardameta, igual que Mourinho, había sido una petición de Robson, quien venía de trabajar con ellos en el Oporto.

Tras la reanudación, las líneas adelantadas de uno y otro bando volvieron a hacer sentir el gol muy próximo. Molina logró desbaratar un nuevo intento de Ronaldo, quien aprovechaba a la perfección los pases filtrados de Giovanni. De la misma forma, el Atlético abastecía de contraataques a Kiko, capaz de fijar a sus marcadores y asistir con peligrosidad a compañeros como Esnaider, el cual estuvo cerca de firmar un doblete anotador.

Finalmente, sería el jerezano el artífice del 2-2, al provocar que Juan Fernández Marín le señalase un penalti favorable al ser arrollado por Abelardo. Su antiguo compañero olímpico del 92 no pudo frenar al andaluz de otra forma en el minuto doce del segundo tiempo. Pantic, el héroe de la final copera de Zaragoza, no perdonó desde los once metros.

La igualada dio alas al estilo inglés que proponía Antic, con veloces transiciones que obligaron a estiradas como la de Baía ante un disparo de Bejbl. Robson se decidió a mover el banquillo, sacando a Juan Antonio Pizzi. Ya su primer balón en la Supercopa simplemente requirió empujar un certero pase de Giovanni en el 28.

Montjuïc presenció asimismo una conexión que daría muchas alegrías a los barcelonistas aquel curso: Iván de la Peña y Ronaldo se entendían casi por instinto sobre el césped. Años después, en el espacio televisivo Fiebre Maldini, el internacional brasileño no dudó en citar al centrocampista cántabro como uno de los mejores socios que tuvo en cualquiera de sus equipos. Pese a ello, su primera gran obra fue una inversión de papeles: tras regatear con maestría a Geli, el antiguo jugador del PSV abasteció a de la Peña.

Los compases finales tuvieron un protagonismo inesperado en José Mourinho, cuya forma de protestar y espolear a los suyos le valió una tarjeta amarilla, tal vez el primer reflejo de la fuerte personalidad que el portugués luego tendría tras desligarse de la tutela de Robson.

Molina volvió a sufrir intentos de vaselina por su posición casi de líbero, destacando la intentada por un Giovanni muy preciso, capaz de iniciar una arrancada cuando expiraba el choque para dar un pase de la muerte a Ronaldo. Impasible, Antic se ajustaba la corbata ante el 5-2, si bien reinaba cierta sensación de marcador engañoso para los méritos de los dos contendientes.

En vísperas del duelo en La Peineta, con una entrada discreta, el vigente campeón preparó una encerrona a un Barcelona que se vería lastrado por un problema que tendría toda la campaña: Ronaldo y Giovanni eran requeridos por la selección brasileña.

Bobby Robson tampoco pudo contar con sus internacionales portugueses, algo que dio una nueva oportunidad a Julen Lopetegui en la portería azulgrana. Casi siempre esos momentos del cancerbero coincidían con enfrentamientos ante los rojiblancos. En el banquillo de suplentes podía observarse a Robert Prosinecki, jugador de renombre desde sus días en el Estrella Roja, aunque de efímeros pasos en Real Madrid y Barcelona, marcado por las lesiones. Si bien inició el curso en la Ciudad Condal, terminaría marchando al poco, tras haber sido codiciado por el mismo Antic, como hemos visto previamente.

El estratega rojiblanco, apasionado del ajedrez, diseñó un encuentro donde los suyos irían con agresividad a por el esférico cuando estuviera en poder de los blaugranas. Casi un intercambio de piezas para lograr emparejamientos favorables. Junto a Juan Eduardo Esnáider y los movimientos de Kiko de espaldas, buscó aprovechar a atacantes como Roberto o Biagini. Un papel destacado lo desempeñaría Simeone con sus subidas desde el centro del campo para incorporarse a rematar. Era la función que más le gustaba desde sus días con Carlos Salvador Bilardo y Alfio Basile con la Albiceleste.

Milinko Pantic volvió a marcar territorio ante el Barcelona con un duro lanzamiento a balón parado que estuvo a punto de tomar el ángulo derecho de la meta de Lopetegui. Robson no tuvo en reparos en hacer un planteamiento defensivo, sabedor de su ventaja inicial y al no disponer de algunos de sus mejores hombres.

Se trataba de una apuesta no exenta de riesgos. El Atlético se iba envalentonando ante su afición, con un murmullo incrementado tras otro remate de Pantic, en esta ocasión, a la madera.

Pasada la media hora, un nuevo centro del antiguo centrocampista del Panionios fue peinado por Esnáider. El balón quedó muerto y fue golpeado accidentalmente por Sergi. López y Simeone corrieron para empujar un esférico que ya se había convertido en el primer gol de la noche veraniega.

Los gritos de “¡Olé!” y los aplausos ante los taconazos rojiblancos iban espoleando a la escuadra local. Roberto tuvo un remate a bocajarro que se le mandó a las nubes. Al descanso, la moral madrileña para alzar la Supercopa se encontraba alta, especialmente por la forma en que estaban imponiendo su plan sobre un Barcelona tímido, contemplativo sin la fuerza creativa de sus dos brasileños.

El segundo tiempo fue un intento de adormecer el ritmo a cargo de mediocampistas como Pep Guardiola, aunque Kiko tardó poco en buscar sorprender a Lopetegui. Solamente un rápido disparo de Stoichkov ante la posición adelantada de Molina dio síntomas de vida visitante.

Con su usual carácter y temperamento ganador, el búlgaro empezó a pelear cada pelota y a buscar disparar a la menor oportunidad. No resulta extraño que fuera él quien terminase aprovechando un centro de Sergi Barjuan en el minuto 13 para casi sepultar las esperanzas colchoneras.

Antic recibió amarilla por parte de Juan Ansuategui Roca por protestar ásperamente la posición del goleador blaugrana. Como mostraron claramente las cámaras de la TVE, la posición del dorsal 8 era completamente legal, pero la acción nunca debió subir al marcador porque Sergi inició su carrera desde situación irregular.

Pantic volvió a rozar el gol desde el golpe franco. A la altura del minuto 20, parecía que Lopetegui se anticipaba a la llegada de Esnáider, pero el delantero argentino aprovechó la indecisión para rematar una asistencia de cabeza de Kiko. Lejos de amilanarse, como señalaron los corresponsales de Mundo Deportivo, los atléticos siguieron creyeron que la atmósfera “de ratonera” de La Peineta podía incomodar mucho a un Barcelona sin posesión.

Pantic destapó la caja de los truenos al conseguir, al fin, el ansiado tiro libre. A falta de quince minutos, el asedio de los pupilos de Antic fue total, siendo notorio que no consiguiesen el cuarto. De forma caballerosa y con sus modales habituales de Sir, Robson felicitó a su contrincante como a un gran equipo, en la misa consonancia que Julen Lopetegui, abrazado por José Mourinho nada más terminar el partido.

Stoichkov y Gil compartieron otro momento de complicidad durante la entrega del trofeo, recalcándose esa sensación de que el búlgaro habría sido una mezcla explosiva con el polémico presidente.

Por imponente que hubiera sido, ese primer duelo era apenas un anticipo de un año enloquecido donde los Atlético de Madrid-Fútbol Club Barcelona alcanzaron otra dimensión. A medida que avanzaba la primera vuelta, existían expectativas por verlos de nuevo en acción. Y esas premisas no fueron desilusionadas, todo lo contrario.

Los compromisos internacionales y algunas lesiones hicieron que el Barcelona tuviera nueve bajas para recibir al vigente campeón de liga durante el mes de noviembre. Con nombres como Stoichkov o Ronaldo en la grada, la gran noticia era el debut de Francesc Arnau, malogrado guardameta que fallecería inesperadamente en 2021.

El joven portero se las vería ante una de las escuadras más ofensivas del campeonato. Más de 90.000 espectadores llenaron el Camp Nou para disfrutar de un encuentro que se antojaba iba a tener un marcador alto. Apenas cinco minutos después de que Daudén Ibáñez diera el pitido inicial, un taconazo de Kiko dejo la banda a Toni, cuyo centro fue rematado picado de una forma perfecta por Caminero.

A partir de ese momento, el Barcelona empezó a volcarse sobre la portería de Molina. Luis Enrique fue uno de los más activos para intentar desequilibrar en duelos individuales. Al cuarto de hora, Guardiola sorprendió a los de Antic al aprovechar un rechace de la zaga colchonera para dar un suave pase que Juan Antonio Pizzi amortiguó para armar su pierna y restituir la igualdad.

El antiguo goleador del Tenerife se convirtió en la pareja de baile de López, quien tuvo algunos encontronazos con el argentino que recordaban a los que mantenía tradicionalmente con Stoichkov.

Cercana la media hora, Luis Enrique lanzó un mal centro que fue desviándose con tan buena fortuna que sorprendió a un adelantado Molina. Lejos de amilanarse, los rojiblancos se despedirían de esta primera mitad con un larguero, fruto de un rechace de Guardiola, y la madera tras otro medido golpe franco de Pantic.

A la vuelta del descanso, los hombres de Antic iniciaron un firme asedio. Caminero protesto una posible mano de Laurent Blanc, si bien la repetición mostró que el central francés paró la pelota con su hombro. El debutante Arnau se ganó el aplauso de la grada y las felicitaciones de sus compañeros al despejar un envenenado cabezazo de Kiko.

Quizás recordando la mala actuación en La Peineta, Bobby Robson buscó que los suyos aprovechasen la ofensividad madrileña para responder a cada golpe. Giovanni probó el lado derecho de la portería defendida por Molina, mientras que Popescu estuvo a punto de firmar una vaselina preciosa al aprovechar la posición como líbero del cancerbero.

Pese ello, tras agarrar el balón tras el primer córner del Barcelona, Molina botó un pase largo que Esnáider controló con habilidad. “El Pitu” Abelardo permitió a su adversario espacio para encararle, algo que hizo al argentino poder lanzar un medido centro que Vizcaíno controló y terminó siendo el empate a dos. Apenas se había sobrepasado el minuto 60 y un narrador experimentado como Paco González especulaba con que pudiera ser el mejor choque en lo que iba de campeonato.

Julio Maldonado “Maldini” especuló con que la pizarra de Antic se hubiera beneficiado del compromiso con la República Checa de Radek Bejbl. Aunque era un jugador excelente y de contención, su ausencia había dado más electricidad y vértigo propio de la Premier League a sus compañeros.

Pronto, Luis Enrique estuvo a punto de desbaratar el empate tras superar a Molina, si bien Santi mandó el balón fuera desde la línea de gol. Sea como fuere, el minuto 73 dio la clásica jugada polémica que era propicia en estos espectáculos deportivos de alto voltaje. Caminero exageró el contacto con Blanc para sacar una pena máxima. Aunque el vallisoletano se marchó lesionado, no revistió de mayor gravedad. Forzado a defender las redes desde los once metros, el debutante no pudo frenar el lanzamiento de Juan Eduardo Esnáider, quizás en su mejor actuación desde que había llegado a las filas del Vicente Calderón, con la complicada misión de suplir a Penev.

Luis Enrique buscó aprovechar la presión del público al fingir un derribo por parte de Pablo Alfaro, antiguo azulgrana y uno de los defensas de refuerzo de Antic. Daudén Ibáñez no señalizó nada pese a las furiosas interpelaciones del asturiano. El atacante blaugrana era otro oro olímpico, forjado en la escuela del Sporting y su temperamento ganador volvía a mostrar que aquella selección ganadora en Barcelona fue un ingrediente fundamental para estos épicos partidos.

Finalmente, Robson dio salida a Iván de la Peña. El cántabro apenas necesitó dos minutos para inventar una asistencia genial a Pizzi que Molina y su defensa desbarataron, pero no lo suficiente para que Giovanni rematase a placer. El 3-3 no contentaba a ninguno de los dos aspirantes y quedaban más de diez minutos de vértigo.

Molina se jugó la tarjeta roja en una salida para frenar otra galopada de Luis Enrique, recibiendo solo amarilla. De la Peña probó su disparo en una falta directa que se fue alta por poco. En una metáfora hermosa de del pulso de esta década, Kiko Narváez y Pep Guardiola protagonizaron un emotivo abrazo tras haber empezado una pequeña discusión por las decisiones arbitrales. Compañeros con la absoluta, el jerezano recordaría años después con simpatía aquel instante y como el de Santpedor se excusó por las revoluciones que llegaba a tener en plena competición.

Robson dio algunos minutos a José María Bakero, ídolo de la grada pese a no disponer ya de minutos y no entrar en los planes de Robson. El capitán el Dream Team se marcharía a México a mitad de esa campaña, no sin antes recibir el homenaje de su público en una victoria ante el Valladolid donde marcó (6-1).

Probablemente, fue el choque más vistoso en un año donde el sobrio y rígido sistema de Fabio Capello aupó pronto al Real Madrid hacia el liderato. Con todo, el entrenador italiano no pudo con el Barcelona en los octavos de final coperos. Complacidos de haber eliminado a un rival tan duro, los pupilos de Robson no podían imaginar que el caprichoso bombo iba a llevarlos a coprotagonizar el punto álgido de nuestra historia.

El mejor momento: Cuartos de final Copa del Rey (1997)

El reencuentro no se hizo esperar. A finales de febrero, el Barcelona recibió una amarga recompensa por lograr superar en octavos de final a un rival tan duro como el Real Madrid de Capello: el vigente campeón aguardaba en el Vicente Calderón. Bobby Robson estaba inquieto por el esfuerzo físico de aquella serie, además de no poder llevar al Manzanares ni a Ronaldo ni Giovanni, convocados por la selección brasileña para un amistoso ante Polonia.

David Salinas, estudioso de la andadura en el torneo del KO del club azulgrana, destacaría como el técnico inglés daba por bueno un empate que permitiera jugarse el pase a las semifinales en el Camp Nou. Esa sensación de urgencia se incrementó cuando, poco antes de llegar a los veinte minutos disputados de encuentro, un duro disparo de Simeone fue desviado por Sergi y Caminero, algo que desorientó a Vítor Baía.

Fueron momentos donde el conjunto rojiblanco se adueñó del escenario. La grada pidió roja a Fernando Couto, quien realizó una agresiva acción sobre Simeone merecedora de algo más que amarilla. Manuel Enrique Mejuto González, colegiado aquella noche, recibiría también protestas azulgranas por un posible derribo del centrocampista argentino sobre su compatriota Pizzi.

La situación era idónea para los pupilos de Antic, si bien Pep Guardiola fue dando orden al desconcertado esquema visitante. Esa pausa permitió a los de Robson juntar líneas y esperar un golpe de fortuna fruto del talento individual. Figo logró desequilibrar con su capacidad técnica al filo del final de la primera parte para sacar un penalti a Daniel Prodan. Sería Juan Antonio Pizzi el encargado de ejecutar la pena máxima, un gol con valor doble.

La inyección de moral fue personificada en la reanudación nuevamente por Pizzi. Luchador en cada balón aéreo que rondaba el área de Molina, tendría el rostro ensangrentado cuando conectó un certero testarazo que colocó un 1-2 que el Barcelona habría firmado sin dudar en vísperas del clásico duelo.

Lejos de correr los riesgos tan típicos de la era Cruyff, aquella versión del club de la Ciudad Condal podía ser más conservadora, optando por replegarse. Pese a ello, ese recaudo no tenía por qué ser sinónimo de protección. En una acción individual impresionante, Kiko Narváez hizo uno de sus controles imposibles para superar a Baía con un tiro cruzado, muy similar a la acción con la que desatascó la temporada anterior un duelo ante el Salamanca que valió media Liga.

El Atlético se volcó al ataque, forzando varias intervenciones de mérito por parte de Baía. Antic, siempre buscando el lado más favorable de las cosas, recordó el buen desempeñó que había tenido su plantilla en Barcelona hacía apenas unos meses.

Los pupilos del estratega serbio estaban en unas semanas decisivas para evaluar su temporada, plagada de presión tras obtener un brillante doblete. El diario Marca sacaba a un Caminero orgulloso en portada, posando con el título de la Copa del Rey en un claro aviso al Barcelona de que no pensaban entregar con facilidad su condición de vigente campeón.

E incluso más importante fue su viaje a Ámsterdam el 5 de marzo. La ida de los cuartos de final de la Champions League se saldó con un valioso empate. Aunque Patrick Kluivert logró igualar el tempranero tanto de Juan Eduardo Esnáider, tener el factor cancha a favor en la pugna por el billete a semifinales parecía un buen presagio.

Lejos del rendimiento de Madrid y Barça aquella campaña en liga, los torneos de eliminatorias parecían la apuesta en la que iba a centrarse la institución rojiblanca.

Paradójicamente, sería en la competición de la regularidad donde comenzó a desangrarse ese proyecto. Alfonso Pérez castigó a los rojiblancos con su primer hat-trick en Primera División, en un triunfo sobre la bocina del Betis en el Benito Villamarín que se saldó con las sanciones a Esnáider, Simeone y Geli. Gil usaría su presencia mediática para presionar al Comité de Apelación, alegando que, en caso de no ser revocados aquellos castigos, no presentaría a su equipo en la Ciudad Condal para la vuelta de los cuartos de final.

Medios madrileños como Marca o As hicieron un seguimiento de aquel órdago que no se resolvió hasta que los de Antic cogieron el vuelo hacia Barcelona apenas tres horas antes de la hora fijada para el duelo del 12 de marzo. Aparentemente, podía imaginarse a una escuadra visitante descentrada, cansada por el rápido viaje y por el ruido generado alrededor de su presidente. Lejos de ello, la puesta en escena del campeón copero iba a silenciar con rapidez pasmosa al Camp Nou.

Entre las 90.000 personas que acudieron a ver el espectáculo en la capital catalana se encontraba Louis van Gaal. Aparentemente, su presencia resultaba lógica porque era el entrenador de un Ajax que tenía pendiente la cita en el Calderón, pero había algo más que hacía atractiva también su presencia para la afición culé. Era sabida la no continuidad de Robson y que su recambio iba a ser el severo van Gaal, con una reputación sólida tras llevar a su joven conjunto a dos finales del máximo torneo continental de manera consecutiva.

Con gente tan creativa como Iván de la Peña o Pep Guardiola a los mandos, los locales intentaron coger el tempo del partido, en una noche donde Robson optó por tomar recaudos defensivos con la reincorporación de Gica Popescu. De cualquier modo, el Atlético golpeó primero a los ocho minutos tras un intento de lanzamiento de fuera del área del carrilero Aguilera. Si bien fue un disparo centrado, Baía no acertó a agarrarlo y dio una segunda oportunidad que un oportunista Pantic no desaprovechó.

Pese al prematuro revés, los blaugranas fueron trenzando su juego. De la Peña conectaba pases incisivos que la velocidad explosiva de Ronaldo tornaba en peligrosos, mientras que Luis Figo iba exigiendo cada vez más ayudas en ese sector, puesto que ni un defensa experimentado como López parecía capaz de contener al inspirado portugués.

A diferencia de lo que había ocurrido en el célebre 1-3 del regate de Caminero sobre Nadal, los de Antic estaban consiguiendo marcar primero antes que dominar. Con los locales tomando la iniciativa, Pantic volvió a sorprender en una jugada que parecía inofensiva hasta que armó un disparo desde fuera del área que superó al central francés Laurent Blanc y no pudo ser atajado por Baía. El guardameta lusitano venía de ser elogiado en el Calderón, pero no podía ni imaginar que el centrocampista colchonero iba a regalarle una de sus noches más duras de su carrera.

0-2 en apenas media hora. Blanc también empezaría a sentir que no era su noche cuando, apenas pasados unos minutos del gol, se vio desbordado por las maniobras de Kiko Narváez en el área. Con habilidad, el delantero andaluz supo proteger el esférico y lanzó un sombrero que llevó al defensa francés a agarrarle de forma expeditiva. Gracia Redondo acertó al decretar una pena máxima donde Pantic engañó a Baía.

Criticado a lo largo de toda la temporada por un sector nostálgico de la gloriosa época de Cruyff, Bobby Robson demostró ser también un estratega audaz en un partido donde ya parecía tenerlo todo perdido. Sin temor a encajar más goles, se decidió a sacrificar a dos marcadores como Popescu y Blanc para dar entrada a dos goleadores: Stoichkov y Pizzi.

A expensas de lo que sucediese, nadie podría acusar al ex seleccionador británico de dar la eliminatoria por perdida. Su audaz maniobra iba a suponer un bombardeo constante a la portería de Molina, sabiendo, eso sí, que se expondrían a feroces contraataques del vigente campeón.

El búlgaro no estaba teniendo un regreso particularmente feliz al equipo donde alcanzó el estrellato y un Balón de Oro. Seguía siendo uno de los predilectos de la grada por su coraje y pasión, aunque con muchos fichajes jóvenes en posiciones similares a la suya, había tenido que admitir a regañadientes muchas más suplencias que en cualquiera de sus etapas con el Dream Team.

Con su temperamento habitual, el dorsal 8 culé intentó una volea que salió muy alta, si bien ponía su sello en la eliminatoria. El veterano pensaba vaciarse ante uno de sus oponentes más clásicos, contagiando con su entusiasmo a sus compañeros.

En un clima incómodo para Robson, el primer tiempo culminó con algunos silbidos, mientras las cámaras de televisión mostraban a parte del público pidiendo autógrafos a Van Gaal, su futuro sustituto.

El Atlético que había dudado hasta última hora comparecer a aquella cita estaba a las puertas de un triunfo histórico. Capitaneados aquel día por Toni, los de Antic mostraron sus cartas con rapidez para la reanudación. Confianza en el hábil juego de pies de Molina para tenerle adelantado y atento a los pases largos sobre Ronaldo, mientras llegadores como Caminero o Pantic buscarían irrumpir entre líneas. De igual forma, Kiko podía recibir por alto y causar estragos cerca de los dominios de Baía.

Sobre el papel, un plan más que adecuado. De cualquier modo, apenas iniciada la puesta en escena, Figo dio un pase profundo a una internada de Stoichkov, en uno de sus partidos de aquel año con más movilidad. El búlgaro buscó un remate que fue desviado por la defensa, si bien Ronaldo empalmó de primeras el rechace para abrir la cuenta de los suyos.

Comentarista en la radio para aquel duelo copero de su ex equipo, el blaugrana Lobo Carrasco destacó la capacidad de los visitantes para dañar al Barça y no amilanarse por el conato de remontada. Dándole la razón, Pantic centro a Caminero, el cual aprovechó una indecisión de Baía para regatearle con facilidad, dando un pase de la muerte al centrocampista checo Radek Bejbl, cuyo disparo potente y raso fue sacado por Fernando Couto sobre la línea. El portugués era otro de los hombres de confianza de Robson, además de petición expresa del míster a directiva de Núñez. Un murmullo incómodo se incrementaba cada vez que el antiguo cancerbero del Oporto se veía exigido.

Por el otro lado, la presencia de Stoichkov estaba siendo cada vez más productiva, incluyendo internadas donde atravesaba la defensa colchonera y disputaba cada pelota perdida. Fruto de su insistencia, apenas cuatro minutos después del primer gol local, lanzó otro centro que la zaga de Molina pudo repeler, pero provocando otro desbarajuste en su sistema. Sergi Barjuan empalmó un centro-chut de primeras que Pizzi no acertó a rematar en plancha, pero Ronaldo solamente tuvo que empujar hacia dentro el esférico.

El tempo del partido había cambiado. Con el público cada vez más convencido de la inminente remontada, Vítor Baía controló mal el esférico, forzándose a sí mismo a sacar con poca puntería un pase que acabó en un oportunista Caminero que trazó una delicada asistencia a Pantic, quien superó a sus marcadores para batir con sutileza al guardameta lusitano. Tras los malos momentos iniciales, los rojiblancos parecían sentenciar la eliminatoria, con el héroe de la final de Zaragoza pasando a la historia estadística del torneo por su póker de goles.

Volvía a confirmarse que el fútbol tenía un componente anímico fundamental. Pantic estuvo a punto de lograr otro tanto con una excelente falta directa que Baía acertó a mandar a saque de esquina. Fue una buena intervención del portugués, si bien quizás incluso pudo aventurarse a agarrar la pelota por haber intuido perfectamente la dirección, pero quizás el despeje vino fruto de no querer complicar todavía más la situación del equipo en una velada donde el serbio parecía tener los hados a su favor.

Resulta elogiable que los de Robson no variasen su libreto, pese a notar lo incisivo que podía ser el Atlético con apenas un par de combinaciones para plantarse en su área. La sociedad Sergi-Stoichkov estaba siendo muy productiva en su banda, mientras que Iván de la Peña trenzaba diagonales que buscaban con toda la malicia la velocidad de Ronaldo y la capacidad para rematar de Pizzi.

Los hombres de Antic se estaban viendo exigidos. Particularmente Prodan, a quien Ronaldo buscaba con habilidad la espalda. En su sector, Stoichkov incrementaba la intensidad de cada lucha, siendo más que expeditivo en ocasiones. Gracia Redondo y su equipo arbitral colocaron el listón elevado para señalar una falta, algo que fue contestado por López, más que habituado a medirse contra el temperamental búlgaro.

Una jugada a balón parado que botó Pep Guardiola fue rechazada en el minuto 67 por los colchoneros, sin poder imaginar que Luis Figo iba a improvisar una volea que levantó a todo el estadio, absolutamente imposible para Molina por ir directa a las redes.

En este punto, debe ser considerada la posible fatiga de los visitantes, los cuales no habían podido preparar como era recomendable ni el viaje ni la preparación previa a una cita tan importante. Un bajón físico, sumado a sus tres bajas, ayudarían a explicar la progresiva imposición de los blaugranas en el campo durante este tramo, además de la habilidad de Stoichkov para involucrar a la grada. Por ejemplo, cuando hizo una carrera forzada para evitar que se perdiese un mal pase de Figo.

De la Peña conectó en el 72 con Ronaldo. El dorsal 9 se dio media vuelta para batir con uno de sus característicos tiros cruzados a Molina. El 4-4 colocaba un nuevo escenario que habría parecido imposible cuando Pantic castigó la indecisión de Baía.

Con todo, aquel Atlético era un conjunto experimentado que venía de alcanzar campeonatos en momentos de máxima presión y dificultades. Hombres experimentados como López lograban desviar lanzamientos de goleadores como Pizzi, mientras que Prodan aprovechaba un encontronazo con Luis Enrique para ganar unos segundos al cronómetro. Ese momento vino acompañado de polémica, puesto que Iván de la Peña interrumpió la ayuda que Santi estaba brindando a su compañero rumano por considerar que todo era un engaño para ganar tiempo. Fue el inicio de una pequeña tangana interrumpida por Gracia Redondo.

De la Peña, con todo, no pareció afectado en su precisión. Casi de inmediato, mandó una diagonal extraordinaria que Stoichkov aprovechó con un hábil desmarque. Sin embargo, el búlgaro remato con su derecha, pierna con la que no tenía la precisión que alcanzaba con la zurda, algo perfectamente aprovechado por un Molina bien colocado.

Pese a haber encajado cuatro tantos, el cancerbero colchonero estaba salvando a su zaga en varias ocasiones, incluyendo una doble ocasión de Ronaldo y Pizzi, quienes no lograron batirle.

De hecho, el guardameta estuvo a punto de evitar la culminación de la remontada en el minuto 82. Guardiola botó un centro muy preciso desde la derecha, algo que fue perfectamente aprovechado por Abelardo Fernández, cuyo cabezazo se dirigía directo a gol hasta que fue repelido a una mano por Molina. Desafortunadamente para la causa rojiblanca, ya no tenía equilibrio para repeler el disparo a bocajarro que un oportunista Pizzi aprovechó a la perfección.

Firme defensor de la importancia de la psicología en el fútbol, Antic señaló que Stoichkov había sido el hombre clave para la transformación de la mentalidad azulgrana. En verdad, pese a no anotar ningún gol, la impronta del búlgaro estuvo presente en cada uno de los tantos, además de conectar con la grada de Camp Nou como ningún otro miembro de la plantilla.

Bobby Robson deparó uno de los momentos divertidos en rueda de prensa al admitir un curioso despiste. Tras lograrse el 4-4, el técnico británico no comprendía la urgencia de sus pupilos en seguir insistiendo a la ofensiva cuando ya habían obtenido el derecho a la prórroga. Sir Bobby olvidaba el valor doble de los goles fuera de casa.

Fiel a su estilo caballeresco, restó importancia a sus cambios y elogió públicamente a todos los jugadores, señalando asimismo que la atmósfera del estadio fue capital para la hazaña.

Resultó ser el mejor encuentro de la maravillosa rivalidad, el cual casi llegó a los 10 goles, puesto que de la Peña mandó a las nubes un fácil remate que habría certificado uno de sus mejores días como blaugrana.

Un monumento al fútbol

“El mejor monumento al fútbol de los últimos años”. Con esa prometedora cabecera, Carlos Martínez dirigía la previa a la visita del Barcelona al Vicente Calderón. Los pupilos de Bobby Robson se hallaban en plena persecución del Real Madrid de Fabio Capello. Para mantener la presión, debían batir a un viejo conocido, el vigente defensor del título.

Pep Guardiola bromeó ante las cámaras, recordando que ese duelo solía ser dado por las cadenas autonómicos, advirtiendo a Canal + que ambos capitanes habían pactado el 0-0 para fastidiar. De igual forma, Kiko Narváez lanzaba un aviso a navegantes: “Que no se cabreen si hoy comen mortadela, porque los hemos acostumbrado a caviar todos estos partidos. A ver si se piensan que va a haber siete u ocho goles”.

Nada más lejos de la realidad. Nuevamente, a orillas del Manzanares se disfrutó de un espectáculo impresionante que ayudaría al imaginario popular en aras de destacar los festivales futbolísticos con los que obsequiaban ambas entidades.

Editando un resumen del duelo para el programa Fiebre Maldini, años después, Juan Carlos Crespo admitió que aquel encuentro de la jornada 33 suponía un verdadero reto, puesto que tuvo que descartar jugadas realmente buenas, puesto que el formato exigía que tuviera una duración de cinco minutos.

Apenas pasado el primer cuarto de hora, Kiko Narváez recibió un certero pase de Pantic que controló de manera magistral para batir a Baía con un sutil toque. El jerezano era un verdadero especialista en dar problemas a marcadores como Popescu, Couto o Nadal, puesto que compartía su envergadura, pero con una movilidad atípica en alguien de su estatura.

A partir de entonces, el duelo se convirtió en un reto para los realizadores de cámara. El empate visitante oteaba en el horizonte, si bien los contraataques locales podían ser devastadores. Esnáider no acertó a sortear al portero azulgrana en un mano a mano, mientras que la escuadra de la Ciudad Condal buscaba abastecer de balones a Ronaldo.

Sin embargo, sería a balón parado cuando, a cinco minutos del descanso, De La Peña sorprendió a Molina con una falta magistralmente botada. El 1-1 suponía un cambio en el guión de Antic, quien había acariciado marcharse a los vestuarios con ventaja y sembrando dudas en su oponente.

Antes de que el Atlético pudiera reponerse, el centrocampista cántabro filtró una asistencia que Prodan no acertó a cortar. El fallo permitió a Ronaldo iniciar una de sus clásicas galopadas para firmar el 1-2. De hecho, todavía tuvo tiempo de volver a mandar otra pelota a la madera.

La segunda parte generó unas expectativas que no quedaron defraudadas. Al poco de la reanudación, Simeone tuvo que sacar bajo palos una nueva amenaza de Ronaldo. Amunike haría lo propio con respecto a Esnáider. Antic depositó su confianza en la conexión que podían establecer Caminero y Kiko, dos de los puntales en el reciente doblete.

Para desesperación del público en el Calderón, el ariete brasileño del Barcelona no desaprovechó una contra en el minuto 58 para firmar un 1-3 que parecía alejar definitivamente a los visitantes. Con el goleador mirando al público e interactuando en ocasiones, iba a irse gestando una manifiesta hostilidad que luego daría como resultado uno de los gestos menos deportivos del crack nacido en Río de Janeiro.

Lejos de especular, los blaugranas olfateaban la posibilidad del cuarto, si bien ello iba desguarneciendo su defensa. Couto no logró rechazar una pelota dividida que el pundonor de Simeone logró tornar en una acción de réplica devastadora. Con rapidez, Kiko hizo un lanzamiento que Baía logró repeler de primeras, no así el rebote que propició el antiguo jugador del Cádiz. Tras apenas cinco minutos de incertidumbre, las espadas volvían a estar en todo lo alto.

Como hemos señalado, buena parte del mérito debía recaer sobre los hombros de Simeone. Pese a ello, el argentino enturbió su trabajo al tomarse la justicia por su cuenta tras una falta señalizada a Luis Figo sobre Fortune. Ante Daudén Ibáñez, El Cholo hizo una innecesaria y fuerte entrada al extremo portugués que deparó su expulsión justo cuando los de Antic estaban recobrando energía para una de las clásicas remontadas que se daban en esos enfrentamientos.

Aprovechando los muchos espacios, Figo usaría sus cambios de ritmo para sacar ventaja sobre Santi, quien le intentaría agarrar en una acción que se señalizó como penalti. Las repeticiones mostrarían que, de haberlo, se habría producido primero fuera del área. Corría el minuto 75 y Santi vería su segunda amarilla de la velada.

Ronaldo no perdonó desde los once metros, si bien acompañó el hat-trick con un encaramiento ante el sector de público rojiblanco tras la portería de Molina. Su corte de mangas quedaría registrado, al igual que su forma de mandar callar a la afición del Betis en el Benito Villamarín tras finalizar un excelente remate desde fuera del área, respondiendo así a los insultos que había escuchado contra su pareja durante el partido.

Con mucha comodidad, Guardiola pudo armar el juego para otra irrupción de Ronaldo, quien certificó su dominio sobre el campo con una asistencia para Figo poco antes del pitito final. Tras e trepidante choque, Jesús Gil atendió a los medios de comunicación en compañía de Nicolau Casaus, uno de los hombres clave en la andadura de Núñez.

De forma irónica, ante el micrófono de Canal +, el presidente del Atlético calificó como “Excepcional” la labor del cuerpo arbitral. No negó que Simeone había cometido un fallo, pero argumentó que todo formaba parte de una tendencia donde la Federación Española estaba pretendiendo que el club del Manzanares terminase en Segunda División.

El polémico presidente afirmó que al centrocampista argentino se la había tratado como si fuese “un indio”, argumentando que la reacción de su jugador sobre Figo era el producto de malas decisiones anteriores a cargo del estamento arbitral.

Roger Xuriach rememoraría para la revista Panenka la fortaleza goleadora exhibida por Ronaldo ante el Atlético de Madrid. Sería el único año como azulgrana del brasileño, puesto que sus agentes terminaron atendiendo a los cantos de sirena que venían desde el Inter de Massimo Moratti. El balance de campaña fue más que positivo, pese a que Robson no fue renovado: Recopa, Copa del Rey y Supercopa que mostraban un alto rendimiento, únicamente enturbiado por la Liga que le les escapó en las últimas jornadas ante el Real Madrid de Fabio Capello.

El Atlético se clasificó para la UEFA, si bien sabía a poco para el potencial de la escuadra. Repasando sus eliminatorias ante Ajax y Barcelona, estuvieron realmente cerca de llegar más lejos en sendas competiciones.

Los últimos compases de la tradición

La llegada de Louis van Gaal a Barcelona, el hombre que había asistido al espectacular 5-4 del Camp Nou, marcó un cambio de tendencia en el proyecto de Núñez. Técnico con un gran apego a lo táctico y poco amigo de las improvisaciones, trajo orden al vestuario, algo esencial tras la marcha de Ronaldo, un jugador que podía simplificar muchos problemas por su talento individual. De manera sorpresiva y a poco del cierre del mercado, los blaugranas consiguieron a Rivaldo, brasileño que había deleitado durante su primer año con el Deportivo de la Coruña.

El nuevo sistema dio como resultado un Barça dominador en el campeonato doméstico (doblete) y en construcción durante la fase de grupos de la Champions, algo que se tradujo en la eliminación a las primeras de cambio. Una Supercopa Europea ganada de forma sólida al Borussia Dortmund no escondió una andadura decepcionante en lo continental, incluyendo una apurada fase previa ante el Stonko Riga.

Barcelona y Atlético no cruzaron sus caminos en la Copa del Rey, aunque depararon dos interesantes duelos ligueros. Durante la primera vuelta, de la mano de Juan Antonio Pizzi y Luis Enrique, los de van Gaal consiguieron remontar el 0-1 inicial de Robert Fresnedoso, el autor del tanto en el que fue bautizado como “gol de Caminero”. El 3-1 final palidecería ante la vuelta que se disputó en el Vicente Calderón, con los de la Ciudad Condal ya celebrando el título liguero y la escuadra local necesitada de puntos para asaltar las plazas que daban acceso a la ya extinta UEFA.

Con muchos altibajos, la figura de Radomir Antic, arquitecto del mítico doblete, daba síntomas de agotamientos, por lo que no extrañaba la presencia en la grada de Arrigo Sacchi. El estratega revolucionario que había colocado los cimientos del gran AC Milan de la década de los noventa iba a desembarcar en unos de los clubes más históricos de España. Aquella velada, pudo ser testigo privilegiado de otro festival futbolístico, iniciado con un tanto de Rivaldo desde casi el medio del campo, penalizando la posición adelantada de Molina.

Con su usual humor británico, Michael Robinson, narrador del duelo para Canal +, afirmó que todo iría aquel día “según la tradición”. Los pupilos de Antic contaban con su núcleo duro (Pantic, Kiko, Caminero, etc.), más la incorporación de un goleador del calibre de Christian Vieri, pichichi en aquella campaña con 24 dianas en el mismo número de partidos. Sensacional promedio que incluyó noches tan extrañas como la del Helmántico, donde su póker anotador no impidió que los rojiblancos cayesen 5-4.

Fue un duro disparo del transalpino el que no pudo ser blocado por Vítor Baía, quien se había convertido en suplente de Ruud Hesp, permitiendo, dando un rechace que Paunovic no perdonó.

Si Viera era el ejecutor, aquella última versión del sistema de Antic contaba con la magia creativa de Juninho Paulista, un habilidoso extremo brasileño cuya carrera se vería truncada tras una durísima entrada de Míchel Salgado por detrás durante un encuentro en Balaídos. En aquellos momentos, Juninho era uno de los referentes del Atlético y, frente al Barcelona, quiso demostrador que el seleccionador Mario Zagallo se había equivocado al no incluirlo en la lista de la canarinha para el Mundial de Francia en 1998.

En un fallo de conexión de la zaga portuguesa del Barcelona, Fernando Couto intentó ceder el esférico de cabeza a su meta, pero calculó mal la distancia y el meta tampoco pudo reaccionar a tiempo. Los tres goles en apenas 45 minutos eran un anticipo de lo que quedaba aquella tarde a orillas del Manzanares.

Apenas reiniciado el juego, los locales siguieron hallando el ritmo, incluso en los semifallos. Tras una buena acción individual, un lanzamiento de Juninho se convirtió en un pase de la muerte para el avispado olfato goleador de Vieri. El ariete celebró la acción llevando sobres sus hombros al futbolista brasileño.

Van Gaal optó por hacer un doble-cambio ofensivo: Sonny Anderson e Iván de la Peña intentaron acudir al rescate, si bien la inspiración colchonera se hallaba en sus niveles más elevados. Con una vaselina perfecta sobre Baía, Caminero enloqueció en la celebración, arrojando su camiseta a la grada, lo cual no solamente le supuso una cartulina amarilla, también el esforzado trabajo de la utillería de su club para darle una camiseta con la que poder seguir en el césped.

La incorporación de la Peña tuvo aroma de despedida, puesto que parecía inminente su traspaso al Calcio italiano por no encajar en la idea futbolística de van Gaal. Narrando el gol del cántabro tras pase de Luis Enrique, Michael Robinson confesó a Carlos Martínez que iba a ser una verdadera pena perder a esa clase de deportista tan imaginativo de la competición española.

De inmediato, con una grada dispuesta a mostrar su agradecimiento al entrenador que les devolvió el prestigio y los títulos, el Atlético volvió a golpear con un medido centro de Caminero hacia Vieri, cuyo cabezazo marchó inapelable a las redes de la portería blaugrana.

Otra vez, sietes goles. Sin embargo, el telón estaba empezando a bajar.

El fin de los noventa

Llegado el mes de abril del año 2000, existía una fuerte sensación de extrañeza. En un principio, no sorprendía que Atlético de Madrid y Barcelona se midiesen en las semifinales coperas. Sin embargo, casi cualquier otro aspecto de la campaña rojiblanca parecía cercano a una pesadilla.

Inicialmente, el proyecto de la presidencia Gil parecía haber encontrado al entrenador idóneo para seguir creciendo y superar el espectro de Antic. Arrigo Sacchi no necesitaba presentación en el panorama futbolístico cuando desembarcó en el Manzanares durante el verano de 1998. Había sido el arquitecto en los banquillos del todopoderoso AC Milan que dominó la década de los noventa, además de lucir un orgulloso subcampeonato mundial (1994) con la azzurra frente a Brasil.

No obstante, como el propio protagonista admitiría en sus memorias, nunca llegó a sentirse cómodo en la capital española, pese a disfrutar de jugadores que admiraba profundamente como Kiko Narváez. De sus páginas se desprende que ya se encontraba en una fase distinta de su trayectoria, con menos pasión y afectado por una mezcla de añoranza y otras inquietudes ajenas a lo deportivo. La campaña 1998/99 no supuso una mejoría rojiblanca. Además, en la faceta que nos ocupa, sus duelos contra el Barcelona fueron de marcadores escuetos (0-1 para los rojiblancos en la Ciudad Condal y 1-1 para el Calderón). Eso sí, los pupilos de Louis van Gaal terminaron alcanzando su segundo entorchado liguero consecutivo.

La marcha del prestigioso míster provocó un nuevo terremoto institucional que palidecería ante los futuros acontecimientos del curso 1999-00. En los últimos estertores del año 1999, la Audiencia Nacional ordenó entrar a la Guardia Civil en las oficinas del Vicente Calderón. Se iniciaba una investigación anticorrupción que pondría de manifiesto los aspectos más oscuros del “gilismo”.

Pese a contar con una plantilla de primer orden (Juan Carlos Valerón, Jimmy Floyd Hasselbaink, Kiko, Molina, etc.), el caos institucional se trasladó a un vestuario que protagonizó un campeonato liguero sumamente irregular. Amparados en la pólvora de Hasselbaink, podían ganar con holgura en el Santiago Bernabéu y luego encadenar malos resultados que le llevaron a jugar con el fuego del descenso.

La Copa se convirtió en el gran consuelo rojiblanco. De hecho, doblegaron al Barcelona en la ida sin dificultad por un contundente 3-0. David Salinas recordaría que los blaugranas aterrizaron en Madrid con un recuerdo doloroso en Champions: 3-1 en Stamford Bridge frente al Chelsea. Irónicamente, terminarían remontando ese duelo continental de forma espectacular (5-1).

Tampoco era tranquila la situación para los jugadores de un Radomir Antic que había aceptado intentar el enderezamiento de la nave. Iban decimonovenos en Liga y la figura del presidente Gil iba de polémica en polémica.

El marcador del Calderón daba clara superioridad a los colchoneros, pero este artículo ha escenificado la facilidad con la que cualquiera de estos contendientes podía remontar esas circunstancias. De cualquier modo, la vuelta no llegó a disputarse, en uno de los momentos que Pep Guardiola, capitán y futuro entrenador exitoso en el club de sus amores, intentaría olvidar en su biografía. En un ejemplo de falta de entendimiento con la Real Federación Española, el club de Núñez estaba asolado por un fenómeno que luego sería llamado “virus FIFA”: muchas de sus estrellas internacionales estaban convocadas por partidos amistosos. Solamente Rivaldo iba a disputar un partido de alta competición con Brasil. A ello se le sumaba la fatalidad de lesionados importantes como Luis Enrique.

En esas circunstancias pudo intentarse recurrir al filial, pero las normas federativas solamente permitían ampliar tres fichas, temiendo que más podían restar prestigio a la competición. El Barcelona reclamó otras fechas en un calendario apretado.

Con esos ingredientes, el Atlético de Madrid fue involuntario testigo de un momento dantesco para la Copa del Rey. Ante su negativa a jugar por falta de efectivos, la plantilla azulgrana tuvo que aceptar la derrota inmediata, además de exponerse a una exclusión del torneo (esta última medida no llegó a hacerse efectiva).

Nadie en la parroquia rojiblanca podía imaginar que sería la última alegría de aquel annus horribilis. Toni Jiménez, guardameta suplente ante Molina, había logrado que Antic confiase con él para la Copa del Rey. A poco de empezar el duelo, el portero (medalla de oro olímpica en 1992), botaba inocentemente el esférico en Mestalla, sin ser consciente de que Raúl Tamudo, el pícaro ariete del Espanyol, iba a aprovechar para robarle la pelota con la cabeza y batirle. El resultado sería 2-1 y Toni no podía hallar consuelo al perder ante su ex equipo. A pie de campo, el periodista Iñaki Cano le hizo una entrevista donde este profesional dio muestras de su absoluto abatimiento, símbolo del sufrimiento de aquella Liga donde habían terminado descendiendo en el Carlos Tartiere. Maliciosamente, las deidades futbolísticas hicieron que fuese ante un mito como Luis Aragonés, por aquel entonces entrenador del Oviedo. Aquel día, el pichichi Hasselbaink falló desde los once metros.

Había bajado a Segunda uno de los clubes más laureados del balompié español. No parece casual que también marcase un cambio de tendencia en aquellos míticos enfrentamientos con el Barcelona.

Cambiando de pieles

 

Dos años tardaría el Atlético en volver a la máxima competición nacional. Eso sí, lo haría con una nueva estrella llamada a ser un pilar fundamental de la institución: Fernando “El Niño” Torres se convirtió pronto en el estilete de un Vicente Calderón que había mantenido buen número de abonados a lo largo del bienio bautizado por los ingeniosos publicistas del club como “los años en el infierno”.

Luis Aragonés fue el responsable desde la banca del ascenso, además de procurar personalmente el fichaje de jugadores como Germán “El Mono” Burgos, quien rememoraría en sus memorias cómo su técnico, por aquel entonces en el Mallorca, le convenció de ligar su destino profesional a los colchoneros.

El caprichoso calendario permitió revivir de inmediato aquellos apasionantes duelos. La Liga 2002/03 vio a los rojiblancos regresar al feudó culé, en un interesante 2-2 con doblete para Luis Enrique, aupado como capitán del Barça. Van Gaal había retornado a la escuadra tras probarse con otros entrenadores, sin que nadie pareciera dar con la tecla adecuada cara a recuperar el dominio previo de los azulgranas en el fútbol español.

Otero y Correa marcaron para los visitantes. Mientras Aragonés en la banca y Torres en el césped intentaban consolidar a los del Manzanares en la élite de nuevo, el Barcelona naufragó hasta un curioso paralelismo histórico. Radomir Antic, el hombre que rescató a los de Gil en su hora deportiva más aciaga, cogió el Barcelona tras un sonrojante 3-0 en el Calderón. El Niño Torres abrió la lata, si bien las siguientes campañas serían con enfrentamientos de menor promedio anotador.

Tras unos años sumamente discretos en lo deportivo, el Barcelona iría recomponiéndose, hasta el punto de que el fichaje de Ronaldinho el verano de 2003 marcaría un cambio de tendencia que permitiría a los de la Ciudad Condal iniciar un nuevo ciclo ganador. Paralelamente, el Atlético iría alejando el temido espectro de bajar de categoría, aunque como bien han reflejado periodistas como Rubén Uría, graves deficiencias en el organigrama y una política de fichajes cuestionable alejaron al célebre conjunto del Manzanares de los focos mediáticos.

En esa coyuntura, el Barcelona iría antojándose como la gran amenaza para el Real Madrid, mientras que escuadras sólidas como el Valencia suplieron a un Atlético en casi perenne reconstrucción. Si bien con Quique Sánchez Flores volvieron a lograr entorchados internacionales, el punto de inflexión en el devenir de los del Manzanares vino en diciembre de 2011 con el fichaje de Diego Pablo Simeone como técnico responsable tras una dolorosa eliminación copera ante el Albacete, momento que condenó al míster Gregorio Manzano.

Con un staff técnico donde sobresalían su segundo, Germán “El Mono” Burgos, y el preparador Óscar “El Profe” Ortega, conseguirían cimentar un bloque sólido, armado desde la defensa y sumamente competitivo.

Este regreso a la élite no permitió que los mano a mano con el Barcelona recobrasen la espectacularidad de antaño. Superados los primeros compases ante el rodado conjunto culé, especialmente en los exitosos años de Pep Guardiola, cronistas como Santi Giménez aciertan al señalar que el antiguo y frenético ritmo quedó transformado en medidas partidas de ajedrez donde un mínimo error se penalizaba.

Simeone no ha logrado, de momento, vencer en el Nou Camp como visitante, si bien logró un valioso empate a uno (gol decisivo del defensa uruguayo Godín) para alzar el campeonato liguero de 2014, una de las dos que llevan celebradas desde su andadura. El Barcelona tuvo que sufrir dos dolorosas eliminaciones en cuartos de final de la Champions (2014 y 2016) ante el compacto bloque rojiblanco, si bien ha tenido momentos de su sumo dominio con su estilo de juego que le han permitido en la última década lucir ya cinco Copas de Europa, gran asignatura pendiente de su rival, quien la rozó en dos ocasionas, perdidas de manera dramática ante su rival en la capital: el Real Madrid.

Conclusiones

Más allá de la anécdota, parecen existir algunos denominadores comunes que permiten entender las causas que llevaron a Barcelona y Atlético de Madrid en aras de brindas unos partidos espectaculares e imborrables para el fútbol español. A lo largo de estas páginas, invitamos a la amable persona lectora a considerar estos puntos:

A)   Dos filosofías complementarias: El estilo de Cruyff de posesión y primer toque fue demoledor ante muchos rivales españoles, pero el Atlético, cimentado en la filosofía de inteligente contraataques forjada por Luis Aragonés y un estilo directo tipo británico con Antic, hallaba réplicas tan compatibles como vistosas para la audiencia.

B)   Duelo codiciado: El ascenso de Canal+, las televisiones autonómicas y la prensa deportiva dieron un escenario idóneo para dos clubes históricos. Personalidades tan controvertidas y fuertes como las de Gil, Stoichkov, Futre, Núñez y otras daban una repercusión que sobrepasaba lo acontecido en el césped.

C)   Pólvora carioca: No es azar que Romário y Ronaldo lograsen magníficos partidos en estas citas, puesto que la defensa de Antic y las constantes idas y venidas eran justo lo que estos 9 imaginativos precisaban.

D)   Centrocampistas llegadores: Figuras como la Caminero o de la Peña podían en estas ocasiones poder lucir todas sus virtudes. No sorprende que el Barcelona codiciase al vallisoletano o que Stoichkov fuese un objetivo constante de Gil. Muchos jugadores habrían podido cambiar de camiseta y seguir produciendo goles con el sistema del oponente.

E)   Núcleo de las Olimpiadas de Barcelona: Durante el torneo de 1992, se forjaron vínculos entre jugadores como Kiko, Guardiola, Solozábal, Toni, Luis Enrique, Ferrer, López, etc. Se trataba de una nueva generación prometedora que explotó justo cuando estos choques Atleti-Barça se tornaron en espectaculares.

Referencias

Astruells, A. (9/10/1994). El partido más excitante. Mundo Deportivo. 2.

Bonellí, C. (12/03/1995). En la grada, con Simeone. Mundo Deportivo. 12.

Burgos, G. y Udaberri, M. (). Mono Burgos. Insoportablemente yo, Madrid: El Tercer Nombre.

Castelló, I. (2017). Salvaje: La imperiosa historia de Jesús Gil y Gil, Barcelona: Contra.

Colino, J. (23/04/2020). “Al negro le corto el cuello, a ver si lo matan” cumple 25 años. Diario As

Enlace en red:

https://as.com/futbol/2020/04/23/primera/1587647459_547536.html

Cruyff, J. y Rico, M. (1994). Mis futbolistas y yo, Barcelona: Ediciones B.

Frieros, T. (1996). La gran cantera del Barça: Fábrica de campeones, Barcelona: Ediciones B.

García Ropero, J. A. (dir.) (2021). El Atleti del doblete. Madrid: Movistar +.

Gendre, M. (2019). Branquiazul: Historia oral de los años dorados del Dépo, Barcelona: Contra.

Giménez, S. /06/02/2022): Catarsis en el Camp Nou. Diario As.

Enlace en red:

https://as.com/futbol/2022/02/06/primera/1644155634_919088.html

Miguélez, J. (05/06/1993). La UEFA sanciona con 20 partidos en total a cinco jugadores del Atlético. El País.

Miguélez, J. (21/05/1995). El Atlético destituye a D’ Alessandro y negocia con Basile. El País.

Enlace en red:

https://elpais.com/diario/1995/02/21/deportes/793321202_850215.html

Miguélez, J. (1997). Entre la ciencia y los pequeños detalles. Entrenadores: Un poder inestable, Madrid: Aguilar, 7-18.

Montero, N. y Guijarro, M. Á. (2014). Leyendas del Atlético de Madrid: 110 jugadores que han escrito la historia del club rojiblanco, Madrid: LID Editorial.

Ortego, E. (2/10/2021). Caminero: Los Atlético-Barça de mi época eran partidos eléctricos. Diario As.

Enlace en red: https://as.com/futbol/2021/10/01/primera/1633116918_606033.html

Rodríguez Garrido, J. E. (2016). Recuerdos del doblete: 20 años no es nada, Madrid: Al Poste.

Salinas, D. (2009). El rey de Copas: Cien años del FC Barcelona en la Copa de España (1909-2009), Barcelona: Meteora.

Serra, J. M. (31/10/1993). El Barça golea y luego se hunde. Mundo Deportivo. 2-3.

Stoichkov, H., Aguilar, F. y Torres, X. (1995). Ciento por ciento Stoichkov, Barcelona: Planeta.

Uría, R. (2014). Atleti: De muerto a campeón, Madrid: Editorial Pamies.

Xuriach, R. (2021). Fenómeno. Panenka, 110, 80-87.